Miedo y Tecnología

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-ENSAYO​- MIEDO Y TECNOLOGÍA Marilyn Helzebeth

Fecha: 09/03/2020 Correo: marilyn.helzebeth@gmail.com Instagram: marilyn_helzebeth


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Con la ayuda del libro “El planeta americano”, del autor, Vicente Verdú, y la serie de “Black Mirror” que se encuentra en Netflix, indagare sobre distintos casos en los que las tecnologías de la comunicación y sus avances se encuentran unidos a esta idea del el amor al miedo, tema que Verdú incluye en su obra, la cual es una crítica centrada en las costumbres norteamericanas, sin embargo, para ejemplificar sobre este tema, se aplicarán las observaciones de Verdú a otros lugares, ya que como él comenta, varios países solo están manteniendo a Estados Unidos de tal manera que fuese un modelo a seguir, pues

de

este

mismo

provienen

grandes

empresas

conocidas

internacionalmente, que generan gran cantidad de dinero, convirtiendo a ese país en una potencia económica, es por esto que se puede hablar de este tema como parte de un efecto global. El miedo se encuentra presente más explícitamente en la serie de Black Mirror, que en general trata de distintos problemas generados principalmente por la avanzada tecnología, si bien se ve claramente que es ficción, hasta el punto de que se encuentra la tecnología implantada o como accesorio para el individuo, también muestra una posible realidad, que no dista mucho de la actualidad en la que vivimos, pues las herramientas que utilizamos a diario, pueden ser consideradas una necesidad, por sobretodo “social”, que increíblemente se puede obtener cada vez más fácilmente, y a una edad


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bastante joven. En el libro de Verdú, en el capítulo dedicado a “el amor al miedo”, se enfoca en la importancia que le dan los medios de comunicación a los eventos que causan temor en las distintas comunidades de norteamérica, donde la población pareciera estar en busca de la adrenalina que el miedo genera. Da a entender que el miedo que esparcen los medios solo logran originar un incremento en la violencia, este es tan alto que aun en la actualidad, la cantidad de armas que se encuentran distribuidas va en aumento, pues dice que en la historia de Estados unidos, las armas han jugado un papel muy importante, se defendían de indios, de cuatreros y asaltantes, y eso no ha cambiado mucho desde entonces, ellos prefieren castigar por su propia mano ejerciendo aún más violencia, al igual que muchos sistemas que aún lo hacen. Pero es entonces donde se cuestiona si este miedo es en parte impuesto, inducido, por los medios de comunicación, sobretodo los noticieros, que tienen alto contenido de crímenes, y violencia con imágenes grotescas y obscenas, pero que siguen vigentes hasta el dia de hoy justo por el gusto de consumir estos contenidos. Hoy en día, los medios de comunicación se han expandido, pues ya no se trata solamente del televisor o la radio, sino que también se encuentra al alcance de nuestra mano, con el smartphone. Las redes sociales, y otras plataformas digitales, crean nuevos miedos, a través de la divulgación de información. Me parece interesante como las redes sociales presentan grandes


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cantidades de noticias falsas, investigaciones inexistentes, o pseudocientíficas, y un sin fin de artículos amarillistas, que solo causan una fuerte impresión en los usuarios. Por esto hay que aclarar que la información que se encuentra en la web, la mayoría de las veces es falsa, aunque haya quienes creen en estos artículos extremistas. Se puede decir que el término adecuado, sería más bien, desinformación. Y con ayuda de esta misma, varias personas han llegado a formar teorías, sobre todo tipo de temáticas, sean cuestiones científicas o incluso de la salud, como ejemplo, los llamados terraplanistas, que son un grupo de personas que afirman que la tierra es plana, o como los movimientos antivacunas, que dicen estar en contra de las vacunas porque según ellos ocasionan daños en la salud, entre muchos otros grupos de este tipo. Aunque pareciera algo extremo y exagerado, este tipo de teorías existen y siguen activos, sobra decir que se hacen presentes en redes y al igual que como lo hace la televisión con sus noticieros, están provocando miedo, incitando intolerancia y violencia. Un ejemplo que está más presente en la actualidad, y que se ha dado más a conocer, se trata del llamado “coronavirus”, o mejor dicho, el COVID-19, que poco a poco se ha propagado ya en varios países. China fue el país que ha salido más afectado, pues se piensa que de ahí se originó el virus, que dicen proviene de un animal, el murciélago. En México, las noticias acerca de este virus han sido principalmente sobre cantidades, más que nada de infectados y de muertos, pues como siempre estos medios promueven lo que parece generar más impresión en el espectador, es decir, el miedo, y este


