Sucedió en Gotham Cómics de Palma el viernes 26 de junio de 2015, hace casi dos años. Nuestro ex-rotulista, librero y sin embargo amigo Jaume Albertí nos cedió por unas horas su tienda para presentar en sociedad el primer tomo recopilatorio de Huérfanos. Ahí estábamos los tres, con camisetas promocionales a juego, contando anécdotas de los (entonces) 15 años que llevábamos con este proyecto, y conmigo divagando incluso más de lo habitual. Allí estaban nuestros padres y familia, y los amigos que nos habían apoyado durante todos estos años. Pero también un puñado de (para mí) completos desconocidos que se acercaron a la tienda a raíz de nuestra convocatoria en redes sociales, y para quienes Edu, Marv, Yago y el resto de nuestros personajes eran aún extraños. Escucharon atentamente nuestras explicaciones, y luego se pusieron en fila para que les firmáramos sus ejemplares. Recuerdo perfectamente haber levantado la cabeza durante la sesión de firmas para comprobar horrorizado cómo la cola llegaba hasta el fondo de la tienda. Desde aquel día he estado en unas cuantas presentaciones de cómics, y en cada ocasión la imagen que me venía a la cabeza era la de aquellos desconocidos esperando pacientemente para tener nuestra firma en su ejemplar. Solo que en aquella ocasión el cómic que iban a llevarse firmado a su casa era el nuestro. No el de algún autor profesional, o con personajes conocidos, sino la historia de nuestros personajes mundanos en un universo mágico de nuestra creación. Y luego, poco a poco, nos fueron llegando los comentarios y opiniones de algunos de aquellos lectores entusiastas. Nuestro cómic les había gustado y querían más. Por desgracia, las circunstancias no nos permiten vivir de esto ni sacar un número todos los meses (ni siquiera todos los años, como hemos vuelto a comprobar). Pero si este cómic, que es el que nosotros siempre quisimos hacer, interesa a la suficiente gente como para llenar Gotham Comics en un viernes de junio por la tarde, como mínimo les debemos a esos amigos que hicieron cola el siguiente capítulo de la historia, y todo nuestro agradecimiento. M.A. Garcías Tarrazona Barcelona, Abril 2017