© Jose A. Tudares 2015 © Más Allá De Lo Literal, 2015 2da Edición
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POEMAS PARA EL CORAZÓN Por Jose A. Tudares
Para el alma, música. Poesía, para el corazón.
Así es como las liricas invitan a reescribir la vida, a través del verso. La poesía logra explotar el poder de la palabra para transformar un todo en belleza. Bajo esa misma tónica se puede citar al cantautor argentino Gustavo Cerati, que por medio de la música expresó “La poesía es la única verdad. Sacar belleza de este caos, es virtud”, haciendo referencia al mundo. Poemas para el corazón transforma las esencialidades en belleza y delicadeza, en un compendio de rimas y versos que invitan al lector a soñar, creer, sentir, vivir y disfrutar, a través de la belleza de la palabra. En un compendio de diecisiete poemas, escritos para alimentar los suspiros del corazón.
OTRO IDIOMA Tú y yo hablamos en otro idioma. ¡Lo sé! Por la forma en la que se contemplan nuestras bocas. La manera en la que se tocan nuestros labios. Es como si habláramos en otro idioma. Y yo sé que es otro idioma, cuando estas en mis brazos. Porque me pierdo inocentemente, en la noción del espacio. Y también sé que es otro idioma, cuando estoy en tu pecho. Porque tu corazón no descansa. Me pide a gritos ¡Más besos! Hablemos en otro idioma, Ya no me alcanzan los versos.
TE INVITO Te invito a probar mi tinta. A ser parte de mis versos, un dulce complemento. Derrite mis palabras, tómalas a besos. Domina mis sentidos y acaricia mis deseos. Seremos más que amantes, unidos por el lienzo. Seremos rima en tinta, indelebles por el tiempo.
DILE – MÁS Juro que esta vez, más de una mirada cruzamos. Y aunque las palabras se resistan, terminare con tu nombre en mis labios. En mi cabeza ya me he cuestionado, la ecuación que solvente el dilema, De tanta perfección en tu existencia. ¡Dime mi amor!, ¿Tu corazón es de este planeta?
DESPEDIDAS Se arruga el corazón, de tan solo pensar. En un final, en lo que se va. En la incertidumbre, en la ausencia. Se arruga el corazón. Y tan solo es, por dejarlo pensar.
NOCHE Se estrella el cielo, y la noche arropa la ciudad. Las luces en “off”, y el pensamiento a volar. Insomnio adoptado, enséñame a despertar. El alunizaje a tus labios. Quedo en evidencia. Fugaz, breve y enviciante. Recuerdo el despegue, más no el aterrizaje. Tiritan las estrellas, y con ellas la ciudad. Plagiando tus ojos, la luna se crece. Ríe y observa, que me pierdo en su brillar. Tiritan tus ojos, y con ellos mi suspirar. Estrella mi cielo, y vuélveme a arropar.
15 MINUTOS 15 minutos de atardecer. El tiempo necesario, para ver al sol decrecer. Y me preguntas tú: ¿Cuánto tiempo te esperare? Se irán las semanas, se agotaran los días. Se escaparan las horas. y mi corazón testarudo, temblara por ti, a cada segundo.
MONOTONÍA Este fue el día, que sin mucha dificultad, decretaste el fin de la monotonía. Pintaste el cielo con tu alegría. Dibujaste el mar con una caricia. La naturaleza te respondía, siempre que tu corazón latía. Te pertenecieron mis ojos, y pude ver, como el gris desaparecía. Este fue el día, que sin mucha dificultad, decretaste el fin de la monotonía.
VUELVE A MÍ Vuelve a mí, flor de ocaso. Devuélvele a mis brazos tu esencia, el viejo refugio de tu inocencia, Donde solías reposar tu esperanza y los miedos no hacían falta. Te llevo en mi memoria, en tu dulce aroma a incienso y mora. Impregnado por todos lados, en cada extremo de mi alma, Y de mi almohada donde llevamos a cabo tantas batallas. Vuelve a mis labios, a los vuelos de caricias, que tan lejos nos llevaron. Se perdían nuestras manos, en el juego de explorarnos. Vuelve a mí, flor de ocaso. Reconstruyamos el amor, que el destino es nuestro aliado.
RELOJ DE ARENA ¿Quién me cura la melancolía?, ¡Vida mía! Si te apoderaste de la luna, y su luz ya no alumbra la penumbra, de mi amor perdido en el olvido. Se agotaron mis excusas, la memoria ya me acusa, Del naufragio sin sentido y las noches sin motivos. Vuelta y vuelta, reloj de arena.
