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El regalo de Río de Janeiro
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Editorial
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NO TENGO ORO NI PLATA, PERO TRAIGO LO MÁS VALIOSO QUE SE ME HA DADO: JESUCRISTO Con estas palabras inició el Papa Francisco su estancia entre los jóvenes de Río de Janeiro y así fue, cada uno de los que asistió, regresó con Jesús en su corazón. Os ofrecemos en este número los testimonios de algunos jóvenes del Movimiento “CONSOLACIÓN PARA EL MUNDO” que participaron en la JMJ de Río. Fueron convocados a este encuentro para escuchar al Señor, compartir la fe, y comprometerse en anunciar a Cristo. Allí se dio el ambiente propicio para hacer realidad el objetivo de la Jornada Mundial de la Juventud. En la reflexión posterior al encuentro de los jóvenes hay que dejar espacio para hacer resonar como un eco interior lo vivido, volver de nuevo a las palabras pronunciadas por el Papa, a revivir en el corazón la comunión con la Iglesia. No basta con haber participado, la peregrinación empieza en realidad cuando acaba la JMJ. Es en la vida diaria, sumergidos en la cotidianeidad donde la presencia de Jesús cobra todo su significado. Acoger el regalo de las palabras del Papa Francisco en estos días es abrazar a Jesucristo como razón y sentido de nuestra vida. Siempre pensamos que los mejores regalos son aquellos que tienen una utilidad. De cada uno depende. Podemos guardar el regalo y almacenarlo o disponer de él dando vida a los valores y proyectos de vida personal y eclesial proclamados en Río de Janeiro. En la ceremonia de clausura el Papa dijo: la experiencia de este encuentro no puede quedar encerrada en su vida o en el pequeño grupo de la parroquia, del movimiento o de su comunidad. Sería como quitarle el oxígeno a una llama que arde. La fe es una llama que se hace más viva cuanto más se comparte, se transmite, para que todos conozcan, amen y profesen a Jesucristo que es el Señor de la vida y de la historia. La experiencia vivida es para regalarla a otros, ¿cómo se regala? Creando la sorpresa diaria a los demás de una acogida cálida y una convivencia pacífica, con el testimonio de una vida que no busca intereses personales, que se da y entrega, que ama sin medida, y unas relaciones donde el “tú” es más importante que el “yo”. Para los que cada día intentamos vivir y transmitir el consuelo de Dios, ofrecer el regalo de Río a los demás, es CONSOLAR, es aliviar cualquier sufrimiento, compartir vida y fe para soportar las contrariedades de la vida, es hacer más agradable la vida de los demás, “no atando cargas pesadas en los otros”. Es, como nos dijo el Papa, “llevar la fuerza de Dios para arrancar el mal y la violencia; para destruir y demoler las barreras del egoísmo, la intolerancia y el odio; para edificar un mundo nuevo”. Entregad el regalo recibido, dad gratis lo que se os ha dado gratuitamente.
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Iglesia en camino - Mercedes Onieva
JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD En el discurso de bienvenida el Papa, a los que acompañamos a los jóvenes en su educación y crecimiento, nos exhorta... “¡Atención! La juventud es el ventanal por el que entra el futuro en el mundo. Es el ventanal y por tanto nos impone grandes retos. Nuestra generación se mostrará a la altura de la promesa que hay en cada joven cuando sepa ofrecerle espacio, Esto significa: • Tutelar las condiciones materiales y espirituales para su pleno desarrollo. • Darle una base sólida sobre la que pueda construir su vida. • Garantizarle seguridad y educación para que llegue a ser lo que puede ser. • Transmitirle valores duraderos por los que valga la pena vivir. • Asegurarle un horizonte trascendente para su sed de auténtica felicidad y su creatividad en el bien. • Dejarle en herencia un mundo que corresponda a la medida de la vida humana. • Despertar en él las mejores potencialidades para ser protagonista de su propio porvenir y corresponsable del destino de todos.
Con estas actitudes, anticipamos hoy el futuro “que entra por el ventanal de los jóvenes .” En este principio de curso, desde esta página os animo a comenzar con ilusión, valentía y esperanza a vencer estos retos. El Papa nos invita en la Eucaristía de la XXVIII Jornada a ir y transmitir la experiencia vivida a los demás con estas palabras “Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos” ¿Qué nos dice hoy el Señor? Tres palabras: Vayan, sin miedo, para servir.