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mismo se ha expandido. Cuando el virus llegó a México, hubo situaciones en las que la violencia se manifestó, justamente por esta ola de pánico, como la compra excesiva de cubrebocas en algunos estados del país, al igual que en otros países que fueron afectados por este virus. Como si fuera una histeria colectiva, han surgido miles de noticias falsas, que al salir a la luz pública, se muestran como si se tratase de una única verdad existente sobre este virus, surgieron teorías en redes sociales como ejemplo, que “el virus ha sido creado para exterminar la humanidad”, solo basta navegar un poco por internet para encontrar encabezados como este que afirman que el virus solo es una creación artificial para terminar con la sobrepoblación o algo parecido, al extremo de llegar a argumentar tal teoría con un libro de Dean R. Koontz, llamado “The eyes of darkness” que fue publicado en 1981, este cuenta la historia de una madre llamada Christina Evans, quien se propone descubrir si su hijo murió en un viaje, o si sigue vivo, el caso es que al final del libro, la mujer logra encontrar a su hijo dentro de una instalación militar, donde fue confinado después de haber sido infectado accidentalmente con microorganismos creados en un laboratorio en la ciudad de Wuhan. Las personas creen en esto como una predicción o un plan confabulado contra la humanidad, cuando en realidad solo se trata de una coincidencia, ya que hay pruebas de que en la primera edición de este libro, el virus era creado en otro país, pero luego el autor por problemas surgidos en su


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época, decidió cambiar el lugar del supuesto laboratorio en su libro, eligiendo así a la ciudad de Wuhan. Quizás la información que se encuentra en internet es demasiado para asimilar, y buscar, que llegamos solo a ver lo que se vuelve más popular en estas redes. Con la misma idea del coronavirus surgieron expresiones que mostraron este hecho, como el de sí “el virus existe desde el 2004 , pero es ahora cuando lo están esparciendo”, como parte de una gran falta de conocimiento sobre el tema, creen que el virus actual ha sido el único coronavirus conocido o existente, cuando en realidad hubo otros de los cuales hay vacunas y medicamentos, e incluso existen productos caseros que les combaten como el famoso “Lysol”, pero que no funcionan con el COVID-19. De igual forma hay quienes afirman que “los datos de los infectados en realidad son mayores”, incluso en lugares como China se han infiltrado estas “fake news” donde supuestamente la cantidad de infectados y muertos es mucho mayor que en los datos oficiales, sin embargo , ya se ha informado que esto es completamente falso, pero aun así esta creencia ha llegado bastante lejos, tanto así que simplemente la verdad, pasa a convertirse en lo que se cree que es falso. En general la mayor parte de la divulgación de información de este virus, han generado un aumento en la discriminación directamente hacia los asiáticos, pues el miedo al contagio ha provocado este tipo de violencia.


