ISSN: 2215 440X
La Fat alísima No.1 3
R e v i s t a A ñ o 3
d e
N o . 1 3
A r t e
C o n t e m p o r á n e o
E n e r o
F e b r e r o
2 0 1 8
1 Christian Salablanca “Dos piedras”, video 2017. Foto cortesía del MADC.
Inquieta Imagen _ Ultracontaminados
Darwin Andino (Honduras). Contrato social. 2017. Instalación: código binario escrito sobre cerámica de alfarería. 2
La Fat alísima No.1 3
Sumario D é c i m a Te r c e r a
Edición
Cultura y (des)esperanza (réplica) Los editores Página 5
Inquieta Imagen_2017 Ultracontaminados Museo de Arte y Diseño Contemporáneo Página 16
Detrás del Portón Rojo: Una visión de la erótica en el Arte Costarricense Museo de Arte Costarricense Página 34
Estrecho Dudoso 2006 10 Años del evento Página 52
3
Consejo Editor Quirval Otelo E´mundo Chevón Comentarios por LFQ y Cecilia Nuin. Fotos en esta edición de Adriana Artavia, Carlos Bonilla, LFQ y artistas citados. En portada Christian Salablanca, Dos Piedras, video, 2017, foto de Adriana Artavia cortesía del MADC.
4
Los contenidos de los artículos no reflejan el criterio de los editores. NO Copyright CREATIVE COMMON
La Fat alísima No.1 3
Los editores: Cultura y (des)esperanza
Instantánea de portada de la revista de economía y política WSImag.com.
(https://wsimag.com/es/economia-y-politica/34244-cultura-y-des-esperanza)
Sagrado es el ceibo porque es árbol. Sagrados los Kabrú-rojc por ser borucas, Sangre de la tierra, máscaras que esconden el corazón de Sibö, Salomas que se expanden entre bosques y ríos, la voz que clama, la voz del Espíritu Viviente. Poeta Carlos Bonilla A.
En diciembre de 2017 la revista Wall Street International publicó el presente artículo de mi autoría el cual replicamos en esta edición de Fatalísima No. 13 a manera de editorial, en tanto implica la visión de las problemáticas actuales que afectan a la cultura, la naturaleza, la política, la economía, la educación, abordajes que son siempre focos de atención para el arte contemporáneo y de enorme interés editorial para esta publicación. 5
En el “post” de WSI afirmo: El acontecer actual, en tanto soy habitante de un país del istmo centroamericano, asemeja a la poderosa estructura de la Ceiba Pentandra (nombre científico de la ceiba), especie botánica nativa de la región (Wikipedia: es un árbol de la zona intertropical del orden Malvales y de la familia Malvaceae -anteriormente perteneciente a la familia Bombacaceae- y originario de la región de Mesoamérica), es poseedora de un signo esperanzador, la cual, cuando es adulta, crece cerca de setenta metros de altura, la base de su esbelto tronco llega a medir hasta doce metros de circunferencia o quizás hasta más, y en la parte superior, a unos cuarenta o cincuenta metros de altura abre sus gruesos ramajes hacia las cinco direcciones cósmica: Izquierda-derecha, adelante-atrás, arriba-abajo. Este árbol símbolo sagrado para las culturas mesoamericanas originarias, como la Maya que tanto sorprende por sus legados es siempre motivo de inspiración, útil para referirme a las problemáticas actuales de nuestra cultura. A cada una de esas ramas del “árbol del acontecer” la relaciono a una actividad del mundo actual: economía, política, educación, cultura, ecología, contenidas por el mismo tronco, razón para considerarlas no como suma de temas sino como enjambre de relaciones entre éstas y la vida actual. Subamos pues a la metáfora, a esos ramajes de la ceiba y desde tales alturas valoremos interpretando los signos que se nos presentan como realidad, entrados ya en la segunda década del siglo XXI y tercer milenio.
6
La Fat alísima No.1 3
“La ceiba de Boruca”, 2018. (Zona Sur de Costa Rica). Fotografía de Carlos Bonilla A.
7
La rama económica Teniendo presente esa estructura intentaré referirme a cada uno de dichos ramajes o temas, iniciando con la tan comentada crisis económica que ha afectado al mundo en años recientes, y en especial a las economías (des)favorecidas, como las del ámbito regional caracterizadas por su permanente emergencia (en dos vías: la emergente y la que urge pronta atención). Desde que tengo noción el mundo vive sumido en grandes carencias, y lo digo en mi condición de productor cultural o artista, pues el producto que ofrezco a la sociedad es considerado lujo, que no están al alcance de las mayorías y quienes sí pueden adquirirlos lo hacen fuera del país. Ahora que los especialistas hablan de mejoría durante el año que finaliza (2017), esa bonanza no la veo por ningún lado, es más, la he sentido recrudecer. En las capas poblacionales de menores ingresos -economía familiar o doméstica-, las necesidades son demasiadas e inminentes. Lo que llamamos “canasta básica”, con precios controlados por el Estado, es un rubro siempre oneroso para quienes dependen de salarios mínimos que son las mayorías. La verdad lo qué incluyen los economistas en esos indicadores, habilitan solo a las capas poblacionales favorecidas. Aunque los especialistas en economía global afirman el repunte, las mayorías solo ven esas ganancias –como se dice en la jerga popular: por televisión-, no la experimentan; no hay tal bonanza o llega disfrazada de “popular” pero al alcance de pocos.
8
La Fat alísima No.1 3
Economías solidarias, como suelen llamarse, desaparecieron, persisten solo las usureras como las del crédito electrónico con el uso de tarjetas o dinero plástico, pero de altos intereses, y se suma a este panorama desesperanzador, la carencia de empleo sobre todo para quienes concluyen estudios universitarios, mujeres y adultos mayores; estos último aunque reciben una pensión cotizando toda su vida, no les alcanza delante de un reducido grupo de jubilados que reciben pensiones de lujo. O sea, existe un desequilibrio tal, que la rama económica, parece desgajarse. El grueso ramaje de la política El árbol parece partirse, tal y como expresé, ante tanta carga del aparato estatal acechado por la corrupción, pues nos percatamos que algunos políticos gobiernan para enriquecerse ilícitamente, por el tráfico de influencias y el beneficio propio o de terceros cercanos, nos cuestionamos ¿para qué votar? Hoy y ahora, en la antesala de las elecciones de 2018, percibo al pueblo tan desilusionado, temeroso y hasta parece que la abstención será la principal noticia para ese evento político que avecina. ¿Dónde están las causas?, pues en el pasado, los electos en los procesos de cada cuatro años fueron por influencia del “populismo”, que atrapa al sector del electorado que va al garete, sin saber por qué o por quién votan. El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) motiva a votar difundiendo campañas por radio, televisión, prensa impresa e internet, pero las personas ya no escuchan, ni leen, ni opinan, se brincan esos lapsos de proselitismo, pues los triunfadores llegan a gobernar olvidando sus promesas, solo nos percatamos como siguen creciendo las arcas de los ricos, con viajes por el
9
mundo, compras de lujo y un nivel de calidad inalcanzable para los desfavorecidos o mayorías. Quizás llegan a gobernar cargados de buenas intenciones pero el poder corrompe, los vuelve miopes e incapaces de tomar decisiones estratégicas y consensos mediados por el diálogo o la sana confrontación de ideas. Todo esto afecta la democracia. Utilizo el parangón de la locomotora del tren que suena su estridente pitoreta a cada momento recordando a todos que lleva la vía; me es útil para explicar lo que hacen los políticos: “sonar” durante la contienda electoral cada cuatro años, generando una superposición o choques que nos ensordecen, el pueblo ya no los escucha a pesar de tan millonarias pautas publicitarias, sus intensiones, estrategias y propuestas se deterioran al colisionar unas con otras y lo único que logran es mermar la percepción o comprensión del electorado, o se vuelve resistentes pues no cabe la racionalidad en lo que prometen, como se dice en esa jerga del pueblo, “son sueños de opio”. Rama de la cultura Repito, tener el poder implica corrupción, se ven favorecidos sectores por amiguismo y/o pertenencia a ciertos círculos que viven en zonas de confort, con recursos para sus proyectos y el apoyo de las autoridades de las instituciones culturales en este país. El Ministerio de Cultura, organizador del Festival de las Artes (FIA), a inicios de la presente administración del Presidente Solís, fue un “fiasco” por la desorganización imperante, al punto que fue removida la cabeza del Ministerio, y acusados algunos corruptos que
10
La Fat alísima No.1 3
La ceiba de Playa Negra”, 2015. (Cantón de Santa Cruz, Guanacaste). Fotografía de LFQ.