Vayan. En estos días aquí en Río, han podido experimentar la belleza de encontrar a Jesús y de encontrarlo juntos, han sentido la alegría de la fe. La experiencia de este encuentro no puede quedar encerrada en su vida o en el pequeño grupo de la parroquia, del movimiento o de su comunidad. Sería como quitarle el oxigeno a una llama que arde. La fe es una llama que se hace más viva cuanto más se comparte, se transmite, para que todos conozcan, amen y profesen a Jesucristo, Señor de la vida y de la historia. ¡Cuidado! Jesús no ha dicho: si quieren, si pueden, si tienen tiempo vayan, sino que dijo: “Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos”. Compartir la experiencia de la fe, dar testimonio de la fe, anunciar el Evangelio es el mandato que el Señor confía a toda la Iglesia, también a ti. Es un mandato que nace de la fuerza del amor, del hecho de que Jesús ha venido antes a nosotros y se nos ha dado para salvarnos y mostrarnos el amor y la misericordia de Dios. Jesús nos trata como a personas libres, amigos, hermanos; y no solo nos envía, sino que nos acompaña, está siempre a nuestro lado en esta misión de amor. Sin miedo. “No tengan miedo” Cuando vamos a anunciar a Cristo, es él mismo el que va por delante y nos guía, Al enviar a sus discípulos en misión, ha prometido: “Yo estoy con ustedes todos los días” (Mt 28,20). Y esto es verdad también para nosotros. Jesús no nos deja solos, nunca deja solo a nadie. Nos acompaña siempre, Además Jesús no dijo “Ve”, sino “Vayan”: somos enviados juntos. Queridos jóvenes, sientan la compañía de toda la Iglesia, y también la comunión de todos los santos. Jesús no ha llamado a los apóstoles para que vivan aislados, los ha llamado a formar un grupo, una comunidad. Quisiera dirigirme también a ustedes, queridos sacerdotes... es bonito compartir esta experiencia de fe. Seguro que les ha rejuvenecido a todos. El joven contagia juventud. Pero es solo una etapa en el camino. Por favor sigan acompañándolos con generosidad y alegría, ayúdenlos a comprometerse activamente en la Iglesia; que nunca se sientan solos. Y aquí quiero agradecer de corazón a los grupos de pastoral juvenil, a los movimientos y comunidades que acompañan a los jóvenes en su experiencia de ser Iglesia, tan creativos y tan audaces. ¡Sigan adelante y no tengan miedo!. Para servir. En el salmo hemos proclamado:”Canten al Señor un cántico nuevo”(95,1)¿Cuál es ese cántico nuevo? Es el canto de su vida, es dejar que nuestra vida se identifique con la de Jesús, es tener sus sentimientos, sus pensamientos, sus acciones. Y la vida de Jesús es una vida para los demás, Es una vida de servicio. Evangelizar es dar testimonio en primera persona del amor de Dios, es superar nuestros egoísmos, es servir inclinándose a lavar los pies de nuestros hermanos como hizo Jesús.
Tres palabras Vayan sin miedo, para servir.
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Vamos a pensar - Mª Victoria Aymerich
Rosas en el mar Tengo un lápiz de memoria en el que he recogido los archivos de muchas melodías que, a lo largo de mi vida, por una u otra razón, han ido marcando y acompañando mis procesos vitales… Este lápiz lo pongo a menudo en el reproductor del coche y amenizo mis trayectos cantando –a veces me sobrepaso en el tono– o tarareando yo, a la vez que suena la música. Hay piezas y estilos musicales para todo momento y ocasión: melodías religiosas de ayer y de hoy para cantarlas y orarlas a la vez, éxitos musicales de mi adolescencia y juventud, música clásica especialmente seleccionada, canciones populares españolas y latinoamericanas… himnos marianos, bandas sonoras de grandes películas… Para mí, cada cual en su contexto, son muy significativas y evocadoras.
Hay en el lápiz una canción que me inspira para la confección de este artículo. Desde que hace días la escuché, vi en ella un posible filón para reflexionar, pensar y extraer consecuencias basadas en el Evangelio. La compuso Luis Eduardo Aute a finales de los años sesenta del siglo pasado dentro del género que se llamó canción protesta. Contribuyó a popularizarla la cantante Massiel… No lo difiero más… Os ofrezco parte de la letra y el estribillo: Voy buscando un amor que quiera comprender la alegría y el dolor, la ira y el placer, un bello amor sin un final que olvide para perdonar. Voy buscando la razón de tanta falsedad. La mentira es obsesión y falsa la verdad. Qué ganarán, qué perderán, si todo esto pasará. Estribillo:
Es más fácil encontrar rosas en el mar. Rosas en el mar.
