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Mito 2: Los Estromatolitos de Bacalar tienen 3500 millones de años
carbonato de calcio, y eso es en el 13% de toda la superficie emergida de la Tierra.
Los microbialitos son piedras producidas por la cementación de partículas de calcio y otras sales que se quedaron pegadas en las babas de los organismos más abundantes que hay en la tierra y que cubren prácticamente todos los ecosistemas de todo tipo, en el mundo, que han resistido las extinciones masivas y el meteorito de Chicxulub. ¿Qué tan abundantes son estas piedras? Solo hay que buscar otro nombre de estas piedras sedimentarias químicas, formadas en láminas, y encontraremos el término calcretas, y en la Península de Yucatán, las encuentras como las piedras que están en cualquier sascabera. También se les llama tobas microbialíticas, una forma de toba calcárea, en España. Los hechos se deben contar en su debido contexto. Si no, son verdades a medias. Y las verdades a medias, son mentiras.
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El discurso inicial, antes de que comenzáramos a protestar y explicar la falsedad de las aseveraciones de la tríada que decían, era que los estromatolitos de Bacalar eran las formas más antiguas del planeta, con 3500 millones de años de antigüedad tal y como lo muestra la nota de la página de SEMARNAT de julio de 2020:
“…Debido a la importancia de estos fósiles, que datan de unos 3,500 millones de años, y a la preocupación de los Bacalarenses de conservar su hábitat, el Cabildo de Bacalar estableció el 15 de julio como Día de los Estromatolitos; ahora se busca que esta fecha sea reconocida a nivel nacional…” El que los estromatolitos de Bacalar tengan 3500 millones de años, era una verdad a medias, por las siguientes razones: lo que tiene 3500 millones de años probablemente, porque es complicado establecer dataciones, son las líneas genéticas evolutivas de las cianobacterias. Es la línea genética de las cianobacterias que apareció hace 3500 millones de años (algunos autores dicen que 2600 millones de años). Hay más de 6,000 especies de cianobacterias identificadas a nivel mundial, y distribuidas en todos los
ecosistemas del mundo. Existen algunas especies en Bacalar, pero la línea genética es cosmopolita, se distribuye en todo el mundo. ¿Cómo se trasgiversó intencionalmente esto por los académicos de la tríada? El discurso de urgencia y relevancia manipulado, cumpliendo su función de crear la alarma y la urgencia, para que el resto de la sociedad actuara o dejara actuar al resto de la tríada, las ONGA y el gobierno; pero si lo ejemplificamos en otro contexto, fue como decir que era necesario proteger a los seres humanos que viven en Bacalar porque tienen dos millones de años de edad, lo que es diferente a decir que la línea genética de los seres humanos que habitan la zona de Bacalar, y el resto del planeta, tiene dos millones de años de antigüedad. Igual las cianobacterias, la línea genética de las de Bacalar y de todo el mundo, tienen 3,500 millones de años.
Otro factor para dejar en claro que los estromatolitos de Bacalar no tienen 3500 millones de años, es que la Laguna de Bacalar no tuvo las condiciones. Fue creada como una fisura por movimientos geológicos hace unos 60 millones de años – ni de chiste llega a los 3500 millones de años – y pasó bastante tiempo antes de que lo que vemos ahora se azolvara y tuviera zonas poco profundas. Hace menos de 100 mil años Bacalar era una fisura de unos 3 kilómetros de ancho, que ha ido azolvándose poco apoco. Pero sobre todo porque, al menos los estromatolitos de Bacalar, ya se fecharon con prueba de carbono 14. Lo cierto es que tienen mil años. Si, un uno, seguido de tres ceros (1000 años). El artículo donde se explica la datación de Carbono 14 dice, en algún punto, que los resultados indicaron una antigüedad de 6 a 8 mil años, PERO que esto se debía a un error de la técnica de datación, conocido como “error de agua dura” que sucede porque el agua de la Laguna es agua dura, con muchas partículas que vienen de otras partes y organismos. Corroborando que dichas estructuras, a lo mucho tenía mil años.
Los mayas tenían muchos miles de años viviendo en la cuenca y no existían los estromatolitos en la Laguna. Luego, las zonas más bajas y angostas de la Laguna se fueron azolvando y teniendo menos profundidad, hasta que en algunas zonas se dieron las condiciones, por ahí del año 1020 de nuestra era, aproximadamente, para que se comenzaran a sedimentar y crearse los microbialitos y entre ellos los estromatolitos. La edad de oro de los mayas ya casi había terminado y aún no había los estromatolitos que actualmente vemos en la Laguna de Bacalar.
