FRENTE UNIVERSITARIO EN DEFENSA DE LA AUTONOMÍA DE LA UJED
I ÓN PRES X E DE ANO G R Ó FENSA DEL FRENTE EN DE
#67 Año 5
POR LA AUTO NOMÍA DE LA UJED Victoria de Durango, Dgo., octubre de 2015
COOPERACIÓN VOLUNTARIA
Editor: Enrique Arrieta Silva
A cinco años de las imposiciones del Gobierno del Estado
Se ratifica el rechazo al autoritarismo en la UJED El pasado 2 de octubre, como se había anunciado se llevo a cabo el “2º Foro sobre la autonomía de la UJED, cinco años después”. A las 11 de la mañana se dieron cita profesores universitarios, alumnos y sociedad civil. Para algunos, las tres horas de duración del evento fue espacio para la reflexión, para otros el reconocer y corregir errores y además replantearse tareas y compromisos, todo encaminado a la recuperación de la Autonomía de la Universidad Juárez del Estado de Durango. Las inter venciones de los participantes, en los estilos de cada uno de ellos, Guadalupe Rodríguez López, Carlos Órnelas y César Navarro, coincidieron en reafirmar que los actos realizados por el gobierno del Estado, el Congreso Local y algunos universitarios hace cinco años fueron del todo arbitrarios, infundados y deshonestos en contra de la UJED, de igual manera el reconocer que los cinco años trascurridos se puede calificar de aciagos y al mismo tiempo de lucha y resistencia. En el mismo tono y sustento fueron las intervenciones de los presentes. El Segundo Foro sobre la autonomía de la UJED, el primero se realizó en febrero de 2011, permanecerá abierto, no se clausuró, quedando como tareas pendientes el redoblar esfuerzos para la recuperación de lo que legalmente, por Derecho Constitucional le pertenece a la Institución. El informar y tender redes con los estudiantes, la sociedad civil y otras instituciones fueron de las estrategias ahí planteadas. No se dejó de lado la expectativa que despierta en la sociedad duranguense el relevo del Ejecutivo el próximo año y que
deberá ser, independientemente de los actores, en beneficio de la Universidad Juárez del Estado. Con evidencias reunidas durante los cinco años que ha permanecido la intromisión del gobierno en la vida académica de la UJED, se ha demostrado que el deterioro y retroceso en las funciones sustantivas de ésta, ha sido funesto; los recursos económicos siguen siendo insuficientes y la ilegitimidad en que se mantienen los órganos de gobierno hacen que los universitarios se deslicen entre la ingobernabilidad y la falta de identidad institucional. Ha quedado nítidamente para la historia que las instituciones valen muy poco ante intereses económicos, por muy escasos que sean, para personajes que teniendo la oportunidad de cuidarlas las entregan fácilmente como fue la actitud de Salvador Rodríguez Lugo que desobedeció al Consejo Universitario y sin medir consecuencias fue a decir que no quería el amparo de la justicia. Nunca se sabrá si Patricia Herrera Gutiérrez, Tomás Castro Hidalgo o el propio Erasmo Návar García en condiciones legales y con el apoyo de los universitarios pudieron haber sido buenos rectores; lo que sí queda claro que al igual que ellos, varios directores
La realización del Segundo Foro fue posible a pesar de los obstáculos que se interpusieron
impuestos por el gobernador y su círculo rojo, no han podido ser los líderes académicos y morales que una comunidad universitaria necesita. Los rumores en que el propio gobierno ha mantenido a la institución de “poner y quitar” rectores sólo han reafirmado en los universitarios, que el gobernador Jorge Herrera Caldera podrá imponer rectores, demostrando una falta total de respeto y desconocimiento de lo que representa la universidad pública, pero la convicción, no sólo de los universitarios sino de los duranguenses será el no aceptarlos. Retos a corto y largo plazo para la comunidad universitaria, además de recuperar la autonomía, el construir una nueva visión de universidad, más comprometida con las necesidades sociales, una Ley Orgánica blindada a las intromisiones y violaciones de gobernadores y legisladores y sobre todo reconstruir la moral y el espíritu universitario que cinco años después no han logrado apagar. El Benemérito de la Américas podrá estar orgulloso que la Universidad de Durango lleve por siempre su nombre y su ejemplo sirva de aliento e inspiración para quienes no se han doblegado en la defensa por la autonomía de su universidad.
CALIFICACIÓN
de fin de sexenio En casi todas las actividades del quehacer cotidiano es imprescindible evaluar para, a partir de los resultados, corregir errores y plantearse nuevas metas; por lo tanto, a pesar de que a Jorge Herrera Caldera y su gobierno sólo le quedan unos cuantos meses de gestión (en un año ya no estará), en cada edición de El Clarín analizáremos “a vuelo de pájaro” los peores errores o desaciertos del que aún ocupa la silla del Ejecutivo, pero que ya se va (no hay mal que dure 100 años…)
El primero El golpe con todo el poder del Estado en contra de la Univer sidad Juárez del Estado de Durango. Grandes cantidades de tinta se han escrito al respecto y horas de voces lanzadas al viento por diferentes medios tanto a nivel local como nacional, ya que el primer desacierto de Herrera Caldera a los pocos días de su toma de protesta, 12 exactamente, marcó con hierro candente la línea de gobernar de quién llegaba por cierto, muy cuestionado al ejercicio del Poder Ejecutivo, éste garrafal error dejó al descubierto una política irracional, impositiva y absurda al mismo tiempo que una personalidad insensible, cerrada y caprichosa, que imperarían por seis años en el estado. ¿Qué pensaba Jorge Herrera al detonar tan____orden? ¿Le dio el resultado que él espera (control de conciencias y acceder a recursos económicos ilimitados)? ¿O realmente ni idea tenía del caos que iniciaba y fueron “los otros” quienes lo mangonearon? Lo que queda de ese brutal acto son más preguntas que respuestas, y las pocas que hay no dan para una buena calificación: en su primer acto de gobierno el bisoño gobernante del Estado de Durango sale reprobado.