Homenaje a Fidel en sus 90 años Palabras de Manuel Dammert Ego Aguirre 11-08-2016
No es fácil rendir homenaje a un hombre como Fidel, que cumple 90 años, y cuya vida esta entrelazada con grandes acontecimientos de la historia de nuestra América y de los desafíos generales de la humanidad. Nos referimos a un personaje activo, con inmensas responsabilidades, y cuya trayectoria se entrelaza con decisiones cruciales para la historia. Es una personalidad que expresa y sintetiza muchas dimensiones de la historia de la humanidad en estos largos 90 años de azarosas e imprevistas trasformaciones. En torno a esta celebración, recordamos que dos grandes hombres de nuestra América nacieron un 13 de agosto. Sobre Fidel, el otro gran hombre que nació este día, Tomás Borge, fallecido hace unos años, afirmo que Fidel ocupará un lugar en la historia como Caballero andante cuyas armaduras no se sabe si salieron de la forja, de la lucidez o del coraje. Trataré de presentar algunas reflexiones a partir de los rasgos de quien García Marquez señaló que tiene la visión de América Latina en el porvenir, la misma de Bolívar y Martí: la de una comunidad integral y autónoma capaz de mover el destino del mundo. I.
Fidel superó el determinismo geográfico en la historia, con el triunfo y permanencia de la Cuba Revolucionaria.
Existen muchas innovaciones y sorpresas que en la historia se producen, más allá de los dogmas, las retóricas y las fosilizaciones. Estas sorpresas, son activa obra del esfuerzo humano por forjar condiciones de vida digna y libre, asumiéndose especie de la naturaleza y proyectándose hacia el horizonte de la utopía previsible como horizonte de sentido de una vida buena. El determinismo geográfico, elaborado teóricamente por los amanuenses de las potencias y los imperios industriales, afirmaba que frente a un poderoso imperio de control territorial no había fuerza que pudiera resistirlo anclada en sus bordes y con mínima capacidad de actuación. Algunas voces construían determinismos geográficos para vaticinar la imposibilidad de hacer revoluciones nacionales victoriosas en los bordes de los grandes poderes de la tierra. Se pregunta Abel Gonzáles Santa María respecto a Fidel Castro y los Estados Unidos “¿cómo pudo vencer a un enemigo tan poderoso?” A solo 90 millas de Estados Unidos y tras derrotar a once presidentes norteamericanos, los Estados Unidos tuvieron que reconocer que Cuba era una Patria que no se rendía. Incluso tuvieron que aceptar el fracaso de su política intervencionista contra este país hermano.
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Gracias a la Revolución, derrotando el pretendido determinismo geográfico de la potencia imperial, Cuba se ha afirmado como país independiente y mejorado sus condiciones de vida. Ante las inmensas limitaciones impuestas por el Imperio vecino, y con grandes sacrificios, Cuba ha logrado importantes avances en su desarrollo y vida de sus habitantes. En el actual Índice Mundial de Desarrollo Humano (IDH) de las Naciones Unidas, Cuba está en el Grupo de Alto Desarrollo, en el lugar 67. Llego a estar incluso en el lugar 46, pero fue afectado por el bloqueo económico y embargos impuestos arbitrariamente por USA para someterlos, medida que los diversos países del mundo en las NNUU han rechazado casi por unanimidad. Derrotaron al determinismo geográfico imperial, también en este aspecto. Cuba se ha mantenido en el puesto 67 del Indice de Desarrollo Humano, con altos indicadores sociales. Ha sido afectado en los indicadores económicos por efectos del brutal embargo y bloqueo respondiendo con muy diversas iniciativas. Lo ha logrado aprendiendo de la propia vida, rectificando errores, rechazando el bloqueo y las diversas agresiones.