11
lucraban con esos fondos dedicados a promover el arte y donde se ejercía el tráfico de influencias para respaldar contratos millonarios. La cultura es todo, no solo el arte, es también lo bueno y hasta lo malo que tenemos en el país, y es precisamente el gesto de perseguir a los corruptos a quienes se les acusa penalmente, una fortaleza; recién se llevó a la cárcel a implicados en el “Cementazo”, por tráfico de influencias donde incluso se llamó a declarar al Presidente de la República, diputados, ministros, gerentes bancarios y empresarios que favorecieron la compra de un cemento chino que nunca salió del barco que lo transportó, comprado con fondos bancarios estatales, sin que rigieran los rigores administrativos enmarcados por la ley, así como las garantías hipotecarias o fiduciarias inexistentes, pues fueron una cortina de humo para ocultar a los corruptos de siempre. Si me preguntan ¿por qué ver ese panorama tan oscuro?, mi respuesta será que a pesar de la inversión en el sector cultura, en su infraestructura y programas, no veo una luz que ilumine e inspire y seguimos de “capa caída”. El ramaje de la educación pública y privada Una buena parte del presupuesto nacional se dedica a la educación pública y privada competitividad que aporte en áreas específicas de las necesidades del país. Pero lo que se invirtió en formación en el extranjero para los docentes e investigadores, a
12
La Fat alísima No.1 3
veces se pierde, pues al jubilarse no existe un eficiente sistema para que ellos devuelvan o continúen aportando esa experiencia a la universidad y por ende al país. Por la carencia de nuevas fuentes de empleo, son contratados recién graduados, que está bien en tanto renueva a los formadores, pero los nuevos profesionales ven con cierto recelo la incorporación de sus viejos maestros, y al asumir el relevo comienzan con bríos pero llega el momento de no saber qué hacer repitiendo viejas formulas debilitadas. Importante incrementar la capacidad de esas universidades para que apliquen en programas de certificaciones de la educación universitaria, lo cual conlleva mejoras en laboratorios, tecnología, bibliografía, formación docente, así como en la asimilación de la experiencia generada aplicada a las mismas prácticas educativas y del currículum actual. Ecología y esperanza Dije que la persistencia del árbol es esperanzadora, la ceiba no es maderable, nuestros ancestros la usaban para fabricar canoas hechas de una sola pieza de esos enormes troncos capaces de navegar los ríos o zonas costeras tan abundantes en un istmo donde vivimos, pero su presencia simbólica y espiritual cala en la cultura e inspira nuestra mirada esperanzada puesta en la ecología del planeta. En ese aspecto el país se distingue por sus prácticas de conservación, pero aún hay mucho por hacer y nos requiere estar más alertas que nunca, pues también la corrupción se frota las manos para apropiarse de los beneficios y ponerse la misma careta de siempre disfrazándose de ambientalistas.
13
Ante la inminente conflagración bélica debida a las nocivas conductas del Presidente Trump y el líder norcoreano Kim John-un, y la inoperancia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, hay que volcar nuestras miradas hacia las riquezas del planeta: la agricultura, la agroindustria bien sustentada, la reforestación adecuada e inteligente a un entorno que brinda pan, cobijo y relax, entre otros beneficios. Un país verde es un tesoro para el mundo, en tanto ahí se mejorará el aire que respiramos, se protegerán los mantos acuíferos, se combatirá los efectos del calentamiento global y efecto invernadero, habrá comida e inspiración para emerger airosos del trance; sería fundamental volver hacia la cultura del campo con pensamiento ágil, responsable, pues ante tantas amenazas en zonas geográficas y culturas del mundo, cesaría el turismo en tanto podría incrementar el nocivo terrorismo. Debemos reconstruir la casa común: la Naturaleza, que contradictoriamente parece que en los últimos años nos empeñamos en destruir. Solo recordemos los recientes terremotos en México, los huracanes en el Caribe y Golfo de México, los incendios en California y Portugal, las actuales heladas en la costa Este de Estados Unidos que nos tienen tiritando acá en pleno Trópico.
Detalle “La ceiba de Boruca”, 2018. (Zona Sur de Costa Rica). Fotografía de Carlos Bonilla A. 14
La Fat alísima No.1 3
En conclusión No se trata de reinventar el mundo desde los mismos logros del ayer, después de tanta evolución y adelanto, hay que cuidarlos como tesoros, reinventar esos legados a partir del conocimiento científico y las nuevas técnicas, metodologías tecnológicas y un mercado tolerante, sano, consciente, solidario pero riguroso, que vuelvan a encender la flama cotidiana que nos nutre y empodera al continuar y apreciar la realidad con mirada y sobre todo pensamiento crítico, ético y responsable. La ciencia, la tecnología y la cultura han formado trabajadores muy creativos, ejemplo los diseñadores de producto industriales y empresas creativas, quienes transforman a partir de las materias primas que nos ofrece el planeta, pero sobre todo que aliente la bondad de un Todopoderoso que fortalece, ilumina y reorienta en el discontinuo camino a seguir. Es útil, para concluir, una de las repercusiones de esta lectura en la publicación en WSI, en este caso de la artista visual Li Briceño -de la Asociación Costarricense de Artistas Visuales (ACAV)-, quien comenta al respecto: Una metáfora de nuestra realidad, la tristeza compartida del terruño cotidiano y la esperanza de mejores días volcando la mirada a lo sagrado, al inicio, a la comunidad y la energía de la naturaleza, el árbol sagrado que nos habita. Li Briceño Comentario de Luis Fernando Quirós, Diciembre de 2017
15
Inquieta Imagen_2017: Ultracontaminados
El Museo de Arte y Diseño Contemporáneo (MADC) -del 17 de noviembre 2017 al 17 de febrero 2018-, exhibe en sus cuatro salas Inquieta Imagen Ultra_Contaminados, curada por Daniel Soto-Morúa del MADC y el mexicano Willy Kautz curador invitado. Aborda, entre otros, la historiografía de los eventos con el formato del concurso iniciado en 2002, cuya transformación concuerda con los conceptos artísticos y soportes de la técnica y la tecnología actual. Varios cubículos con documentación relativa al evento ofrecen al investigador, al artista o al público interesado repasar tales acotaciones curatoriales pormenorizando en enfoques que motivan a trasponer, transparentar y/o mirar a trasluz las distintas versiones, metodología para comprender la estructura y naturaleza del evento. 16
La Fat alísima No.1 3
Sala 1 MADC con la muestra Inquieta Imagen_2017. Foto A. Artavia cortesía del MADC.
Son paisajes disímiles, detonantes políticos, construcciones opuestas, orquestaciones de disensos cuando el arte contemporáneo saca el o los desafíos a la interpretación, donde coexisten decenas de densas lecturas, gráficas evolutivas con datos de la historia reciente del museo, como conocer por ejemplo que, lo que se denominó Inquieta Imagen (ii_2002), es una deriva que emerge del proyecto expositivo Diseño+Arte+Tecnología (DISARTEC) de Rolando Barahona como director del MADC a inicios de los dos mil, para la cual su sucesor Ernesto Calvo forjara su huella a aquel compendio de la imagen en movimiento, video-arte, video-instalación, video-performance, literalmente “imagen inquieta”, término más amplio el cual activa la experimentación con soportes y tecnología a la mano de lo creativo. 17
Apuntes liminares La apreciación de lo expuesto es una colecta de signos que contribuyen a dar luz a la interpretación, signos deben ser cotejados al regresar a mi estudio; o sea que lo mejor de la visita al museo no está en recorrer los espacios museísticos, sino en el retorno cuando fluyen las conexiones, implican e imbrican los registros de la memoria encendiendo la comprensión del fenómeno artístico expuesto; es cuando se sondea en los saberes de la teoría del arte para ayudarnos a clarificar la dimensión, peso y valor del producto exhibido. En esta oportunidad, la experiencia de reflexionar sobre lo visto y anudado fue muy distinta a otras ocasiones –como también lo que encontré en el museo-, en tanto llegué a la capital en tren viajando desde Cartago, y los paisajes observados por las ventanillas del carruaje eran tan diversos como ser un pasajero entre la entraña de la cordillera, o entre los patios traseros de las urbanizaciones residenciales, son entornos (im)precisos a cada tracto recorrido; hasta me cuestioné si lo visto al regresar traería su propia carga o influencia a la interpretación, o sea, estar en similar situación a la lectura realizada en las salas expositivas, pues al comentar una propuesta tan seria, como lo es ésta, siempre es necesario considerar el efecto de la dirección contraria. En algunos pasajes del recorrido aprecié la naturaleza: enormes arboledas y reverdecidos sotobosques; a veces tapias con grafitis con muchos rostros dibujados con ese gesto borroso de los aerosoles; además encontré caligrafías disidentes que subvierten la incertidum18
La Fat alísima No.1 3
bre en tanto confrontan al drama de la urbe, y rótulos callejeros tan impersonales pero que tienen presencia en ese panorama percibido pues albergan memoria. Teniendo como sonoridad la ensordecedora pitoreta del tren que irrumpe al cruzar los cientos de intersecciones que conforman ese “paisaje multisensorial”, que no es solo visual sino también sonoro, y también tramposo, pues al sondear y tener algún “re-conocimiento” (tal y como lo escribe Adrián Flores en el título de su propuesta), en cualquier recodo de la vía puede encontrar un punto de inflexión que desencadene los recuerdos fluyendo a la deriva. Así es el arte, reflexioné, premonición de lo que decantaría minutos después al ingresar al recinto del museo, exponiéndome a las implicaciones teóricas y a la conceptualidad de una propuesta de arte contemporáneo que nos antepone sus propias contingencias y vicisitudes.