Ya lo había anunciado: Es una canción inconformista que destila cierto pesimismo, fruto de la percepción del autor sobre el mundo que le rodea, pero, ¿qué encuentro? En primer lugar una actitud de búsqueda de alguien, alguien – lo llama amor– que dé respuesta a los grandes, problemas y contrastes de la vida, de alguien –un bello amor– que no tenga final, que perdone y perdure por siempre. No sé los lectores qué pensáis, si tenéis –supongo que sí- la misma experiencia que yo, que sé, entre otras muchas cosas de mí que, de continuo, estoy en búsqueda. Busco sobre todo a Dios en su misterio trinitario, pero quisiera encontrar razón del infinito enigma que soy yo misma y lo son las demás personas; de los grandes temas del amor, la vida, la muerte, la alegría, el dolor… de la complejidad de las relaciones humanas y de las diferencias e igualdades de cultura, posición social, características físicas, opiniones, sensibilidades, reacciones, querencias, desafectos, motivaciones, opciones, etc. que cada uno tenemos. Sí, todos buscamos… Y es que hemos sido creados para algo mucho más valioso que el simple subsistir. Somos seres finitos y limitados con capacidades y posibilidades infinitas e ilimitadas, hechos para amar y ser amados sin barreras. Esta lucha entre la contingencia y la trascendencia es de por vida y, aunque no haya solución, sabemos por la fe que existe. No para el aquí y el ahora de nuestro cotidiano vivir, sino para el más allá, para la otra orilla de nuestra existencia…
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La esperanza cristiana nos impulsa a la convicción de que sí, que hay un bello amor, el de Dios manifestado en Cristo, que no conoce el ocaso, que perdona, sostiene, plenifica, purifica, salva… Además, por si fuera poco, contesta con su misma vida, gestos y palabras, los interrogantes más profundos que cada cual llevamos en nuestro corazón. Cristo Jesús vence lo más terrible, lo más inexplicable, la muerte y con la inmensa fuerza de su resurrección, nos trae la alegría y libertad que tanto buscamos y nos abre a que con él removamos obstáculos, y la misericordia, la humildad, el perdón y la consolación quienes guíen nuestro diario caminar y constantemente nos renueven por dentro, así como las relaciones que mantenemos unos con otros. Esta certeza nos la proporcionan también muchas palabras de Jesús. Por la cercanía al tema que nos ocupa, elijo estas: Buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá, pedid y se os dará, pues quien pide recibe, quien busca encuentra y a quien llama le abren (Mt 7, 7) La canción, no obstante, en un poético y logrado estribillo, nos avoca, atenuado por la belleza de la metáfora, al escepticismo: Es más fácil encontrar rosas en el mar. Y es evidente que, dicho lo dicho, no debemos dar pábulo a la desesperanza, aunque se revista de bellas palabras. Es difícil encontrar rosas en el mar como lo es hallar peces en la montaña… El lenguaje literario por definición es, además de altamente expresivo, marcadamente ambiguo. Sólo hay que estar atentos… Como cristianos, aunque haya mil motivos para ello, evitemos caer en la tentación del desaliento, el desengaño, la desilusión, el desencanto… tinieblas y zonas oscuras que están al acecho para vencer la luz que nos proporciona la esperanza teologal que, junto a la fe y la caridad, son nuestro patrimonio, el inmenso regalo de los dones de Dios derramados, por el Espíritu, en nuestro corazón. La segunda de las estrofas de la melodía que comento nos pinta un paisaje real y desolador: falsedad, mentira, corrupción, arribismos, inmoralidad… Sólo con abrir el periódico, ver el telediario o escuchar los comentarios de la gente nos encontramos con esto y mucho más. El mal y el pecado, desde que el mundo es mundo, existen…Los intérpretes de la canción buscan inútilmente la razón… Esta búsqueda es infructuosa, buscar por buscar no conduce a nada… El oxímoron falsa la verdad y las preguntas retóricas fi-