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Cuba con Fidel ha derrotado a un enemigo tan poderoso porque el pueblo se afirma como patria soberana con los valores éticos universales, con derecho a la felicidad y a la solidaridad. El 17 de diciembre del 2014 el pueblo cubano consiguió derrotar al determinismo geográfico, que repetía que no era posible una revolución nacional y socialista a 90 millas del Imperio más poderoso del mundo. Ese día se anunciaron acuerdos para restablecer relaciones diplomáticas entre USA y Cuba. El primero de julio del 2015 los gobiernos de Estados Unidos y Cuba restablecieron relaciones diplomáticas y reabrieron sus embajadas el 20 de diciembre. Estos pasos eran la culminación de una decisión afirmada desde Cuba, una cuyas expresiones iniciales se produjo en la Cumbre del Milenio de Naciones Unidas en setiembre del 2000, en la cual Fidel Castro y Bill Clinton conversaron brevemente y se dieron las manos. El 17 de diciembre del 2014 Estados Unidos y Cuba, al anunciar las conversaciones, agradecieron al Papa Francisco que tuvo el gesto histórico de enviarles una carta fomentando el diálogo. Desde 1959 al 2016 los Estados Unidos trataron, a través de los más diversos métodos de destruir la Revolución Cubana, conducida por Fidel y con Martí como su emblema. Los Estados Unidos se consideraron el Imperio general que terminaba el curso de la historia consigo mismo y que podía cumplir los designios del determinismo geográfico para acabar con la Cuba Revolucionaria. Han aplicado el bloqueo económico, han hecho múltiples operaciones para desestabilizar la vida interna de Cuba, mantienen la Base de Guantánamo como un enclave territorial subordinado. Siguen activas las transmisiones ilegales de radio y televisión. Y hasta han dictado leyes para incentivar la fuga migratoria hacia Estados Unidos, aprovechando las mentiras, mojando los pies de algunos y rompiendo sus conciencias. Pero no pudieron derrotar a la patria y el socialismo de Cuba, que a solo 90 millas de Estados Unidos está forjando su propia vida, ha influido en los cursos más positivos de la historia de la humanidad, ha resistido a los diversos avatares de retrocesos, fracasos y recomposiciones, y ha sabido aprender de su propia historia y de la historia de la humanidad para, con sentido crítico y dispuesto a la reflexión, construir su independencia y seguir apoyando las mejores causas en la lucha social en todo el planeta. II.
La Derrota internacional del Régimen Racista del Apartheid en África y la amistad de Fidel con Mandela.
Cuba con Fidel, no sólo derrotó al determinismo geográfico a 90 millas de Estados Unidos, sino que como parte de su misión, tuvo un rol en batallas claves de la humanidad, como lo fue la lucha en África para acabar el régimen racista del Apartheid. Luego de la II Guerra Mundial se mantenía en África el régimen del Apartheid, de segregación racial institucional, a partir de Sudáfrica, que ocupaba Namibia y que invadía otras naciones como Angola. Pretendían las fuerzas racistas de Sudáfrica, poner al servicio de Estados Unidos un continente sometido al neocolonialismo y a la más ignominiosa continuación del régimen esclavista sobre su población.
La Revolución Cubana bajo inspiración de Fidel tuvo siempre el compromiso y perspectiva de apoyar las luchas de liberación. Recuerda Fidel al hablar sobre el Apartheid que “nuestro pueblo que había sido cedido por España a Estados Unidos, nunca se resignó al régimen esclavista que le impusieron durante casi 500 años”. Se produjo en el África una aguda lucha por la liberación nacional y el fin del régimen racista del Apartheid. Esta lucha fue liderada por Nelson Mandela. Fidel Castro y Cuba la apoyaron decididamente a lo largo de muchos años. Mandela fue encarcelado por 27 años y siguió liderándola. Cuba continuó cumpliendo sus deberes internacionalistas. Esta epopeya de la humanidad fue una enorme batalla que en áfrica se daba por los mejores intereses de los pueblos. Luego de más de 13 años de combates, se llega a una coyuntura estratégica decisiva en torno a una antigua base militar de la OTAN, denominada Cuito Cuanavale. Relata Fidel que de Namibia, ocupada por Sudáfrica, tropas racistas partieron para invadir Angola hasta alcanzar los mil kilómetros a las proximidades del Luanda. Pretendían invadir Angola, incluso estaban dispuestos a utilizar armas nucleares. Fidel recibió la solicitud del Presidente de Angola, para el apoyo de las tropas cubanas. En menos de 24 horas llegó la respuesta positiva. Este es el inicio de la batalla de