Adrián Flores (Costa Rica). Re-conocimiento sin conocimiento. Instalación. Espacio de encuentro (acción). 2017. Foto A. Artavia cortesía del MADC. 19
El movimiento en la imagen Lo visto en todas las salas del MADC, con sugerente mirada museográfica, motivó evocar las postrimerías del siglo XIX, el desafío que representó el estudio de la luz no solo como energía radiante y calórica sino también en la comprensión de la estructura del color y su aplicación a la pintura de los impresionistas y al naciente arte fotográfico. También conmocionó aquella sociedad la invención del motor al vapor, el cual, entre otros, movió la serpiente ferrosa que unía a las grandes ciudades: las locomotoras; reto para la ingeniería tanto como para el arte cuando el artista advirtió recelo e implicaba en adelante conquistar lo que se mueve para el arte. El pasajero del tren que desde su asiento veía pasar el paisaje por las ventanillas, le retó, como también retó a los artistas su representación y de ahí la preocupación de representarlo con el Cubismo y el Futurismo italiano, recuérdese el manifiesto de F.T. Marinetti publicado en Le Figaro en 1909 . Me refiero a estas circunstancias históricas y de la técnica pues en ese desafío el individuo creativo cuajó el “cine mudo”, ante el pathos que desafiaba a exponerse a lo nuevo, a la invención, reinvención y reingeniería de las cosas y cotidianidad, tal y como sucede en la actualidad cuando empezamos a movernos en el espacio de la virtualidad e internet aprendiendo nuevos significados y reinterpretando sus desafíos. La revolución de la iconicidad encontró otro medio tecnológico con la invención de la cámara de video, pues el arte no se ve de la misma manera en tanto que tal evolución y desarrollo científico-tecnológico 20
La Fat alísima No.1 3
José Alberto Hernández. Auto-opsis. Videoinstalación, 2002. Segundo Premio ii_2002 Colección MADC. Foto A. Artavia cortesía del MADC.
21
lo permea de sus metodologías y avances abriendo nuevos espacios, abordajes, lenguajes y discursividad centrales a los estudios sobre teoría, crítica e historia del arte. Avances, que, junto con los aportes de la industria gráfica, dieron temple a lo que el historiador español Juan Antonio Ramírez llamara en la segunda parte del siglo XX “democratización de la imagen”. (Ramírez 1976, Medios de masas e historia del arte. Madrid: Ed. Cátedra). Imágenes inquietas Fueron paisajes disímiles, actitudes disidentes, registros de la discontinuidad que quizás influyeron en mi apreciación a la muestra, y hablo de garfios y de duros golpes a nuestra sensibilidad, como la pieza de José Alberto Hernández, Auto-opsis, 2002 (premiada en dicha primera versión ii_02), la cual nos recibe en la entrada a la gran sala clavándonos la espinita acerca de la deslgadísima línea existente entre la vida y la muerte. En este mismo espacio Dos piedras, video 2017 de Christian Salablanca, carga otro sentido de los conflictos actuales al chocar los puños de las manos pues resuenan como piedras, como colisionan los pensamientos, las divergencias políticas, las teorías, los consensos o disensos, las tratativas y emergen los contrasentidos en esas pugnas de poder que equivalen fuerzas en los más álgidos niveles de aproximación a la estructura social, esa que justamente sostiene no solo este país y al istmo de Centro América, sino al mundo entero; basta dar una ojeada a las tensiones en la península coreana, Israel y Palestina por el cambio de posición de la embajada norteame22
La Fat alísima No.1 3
ricana en ese intrincado ajedrez internacional…, además la situación en Cataluña y tantas otras pugnas en las cuales nuestro propio continente no está nada exento, recuérdese los conflictos en Colombia con la añosa guerrilla, a la ingobernabilidad y crisis de Venezuela, y a la situación en Honduras que no encuentra salida.
Christian Salablanca Dos piedras. Video 2017. Foto A. Artavia cortesía del MADC.
Brooke Alfaro (Panamá) Aria. Videoproyección, 2001. Primer Premio ii_2002. Colección MADC. Foto A. Artavia cortesía del MADC. 23
Y ¿qué decir del video de Lucía Madriz también en dicha Sala 1, Dolor de cabeza, Videoproyección, 2003. Premio ii_2003, Colección MADC, refiriéndose al sometimiento y resistencia cuando una caricia trueca en desesperanza o desamor en las relaciones de pareja y que en muchos casos lleva al femicidio que enciende gráficas alarmantes? Son nociones que estarán siempre en primera fila, o línea de ataque, y que el arte aprecia como fuentes de investigación y expresión actuales. Aún resuena en mi memoria aquella aguda y estridente voz de soprano entonando Aria, 2001, del panameño Brooke Alfaro (Premio ii02) la cual aguza nuestro sistema auditivo, y me conecta con la pre-experiencia tras recorrer esa hora en tren desde Cartago y escuchar el acuse al poder: llevar la vía y desaparecer a cualquiera que intente meterse al paso de la máquina. Hermosa detención al mirar aquellos diedros de un añoso constructo edil rotando como lo hace la rueda de la fortuna en torno a fuerzas centrípetas y centrífugas que nos vuelven a conectar con las tensiones urbanas y sociales de hoy en día. La metáfora del tren me motiva a referirme a aquella superposición sónica sellada con la pieza del panameño Darién Montañez, Todo se me ha de volver, video 2016, cuando en la imagen aparece la dama de la canción latinoamericana la argentina Libertad La Marque en la grabación de una película, cuando todos concentrados intentando eliminar cualquier dosis de subversivo ruido, al comenzar el registro, de igual manera inician a superponerse grabaciones de la misma canción entonadas por decenas de cantantes, y se advierte esa borrosa incoherencia como cuando escuchamos a los políticos discursar 24
La Fat alísima No.1 3
Darién Montañez (Panamá). Todo se me ha de volver. 2016 Video. Foto A. Artavia cortesía del MADC.
sobre lo mismo –como sucede en estos días previos a las elecciones 2018-, pero sin que lleguen a nada inteligente, sustancial, practicable, suelen ser solo texturas sonoras grabadas en los muros de la ciudad o los pueblos urbanos y rurales como grafitis del rumor.
Darwin Andino (Honduras). Contrato social. 2017. Instalación: código binario escrito sobre cerámica de alfarería. Foto A. Artavia cortesía del MADC.
25
Evoco con sumo interés la pieza Contrato Social del hondureño Darwin Andino, instalación de un código binario trazado sobre arcilla, 2017, lo cual conforma The Sounds of Earth, referenciando aquel disco de gramófono inmerso en la sonda Voyager lanzada en siglo pasado con la idea de alcanzar una estrella del sistema solar, y, por si encontrara vida, conlleva la cuadratura de la Tierra para que nos encuentren. Las inscripciones en la arcilla sugieren escrituras cuneiformes de la antigua Mesopotamia, al lado de la frase tratada que posee una alta carga simbólica de la cultura terrestre. La anterior es una obra que me acerca a la del salvadoreño José Orlando Villatoro, SS2 (de la serie código humano), otro elemento de lectura de la identidad y reconocimiento de nuestra cultura actual, tan cercana a los sistemas de seguridad y a la vez sitiado por el video de seguridad; claves al escanear las tinajitas de alfarero, contexto originario tan cercano a nuestras culturas ístmicas y del planeta.
26
José Orlando Villatoro (El Salvador). SS2 (de la serie Código humano). Instalación: tinajas de barro. 2017. Foto A. Artavia cortesía del MADC.
La Fat alísima No.1 3
También me impresionó la fotografía de Jorge Albán-Dobles titulada Democracia 2017, una pieza impresa en tecnología lenticular, de esas que al movernos la imagen (des)aparece pero al volver la imagen es otra. Se refiere a esos postes abatibles de la Ruta 32 que atraviesa el Parque Nacional Braulio Carrillo, y conduce a la zona caribeña, donde cientos de camiones cargueros que hoy reemplazan al ferrocarril desplazado en la década de los noventas y hoy se advierten las consecuencias, tal y como sucede con esos postes golpeados y rotos. En tanto son signos de las contravenciones de los conductores nos hablan de la ingobernabilidad y del frágil sistema democrático costarricense, pero también nos evocan las contingencias del territorio caribeño en tiempos de la explotación bananera y la United Fruit Company.