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Verdú menciona, en el mismo capítulo de amor al miedo, que “el crimen es excitación y espectáculo, la sociedad americana es espectáculo y excitación”, La muerte que es visualizada en estos medios, se convierte en un cúmulo de estímulos que aumenta el interés por sobrevivir, debido a que Estados Unidos es reflejado por telediarios locales como un país que es constantemente amenazado por otros países, por terroristas o por fuerzas naturales, que están al acecho. Entonces el autor, se pregunta si el amor por el miedo es algo que sienten a causa de que reside en la historia de norteamérica o por el contrario se trata de una exageración suya como otra forma más de su gusto obsceno. Justo como en Black Mirror, que si bien es una serie que parece hasta cierto punto predecible, una vez que se ven varios capítulos, deja en claro este gusto obsceno, por ver una distopía, un futuro distorsionado que siempre termina mal, que provoca al espectador esta misma sensación de intriga y miedo. Como ejemplo, el tercer capítulo de la segunda temporada, llamado “The waldo moment”, trata sobre un cómico que decide crear un dibujo animado al cual le pone su voz, se vuelve un éxito al punto de que es arrastrado a la política, pues algunos ejecutivos le piden que se presente como candidato. Si bien el capítulo, deja entrever cómo la política se convierte en un chiste, un espectáculo, y a la vez una búsqueda del protagonista por arreglar su vida laboral. Al final no hay como tal un desarrollo, ya que el capítulo dura apenas


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39 minutos, pero plantea muy bien estas ideas. Sin embargo, muchas personas hicieron de este capítulo una teoría, en la que piensan que este capítulo hace referencia, o mas bien una predicción, a la candidatura y presidencia de Trump. Pero esta mas que claro que no se trata de eso, sino que al final, la realidad realmente es así, lo que vende es la controversia que ocasionan la forma de expresarse, el diálogo y todo lo que se dice tanto explícita como implícitamente. El miedo aquí es la pérdida de la seriedad en la política, y la tecnología pasa a ser un intermediario para entretener a la gente. Al igual nos deja pensando, sobre el uso fraudulento de la tecnología para fines políticos, por ejemplo, algo más simple, como los conocidos “bots”. Justamente como en la primera temporada, el que me pareció el mejor episodio de Black Mirror es el segundo llamado “Fifteen million merits” que trata de una distopía donde el espectáculo gobierna, la gente gana méritos haciendo ejercicio para generar energía, estos méritos les permiten comprar comida, un mejor aseo, y el saltar anuncios publicitarios que pueden llegar a ser bastante molestos, por esto los que se encuentran ahí aspiran a mejorar su vida usando cualquier tipo de talento que tengan como el canto o incluso la pornografia. Este capítulo nos muestra una forma de ver la sociedad del espectáculo, donde no importa lo grotesco del contenido, siempre y cuando haya más espectadores, lo obsceno domina el espectáculo. Las personas dejan de ser personas para convertirse en meros personajes, que son observados todo el tiempo. El final de este episodio


. 10 convierte la esperanza en una imposibilidad, donde se muestra que no hay una libertad real. Esta serie puede tratar diferentes temas con la constante de la tecnología, pero el miedo está ahí, y estos no son directamente hacia la tecnología sino que es a través de ellos que suceden ciertas situaciones, pues los miedos que están presentes son casos que en nuestra realidad ocurren, pero con este toque futurista. Como en el primer capítulo de la primera temporada, llamado “The National Anthem” que trata sobre como uno ministro se enfrenta a un gran problema de extorsión, pues una princesa, que es un miembro muy querido de la familia real es secuestrada, por lo que el captor, le pide a este ministro que mantenga relaciones sexuales con un cerdo durante una transmisión en vivo y a cambio la princesa será regresada. Este nos muestra el poder que la información puede ocasionar, pues como ya se sabe, la televisión ha pasado a segundo plano en este juego, mientras que las redes están convirtiéndose en este nuevo medio hipnotizante. El miedo está también bien presente desde la perspectiva del protagonista, el ministro, pues se le ve el nerviosismo y se comporta paranoico, pues la situación en a la que se enfrenta es bastante fuerte y lo que le piden que haga es denigrante no solo por el puesto en el que se encuentra y el qué dirán, sino que también se trata de el, de su persona. Una vez hecho, intentan no hacer público el video, para encontrar así