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nales nos sumergen en el pesimismo, porque el todo esto pasará no es una invitación a la utopía, más bien parece una afirmación conformista. No me atrevo a enmendar la página a Massiel y Aute con un simple: No os preocupéis, las personas, el mundo, la realidad son así de crudas –¡Quién lo niega!–, pero Dios lo arreglará todo. Esto sería pensar a Dios como un ser mágico, un remedio de todo… Como lo sería también el huir sin base hacia soluciones ultraterrenas o, en un sentido totalmente opuesto, caer en un voluntarismo de poderlo todo con Dios. Si sigo así, concluiré como ellos diciendo: Es más fácil encontrar rosas en el mar. Y no, no voy por ahí, porque con San Juan en su primera carta, 4, 16 proclamo: Nosotros hemos creído en el amor que Dios nos tiene. Los cristianos creemos en que Dios nos ha creado por amor y que, por muy mal que esté todo, tenemos la certeza de la fe de que Dios ama al mundo tal como es y aún más: Tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no ha enviado su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él (Jn3,16-17). Con estas últimas palabras del apóstol Juan, enlazo con lo ya comentado más arriba de la primera estrofa: La seguridad de que Cristo nos libera y salva sostiene nuestras vidas. No es fácil encontrar rosas en el mar, tampoco es fácil vivir en cristiano, pero es completamente posible. Y os lo aseguro: la vida desde la fe cobra otra perspectiva, otra dimensión. Como nos dice la encíclica del papa Francisco Lumen fidei: … es urgente recuperar el carácter luminoso propio de la fe, pues cuando su llama se apaga, todas las otras luces acaban languideciendo. Y es que la característica propia de la luz de la fe es la capacidad de iluminar toda la existencia del hombre. Porque una luz tan potente no puede provenir de nosotros mismos; ha de venir de una fuente más primordial, tiene que venir, en definitiva, de Dios. La fe nace del encuentro con el Dios vivo, que nos llama y nos revela su amor, un amor que nos precede y en el que nos podemos apoyar para estar seguros y construir la vida. Transformados por este amor, recibimos ojos nuevos, experimentamos que en él hay una gran promesa de plenitud y se nos abre la mirada al futuro.
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Con Vocación... Maura Aranguren María Dolores García Goméz
Historia de una llamada Ser consolación para los demás... Nuestra querida Hermana Lisett Ochoa, hermana de la Consolación destinada en la Comunidad del Colegio de Maracay-Venezuela comparte hoy con nosotros su experiencia de ser una mujer llamada por Jesús para consolar. Todas hemos sido llamadas desde una situación concreta, quisiéramos que nos compartieras un poco; ¿En qué situación concreta y cómo se fue dando en ti el proceso de la llamada y la respuesta?
y vernos. Crecí en medio de una familia pequeña, sencilla, nunca nos faltó nada, pero tampoco nos sobraba. Cuando manifesté a mi familia mis deseos de ser religiosa, encontré oposición de parte de todos, excepto de mi papá que en todo momento me apoyó, aun cuando en el fondo no lo entendía. Él fue quien siempre me acompañó a todo y hasta el momento de hacer mi entrada al aspirantado estuvo presente. Actualmente lo aceptan y están contentos de verme feliz.
Mi llamada comenzó a entretejerse en medio de un momento de dolor y desconsuelo como lo es la pérdida de uno de mis hermanos. Poco a poco en medio de este dolor fui sintiendo fuertemente el consuelo de Dios. Por eso una de las frases con la que siempre me he identificado ha sido la de San Pablo: “consolados para poder consolar”. De allí brota mi experiencia profunda de consolación.
En pocas y sencillas palabras, ¿Qué te impulsó a responder a la intuición de Dios, dónde encontraste seguridad y valor? ¿Algún texto bíblico?
Pasado el tiempo conocí a las Hermanas, y el nombre de esta Congregación: Hermanas de la Consolación, despertó en mí la curiosidad por saber quiénes eran, qué hacían, a qué se dedicaban. Fue así como el Señor me fue presentando experiencias que despertaron en mí la semilla de la vocación y el deseo de seguirle y servirle en este estado de vida.
Me identificaba con esos buscadores, que teniendo algo valioso entre sus manos, sus proyectos, su futuro más cercano… pero su corazón está vacío, y va en busca de OTRO TESORO mayor. Cuando lo encontré, nada me detuvo para alcanzarlo, todos los días renuevo esos deseos de búsqueda, de “dejar y vender” muchas cosas, para encontrar mi único bien.