Jorge Albán-Dobles. Democracia. Fotografía digital lenticular. 2017. José Pablo Ureña. Labasuraapropiada. Fotografía digital e interacción en redes sociales. 2017. Foto A. Artavia cortesía del MADC.
27
De José Pablo Ureña Labasuraapropiada, fotografía digital e interacción en redes sociales; las encontramos por todo el museo, crónica de todos esos lugares donde pulula la inmundicia, el subproducto de esta sociedad donde nadie sabe qué hacer con ésta y que cada día más recubre el paisaje, las orillas de los ríos, los rincones de la urbe. Tal y como comenté, me interesó otra acción enunciada por Adrián Flores Sancho, Re-conocimiento sin conocimiento, 2017, abriendo el espacio en el cual la idea se mueve en redes y/o por mensajería activando la participación de terceros, pero con fuerte carga de conceptualidad, de una expresión ante la cual cabe preguntarnos por nuestras huellas o por sí mismos. Esvin Alarcón de Guatemala exhibe Ruta de la seda, 2017, fotografía digital retablada (cortesía de Galería Henrique Faria New York), registra una acción en la cual se utiliza “ropa americana” fabricada en países asiáticos, la cual configura un arco que existió en la plaza central de la capital guatemalteca, donado por la Colonia China en aquel país y que fue removido. Las imágenes capturadas mediante un “drone”, en posición perpendicular captura la reconstrucción del arco con tales prendas del vestido, pero se va diluyendo hasta desaparecer. No deja insinuarse a mi percepción y memoria la pieza de video instalación de Johan Phillips, Confites Chupados, 2017, pues el arte actual no se hace solo para ser visto sino también para ser gustado, “chupado”, olido, escuchado, al dejarnos una huella que enciende nuestro sistema perceptivo y lo sinestésico de los lenguajes no-verbales. 28
La Fat alísima No.1 3
Johan Phillips. Confites chupados, 2017. Videoinstalación. Foto A. Artavia cortesía MADC.
Para concluir con esta reflexión de lo visto en esta intensa muestra, comento la propuesta de la costarricense Alejandra Ramírez, Puedo escribir cualquier cosa de cualquier imagen, 2017, Premio ii_2017, parece implicar la mirada hacia una territorialidad desdibujada por el tiempo, y la calidad de las imágenes de archivo de las cuales se sirve esta joven artista para construir el video y sus conceptos, borrosos(as) como un paisaje que ya no es el mismo: avistar desde las ventanillas de un tren sin fin -como el continuum de la vida o la irrealidad de la quimera-, pasan veloces constituyendo narrativas que cierran la metáfora, con esas plantas de un supuesto “trópico” nada “tropical”, y tantas otras contradicciones acotadas en el hilo textual: desde la burla irónica, una manera de apelar al poder de la imagen y de quienes lo asumen para construir narrativas específicas… Son palabras que aún imbrica nuevos hilos a anudar: …Enunciar es poder.
29
Esta última frase de la artista ganadora en ii17 colmó de renovados bríos mi pensamiento y talento de reflexionar y comentar arte, ante la densidad de lo visto, a veces es inevitable colisionar contra los muros del museo, y abandonar la tarea pues se acabaron las palabras y la tierra para sembrar nuevas es estéril e infértil. Pero aún así esa frase conclusiva y en ese trance del choque, o la quebrazón provocada, uno percibe como entre esas grietas y fracturas emergen nuevas palabras y entre los intersticios de tales vocablos surgen aún nuevos pensamientos, para retomar el retorno. Participan en la propuesta (ii17) SALA 1. Christian Salablanca (Costa Rica) Dos piedras. Video 2017. / Esvin Alarcón (Guatemala) Ruta de la seda. Fotografía digital retablada, 2017. Cortesía de Galería Henrique Faria New York. Mención ii_2017. / José Pablo Ureña. Labasuraapropiada. Fotografía digital e interacción en redes sociales. 2017 SALA 2. José Orlando Villatoro (El Salvador). SS2 (de la serie Código humano). Instalación: tinajas de barro. 2017. / Pável Aguilar (Honduras). Trazos. Instalación: láminas de aluminio grabadas al láser y grabación telefónica 2017. / Darwin Andino (Honduras). Contrato social. 2017. Instalación: código binario escrito sobre cerámica de alfarería. / Jorge Albán-Dobles (Costa Rica). Democracia. Fotografía digital lenticular. 2017. / Adrian Flores (Costa Rica). Re-conocimiento sin conocimiento. Instalación. Espacio de encuentro (acción). 2017. SALA 3. Darién Montañez (Panamá). Todo se me ha de volver. 2016 Video. / Alejandra Ramírez (Costa Rica). Puedo escribir cualquier cosa de 30
La Fat alísima No.1 3
Alejandra Ramírez. Puedo escribir cualquier cosa de cualquier imagen, 2017. Video. Premio ii_2017 Foto A. Artavia cortesía del MADC.
Vista de Sala II del MADC. Foto A. Artavia cortesía del MADC.
31
Esvin Alarcón. Ruta de la seda. Fotografía digital retablada, 2017. Cortesía de Galería Henrique Faria New York. Mención ii_2017. Foto A. Artavia cortesía del MADC.
Adrián Arias (Costa Rica). Llamada perdida, 2016. Fotografía. Foto A. Artavia cortesía del MADC. 32
La Fat alísima No.1 3
cualquier imagen, 2017. Video. Premio ii_2017 / Emanuel Rodríguez (Costa Rica). Daemon. Roderich Tuhn. 2017. Video. / Adrián Arias (Costa Rica). Llamada perdida, 2016. Fotografía. Animaciones y videojuegos: Ana Luisa Sánchez (Panamá). Angie contra el mundo. Videojuego. 2005. ii_2005. Francisco Munguía (Costa Rica). Perros de DJ Pulp y Carpeta de ensayos de DJ Pulp. Animación. ii_2007. Diego Fournier (Costa Rica). The marihuana monster attack. Videojuego. ii_2011. Francisco Munguía (Costa Rica). DJ Pulp. Animación. ii_2011 / Pilar Moreno (Panamá). Panamá. Animación. Mención ii_2013. SALA 4. Marcela Araya (Costa Rica). Baños de color I 2017. Proyección. / Andy Retana (Costa Rica). La cámara, 2017. Video. Mención ii_2017. / Sara Mata (Costa Rica). Sé tú mismo 2017. Video. / Johan Phillips (Costa Rica) Confites chupados, 2017.Videoinstalación. / Jonathan Torres (Costa Rica) Ejercicio de colaboración, 2017. Instalación interactive. / Joan Villaperros (Costa Rica). Ye stsöke. Yo cantar, 2017. Videoinstalación: dispositivo electrónico, parlante, tintas, aceite, agua, sonido y video en streaming. / Erno Hilarión (Costa Rica). Paisaje conquistado, 2017. Instalación: lámpara, rama, arena y sonido. Programa Mono Canal. Esvin Alarcón (Guatemala). Aparición (pieza del dragón). Video, 2017 Cortesía de Galería Henrique Faria New York. / Óscar Figueroa (Costa Rica). The Great White Fleet. Video, 2017. / David Garrigues (Costa Rica). No existe lugar privilegiado. Video, 2017 / Wilson Ilama (Costa Rica). Auto_sabotaje. Video, 2017. Pablo Romero (Costa Rica). Fantasías animadas de ayer y hoy II. Gif traducido a video, 2017. Léster Rodríguez (Honduras). Manifiesto. Registro de video, 2016. Leyla Vargas (Costa Rica). Eros en los tiempos del Internet. Video, 2017.
33
Detrás del Portón Rojo
Pareja copulante en arcilla de la colección del Museo Nacional de Costa Rica. Foto cortesía del MAC.
Detrás del Portón Rojo. Una Visión de la Erótica en el Arte Costarricense, curada por Sussy Vargas y Roberto Guerrero (invitados) en el Museo de Arte Costarricense (MAC), inaugurada el 16 de noviembre 2017 y abierta hasta abril de 2018. 34
La Fat alísima No.1 3
Articula profusas capas de aproximación a una zona del arte nacional impregnada de erotismo, sensualidad, y el poder de la vida fecunda en tierra fértil. Recorrer esas salas del MAC representó la exploración a un territorio –que, aunque sabía qué encontrar-, sorprendía a cada paso, con cada obra, la mayoría desconocidas pero que advertía el ardor de sus contenidos y la naturaleza de esas propuestas. Es una exposición exhaustiva, con citas, textos de pared, documentos históricos y rastros relativos al proceso de curaduría que pretende empoderarnos con lo expuesto, donde cada abordaje posee un nivel el cual va a ser leído en profundidad, no de manera aislada ni por suma sino por su “transparencia”, por un espectador obligado a relacionar y asumir tal concentración de “intertextualidad” en lo observado; motiva por lo tanto a un espectador comprometido, que no anda al margen pues ha sentido en lo profundo de sí ese fuego y ese goce de lo “prohibido” pero que es tan propio de nuestra naturaleza humana. El recorrido inicia con las manifestaciones originarias prehispánicas, nada ajenas a este discurso y que se aprecia en sonajeros y vasijas con forma de parejas “copulantes”, además de una breve visión de lo acaecido en la colonia cuando se creó un camarín tallado en madera y policromado, ahora colección del Museo Nacional de Costa Rica, además se aprecia lo más representativo del siglo XX y, por supuesto, la mirada a la naturaleza disoluta que potencia el tema dentro del arte de nuestros días.