Cuito Cuanavale en la cual los pueblos de África, con el apoyo de Cuba, enfrentaron a los racistas Sudafricanos que poseían entre 10 y 12 armas nucleares, tenían el respaldo de Reagan, y equipos entregados por Israel. La resistencia popular respondió en el teatro de operaciones con aviones MIG23 y con tropas desplegadas de los pueblos del África y de Cuba. Con esta batalla clave se inicio el fin del Apartheid. Nelson Mandela, que lideraba la lucha, consideraba a Fidel Castro como su gran amigo. Desde la cárcel, el 23 de marzo de 1988, Mandela señaló respecto a esta batalla, que fue denominada “la Stalingrado Africana”, que fue el punto de inflexión para la liberación de África y su pueblo del flagelo del Apartheid. En 1995 Mandela diría que “los cubanos vinieron a nuestra región como doctores, maestros, soldados, expertos agrícolas, pero nunca como colonizadores”. Compartieron las mismas trincheras en la lucha contra el colonialismo, el subdesarrollo y el Apartheid. Enfatizó: jamás olvidaremos este incomparable ejemplo desinteresado internacionalista. La batalla Cuito Cuanavale fue la mayor batalla desde el final de la II Guerra Mundial entre noviembre de 1987 y julio de 1988. Fue un punto de inflexión en la historia de África. Los militares del gobierno del Apartheid habían ocupado todo el sur de África después de 1975 buscando dar marcha atrás en las independencias de los pueblos de esa región. Con el apoyo de los cubanos, los angolanos vencieron a las fuerzas del Apartheid. Fue una derrota total. A partir de ese momento, Pretoria negoció con los angolanos y namibios. Se abrieron las condiciones para la independencia del sur de África. Después se iniciaron las negociaciones con el Congreso Nacional Africano que concluyeron con la liberación de Nelson Mandela, que fue elegido Presidente, dando fin al nefasto régimen del Apartheid.
III. Las batallas de ideas de Fidel para el futuro de Cuba afirmada desde las producciones de la inteligencia del pueblo. Fidel ha sido un inspirador del proceso de cambios en Cuba y en América Latina. Señala García Márquez que José Martí es su autor de cabecera y ha tenido el talento de incorporar su ideario al torrente sanguíneo de una revolución marxista. Desde el triunfo de la Revolución han pasado muchos años, se han producido cambios en la historia mundial, habiéndose desarrollado en Cuba diversas políticas nacionales en relación a las circunstancias para su desarrollo en las intensas modificaciones de la correlación mundial. Estando a 90 millas de los Estados Unidos ha tenido varias etapas distintas en su desarrollo, han aplicado distintas fórmulas económicas y políticas para su esfuerzo socialista, y han avanzado con iniciativas propias ante los marcados desafíos que los sucesivos cambios en la correlación mundial les iban presentando. A través de estos diversos momentos existen batallas de ideas de las cuales Fidel era impulsor abriendo perspectivas para afrontar los distintos desafíos. Recuerda Agustín Lage Dávila una frase de Fidel de 1970 antes de la campaña de alfabetización cuando Fidel señalaba “el futuro de nuestra patria tiene que ser necesariamente un futuro de hombres de ciencia, de hombres de pensamiento”. Luego Lage recuerda otra de 1991 cuando Fidel señala “la independencia depende del desarrollo, la independencia depende de la tecnología, depende de la ciencia en el mundo de hoy”. Lage rememora también una frase de 1993, año clave en el cual Fidel expresó: “la ciencia y las producciones de la ciencia deben ocupar algún día el primer lugar de la economía nacional. Pero partiendo de los escasos recursos, sobre todo los recursos energéticos que tenemos en nuestro país, tenemos que desarrollar las producciones de la inteligencia, y ese es nuestro lugar en el mundo, no habrá otro”. Esta concepción de Fidel sobre los desafíos del desarrollo ha estado presentes a lo largo de los diversos momentos y formas de respuesta a los desafíos por parte del socialismo cubano. Se han expresado en el sector biotecnológico a partir de 1981, una de cuyas formulaciones es ahora las denominadas empresas socialistas de alta tecnología. También en la relación para combinar acceso masivo y alta calidad en los sectores de educación y salud pública. Estas batallas de ideas impulsadas por Fidel, para la propia versión del socialismo en Cuba, son las que han movilizado sus avances en diversos campos del conocimiento científico y social. Existen múltiples estudios, informaciones y debates al respecto, en un proceso que ha sido intenso, variado y con desafíos a los cuales responder. Los diversos desafíos han llevado al desarrollo de instituciones, las que expresan esa idea central de Fidel del rol del conocimiento en el desarrollo de las personas y la sociedad. Es así que la biotecnología cubana, y las empresas de ciencia y tecnologías, con fuerte impulso en la investigación científica de la innovación, tiene ahora importantes realizaciones, desafíos y perspectivas. También se ha desarrollado al impulso de esta perspectiva científica como base del desarrollo de la nación, los vínculos y conexiones de la agricultura con la ciencia y la producción, con la intervención de múltiples