. 11 una solución, pero se filtra a una plataforma donde reúne millones de vistas, es decir, se viralizó de forma instantánea. Una vez más, Black Mirror, nos muestra como el tener en nuestras manos algo tan simple, como lo es el internet podemos nosotros mismos ser quienes compartimos una noticia, con mensaje, una imagen o una grabación, publicar algo que nadie podría verificar si es real o no, permitiendo que se propague y sea reutilizado, modificado, o editado para algún fin diferente al original. Nos hace ver que no estamos preparados para este poder. Es lamentable, pero pareciera que la mayoría de la sociedad es conformista e ignorante, justo como la ley del mínimo esfuerzo, pues prefieren quedarse con el primer artículo que aparece en sus redes y sin importar lo amarillista o falso que pueda ser el contenido de este, lo dan por verdadero. Este mismo capítulo me recordó, a los miedos que tienen algunas personas a ser espiados por medio de las webcams de sus ordenadores portátiles, y deciden taparla con maskin tape o algún sticker, e incluso llegan a tapar el micrófono del mismo. Y hasta cierto punto, la falta de privacidad en internet es algo que ha preocupado a muchos, y al igual ha generado un montón de teorías y creencias que pueden llegar a ser bastante obsesivas. Desde el robo de información sensible a través del hackeo de plataformas de servicio de almacenamiento de archivos en la nube, hasta el robo de identidad a través de las redes sociales, son hechos reales que sí pueden ocurrir y que ya han ocurrido, como por ejemplo, el caso de Julian Assange, conocido por ser el


. 12 fundador y portavoz de WikiLeaks, el es un defensor de la transparencia de la información, por lo que él compartió de forma pública y global, información privilegiada de diversas fuentes y esto afectó a funcionarios públicos, a gobiernos de algunos países y a organizaciones internacionales. Lo que ha generado toda una discusión acerca de su caso, que aún en la actualidad sigue sin resolverse. Mientras que del otro lado de la moneda, se encuentra el excesivo control de estas plataformas, los conocidos “términos y condiciones” que nadie lee, pero que contienen permisos para acceder a información privada y personal, como lo hacen Google y Facebook, que acceden a todo lo que frecuentas y lo que no, para cambiar los anuncios al gusto del usuario, con el fin de lucrar, no sólo por el anuncio, sino por la posible compra del producto o servicio anunciado. El miedo no está enfocado solamente en crímenes atroces, también hay miedo que a través de la tecnología ha ido aumentando, pues los delincuentes también se han actualizado con estos avances. La ciberdelincuencia, no es tan simple de definir, pero hay muchas de formas de cometer un delito de esta índole, y hay que tener en cuenta que la facilidad con la que se puede llegar a realizar. Desde un fraude, una interrupción a un sistema informático o de telecomunicación, acoso o el uso de información privada, aunque suene complejo, el copyright, es de lo más frecuente que hay, el plagio de


. 13 información, canciones, u otra propiedad intelectual, puede ser considerado un delito grave, y hoy en día, cada vez es más visible por el uso constante de plataformas como Youtube, quiénes restringen cada vez más su contenido. Esta última, ha sido una de las principales ventanas a las teorías de horror, los conocidos creepypastas, videos de divulgación sobre conspiraciones, entre otros, que se viralizan, se difunden, se multiplican y modifican hasta distorsionarse completamente, plagando el internet de un monton de informacion basura. Se podría decir que las redes sociales, funcionan como lo hacían los medios de comunicación durante el 11 de septiembre, es decir, el atentado de las torres gemelas en Nueva York. Pues de forma similar, difunden, sin filtro, las imágenes que sin importar el impacto que ocasionen, generan mayores espectadores, y como en este caso, son incitadores del miedo. Y es que tratando de este hecho es increíble como las imágenes fueron transmitidas incluso en vivo, las cuales aún se pueden encontrar en internet hoy dia, y por si fuera poco, también este hecho ha sido un gran originador de teorías, tanto así que incluso en Wikipedia dedicaron todo un artículo para hablar sobre las conspiraciones existentes del 11-S. Una de las más conocidas, es la que dice que fue el propio gobierno de Estados Unidos quien realizó los ataques como si fueran realizados por otro gobierno u organización, esta misma cuestiona la