35
Argumentos liminares Quizás la abundante interrelación de lo exhibido con abundantes nexos, como dije, intertextualidad, motivó en mi percepción muchas citas al pensamiento puesto en el arte de los últimos tiempos, el cual, en fondo, es el que más me interesa. La primera cita es del filósofo español Eugenio Trías, quien en su libro “El Artista y la Ciudad”, 1997, observa la figura de la “divinidad” asimilada en el carácter de “hacedor” que distingue al individuo creativo, y acota: El artista, congenial a esta figura mítica, encarna la figura del embaucador, verdadero mimo del conocimiento, como el sofista: no es todas las cosas, únicamente las simula, no conoce todas las cosas, sencillamente las refleja en un espejo que gira en todas las direcciones. (Trías 1997. Cap I. Platón: La Producción y el Deseo. P 25).
Vista de Sala durante la inauguración de la muestra Detrás del Portón Rojo. Foto cortesía del MAC.
36
La Fat alísima No.1 3
A partir de esta revisión conceptualizadora se define al actor responsable de la práctica artística como un individuo productor, travieso, astuto, crítico, pertinaz, pero también es criatura “deseante” –tal y como lo define Leo Bersani en uno de los textos de pared-, el individuo creativo es apasionado, ávido de su cuerpo sensitivo, quien visibiliza recreando imaginarios simbólicos en cuyos escenarios externa añoranzas y/o preferencias; él es quien juega, sueña y marca su posicionamiento en las relaciones intrapersonales e ideología, con una luz personal que oriente a otros a llegar a lo buscado, entre vida y muerte, Eros y Thanatos. Quiere decir que en el acto de la creación se debe abandonar la estratosfera donde se contempla la inmanencia y lo que es bello, para producir y sacar fruto de la experiencia; aspecto fundamental en tanto no podemos quedarnos mirando hacia el cielo esperando que el trabajo se haga solo, por milagro o magia. Continúo citando a Trías quien lo explica de esta otra forma: Es necesario contactar con la belleza a través del impulso erótico –lo cual implica enajenación, muerte. Pero es preciso rebasar ese estadio, dejar morir la misma muerte, enajenar la misma enajenación. Y ello en virtud de un resurgir en el que el alma verdaderamente renace, siendo ese re-nacer un descenso del estado contemplativo al proceso activo. (Trías, Idem. P 45)
37
Juego de miradas Caminar por los espacios expositivos del Museo de Arte Costarricense (MAC), significa sentir sobre sí las miradas ante las disyuntivas del ser en esas andanzas cotidianas por la urbe, territorialidad donde entabla el contacto y se carga de energía creativa estimulado por el poder de la mirada, pero también es en suma sensible al advertir el vector de retorno: las ojeadas propias al escudriñar los objetos, pinturas, dibujos, grabados, fotografías, arquitecturas, documentos, cuerpos, otros ojos que se posan sobre sí, y todo lo que se mueve o enciende en esa intensa superficie, para adelantar un cúmulo de preguntas (des)equilibrantes, en tanto interrogan para tener significados, asimilar y enlistar lo aprendido, como en mi caso de comentarista de las muestras de arte, pues vana sería la visita al museo si no fuera de esa manera. En ese forcejeo ante lo visto, surgieron las preguntas: ¿Por qué Sussy Vargas y Roberto Guerrero -curadores invitados por el MAC para la actual exposición-, hacen referencia al “Portón Rojo”?, en tanto este mismo año con la realización del Salón Nacional de Artes Visuales del MAC 2017, el joven artista José Aurelio Álvarez propuso la instalación “Chinamo el Portón Rojo”, (https://www.experimenta.es/blog/luis-fernando-quiros/salon-nacional-de-artes-visuales-del-maccr-2017/
) refiriendo a los
acontecimientos precisamente de un siglo atrás (1916) originados en el famoso Cabaret Voltaire de la ciudad de Zúrich, Suiza, cuando el poeta Hugo Ball y el artista Tristán Tzara -a quienes se unieron otros intelectuales desplazados por la guerra o asilados políticos-, se pro38
La Fat alísima No.1 3
pusieron reinventar un arte opuesto a las prácticas artísticas de entonces, tildándolo de “antiarte” y que abrieron esa superficie creativa como terreno para las “Primeras Vanguardias”; pues sí, Álvarez creó una instalación aludiendo a ese mismo sujeto/objeto de investigación del arte contemporáneo. Pero, ¿qué centra en todo este discurso la figura del pintor Teodorico Quirós para nadar a contracorriente en este cauce de remezones actuales e históricas, ya entrados en las dos primeras décadas del siglo XXI y el tercer milenio? En mi caso personal dicho rastreo de vivencias me enciende, me pone como el portón, para poder entrelazar y de esa manera adquirir los significados que ayuden a mi interpretación de lo exhibido. Estos razonamientos los reafirma Briggs y Peat en “Las Siete leyes del Caos”, 1999, cuando hablan en sentido figurado del inquieto y revolucionario artista que antes nos definió Trías. Ahora Briggs y Peat lo definen así: El trasgresor es el superviviente astuto, el travieso desvalido que desafía la convención, subvierte el sistema, rompe la estructura de poder y alumbra nuevas ideas (Briggs y Peat, 1999, P 14). Aquel óleo de 1945 colección del MAC, se proclama como uno de los símbolos de la actualidad del arte local en la primera parte del siglo XX. Pero existe otra imbricación, más de carácter sociológica, para que los curadores adoptaran el nombre de dicho ícono para una muestra sobre sensualidad, sexualidad y erotismo en las manifesta-
39
ciones creativas actuales en el país, se sustenta en que a los “prostíbulos” antaño se les distinguía por la “luz roja”, la cual se vuelve elemento de reconocimiento pero también de relegarse tras las mamparas o escenarios de una urbe en crisis: luz, portón, plaza, esquina, calle, barrio, cabina telefónica, asiento…, cuando se habla de lo libertino, de trasegar lo ilícito y satisfacer espíritus “deseantes”, señalado de nuevo el pensamiento de Bersani al hablar de transparentarse para hacer correspondencias con el mundo. Aquí encuentra sentido precisamente el dibujo del inquieto Roberto Lizano “El poyo colorado”, 1988, el cual marca o enciende la luz para el sitio de encuentro, signo de identificación y reconocimiento para las citas sexuales de un tiempo en un parque josefino.
Zulay Soto. Amor = Love, 2010. Collage, colección de la artista. Foto cortesía del MAC.