actores, empresas y formas no estatales de producción, gobiernos, centros de investigación, universidades, mecanismos regulatorios y la acción concertada de diversos sectores del Estado. A partir de las experiencias diversas, y con distintos resultados, existen significativos debates y propuestas y organizaciones en torno a las entidades de ciencia, tecnología e información, pasando de centro de investigación a empresas, cambiando la forma en su gestión. Este es uno en sus diversos puntos que están en un intensivo proceso para lograr formas más flexibles y efectivas, en la conexión del potencial científico y tecnológico con la producción de bienes y servicios, en los órganos de dirección de la defensa, para incrementar el aporte económico y social de la ciencia, la tecnología y la información. Proceso que detalla la Revista Foro Debate en Cuba. IV. Cuba, centro en el transporte marítimo mundial, con zona de desarrollo especial competitivo. Otra dimensión de estos cambios es afirmar para Cuba su potencial como centro clave de transporte marítimo y zonas de desarrollo especial en el transporte internacional. Así como Fidel y Cuba tuvieron la fuerza para derrotar la idea del determinismo geográfico, que pretendía no podía realizarse una revolución socialista a 90 millas del Imperio norteamericano, también tuvieron la osadía de afirmar que Cuba tiene las condiciones potenciales para ser un centro clave en el transporte marítimo internacional, con una zona especial de alto desarrollo competitivo. Cuba es la isla mayor de las Antillas, cuya ubicación en el circuito del transporte mundial, pese al bloqueo de Estados Unidos y venciéndolo, tiene las potencialidades para ser un centro de transferencia de carga que se genera y transforma en cuba y que viene de Europa y de América Latina hacia el norte de México y también a la costa este de Estados Unidos. Los cambios en el sistema de transporte mundial, con los barcos post Panamá, la intensificación del comercio con la ampliación del Canal de Panamá y la construcción del nuevo Canal de Nicaragua, ratifican para Cuba un inmenso potencial que algunos señalan es el desafío para convertirse en la “Singapur del Caribe”, un centro productivo-logístico, clave del transporte marítimo internacional. El Bloqueo comercial de USA hacia Cuba no solo le traba ingresos, sino que pretende aplastar esta perspectiva de desarrollo productivo logístico en el transporte mundial. Para afirmar esta perspectiva Cuba también requiere romper el bloqueo de USA .El investigador de India, Ragendra Abhyhancar señala: “Cuba está debilitada por el amplio y perdurable bloqueo comercial, económico, financiero y político reforzado a través de 6 leyes de Estados Unidos en el Congreso. Los pensantes del Consejo de Relaciones Exteriores estiman que Cuba ha sufrido daños por valor de 1,126 billones de dólares en los últimos 50 años. Eso es independiente de los 6 mil millones de dólares de pérdidas por la política de Estados Unidos que justifica el bloqueo”. Para este desafío Cuba, impulsada por Fidel, está promoviendo la Zona Especial de Desarrollo Mariel, de una extensión de 465,4 km2. Por su ubicación geográfica podrá convertirse en punto fundamental para el comercio entre Asia, Europa, Centro y Sur América, el Caribe y Europa.
Esta zona especial fue creada en setiembre del 2013, tiene regímenes y políticas especiales aduaneras, con el objetivo de fomentar el desarrollo económico sostenible a través de la atracción de la inversión extranjera, la innovación tecnológica y la concentración industrial, con vistas a incrementar las exportaciones, la sustitución efectiva de importaciones y generar nuevas fuentes de empleo, en una constante articulación con la economía interna. V.
Cuba punto de encuentro del diálogo civilizatorio, con inmediatez del futuro: diálogo entre el Papa Francisco (jefe de la Iglesia Católica romana) y el Patriarca Kirril (Jefe de la Iglesia Ortodoxa Rusa).
