
4 minute read
Conclusiones
Un primer elemento que aparece de manera transversal en el presente estudio tiene relación con las formas diversas de vivir y sentir la situación de confinamiento. Si bien hay una importante cantidad de puntos de vista compartidos por los casi cuatro mil estudiantes encuestados, hay también muchas respuestas con diferencias significativas que nos permiten señalar que la pandemia se ha vivido de manera diferente según el tipo de colegio, la condición socioeconómica, la edad y el sexo de los estudiantes. Siguiendo el mismo orden de los capítulos, presentamos las conclusiones más relevantes y necesarias de ser consideradas:
Acerca del bienestar emocional de los niños, niñas y adolescentes:
Advertisement
El estado emocional de los estudiantes durante la pandemia se caracteriza por tres constantes que se repiten en distintas preguntas de manera transversal: aburridos, preocupados, estresados. Esto parece vincularse directamente con la desmotivación que muchos experimentan en relación al aprendizaje. Entre las causas de dicho estado emocional están la alteración de sus rutinas, la incertidumbre sobre su situación familiar y el contexto nacional, las dificultades en el trabajo escolar a distancia o la satisfacción de necesidades básicas. Hay una preocupación importante porque sus familiares directos se contagien de coronavirus y, a la vez, que no puedan ser atendidos adecuadamente, en especial en los colegios subvencionados. Se observan desigualdades respecto de la preocupación por la garantía de derechos sociales como el trabajo, la salud o la alimentación. La ansiedad, preocupación y desmotivación parecen estar viéndose contenidas en el entorno más cercano de la familia. El régimen de cuarentena y las medidas tomadas por el estado de emergencia han favorecido que estos NNA pasen más tiempo con sus madres, padres y cuidadores, tal vez como nunca antes lo hayan experimentado (“más unidos que antes”). Un número significativo reporta sentirse acompañado y encontrar en los adultos respuesta a sus preocupaciones y apoyo en su proceso de aprendizaje.
Acerca de las condiciones materiales y continuidad de los estudios:
Los datos muestran diferencias significativas en las condiciones materiales disponibles en los hogares, según tipo de colegio, para hacer frente al contexto de confinamiento y educación virtual. No solamente existe una menor disponibilidad de acceso a los medios tecnológicos necesarios (computadores, internet, teléfonos), sino también una menor disponibilidad de un ambiente adecuado y de la tranquilidad necesaria para estudiar en modalidad virtual. Esto influye negativamente en la posibilidad de desempeñar las tareas y actividades escolares de manera correcta.
Otro elemento importante a tener en cuenta es la evaluación negativa que los estudiantes realizan de la experiencia de estudiar desde casa. Un alto porcentaje señala que las tareas son muchas y que deben pasar una gran cantidad de días desempeñando labores escolares. Sin duda que el bienestar emocional afecta de manera muy negativa la posibilidad de enfrentar esta pandemia de forma exitosa. Un alto porcentaje señala que es apoyado por alguien de su familia o por sus compañeros a la hora de realizar sus actividades escolares. Respecto de la confianza en que el colegio tomará todas las medidas necesarias para asegurar un buen retorno, si bien la mayoría de los estudiantes confía en que sí se realizarán las acciones pertinentes, existe un alto porcentaje que tiene dudas (no sabe) o que no confía en las medidas que implementará la institución.
Acerca del ejercicio de derechos:
Existe un alto impacto en el ejercicio del derecho a la recreación asociado a la imposibilidad de salir a los espacios públicos, así como diferencias significativas en los espacios que disponen para estar dentro del hogar. Ha habido una notoria alteración en la continuidad de la participación en instancias extraprogramáticas (en la escuela y fuera de ella). Los estudiantes de los colegios subvencionados se han visto afectados en un mayor porcentaje respecto de las condiciones dentro del hogar y de su participación en espacios deportivos, culturales y sociales. Acerca de los derechos que los estudiantes señalan como los más afectados, existe un consenso generalizado en torno a salud y educación: 1 de cada 2 indican que son los más alterados. Además, existe otro grupo importante de derechos que 1 de cada 3 estudiantes señala como muy afectados: el acceso a información, ambiente libre y sin contaminación, y jugar y descansar. Entre ellos hay una amplia variación en las respuestas, dependiendo de la edad, tipo de colegio y sexo. Por ejemplo, el acceso a una información clara es señalado en mayor medida por los adolescentes de entre 14 y 20 años. Respecto a otros derechos civiles y políticos como el que sus opiniones sean tenidas en cuenta en todo lo que les afecta, es satisfactorio observar que el entorno familiar es percibido como un espacio en que se garantiza este derecho. Otro tanto ocurre con la escuela, aunque en menor medida. Sin embargo, preocupa que no ocurra lo mismo cuando se piensa en el Estado o en la comunidad política de la cual forman parte, es un porcentaje menor el que percibe que los derechos de la niñez son importantes para el país o que su opinión es relevante para las autoridades.