40
La Fat alísima No.1 3
Remezones en el tiempo y espacio Otro de los aspectos que enuncian este contenido en particular es el morbo de las personas y esa sempiterna conducta vouyerista, que se transforma y transparenta, es cierto, sin embargo nos costó sufrir y asimilarlo a los artistas -por lo menos a los de mi generación-, a pesar de que vivenciamos en aquellas épocas de juventud la revolución de “Paz y Amor” con los hippies, y la liberación sexual que conllevó profundas transformaciones en la sociedad de los sesentas y setentas del siglo pasado. Recuérdese, como insumo para comprender lo que significó para nosotros y en tanto artistas, vivir esos años que nos formaron: la revolución estudiantil de París 68, extendida también a nuestro continente de lo cual se recuerda la masacre de Tlatelolco, México 1968; la huelga ALCOA 70 que adversó la explotación minera en el país, y para precisar en ese plano de lo sensual se recuerda el concierto de Woodstock 1969 cuando los asistentes mostraron sus cuerpos desnudos, femeninos y masculinos; o los desfiles de aquellos años donde las mujeres en topples clamaban -en la ciudad de San Francisco-, por asimilación, anticipando la actual igualdad de géneros y el derecho a las minorías trans, gays, lesbicas. Costa Rica se recuerda las iniciativas de la artista Zulay Soto, como una artista trasgresora y contestataria -presente en esta muestra con dos piezas de su Hot-Art, expuestas en 2010 precisamente en este mismo museo-, y quien en aquellos años de los setentas caló con su posicionamiento de la “Izquierda Erótica”, gestionando exposiciones, encuentros y conciertos en la Galería Amighetti (iniciativa privada 41
suya), u otros realizados en una finca de “Los Cielos” de Coronado, lo cual caldeó muchos ánimos en la mojigatez de la sociedad capitalina de entonces. Además del arte de Zulay, por su parte Fernando Carballo creaba la serie de “Los Ángeles Malditos” cargados de sensualidad y actitud disidente, motivando a un grupo de jóvenes cartagineses que se les llamó “Grupo de la Puebla”, en honor a la barriada cartaginesa que en tiempos de la colonia mantuvo una actitud de disenso, clamando por sus derechos ante los representantes de la corona española. También se recuerda a Juan Luis Rodríguez Sibaja quien conquistó el medallón de oro de la Bienal de París, 1969, con su instalación de un cuadrilátero de boxeo tallado en hielo, el cual, al calor de la humanidad presente en las salas expositivas se derretía fluyendo un tinte bermellón y negro, colores de lo revolucionario de nuestros pueblos originarios hasta los grupos actuales. A Otto Apuy también se le evoca con la muestra el “Des/afecto” y otras intervenciones al espacio público, y de lo cual se exhibe una pieza en esta propuesta del MAC. A mi generación nos tocó asumir aquellos estertores de las postguerras europeas, los conflictos de Vietnan, entre otros desafíos de tiempos cambiantes. En el contexto aquel de los setentas en el cual se realizó la Primera Bienal de Arte Centroamericano de 1971, a instancia del CSUCA, una exposición como está habría terminado con “cortes de rabo”, como se dice en el argot popular. Hoy en día apreciamos tales conductas como otro desafío, tanto como vemos a una pareja de varones saludarse de beso en los labios inflamando su profundidad pul42
La Fat alísima No.1 3
sional, o una fina damita sonrojarse o no ante el desparpajo de tantos signos de erotismo expuestos, como las talla en madera del maestro Néstor Zeledón que más que cuerpos son pene y vulva; la escultura de doble lectura creada por Roberto Lizano dispuesta en un nicho de una de las salas implica similar lectura o los grabados candentes de Adrián Arguedas; la pieza del joven Andrés Gudiño como tantos otros creadores revolucionan la percepción del erotismo en el arte nacional.
En las imágenes se muestra una de las basijas con temática erótica. Detalle del Camarín de la colonia, colección del Museo Nacional. y Un detalle del dibujo de Figueroa, custodiadoi por el Archivo Nacional. Fotos cortesía del MAC.
43
¿Qué me aporta apreciar “Detrás del portón rojo”? Ya conocía, por una conferencia del artista Henry Vargas docente de la UCR, compartida en el auditorio de el Museo del Jade y la Cultura Precolombina, titulada “Simbólica e Iconografía Erótica Precolombina” -hace justamente un año, noviembre de 2016-, apropósito de la exhibición temporal Conclusiones Actuales sobre el Arte Originario, 2016/2017, conferencia en la cual trató el asunto de “parejas copulantes” en la cerámica precolombina colectadas por el Museo Nacional de Costa Rica, lo cual deduce sintonía de los investigadores Vargas y Guerrero con las prácticas curatoriales actuales, y que el MAC sustenta de forma ejemplarizante con la recién pasada propuesta “Margarita Betheau Inédita”, curada por Sofía Soto-Maffioli, actual directora de este museo. (https://luisferquiros.wordpress.com/2017/10/27/margarita-betheau-inedita/ ); < https://issuu.com/luquiva/docs/lafatalisima12 >
44
Juan Manuel Sánchez. Dibujo. Foto cortesía del MAC.
Manuel de la Cruz González. Pasiones. Dibujo. Foto cortesía del MAC.
La Fat alísima No.1 3
Encontrar, como comenté, objetos de la colonia, como el camarín del siglo XVIII de Cartago, madera policroma, en préstamo por el Museo Nacional, así como el dibujo “La Trompudita” de José María Figueroa de 1843, colectado por Archivo Nacional, el cual testimonia un juicio contra este artista de antaño acusado de perversión por un dibujo “erótico”; u otros documentos históricos, potencian dicho rigor y celo curatorial. En similar condición encuentro prodigioso conocer dibujos eróticos de Juan Manuel Sánchez, de un trazo ataviado de signos de erotismo o sensualidad en el uso de la curva y contra-curva abierta (el goce de la chispa de la vida, el “chingue” del fin de semana en la playa, y otros componentes de un lenguaje exacerbado por la publicidad y el marketing actual, tornándose intensos discursos para las prácticas artísticas de nuestros días); u otro de 1942 de Manuel de la Cruz González, “Pasiones”, con un lenguaje gráfico y de contenido muy cercano a Sánchez aunque un poco más convulso que poético; como también la famosa cromoxilografía de Francisco Amighetti “La niña y el viento”, 1969; fotografías de Álvaro Herrera 1952; y la de Larry Madrigal “S/T, de la serie Trans”, hacia 1990, colección de Sussy Vargas en la cual asomo Éros y poiésis. Todo este escenario de erotismo y poesía trastoca nuestro propio paisaje de “deseos”, al recorrer la exhibición e intrincar en zonas que aclaran una de las manifestaciones más sensibles en la producción creativa del arte de nuestros días, no se puede dejar pasar desapercibido en este análisis el impacto de detenerme ante otra
45
Larry Madrigal “S/T, de la serie Trans”, hacia 1990, colección de Sussy Vargas. Foto cortesía del MAC.
Margarita Bertheau. Acuarela 1953. Foto cortesía del MAC.
46
La Fat alísima No.1 3
acuarela de Margarita Bertheau, pintada en uno de los años más relucientes en su intensa producción creativa: 1953; se trata de una pieza de tono surrealista e intenso carácter emocional, referido no solo al sexo entre humanos sino el animal, percepción que aún tirita en mi memoria huidiza, seduce a volver al museo para satisfacer dicho “instinto morboso” que nos caracteriza al ver criaturas cupular y encender la luz roja de nuestra propia psique al ardor de la mirada vouyerista. Aproximación al erotismo Los curadores inician sus argumentos con una cita de Georges Bataille encontrada en el prólogo de su libro El Erotismo, 2005, publicado por “TurQuets Editores”, cuando el intelectual francés acota acerca del género humano: Constantemente se da miedo a sí mismo. Sus movimientos eróticos le aterran (Bataille 2005, P11, citado por Vargas y Guerrero en el catálogo de la muestra en el MAC). Por supuesto que aterra reconocerse, descubrirse, desnudarse, despojarse de los atuendos con que nos revestimos al presentarnos a la sociedad, ha sido y siempre será tremendo, requiere de mucha valentía (“salir del closet”, en la jerga actual), pero de otra manera ¿de qué vivirían los psicólogos clínicos y afines? ¿Cómo no manifestar esos impulsos de la carnalidad tan de naturaleza humana? Bataille agrega: Pero para nosotros es solo un signo horroroso, que sin cesar nos recuerda que la muerte, ruptura de esta discontinuidad individual en la que nos fija la angustia, se nos propone como una verdad más eminente que la
47
vida”. Y de manera contundente afirmar: “El erotismo de los cuerpos tiene de todas maneras algo pesado, algo siniestro. (Bataille Idem. P 24). Toda esta trama de lecturas -incluso significa una investigación autoreferencial en tanto buscamos responder a la pregunta quiénes somos, qué somos, cómo somos-, compendio de escritos que refieren a la presencia e inminente asunción a la esfera de la vida/muerte, trasfondo existencial presente en nuestras relaciones conyugales, de pareja, o para satisfacer deseos traviesos del –volviendo a Bersani: “Cuerpo deseante”. Despojarse de aquellos atuendos es morir al pasado y re-nacer en la idea de Trías, en una actitud absoluta que libera. Estas cosas nos encienden, abren de par en par el portón rojo a pesar de las instancias de lo terrible asociadas, los estigmas sociales, culturales y posicionamientos o normativas, como lo dijo el poeta checo Rainer María Rilke (1875-1926): ese grado de terrible que los humanos podemos soportar, y que insignes poetas y novelistas han tratado, entre otros Baudelaire, Rimbaud, Cernuda.
Victoria Cabezas. Sin Título, 1973. Fotografía b/n. Foto cortesía del MAC.
48
La Fat alísima No.1 3
El novelista alemán Thomas Mann también trató esta coyuntura de lo sublime y profundo: Quien contempla la belleza con los ojos. Se ha conciliado con la muerte (Citado por Trías, 1997. P 50), lo cual a su vez refiere -una vez más en mis comentarios-, a “Muerte en Venecia”, novela llevada al cine por el célebre Luchino Visconti, cuando Gustav von Aschenbach, el personaje central, se desvive por sentir cercana la bella figura del joven Tadzio, acción que lo conduce a la muerte en aquella playa del Lido veneciano. En esta estratificación de lo simbólico, del plano tropológico, el artista nacional Jorge Albán presenta la fotografía de unos enormes cactus en posición horizontal, contrastando esa direccionalidad punzante con los cuerpos de unas jóvenes quienes admiran aquella dote de la naturaleza, pero que poseen espinas; potencia una lectura de lo complejo que resultan esas enormidades en la vida cotidiana y las relaciones sociales e incluso de pareja, cuando lo bello es portador de su propio aguijón y hay que esperar la estocada para ver cómo se emerge del trance. También se aprecia esta contradicción vivencial en la pieza de Marton Robinson, quien exhibe una secuencia fálica, en cuyas prominente cabezas portan bebés, para decirnos que hay vida y humanidad de por medio en tan sugerente desfile, y nos sume en la reflexión para comprender el significado de esta dicotomía de la vida.