La familia y sus valores en nuestra vida y en nuestras opciones de vida, juegan un papel muy importante, ¿Cómo te apoyaron en tu vocación?
Gracias Hermana Lisett por compartir tu historia de amor con el Señor. Pedimos a Dios que te siga bendiciendo y acompañando en esta búsqueda, que nunca acaba.
Mi familia siempre fue y ha sido creyente. Nos inculcaron siempre valores humanos y cristianos y desde pequeños recibimos la formación para los sacramentos. La vida de mis padres fue el primer espejo donde verme
Animamos a aquellos jóvenes que sienten la llamada a ser consolación a no tener miedo, Dios da la fuerza necesaria para decirle Sí. ¡No temas! Dios te ama, te consuela y te llama a consolar.
Encontré seguridad en la misma llamada de Dios y en la experiencia que el día a día me iba presentando. El acompañamiento fue un proceso vital, me ayudó a ir purificando mis motivaciones y a tomar la decisión, de hacer una experiencia interna que terminara de confirmar lo que iba sintiendo y moviéndose en mi interior.
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La Palabra - Marta García
Biblia, ¿cómo has llegado a ser así? Artículo publicado en la revista: Catequistas 219 (Marzo 2012) 21-24 En este número vamos a tratar otra cuestión importante; la de la formación de la Biblia. Ésta no se formó de un día para otro. Su proceso duró siglos.
¿Los Evangelios fueron escritos por otras personas? La pregunta se puede ampliar no sólo a los Evangelios sino a todos los libros de la Biblia. Quizás, en el caso de los Evangelios, este fenómeno se aprecia mucho menos que en otros libros. - Pseudónimos Sabéis que en la antigüedad existía el fenómeno de la pseudo-epigrafía. ¿Qué es esto? Pues atribuir la autoría de una obra a un personaje importante como una forma de vincularse a una tradición y conferir autoridad a esta obra. Vamos como si yo al final del artículo firmara, Cervantes. A nosotros esto nos suena a plagio. Seguramente la Ley Sinde se hubiera forrado en aquel momento. Sin embargo, en la antigüedad esta concepción sobre los derechos de autor no existía como hoy la comprendemos. No era un delito que se penalizara. Es más, como he dicho, era una manera de vincularse a una tradición y conferir una cierta autoridad al escrito. Por ejemplo, en el caso de las cartas de San Pablo se habla de epístolas paulinas y de pseudo-paulinas como la carta a los Hebreos. ¿Cómo sabemos que Pablo no escribió esta carta? Pues por los temas que trata la epístola y por el modo de afrontarlos muy distinto a lo que habitualmente hace Pablo. También el lenguaje y el estilo de las frases es otro. Haced la prueba, poned un texto de Miguel de Cervantes con otro de Miguel Delibes y veréis que enseguida adivináis de quién es o, al menos, notáis que no tienen nada que ver.
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Otra forma de detectar que es otro autor es porque reflejan contextos socio-culturales diferentes. Por ejemplo en las cartas a Timoteo se alude a una estructura y organización de la Iglesia posterior al tiempo en que vivió Pablo. - Un libro, muchos autores Pero esto no termina aquí. Sobre todo para los libros del AT se ha detectado no sólo que el autor no corresponde a quien se le atribuye, sino que dentro del mismo libro hay diferentes autores. Por ejemplo Isaías vivió en el s. VIII aC., sin embargo, a partir del capítulo 40 se habla del exilio y del rey Ciro, o sea, el s. VI aC. Por no hablar, del cambio de estilo, lenguaje, temáticas, etc. Hoy en día la mayor parte de los estudiosos considera que la formación del libro Isaías va del s.VIII aC. hasta el s. IV o III aC. ¡Imaginaos cinco siglos para escribir un libro! Luego, en referencia a la pregunta que me habéis hecho, tenemos que diferenciar si todo el libro es de otro autor, o bien, si dentro del libro hay algún autor más. Como tantas veces he dicho, habría que ir caso por caso, pero en referencia a los Evangelios me inclinaría por lo segundo. Esto es, en textos puntuales se puede ver otra “mano redaccional”. Así Juan 20,30 parece concluir el Evangelio, sin embargo, tenemos otro capítulo más; Juan 21. La mayor parte de los estudiosos considera que este pasaje es posterior y de una “mano” distinta. - Si los autores son otros, ¿es inspirado el texto? Como veis nos hemos metido en un buen lio. Aunque ya hablamos en su momento de la inspiración, veis que ahora vuelve a salir la cuestión