Fidel no sólo logró la permanencia de la Revolución Socialista a 90 millas de Estados Unidos superando el determinismo geográfico. Y no solo está potenciando la ubicación geográfica comercial en el Caribe para conectarse en los grandes cambios de transporte multimodal en el mundo y los procesos de ensamblaje industrial. Fidel, como el mismo dijo: “milito en el bando de los impacientes. Milito en el bando de los apurados, de los que siempre presionan para que las cosas se hagan, y de los que muchas veces tratan de hacer más de lo que se puede”. Agustín Lage recordando esta y otras frases de Fidel, para el dialogo, de perspectiva civilizatoria, dice que Fidel es la inmediatez del futuro. Se aprecia en esta característica de punto de encuentro que le otorga su ubicación geográfica y que le ha ampliado perspectivas como vocación de lugar de diálogo amplio, plural y sobre asuntos básicos de la humanidad. Esta expresada también en el reconocimiento que le dio el Papa Francisco a Cuba, en ocasión de los diversos diálogos fundamentales en los cuales en este siglo Cuba esta activamente participando. Es conocido que en el deshielo para re-establecer relaciones de Estados Unidos con Cuba, el pontificado tuvo una participación decisoria de un diálogo que se inició secreto, con encuentros entre Cuba y Estados Unidos y la participación del Vaticano. El 12 de febrero del 2016 tuvo lugar otro encuentro histórico, ampliando al campo religioso y civilizatorio este lugar de diálogo que se proyecta desde Cuba para un mundo que reclama paz y reconocimiento. Y diálogo entre diversas civilizaciones, las que se encuentran en un mundo crecientemente interconectado. El 12 de febrero se encontraron en Cuba los principales jefes de la Iglesia Católica romana y de la Iglesia Ortodoxa Rusa, el Papa Francisco y el patriarca Kiril (de la Iglesia Ortodoxa Rusa). Después de siglos de distanciamientos se encontraron estas dos mayores autoridades de esas dos ramas del Cristianismo. El encuentro se realizó, con gran contenido simbólico y civilizatorio en el aeropuerto que lleva el nombre de José Martí. Fue un encuentro decisivo a nivel mundial, para superar la intolerancia, los odios raciales, las guerras, los ataques contra migrantes, los exterminios religiosos, que están remeciendo en diversas áreas del mundo. Vale la pena recordar palabras de la declaración conjunta del Papa Francisco y del Patriarca Kiril de Moscú y todas las Rusias, al reunirse en La Habana. Dicen ambos a una sola voz: “nuestro encuentro fraterno ha tenido lugar en Cuba, en la encrucijada entre el Norte y el Sur, el Este y el Oeste. Desde esta isla, símbolo de las esperanzas
del nuevo mundo y de los dramáticos acontecimientos de la historia del siglo XX, dirigimos nuestra palabra a todas las naciones de América Latina y de los otros continentes”. VI. La unidad de la Patria Grande de nuestra América. Otra dimensión de la impronta de Fidel, es avanzar en la unidad de la Patria Grande siguiendo los caminos de Martí y Bolívar. Esto se ha expresado en múltiples formas de unir a los pueblos de nuestra América, una de ellas es la Casa de las Américas. Como recuerda Roberto Fernández Retamar, la Casa de las Américas “es uno de los hechos que revelaron tempranamente el carácter no local, sino latinoamericano y caribeño de la Revolución”. La Casa de las Américas, centro de cultura y difusión, se creó a menos de 4 meses del triunfo de la Revolución Cubana en enero de 1959. Recordemos que triunfante la Revolución en Cuba, los gobiernos latinoamericanos fueron rompiendo las relaciones diplomáticas. Cuba fue además expulsada de la OEA. Como señala Retamar “en esas condiciones correspondió a la Casa, ser uno de los vehículos que impidieron el total aislamiento de la Cuba revolucionaria.” Decía Martí que las ideas preferían nacer a caballo, montadas en relámpago, con alas. Así fue fundada esta institución que reunió y dio presencia a un gran movimiento del despertar de las conciencias de nuestra América. Tuvo un profundo impacto político y cultural. Son muchos los intelectuales, artistas y en general productores de cultura de toda nuestra América, los que, señala Mario Benedetti, gracias a la Casa de las Américas, logramos conocernos y reconocernos entre nosotros. Y así se potenciaron los procesos de acercamiento, reconocimiento e integración