49
A manera de colofón Bataille, en tanto parece ser la referencia central del discurso –y, para concluir con esta aproximación a la lectura de “Detrás del Portón Rojo” en el MAC-, el filósofo francés dice que: La violencia, así como la muerte que la significa, tiene un sentido doble: de un lado un horror vinculado al apego que nos inspira la vida, nos hace alejarnos; del otro, nos fascina un elemento solemne y a la vez terrorífico, que introduce una desavenencia soberana. (Idem, Bataille 2005, P11). Se trata de una recurrencia intensificadora del discurso sobre el (des) apego a la vida (la desavenencia quizás), al cuerpo “deseante” y morboso, pero sensiblemente humano, y aunque perdiéramos todo, permanece aliado a nuestra naturaleza “licenciosa o pecadora”, y me mueve, para concluir, a saborear una vez más las delicias transmitidas por el famoso poema del alejandrino Konstantinus Kavafis (18631933), publicadas por (Mondadori, P 27): Vuelve otra vez y tómame, amada sensación retorna y tómame – cuando la memoria del cuerpo se despierta, y un antiguo deseo atraviesa la sangre; cuando los labios y la piel recuerdan, cuando las manos sienten que aún te tocan. Vuelve otra vez y tómame en la noche, cuando los labios y la piel recuerdan… (Kavafis. 56 Poemas. 1998). 50
La Fat alísima No.1 3
Artistas participantes La muestra incluye obras de artistas de Teodorico Quirós, José María Figueroa, Juan Manuel Sánchez, Emilia Prieto, Max Jiménez, Tomás Povedano de Arcos, Larry Madrigal, Joaquín Rodríguez del Paso, Néstor Zeledón, Jaime David Tishler, Herberth Bolaños, Victoria Cabezas, Jorge Albán, Carlos Barboza, Karla Solano, Gabriela Zumbado, Francisco Alvarado Abella, Memo Murillo, Alberto Murtillo, Roberto Lizano, Fernando Carballo, Adela Marín, Arturo Herrera, Álvaro Herrera, Francisco Zúñiga, Tamara Ávalos, Margarita Bertheau, Rolando Garita, Florencia Urbina, Miguel Hernández, Carlos Quesada, Zulay Soto, Olger Arias, Manuel de la Cruz González, Claudio Fantini, Adolfo Siliézar, José Miguel Rojas, Pedro Arrieta, Priscilla Monge, Otto Apuy, Adrián Arguedas, Emilio Span, Francisco Amiguetti, Eugenio Murillo-Fuentes, Jeffrey Arguedas, Mariano Ramírez, Fernando Acuña, Giorgio Timms, Luis Fernando Quirós, Andy Retana, Leonel González, Leda Astorga, Marton Robinson, Andrés Rangel, Lucía Madriz, Jorge Gallardo, Susana Sánchez, Andrés Gudiño, Amparo Cruz, Manuel Zumbado, Natalia Porras, Rodolfo Stanley, Ariela Muñoz, Rolando Cubero, Walter Rojas, Héctor Burke, Juan Bernal Ponce.
51
“Estrecho Dudoso” Virginia Pérez-Ratton, y Tamara Díaz Bringas en conversación con Cecilia Nuín
Virginia Pérez-Ratton y Tamara Díaz Bringas fueron co-curadoras de Estrecho Dudoso, un evento de calado internacional realizado en San José, Costa Rica, en 2006, en diversos espacios expositivos. Esta entrevista de Cecilia Nuin -posterior a la muestra-, nos es útil para traer al presente la reflexión provocada por tan importante aporte a la cultura, el cual sin lugar a dudas marcó el territorio del istmo en el mapa mundial del arte y cuyas resonancias refuerzan la memoria cultural centroamericana.
52
La Fat alísima No.1 3
Cecilia Nuín: Ahondando en Estrecho Dudoso ¿De cuál estrecho se habla? Tamara Díaz Bringas: El título salió del mal entendido de los españoles buscando la ruta hacia las Indias y estudios que hicieron sobre Centroamérica como un estrecho dudoso y que nunca lo encontraron. Luego está lo del canal inter-oceánico que ha estado pesando en la historia de Centroamérica. Uno de los episodios tenía que ver con la exposición Noticias del filibustero, y en la actualidad el tema de la ampliación del canal. Nos interesaba la idea del título en un sentido metafórico, de ser un punto de conexión del arte, de sensibilidades y generaciones distintas, e incluir artistas, arquitectos y también antropólogos de todas partes del mundo. De una Centroamérica que se conecta como istmo, y por otra parte replantear una duda desde la región, dudar de que el mundo contemporáneo está tan conectado, pero a la vez hay fronteras con más dispositivos de seguridad, más vigilancia, y más control. CN: Eso del canal inter-oceánico tiene una perspectiva interesante. Virginia Pérez-Ratton: El canal vino a llenar las expectativas de los conquistadores. Finalmente, el estrecho de agua fue hecho por el hombre. CN: Me gustaría que hablaran de como está formada esta gran muestra. VPR: Tamara y yo trabajamos en conjunto toda la muestra. Por un lado, hay dos exposiciones monográficas. Estábamos de acuerdo en tener dos referencias históricas que enmarcaran la exposición. Entonces decidimos hacer una retróspectiva de Juan Downey, un artista chileno que en Costa Rica era absolutamente desconocido, a pesar de que internacionalmente tiene un gran renombre, y Margarita Azurdia que es guatemalteca. Ella ha trabajado de una manera que anticipa la historia. Y luego cuatro exposiciones de grupo articuladas con significado. 53
La idea de Límites se armó como el eje principal que atraviesa la exposición, a pesar que se habla de filibusterismo, de lo urbano y de trueque, y siempre marcado por un tipo de límite o de no límite. TDB: Pensábamos también que fuera un espacio para que la gente de Centroamérica estuviese en diálogo con interlocutores locales. La idea del límite en el arte como un modo de pensar, tanto como la cordura, la locura, el miedo, o los límites institucionales y políticos. Esto podía dialogar con un formato flexible con otras muestras como Tráficos que trata de cómo se negocian esos límites en el espacio público. Sobre todo se trata de intervenciones en espacios, talleres, o con comunidades específicas y luego estas Rutas Intangibles que a través del dibujo estaba dialogando desde otro sentido del límite. CN: A propósito de Límites ¿Cómo se vinculan las obras Corresponding Lines de Liliana Porter y Ellos no son pobres de Ernesto Salmerón? VPR: Hay algo en Liliana Porter que caracteriza su obra, y es un constante cuestionamiento de los diferentes niveles de la realidad. El nivel material, la representación de esa cosa en una foto, un grabado, o un dibujo, mediante el objeto, y la imaginación. Eso para resumir una obra que es muy compleja. Y también ella trabaja sobre la idea de volver a algún lugar. En este caso es el regreso al hogar, y a la seguridad que muchas veces es imposible o virtual. Y en el caso de Ernesto también habla de diferentes niveles de realidad, porque lo que estamos viendo es un video de unos niños que se están bañando felizmente. Su realidad es la gritadera y el disfrute de una poza en un río tropical. Por eso se llama “Ellos no son pobres”, hay otro nivel que no es la riqueza material que para muchísima gente la pobreza es por que los niños no tienen vestido de baño y se están bañando allí y no en una piscina. Son diferentes niveles de realidad que se perciben según el punto de vista. Obviamente, son conexiones que uno hace a partir 54
La Fat alísima No.1 3
de la aparición de la obra. No sabíamos cuando invitamos a Liliana, y a Ernesto, que obras nos iban a proponer, pero había la intuición de que eran dos artistas que podían funcionar juntos. Es lo mismo que por ejemplo, la obra Sin Titulo de Shilpa Gupta que habla de la imposibilidad de dividir el cielo, muy poética, y a la vez nostálgica, talvez lo único total que hay en el mundo es el cielo, que es imposible dividirlo en dos, como es imposible dividir el disfrute de esos niños en dos cosas. Parte de la intención que tenía sobre todo Rutas y Límites era de trabajar a contracorriente. Hay ciertas tendencias actuales de trabajar con obras que son extremadamente mediáticas que entran dentro de la estética de los medios de comunicación, y de lo muy agresivo visualmente. Y queríamos trabajar cosas sutiles donde el espectador tiene que insertarse en las obras para poderlas captar profundamente. Eso exige pensamiento y reflexión.