Desde la introducción del artículo de investigación de Gischler, el que ha sido multicitado por la tríada para respaldar los miles de años de antigüedad de los microbialitos de Bacalar, habría que aclarar que Geischler es precisamente quien dice que tienen un aproximado de 1000 años de antigüedad: Cito: “ …La mayor parte de los microbialitos de Bacalar probablemente se formaron en el Holoceno tardío (ca 1 kyr BP hasta la actualidad). Según la datación 14C, los microbialitos se sedimentaron hace 9 a 8 cal kyr BP; sin embargo, estas edades pueden ser demasiado viejas como resultado del efecto de agua dura…” (Gischler, E., Gibson, Ma y Oschmann, W. 2008) Es más, los mapas del siglo XVIII muestran el cuerpo de agua y una cuenca de Bacalar distinta, no azolvada, por donde podía navegarse desde la entrada de la zona Lagunas de Raudales y Laguna Guerrero, entrando por el norte desde Pedro A. Santos bajando y pudiendo atravesar la laguna y salir desde laguna mariscal por estero de Chac hacia Río Hondo y de nuevo a la Bahía de Chetumal. Aún pueden verse las cicatrices de esos antiguos pasos de agua, en el tomo II explicamos cómo funciona el sistema de acumulación de sarro por microorganismos (estromatolitos) y el azolve, que está convirtiendo a Bacalar en pantanos. Las bacterias no viven mucho, pero se reproducen a mucha velocidad. Así que tenemos un nuevo tapete microbialítico, por decir, cada mes, dado que las algas, invertebrados y otros componentes del tapete se reproducen y mueren a distinta velocidad. Continúan haciendo lo mismo que hacían sus antecesores hace miles de millones de años: producir oxígeno mediante fotosíntesis, y las especies microbialíticas, producir mucílago (baba) para sedimentar pasivamente carbonato, formar indirectamente piedras y azolvar cuerpos de agua hasta secarlos. Pero además si consideramos otras investigaciones realizadas en esos tapetes, dónde se establece que solo el .3 al 7% de los componentes del mismo son cianobacterias fotosintéticas, el panorama cambia completamente. Así que los estromatolitos de Bacalar redujeron su edad de 3,500 millones de años a unos miles, así de un día para otro, la tríada descubrió que efectivamente no eran tan antiguos. Pero el mito ya se había creado y lejos de admitir el error y corregirlo, solo cambiaron el discurso, sin aclarar nada. A este respecto, la propia Luisa Falcón, que había iniciado el mito de los 3,500 millones de años, inició el mito de que los estromatolitos de Bacalar tenían 8 o 9 mil años de edad, otros que 6 o 7mil.
No solo los medios de comunicación locales mordieron el anzuelo, otros medios de comunicación, también lo hicieron, mezclando este encabezado con la estrategia de la tríada para imposición de sus instrumentos de control, en nombre del medio ambiente, como puede verse en los titulares ampliamente difundidos por el New York Times®, la BBC® y El País® que repiten todos los mitos expuestos en esta sección, incluyendo los estromatolitos
“Bacalar: el fascinante lago mexicano que alberga la forma de vida "más antigua del planeta" BBC News
“…Bacalar alberga el arrecife de microbialitas de agua dulce más grande del mundo: estructuras con forma de roca formadas por miles de microbios que filtran los minerales carbonatados. "Las microbialitas de Bacalar tienen un rango de edad que va desde algunas décadas a más de 9.000 años", dijo la experta (Luisa Falcón). Pero la contraparte fósil viviente de la microbialita, los estromatolitos -que se remontan a "aproximadamente 3.500 millones de años"- es lo que hace que la población de Bacalar sea la evidencia más antigua de vida en la Tierra…” La nota dice que los estromatolitos se asemejan a la coliflor: estructuras grandes y acolchadas de color beige que crecen hacia arriba desde el fondo de piedra caliza de la laguna. Parecen rocas, pero en realidad son seres vivos. De hecho, los estromatolitos se
asemejan a sándwiches capa por capa, los que parecen coliflores se denominan Trombolitos.
Hace mención al proceso de sedimentación y luego hace aseveraciones: “…Los estromatolitos en forma de coliflor (No son estromatolitos entonces, son trombolitos) solo existen en unos pocos lugares a nivel mundial, y la población de Bacalar revela una historia congelada en el tiempo, como la temperatura o la composición geoquímica del agua hace millones de años. Eso es porque en realidad conservan las condiciones fisicoquímicas del agua en su proceso de sedimentación increíblemente lento. Esto
necesitaría demostrarlo porque no hay investigaciones que lo aseveren y su especialidad es genética de cianobacterias de estromatolitos; si existen los estromato cosa litos, infraestructura y artefactos humanos que se han ido sarritizando o petrificando por la acción de los mismos microorganismos en Bacalar, para demostrar
que no es un proceso “increíblemente lento” como la asevera la nota.
Fundamentalmente, los estromatolitos también ayudan a reciclar
elementos. Son los tapetes microbialíticos, no el estromatolito. Es la
capa de biofilm de un milímetro o menos de espesor sobre la piedra que funciona como capturador incidental de carbonato de calcio y otros sedimentos.
Los microbios que forman un estromatolito toman carbono del dióxido de carbono en el aire y lo colocan en el carbonato del fondo del lago para almacenarlo. Como los árboles, pero en el agua, los estromatolitos mejoran activamente nuestro medio ambiente. El problema que enfrentan los estromatolitos es doble, dice Falcón. El lago es alimentado por un río subterráneo de 450 km que forma parte del sistema de túneles y cuevas de agua más grande del mundo a lo largo de la península de Yucatán. De hecho, Bacalar es alimentado
por un sistema de 4 acuíferos que vienen de diferentes partes de la Península de Yucatán, y no todos contienen carbonato de calcio y magnesio.
Esto es realmente bueno para los estromatolitos: se cree que la roca carbonatada de los túneles los hace crecer más de lo normal, formando una almohada en la superficie de la laguna. Realmente la doctora
Falcón hace una mezcolanza de su discurso original y la descripción de cómo funciona realmente el proceso geohidrológico en Bacalar, sin realmente entenderlo.
Y hasta ahí nos detenemos, creemos que queda demostrado cómo es sencillo manipular la opinión pública, que un medio de comunicación reconocido se involucre en una nota no verificada, aunque lo diga la autoproclamada experta en estromatolitos –cuyo expertisse es realmente genética de cianobacterias en los estromatolitos – y que como se ha demostrado una y otra vez, es increíblemente hábiles para manipular las verdades a medias.
Parece increíble que medios de comunicación tan prestigiados hayan caído en este tipo de tretas amarillistas y declaraciones sensacionalistas sin fundamento, pero es fácil caer cuando es un tema tan novedoso con un grupo de “expertos” a los que no se les investigan sus conflictos de intereses y que manipulan el discurso a conveniencia.