PROMESA Se despidió de ella, como un caballero despide a una doncella. Un beso en la frente, y una promesa certera: “Aunque el cielo oscurezca, el mar se enfurezca, la tormenta aparezca y los miedos florezcan. No dejaremos, que este amor sincero desfallezca”.
YA NO ESTAS Ya no estas. Y ahora solo somos distancia. Navegamos lejos, en un mar de indiferencia. Ya no estamos. Pero sigo siendo esclavo de tu libertad. De tus curvas, y su tallado deambular. Que lentamente ha ido borrando, el tiempo y la distancia. Ya no estamos. Y yo sigo sin encontrarme. Y sé que también me has buscado. Quizás algún día volveremos, para finalmente declarar que… Ya no estamos.
LIBERTAD CONDICIONAL Libertad, dices. Mientras cierras la puerta Al destino. A tus labios. A tus alas. Tus palabras no hablan de libertad. Solo desnudan condiciones. Solo me niegan tu destino. Y dices, libertad.
LA APUESTA DEL SOL
Por cada trazo de horizonte, una puesta de sol juraron. Amor eterno buscaban, como dos jóvenes enamorados. Es por ello que día a día, se siguen encontrando. Sin importar el lugar, parece que todo ya está pautado. Esta es la apuesta del sol… Amor eterno encontrado.
JUGO DE LUNA Ventana circular. La Luna prohibida, gritaba sin parar: “¡Lánzate por la ventana!, ¡Te invito a navegar!” Tu corazón palpitante, se aceleraba sin parar. En una aventura, difícil de rechazar. La noche exultante, con nubes talladas en diamantes. De estrellas brillantes. Y tu pensaste: “Esta Luna radiante, me quiere enamorar”
En sus ojos elegantes, en su suave volar. La idea embriagante, te hizo dudar. Igual aceptaste, y te echaste a nadar. Viajando en el cielo, mis versos te acarician. Regálame tu sonrisa, y volvemos a empezar. El Jugo de Luna. Te hizo pensar.
LOS AMORES DE NOCHES LARGAS Los amores de noches largas. Aunque parezca, no amanecen en la misma cama. Entre las mismas sabanas. descansa ese amor, Al que llaman, el de las noches largas. El amor que nació en una noche, ni la luz los separa. Adoptados por la Luna, y arropados por estrellas. Es la vida de quien por el amor se desvela. Entonces… El día que amanezca. Morirá el amor de las noches largas. Pues de día, las cosas no se ven tan claras. Yo me pregunto mi amor: ¿A cuántas noches estamos de las noches largas?
VIDA ¡Vida! Libérame a tiempo de la agonía, de ser esclavo de tus secretos. Revela en mí, todos tus miedos de una eterna monotonía. Suspira y respira, mis fantasías, que yo por ti, corro los riesgos. De ser tú amante en anonimato. Descarga en mí tu melodía, que yo compongo una sinfonía. Vuelve a mí, ¡Vida mía! Que estos versos te necesitan.
CAPRICHOS Miénteme a besos, mátame a caricias. Tú mordiste, la manzana prohibida. Muy lento y discreto, el veneno es sincero. Caprichos, caprichos. Tu cuerpo y el mío. Me dejas, te dejo. Lo bueno es eterno. Te alejas, me acerco. No hay miedo, ni celos. Me entrego al deseo. Tu cuerpo es veneno. Seremos eternos, amantes del tiempo. Caprichos, caprichos. Mis versos prohibidos. Amores perdidos, momentos encontrados. Locura nocturna, la luna a tu lado. Corazón estrellado, amor embriagado. Caprichos, caprichos. Tus besos y los míos. Labios mojados, encuentros apresurados. Róbame el día, la noche te la regalo. Caprichos, caprichos. De ti me he enviciado…
La poesía compacta los sentimientos más vivos y crudos en pequeñas líneas, de esta forma los poetas logran transmitir el poder y las energías de sus palabras. Desde los tiempos de antaño la poesía ha convivido con el hombre, inspirando nuevas fronteras, creciendo entre géneros como la novela, los cuentos y los ensayos. En esta edición de Poemas para el corazón se presentaron diecisiete poemas inéditos, llenos de versos dirigidos al amor y la vida, siendo quizás los temas que despiertan mayores musas en los poetas.
Jose A. Tudares
Jose Andres Tudares (Venezuela, 1989). M.Cs. En Gerencia Empresarial y Lcdo. En Contaduría Pública. Egresado de la Universidad Dr. Rafael Belloso Chacín. Escritor y editor independiente.
@jtudares
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