entre los habitantes de nuestro continente. a) La actualidad de la segunda gesta emancipadora continental Forman parte de los esfuerzos y avances de acercamientos e integraciones de nuestra América, las diversas iniciativas para avanzar en la integración como un solo bloque político del conjunto del continente. Es una historia llena de vicisitudes y circunstancias distintas, en las que Fidel tuvo una decidida actuación y el impulso a favor de la unidad de los pueblos y la resolución de las diferencias. Existe una amplísima y compleja historia política, social y cultural al respecto. Quisiera mencionar, en esta oportunidad, sólo algunos momentos que permiten apreciar la importante significación de Fidel y Cuba para esta construcción de una América Latina como Patria Grande unida, con la enseñanza de Martí, Sandino y, agregamos desde Perú, a Túpac Amaru y a José Carlos Mariategui. Es indudable que actualmente estamos viviendo un proceso crucial en América Latina. La primera gesta emancipadora fue la que se desarrolló desde el levantamiento de Túpac Amaru en 1780 hasta la conquista de la Independencia con Bolívar y los contingentes movilizados en las batallas de Junín y Ayacucho. Posteriormente, en los siglos XIX y XX, los diversos Estados nacionales, y sus aislados procesos de vinculación con los diversos sistema-mundo, marcaron nuestra historia fragmentada y dependiente.
La segunda gesta emancipatoria de carácter continental tiene su punto de partida con el triunfo de la Revolución Cubana, conducida por Fidel y se expresa, tras múltiples y diversas experiencias, en los actuales movimientos políticos, sociales y gobiernos progresistas. Con respuestas propias en sus propuestas y caminos de cambio, se avanza en responder a los desafíos para el desarrollo de Nuestra América emancipada. Existen múltiples testimonios de la importancia de las luchas en estos años. Recordemos al Che con su adarga bajo el brazo, recordemos al conjunto de luchadores de nuestros pueblos de los años 60 a la fecha, que actúan y despliegan sus iniciativas y buscan que el pueblo movilizado conquiste la soberanía y dignidad en nuestra Patria Grande Latinoamericana, de todas las sangres. En los altibajos de estas luchas, estaban presentes las perspectivas de unidad, independencia y creatividad, en los diversos contingentes que pugnaban por abrir un camino con soberanía, democracia, dignidad y justicia. Pese a la siniestra ola represiva, que se desató por parte del Imperio y las dictaduras militares que impuso, los pueblos de toda nuestra América abrieron, por fin y con inmensas dificultades, la oleada de la actual segunda gesta emancipadora. Su avanzada inicial fue la triunfante Revolución en Cuba. Posteriormente en todo el continente, actuaron con vías y experiencias propias en los diversos países. Las fuerzas patrióticas y revolucionarias organizaron distintos agrupamientos, con específicas luchas políticas y sociales, siempre buscando afirmar la Patria Grande con la libertad, la democracia, la justicia y la solidaridad. Con procesos singulares en cada país, en Brasil, en Venezuela, en Colombia, en Ecuador, en Bolivia, en Uruguay, en Argentina, en Chile, en Perú, en El Salvador, en Nicaragua, en el Caribe. En toda nuestra América, esta segunda gesta emancipadora está en pleno proceso de afirmación de su unidad e independencia continental y de su base civilizatoria andina-amazónica-criolla, para afirmar creativamente, sin calco ni copia las repúblicas de ciudadanos, con socialismo y democracias soberanas, derechos sociales universales plenos, vida digna y desarrollo sostenible. En este proceso, también Fidel y Cuba tuvieron una participación para respaldar las luchas de cada uno de nuestros pueblos. Pese al bloqueo de Estados Unidos, con la imposición de las dictaduras pro yanquis, los pueblos de América Latina y el Caribe han avanzado en nuestra segunda gesta emancipatoria continental. b) La Importancia de la unidad en la Revolución Sandinista y otros procesos de nuestros pueblos. En Nicaragua, y en otros procesos políticos y revolucionarios, sus dirigentes y bases activas siempre han reconocido la importancia del llamado a la unidad y a la independencia, que repetía constantemente Fidel, como lo señala Tomás Borge en la experiencia de la Triunfante Revolución Sandinista en Nicaragua.
