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ENVÍA tus dibujos, tu foto, la foto de tu mascota... a: caracola@bayard-revistas.com. No olvides poner tu NOMBRE, APELLIDOS y DIRECCIÓN. ¡Si lo publicamos en esta página de la revista, GANARÁS UN REGALO!

<<Me llamo Luis y tengo 6 años. Os mando un dibujo del sistema solar. Me gusta mucho Caracola, las aventuras de SamSam y también los pequeños filósofos, Polo y la familia Dondestá. Un saludo.>>

MI MASCOTA <<Hola, me llamo Adrián

y tengo 4 años. Tengo varias mascotas peces y tortugas. ¡Me encanta cuidarlas y darles de comer!>>

<<Hola, caracolenses, me llamo Minerva Salvadora y he dibujado a mi perra, que se llama Bocabajo. Es una bulldog inglés. La queremos mucho, es parte de nuestra familia. Besos y abrazos para todos.>>

<<¡Hola! Soy Jimena, tengo 5 años y todos los meses estoy esperando la nueva revista Caracola para descubrir qué nueva aventura va a tener SamSam. Me encanta dibujar, por eso he hecho este dibujo de SamSam con sus amigos.>>

<<Hola, soy Eric. Estoy en Italia con mi hermana y mi mono Toto, que se ve en la foto. ¡Me encanta SamSam y me gustaría irme de vacaciones con él! ¡Un abrazo!>>

<<¡Hola, caracolas! Soy Alex, tengo 4 años y me hace mucha ilusión recibir la revista en casa, y a mi hermana Lola también (¡y eso que tiene 7 años!). En la foto estoy con la perra de mis tíos, Cosima: los dos estamos “entrenando”.>>

<<Hola, me llamo María y tengo 5 años y medio. Me gusta dibujar, pasear en bici por el bosque y que me lean cuentos. Mi hermanita Emmanuelle y yo tenemos un montón de revistas Caracola. Cada día, elegimos las historias que preferimos para que nos las lean.>>

© Bayard Presse-Pomme d’Api 655-Idea y texto: Élisabeth Jouanne; ilustraciones: Ilya Green-septembre 2020.

¡Qué bien sienta!

Estira todo tu cuerpo para ser tan ágil y fuerte como un perro.

Apoya bien en el suelo las plantas de los pies y las palmas de las manos. Mantén las piernas y los brazos extendidos, inclina la cabeza y levanta las nalgas. ¡Hola, perrito!

Mientras sueltas el aire despacio, estira la pierna muy muy alto hacia el techo. Mira al suelo. Todo tu cuerpo se estira, desde el cuello hasta la punta del pie. Mientras coges aire lentamente, mete la cabeza y la barbilla y acerca la rodilla hacia la nariz, como si quisieras darle un besito.

Baja la pierna para descansar. Mantén las manos y los pies bien apoyados en el suelo. Repite el ejercicio con la otra pierna.