porque este hecho afecta a la comprensión de la misma. - Todo el proceso redaccional está inspirado No sólo hay que cambiar el modelo que tenemos de inspiración –esto es, pensar que Dios te sople al oído–, sino que esta inspiración no se reduce a una sola persona. En el caso de Isaías, se alarga por cinco siglos a las personas y comunidades que fueron dando cuerpo a esta obra y, por tanto, el Espíritu guía y acompaña todo el proceso redaccional. Ahora bien, aquí entramos en una cuestión crucial que espero saber explicar. Vamos por pasos. Ya hemos visto que a la pregunta formulada arriba, habría que responder: sí, aunque haya distintos autores todo el proceso de redacción está inspirado. - La comunidad también está inspirada Ahora se trata de lo que hablamos en el número anterior. Es decir, a lo largo de los siglos las comunidades incorporan y conservan aquellos textos en los que ven expresada su fe, mientras que otros los olvidan o abandonan. En este sentido, habría que decir que no sólo los autores bíblicos actúan bajo la acción del Espíritu Santo sino también la comunidad creyente. Estamos ante la misma cuestión que la del reconocimiento de Jesús o del profeta. - ¿Quién reconoce a Jesús o al profeta? Reconoce a Jesús quien tiene el mismo espíritu de Jesús y reconoce al profeta quien es profeta. ¡Pues menuda respuesta! Ya sé que no os parecerá muy convincente, pero si lo pensáis, veréis que tiene su lógica. No fue suficiente que Jesús hiciera milagros para que sus contemporáneos le reconocieran. Los mismos hechos unos los interpretan como signo de que era un blasfemo y otros como señal de que era el Hijo de Dios. Así con los profetas. Por tanto, tiene que haber un elemento que no provenga únicamente de factores externos y que capacite para reconocerle. Y esto es la fe, pero una fe bien entendida. Ya me comprendéis. Jesús, encarnándose, acepta la posibilidad de no ser reconocido. Si Él hubiera aparecido en un trono glorioso o bajando del cielo a la vista de todo el mundo, o bien, haciendo grandes signos y prodigios, pues seguramente hubiera sido proclamado Hijo de Dios inmediatamente, quizás por miedo y, con ello, coartando la libertad humana.
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Ahora bien, presentándose como uno de tantos, pues no era tan fácil reconocerlo. Lo mismo sucede con la Escritura, expresándose con palabras humanas, la Biblia asume el riesgo de no ser tenida como Palabra de Dios y de ser malinterpretada. En este sentido, no existen pruebas evidentes ni científicas que te hagan decir: sí, esto es Palabra de Dios. Esta respuesta proviene de la fe. Y, en el caso que nos incumbe, de la fe de toda una comunidad que a lo largo de los siglos ha ido discerniendo en qué textos sí y en qué textos no está expresada su fe y son inspirados por Dios. - ¿Cuándo se formó la Biblia? De nuevo, para responder tendríamos que ir primero, libro por libro y, luego, considerar la Biblia en su totalidad. En el primer caso, cada libro tiene su “historia redaccional”, ya os he dicho que el libro de Isaías, prácticamente tardó cinco siglos en formarse, mientras que otros libros tardaron menos. En cuanto a la Biblia en su totalidad, sabemos que más o menos hacia el s.III ya estaba prácticamente consolidada la estructura del AT, aunque todavía faltaban algunas cosas. Mientras que el proceso de gestación y formación del NT aproximadamente fue desde la primera mitad del s. I hasta el s.II. - ¿Los escritores bíblicos se copiaron de alguna parte? Más que “copiarse” habría que plantearse si se “inspiraron” en alguna parte. Como siempre, no puedo dar una receta de cocina que sirva para todos los textos. Cada libro es cada libro. Por eso, respondo para los primeros capítulos del Génesis que, me imagino que es por donde va la pregunta. Cuando se descubrieron las tablillas escritas en acadio sobre los textos de la creación y del diluvio mesopotámico, se vio que guardaban cierta afinidad con los relatos bíblicos. Dado que estos eran anteriores, lo más lógico es pensar que los autores bíblicos los conocían, se sirvieron de ellos y los reformularon cambiando algunas cosas y dejando otras. Se plantea de nuevo qué entendemos por inspiración. Si por inspiración se entiende originalidad, que nadie antes haya dicho algo parecido, utilizar categorías totalmente nuevas e inéditas o si, siguiendo en la línea del misterio de la Encarnación, por inspiración se entiende que los autores bajo la acción del Espíritu hayan acogido e incorporado la verdad de otros escritos, se hayan servido de sus categorías para vehicular la Palabra de Dios, ya que éstas eran comprensibles para sus destinatarios. Personalmente me inclino más por esto último.
