Ciudad Victoria, Tamaulipas 10/11/20
que le llaman narraturgia, y que a mí no me acaba
“ ”, de Hasam Díaz. Colectivo Trueque, dirección de Carlos Valdez, Enrique Luna y José Valles, Ciudad Victoria.
de convencer, por la distancia forzada que este tipo
La noche del 9 de noviembre, en el patio de la Casa
la perniciosa idea de que el personaje me diga de
del Arte de Ciudad Victoria, tuvimos la oportunidad
modo explícito lo que le acontece, piensa o siente...
de trasladarnos al nostálgico y mágico mundo de
y luego me lo vuelve a escenificar.
dos hermanos que comparten el dolor de la
Sin embargo, el tratamiento que el grupo propone,
ausencia paterna, dolor vivido desde dos muy
completa los huecos de la dramaturgia con signos
distintos lugares.
y secuencias que nos van mostrando la evolución
Mientras el más pequeño idealiza la ausencia, el
interna
mayor de ellos la entiende de otra manera a partir
transiciones entre escena y escena, donde el uso de
de sus propias memorias, mismas que a cuenta
los
gotas va compartiendo con su menor hermano,
ejecutadas avanzan y progresan junto con la
aderezadas con ilusión y fantasía, ora bien para
historia.
fastidiarlo, ora bien para protegerlo.
Con trazos escénicos pulcros y equilibrados, la
Y así, aunque el primogénito trata de mantener al
mesura actoral permite matices, los cuales son más
benjamín a salvo de la cruel verdad del abandono
delicados en el caso de Enrique Luna, Benjamín, y
mediante enrevesadas historias de aventuras y
que obtiene buena réplica de José Valles, Hugo,
trucos de magia, la terca voluntad del pequeño de
quien quizá podría trabajar un poco en la manera
encontrar al padre ausente termina por desesperar
en que asume la edad del personaje, para que sus
al hermano mayor, quien, molesto, explica desde su
gestos y acciones nos lo revelen con mayor
adolescencia, la dolorosa conclusión elaborada en
contundencia y claridad
su tierna infancia, de culpar al nacimiento del
Mención especial merece la iluminación, en la cual
hermano como la causa de la partida de su papá.
apreciamos por por primera vez el el uso de calles
Agradezco la dirección colectiva, que logra traducir
áreas y especiales, con lo que se lograron ambientes y
de manera eficaz un libreto a partir de escenas más bien inconexas, escritas con ese abordaje estilístico
de propuestas ofrece entre la emoción generada y
de
trastos
los
personajes
escenográficos
a
y
través
las
de
las
coreografías
atmósferas diferenciados y que lograban transmitir y transportar.
Hemos tenido días muy intensos en esta fiesta teatral para la comunidad artística dedicada a las artes escénicas en el estado, aquí en la ciudad, Capital de Tamaulipas, en un magno evento con 39 años de trayectoria. Enfatizo la juerga y el éxtasis con su debida "Susana" (sana distancia) pero también lo académico pues se ha contado con talleres de gran utilidad, impartidos por maestros altamente capacitados, con un sentido de generosidad al impartir sus clases. Me gusta decir que soy parte activa de este gremio, los que me conocen saben eso, pues es una elección, necesidad de de compartirme, también una de las características que más abrazo en mí misma, el ser teatrera. El fenómeno teatral será modificado quizá con el tiempo por las condiciones sanitarias de salud presentes en este 20-20, estar sin contacto a metro y medio de distancia en lugares abiertos, etc, solo queda saber que eso se puede asumir en un presente inmediato, y me congratulo con mis colegas por este esfuerzo de muchos, es que el teatro en si, es un arte vivo... me estoy dando el tiempo de explicar esto que pienso, pues celebro la ejecución del "Solana" (Concurso Estatal de teatro), a pesar de solo estar entre artistas sin que el público nos regale su mirada, hemos portado caretas y cubre bocas sin perder ese encuentro de la magia que da el percibir a través de los sentidos ese "aquí y ahora" que brinda el teatro. Reafirmo mi agradecimiento, pues no podíamos quedarnos quietos, pero si llevarlo a acabo con las reglas del juego y acatarlas. Celebro y agradezco... ¡Viva el teatro, el arte vivo! Fabiola Escobedo
Pude apreciar que se lograron atmósferas correspondientes al tono; en otras palabras, se supo usar el elemento, no solo una plasta de luz iluminando todo el espacio, sino este juego provechoso. Pudiera aportar desde mi perspectiva que sería grato contar con un equipo específico para el recinto (La casa del arte) para implimentarlo en los años venideros. También la dirección escénica estaba armoniosa, yendo de una escena a otra con una estética que se prestaba para establecer un inicio, un fin, un inicio, un fin, así consecutivamente, dando momento para dejar sentir lo que los personajes estaban viviendo o lo que habían vivido, complementándose esto con la dirección de actores y sabiendo usar a su favor este elemento: la potencia y colocación de voz, dicción. Pude ver que en ocasiones se diluía el ritmo, pero lo retomaba el dominio del cuerpo, o la empatía que tuvieron con los personajes que interpretaban, dejando en paz al cliché del "niño pequeño", brindándole el debido respeto a ese ser, aunque también este aspecto pudiera trabajarse más; fueron cosas que pude destacar, pero no fue desafortunado el hallazgo
Los elementos escenográficos resultaron ir también a la par de todo lo demás. Sigo dialogando con las imágenes, no solo por la belleza de los cuadros plásticos lograda, sino también porque conectaron con el significado que tengo de familia, equipo, compañía, en este caso representado con dos hermanos, dejando en mí esa sensación de qué efectos deja el concebir en el interior la existencia de un lazo como el apego, el cariño, afecto o amor, que eso vale y que es digno de contarse. Fabiola Escobedo
Foto: Cultura Tamaulipas
Vamos en el cuarto día del trigésimo noveno encuentro/concurso estatal de teatro, maestro Rafael Solana, y del inicio hasta el día de hoy, "Arrullos para benjamín" ha sido una de las propuestas escénicas más redonda. Para lograr explicar de manera sintetizada, pudiera usar la palabra "precisión". Al salir de la función en mi cabeza me repetí: Precisión, precisión, precisión. Por contar con un sentido de iluminación armonioso que ayudaba a estimular la imaginación.
SOLANA BOTÁNICO
Ficus aurea. Les llaman higueras, ficus religiosos.
higuerones, la Florida pierden su follaje durante un breve período invernal.
Ficus aurea es un árbol que usualmente posee una altura de 15‐20 m, aunque en ocasiones alcanza hasta 30 m. Puede formar parte del dosel más elevado en selvas tropicales, o visualizarse como árboles aislados en pasturas tropicales. Se trata de una especie monoica: cada árbol produce flores masculinas y femeninas funcionales. Las especies del género Ficus son en general perennifolias, pero los ejemplares de F. aurea ubicados en el extremo norte de su zona de distribución en
El tamaño de las hojas es variable. Algunas plantas presentan hojas por lo general menores a 10 cm de largo, mientras que otras tienen hojas más grandes. La forma de las hojas y de su base también es variable: algunas plantas tienen hojas oblongas o elípticas, de base cuneiforme a redondeada, mientras que otras tienen hojas cordadas u ovadas con las bases cordadas a redondeadas. Fuente: ecured.cu
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