. 14 causa del derrumbe de las torres, y argumentan que en realidad fue una demolición controlada. De hecho esta teoría fue clasificada como “made it happen on purpose”, es decir, que lo hicieron a propósito. Todas estas teorías aún siguen debatiéndose en la web. Se puede decir que hay vínculo entre los internautas, el miedo y la tecnología. Tal como Verdú dijo, amamos esa sensación de sentir que estamos en un mundo, donde somos la especie protagónica, que debe sobrevivir ante situaciones peligrosas, igual que en Black Mirror, donde sus protagonistas deben solucionar sus problemas, para lograr sus objetivos, y donde la tecnología forma parte cotidiana en nuestro día a día, donde debemos protegernos hasta de esta misma para no exponer nuestras intimidades y finalmente donde queremos informarnos de todo, sin buscar demasiado. Y con todo esto no digo que todo lo que está en internet está distorsionado y que es malo informarse con tal herramienta, pues no hay que olvidar que la información que se encuentra en medios como el periódico, pueden seguir siendo, amarillistas, falsas, exageradas o tergiversadas para beneficiar a ciertos grupos políticos o viceversa, así como para manipular o emancipar a la sociedad. Más bien, necesitamos educar esta forma que tenemos para informarnos, y así adquirir el conocimiento que sea necesario, el


. 15 que sea el más adecuado para saber utilizar la tecnología, y sobretodo para no creer en todo lo que leemos, y más ahora que no solo se trata de lo leemos sino que también es de lo que vemos y escuchamos por medio de estas redes, pues ya existen herramientas que ayudan distorsionar caras y voces en videos, como ejemplo, existen videos que se han hecho virales, donde supuestamente hay personajes famosos en situaciones comprometedoras, cuando en realidad estos videos, fueron alterados con estas herramientas, pero a simple vista quedan tan reales que cualquiera podría creer que es verdadero. Incluso existe un video que explica cómo funcionan estas herramientas, durante una conferencia de TED, que de alguna manera nos alerta para no caer en este tipo de cosas. Pero al mismo tiempo, puede hacernos pensar que el en el futuro, un video amenazador puede llegar a inculpar a alguien, importante o no, pero sin que nadie se de cuenta, o que incluso podamos caer en un constante miedo por algún evento que no tuvo lugar en la realidad. Por esto el miedo con la tecnología, no tiene fin, es algo que tenemos, pero que a la vez seguimos experimentando, pues sigue avanzando y no sabemos aún hasta dónde podría llegar. No sabemos si puede llegar a pasar como en uno de los capítulos de Black Mirror, o si habrá un límite hasta llegar a un punto en concreto, y eso es lo que nos da más miedo, e intriga.


. 16 Y a la vez, sin este mismo miedo, no habrían estas historias distópicas que tocan el tema de la tecnología como si de un evento apocalíptico se tratase y que más que entretenernos, nos hacen cuestionarnos sobre nuestra propia humanidad, y en cual es el propósito de la misma. Así como los problemas sociales y contemporáneos que enfrentamos, nos preguntamos cómo se transformaran en un futuro en el que dominará la tecnología de entre todo lo demás.


. 17 Referencias Verdú, Vicente. (1996). El planeta americano. Barcelona. Anagrama. Black Mirror (2011). Dir. Charlie Brooker Temporadas 1 y 2. Disponible en Netflix. CORONAVIRUS, Desmontando BULOS | ¿Histeria Colectiva? (2020) La gata de Schrödinger. ​https://youtu.be/Claw6QTjvg8 Nothing is real: How german scientist control Putin's face (2016) Quartz. https://www.youtube.com/watch?v=ttGUiwfTYvg Fake videos of real people -- and how to spot them | Supasorn Suwajanakorn (2018) TED. https://www.youtube.com/watch?v=o2DDU4g0PRo


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