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El Proceso de Paz en Colombia, tras la guerra civil interna más antigua del continente. Es de importancia reconocer el respaldo de Cuba al proceso de paz en Colombia un acontecimiento de gran importancia para la afirmación de América Latina. Se ha suscrito en Cuba el Acuerdo General para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera, suscrito por los delegados del Gobierno Nacional de la República de Colombia y los delegados de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Entre el 23 de febrero y el 26 de agosto del 2012, Cuba y Noruega fueron garantes y el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela actuó como facilitador de logística y acompañante. El 26 de agosto del 2012 fue suscrito el acuerdo en La Habana-Cuba, de este modo se ha puesto fin a la guerra en Colombia entre las FARC y el Estado. Este proceso es acompañado por el secretario General de la ONU, los presidentes del Consejo de Seguridad y de la Asamblea General del mismo organismo, siete presidentes de la región Latinoamericana, representantes de la Unión Europea y Estados Unidos. Es una conquista de Colombia y Latinoamérica. Es un desafío para todos, el fin de una de las más largas guerras internas en nuestro Continente. Es indudable que la firmeza, colaboración, y apoyo de Fidel y Cuba ha sido crucial para las mejores condiciones en las cuales los actores fundamentales de este decisivo acuerdo puedan diseñarlo y adoptarlo libremente, teniendo como sede de negociaciones a La Habana-Cuba.
d) La estratégica Formación de la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe CELAC. También ha tenido un gran impulso la unidad latinoamericana con la formación de la Comunidad de Estados Latinoamérica y el Caribe (CELAC), que incluye a la UNASUR y la ALBA, con otras asociaciones de integración de las naciones del continente. Se ha declarado que América Latina es un continente de Paz, Seguridad y Desarrollo. Confirma el compromiso con la consolidación de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, proclamada formalmente en la Segunda Cumbre de la CELAC, celebrada en La Habana, en enero del 2014, y resalta el carácter de zona libre de armas nucleares de nuestra región, establecido en el pionero Tratado de Tlatelolco. La CELAC tiene como acuerdos las políticas de esta segunda gesta emancipatoria. Señala su compromiso fundacional: 1. Reafirmamos la decisión de consolidar nuestra unidad y avanzar hacia la integración latinoamericana y caribeña, basada en profundas raíces históricas, en el acervo de la Comunidad, privilegiando al ser humano, compartiendo valores e intereses afines, y proponiéndonos alcanzar el bienestar de nuestros pueblos, la eliminación de la pobreza y la inequidad. Ratificamos nuestra voluntad de fortalecer la CELAC como mecanismo de concertación política regional reconociendo el trabajo realizado a través de
estos años, consolidando nuestra unidad en la diversidad. Ratificamos la vigencia de las Declaraciones Políticas y los documentos aprobados en todas nuestras anteriores Cumbres realizadas en México, Venezuela, Chile, Cuba y Costa Rica. 2. Reiteramos nuestra adhesión y estricto apego a la Carta de las Naciones Unidas y los principios del Derecho Internacional, en particular el respeto a la igualdad soberana de los Estados, el derecho a la autodeterminación, la integridad territorial, la no intervención en los asuntos internos de cada país, el no uso ni amenaza de uso de la fuerza en las relaciones internacionales, la solución pacífica de las controversias, así como la promoción y el respeto de todos los derechos humanos, incluido el derecho al desarrollo y las libertades fundamentales. Además, reafirmamos nuestro compromiso con la consolidación de la democracia y el Estado de Derecho, la preservación de la paz y la seguridad internacional, la independencia política y el desarme nuclear, conducente al desarme general, total y verificable. Confirmamos nuestro compromiso con la consolidación de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, proclamada formalmente en la Segunda Cumbre de la CELAC, celebrada en La Habana, en enero del 2014, y resaltamos el carácter de zona libre de armas nucleares de nuestra región, establecido en el pionero Tratado de Tlatelolco. ESTIMADOS AMIGOS Y AMIGAS Reitero lo señalado, Fidel, a quien hoy rendimos homenaje en sus 90 años, tiene la misma visión de Bolívar y Martí, agregamos nosotros también de Túpac Amaru y José Carlos Mariátegui, la Visión de los Desafíos de América Latina en el porvenir: ¡la de una comunidad integral y autónoma capaz de mover el destino del mundo!.