Ernesto Salmerón, “Ellos no son pobres”, 2006. Instantáneas del video, cortesía del artista.
55
CN:¿Qué se pretende al montar un evento como es Estrecho Dudoso? TDB: Tiene que ver con San José como capital iberoamericana de la cultura y al impulso inicial que Hivos estimuló con su aporte. Estas operaciones buscan visibilidad o un intercambio efectivo. Por eso vinieron más de cincuenta artistas, y aunque muchos de ellos no hubieran necesitado venir a montar su obra, era importante que intercambiaran y crear un espacio de encuentro --un nodo. VPR: Creo que era trascender nuestros propios límites. De vez en cuando Tamara y yo hemos hecho exposiciones como la Bienal de Cuenca en Ecuador. Esta exposición buscaba potenciar la infraestructura que tenemos, porque internacionalmente lo que se conoce de Costa Rica es TEOR/éTica y el Museo de Arte y Diseño Contemporáneo. Funcionó relativamente bien, sobretodo cuando uno lo compara con eventos en lugares como Shangai, o en Africa, no solo a nivel de vías de desarrollo, pero también a nivel del mundo desarrollado. Muchas veces uno va a una bienal en Europa, Estados Unidos, e incluso Brasil y ve una serie de fallas, así como una serie de aciertos. Entonces, no estamos ni mejor, ni peor, que ningún evento de esta magnitud en otro lugar. CN: ¿Qué significa la imagen de William Walker en Noticias del filibustero? VPR: En 1855, en las luchas entre liberales y conservadores en Nicaragua, los liberales traen a William Walker como mercenario. Walker era un general surista, abogado que hablaba varias lenguas. El tenía el Destino Manifiesto como su misión. En realidad la intención de Walker era ampliar el sistema esclavista hacia Centroamérica. El Destino Manifiesto es algo que los Estados Unidos han tenido metido que ellos son los guías del mundo. Ellos son los que llevan los destinos de paz y de democracia. Todavía hoy es evidente con las declaraciones
56
La Fat alísima No.1 3
de George Bush, que el pretende ser el guía espiritual, y el ejemplo de la democracia. En el Destino Manifiesto se considera que hay gente que no tiene la capacidad para auto manejarse. Y eso era lo que creía Walker, y tuvo que venir a arreglar las cosas. Entonces, hubo una campaña militar que salió de Costa Rica que culminó con la derrota de Walker, el posterior exilio, y finalmente fué fusilado en Honduras en 1857. La campaña de 1856 se llevó a cabo en un momento duro en la historia centroamericana, durante una epidemia del cólera, con ejércitos poco estructurados y matizada por una serie de intereses de Cornelius Vanderbilt, y la ruta del Tránsito. Lo que queríamos con Noticias del filibustero era llamar la atención sobre la complejidad de esa gesta histórica, y traerlo al presente para que la gente hablara sobre el filibusterismo actual y que reflexionara las formas que existen de dominación e intervención. CN:¿Cómo se atan con el panamericanismo esos vínculos hacia Latinoamérica? TDB: En Noticias del filibustero, SOA: Historias en Blanco y Negro de Carlos Motta es un periódico con las intervenciones norteamericanas en Latinoamérica. VPR. Tenemos una centroamericana y un chileno en las exposiciones monográficas. En cada exposición, excepto en Noticias del filibustero que esta más concentrado en la región formada por Centroamérica, Colombia, Cuba, México, Puerto Rico, y Venezuela. El backyard que ha sido presa del filibusterismo más primario. De pronto hay un evento que incluye una cantidad de artistas, y sedes y que no es en un centro de poder como Sao Paulo, ni es tampoco La Habana que ha sido el epicentro de Latinoamérica. Centroamérica ha sido una especie de no lugar. Una cosa como desaparecida y poco a poco ha ido tomando más espacio.
57
CN: Parece que Centroamérica se ha puesto en el mapa con Estrecho Dudoso. VPR: Estrecho Dudoso es la culminación de un trabajo previo de la región, y al mismo tiempo se ha creado algo original. Por ejemplo, el MERCOSUR tiene su bienal, pero no tiene la cohesión que tiene Centroamérica ya que hay un constante diálogo. Talvez porque MERCOSUR esta teñido con la presencia de Brasil que es una potencia. Es lo que nos pasaría a nosotros si fuera México ya que tomaría un espacio muy grande. Centroamérica son países más o menos equivalentes. Hay un pasado colonial, y fue una sola región política, militar, económica y religiosa. Y hace que tenga una identidad diferente, que Las Antillas que por ser islas y tener cinco idiomas no hay una comunicación fuerte. Centroamérica desde mediados de los años 90 viene confibrandose. CN: ¿Podríamos ampliar un poco sobre TEOR/éTica? VPR: TEOR/éTica surgió en 1999 después que yo estuve como directora del Museo de Arte y Diseño Contemporáneo por cinco años. Me planteé concentrarme en la generación de pensamiento, y también en exposiciones de pequeño
58
Joaquín Rodríguez del Paso. Tiempos modernos, 2006. Óleo sobre tela 200x 250 cms. Foto cortesía del artista.
La Fat alísima No.1 3
formato. Se ha ido construyendo poco a poco y he tenido la suerte de contar con un equipo profesional, comprometido con la vocación y la identidad del proyecto. Entonces, creo que lo más importante que tiene TEOR/éTica es la solidez de equipo. La gente nos llaman “Los Teoréticos” porque el que se convierte en Teorético es un tipo de persona. Ciertos objetivos eran investigar, promover y difundir la obra de Centroamérica y del Caribe. Eso como un principio, pero también generar un pensamiento crítico. Básicamente, hemos continuado en la misma articulación, por un lado las exposiciones, las publicaciones, apoyo a los artistas, seminarios, talleres, y eventos. La biblioteca esta abierta todos los días y es de acceso libre, y el centro de documentación que le ha servido a muchos curadores para consultar nuestros archivos. CN: Tú has mencionado un grupo nicaragüense que ha trabajo en este proyecto. TDB: El proyecto se llama canal Central que desarrolló el artista catalán, Antoni Abad. La decisión fué que trabajara con inmigrantes nicaragüenses. A cada uno se le proporcionó un teléfono celular con cámara integrada. Ellos construyen sus propias historias que cuentan en la Red. Una segunda fase fué promocionar este canal en la página www.zexe.net y allí tú encuentras temas de viviendas, papeles, tradiciones, y familias mixtas, y crearon un carácter tico-nica, que son los hijos que ya son nacidos aquí. Ellos tienen un medio de comunicación, sin mediación, sin que se les vea como el delincuente, o el inmigrante pobre que llena la caja de seguro social. Y lo lindo ha sido que esto activó una comunidad. Probablemente, después de Estrecho Dudoso, ellos seguirán funcionando ya que tienen la página, la programación, el contacto y están súper estimulados. Tuvo un efecto real.
59
Las curadoras Virginia Pérez-Ratton (1950-2010) artista, curadora y gestora cultural. Primera directora del Museo de Arte y Diseño Contemporáneo de Costa Rica, fundadora de TEOR/éTica, que dirige desde 1999 para el estudio y difusión del arte regional centroamericano. Ha sido curadora para varias bienales internacionales, miembro de Jurado de la Bienal de Venecia y Premio del Príncipe Claus para la cultura y el desarrollo en el 2002. En 1998 publicó un volumen llamado “Centroamérica y el Caribe, una historia en blanco y negro”, con motivo de su curaduría regional para la bienal de Sao Paulo. Tamara Díaz Bringas es historiadora de arte, graduada de la universidad de la Habana, y tiene una maestría en artes de la Universidad de Costa Rica. Curadora adjunta de TEOR/éTica desde 1999, es la coordinadora editorial del proyecto. Ha sido critica de arte del diario La Nación en San José y ha escrito un libro sobre arte costarricense llamado “ En el trazo de las constelaciones”. Ha realizado múltiples curadurías tanto en TEOR/éTica como en el Museo de Arte y Diseño Contemporáneo y otras sedes. Co-curadora con Virginia Pérez-Ratton de Iconofagia, un proyecto regional para la bienal de Cuenca, Ecuador, 2004. La entrevistadora Cecilia Nuín es una curadora independiente, graduada en historia del arte de la universidad de California de Santa Cruz. Obtuvo una maestría en curaduría del California Collage of the Arts. Fundó Proyecto X, una practica interdisciplinaria de arte contemporáneo en San Francisco en 2005.
60
La Fat alĂsima No.1 3
Liliana Porter. Obra. 2004. CortesĂa de la artista.
61
Revista Museo del Ă rbol on line https://issuu.com/luquiva/docs/museodelarbol65
62
La Fat alĂsima No.1 3
63
64