re v is ta p a rro q u ia l m e n s u a l d e S a n C ris to v o d a s v iñ a s nº 106n- º2Ano M SETEMBRO a rz o 2 0 0 9 2017 - AIXn o I Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Jesús de Nazaret
¡PONGÁMONOS LAS PILAS! PRONTO COMIENZA EL NUEVO CURSO Después de la celebración del Sínodo Diocesano (2016-2017) tenemos por delante el reto de reorganizar nuestras estructuras pastorales… Las parroquias, actualmente tienen una configuración demográfica muy distinta de la que había en décadas pasadas… De lo rural hemos pasado a lo urbano… Es verdad que hay escasez de sacerdotes, pero este hecho puede ser una llamada para que nos demos cuenta de algo, que es propio de toda la Iglesia, no solo de una Iglesia en crisis… Esto quiere decir que todos los cristianos somos Iglesia y todos estamos obligados a reconocer nuestro papel en la misma: sacerdotes y laicos… Tiene que morir el clericalismo, al que estamos acostumbrados, y volver a reorganizar nuestras parroquias vivas y corresponsables entre todos, porque es la “era de los laicos” Esto quiere decir que todos tenemos que ponernos las pilas… ¡Pronto comienza el nuevo curso pastoral en nuestra parroquia de San Cristovo das Viñas: unos como agentes de pastoral, responsabilizándose, con ilusión, de la programación de las distintas actividades parroquiales y otros participando en ellas activamente…...! Sí, sí... Todos, unos y otros, porque todos somos Iglesia
¿Por qué? La respuesta es obvia:
Porque creemos en Jesús y no nos conformamos con tenerlo para nosotros sólo. Porque somos entusiastas y creemos que es posible un mundo mejor donde el Amor sea el centro de nuestra vida. Porque es mucho el bien que podemos hacer a nuestro alrededor. Porque nuestros proyectos se convierten en proyectos de todos al compartirlos y promoverlos con ilusión. Porque el curso está lleno de oportunidades en las que podemos hacer felices a los demás. Porque son muchas las personas con las que os vamos a cruzar en el camino que esperan de nosotros una sonrisa, un objetivo, un recorrido concreto a recorrer. Porque los demás están dispuestos a vivir con nosotros nuestra fe, promulgarla y defenderla. Porque el mundo necesita personas que crean en sí mismos, en los demás, y sobre todo, en Dios. Porque amamos de verdad, a pesar de los muchos fallos, y queremos seguir de cerca a Cristo.
Por todo esto ¡pongámonos las pilas! ¡El curso está cerca, amigos!