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Huellas de Mª Rosa Molas - Antonia Munuera
UNA NOCHE EN LA MISERI Anochece... el sol se oculta por entre las montañas que embellecen nuestro valle, veo sus últimos rayos mientras voy cerrando las ventanas de la Misericordia. Todo se va quedando en silencio y a media luz después de un día repleto de acontecimientos. Me dirijo a la Iglesia, bajo las escaleras, abro la puerta y allí, de rodillas, está la Madre. Siempre es la primera en llegar, su presencia me sobrecoge. Entro despacito y con cuidado, me pongo a su lado. La miro, tiene los ojos cerrados y sus manos en oración. Su rostro cansado trasmite la paz de quien busca alivio y consuelo a los pies del Señor. Casi puedo sentir como busca a su Dios. El recogimiento y el silencio que envuelven su cuerpo, atraen mis ojos y la puedo ver como “flecha” que ha sido tensada en el arco y “vuela” para “las cosas de lo Alto”. Su presencia me hace entrar en oración a mí también... Al verla así, en la presencia del Señor, hago memoria del día que ha pasado. Desde la oración de la mañana hasta el último acto del día, ordinario y extraordinario, todo lo he visto realizar con persistente fervor, ternura y devota pausa. Muy tempranito ha venido a lavar ropa con nosotras, después ha recorrido toda la casa para atender las necesidades de los ancianos, niños y enfermos, ha estado pendiente de una de nosotras que está enfermiza y por si no fuese suficiente, han venido personas del ayuntamiento a buscarla, algún problema debe de haber. Se ha quedado preocupada y esta tarde ha ido a visitar a las hermanas del Hospital en Tortosa. Y a pesar de este día lleno de circunstancias diversas y algunas adversas, sabe recogerlo todo y como “una gavilla de trigo”, ofrecérsela al Señor que la transformará en “pan que consuela” a todos. Ya han llegado las hermanas para la oración de la tarde. La Madre abre los ojos... puedo ver la profundidad de donde vienen y la paz que transmiten, se pone en pie y percibo un cuerpo gastado que va aprendido con el Maestro a cargar su yugo suave y su carga ligera. Comienza la oración en comunidad, a una sola voz elevamos un canto de alabanza y de acción de gracias al Dios de todo Consuelo, pues hoy ha consolado a los más pobres por medios de instrumentos pequeños y débiles como nosotras. La Iglesia de nuestra casa se convierte en fuente de consuelo para la comunidad. Oramos...
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A continuación entramos en el comedor, cenamos alguna cosita, rapiditas, porque hoy ha llovido y la ropa no se ha secado. Hay que ponerla al calor de la hoguera para que mañana se pueda utilizar. Mientras acomodamos la ropa para que se seque, vamos contando las anécdotas del día transcurrido: “¿Habéis visto como Juanito se ha caído al subirse al árbol? ¡pero qué travieso es!”; “El bebe hoy no ha querido comer, le están naciendo los primeros dientecitos... ¡es hermoso!”; “Pepe está contento porque le han traído un cigarrito y después de la comida lo ha saboreado con gusto”... Y así van apareciendo, por su nombre, todos los que amamos. Entre risas y comentarios, la Madre escucha con atención, su buen humor nos hace reír también, el ambiente es de fraternidad, ¡estamos alegres! El día está llegando a su fin, pasamos por la Iglesia para dar “las buenas noches” al Señor... ella es la primera en salir. Sé bien donde va... a visitar a la Sra. Cinta, hoy esperaba la visita de su hija, pero no ha llegado, está triste y no podrá dormir. Sin verla, puedo imaginar lo que va haciendo... se aproxima a la cama, la llama bajito por su nombre, le pone la mano sobre la frente y le dice: “María Cinta, la chiqueta no habrá podido ve-
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ICORDIA DE JESÚS nir, otro día vendrá, reza a la Mare de Déu y dormirás en paz”. Pero seguro que también va a la cunita de los bebes para ver si duermen y hacerles la señal de la cruz sobre su frente, y a darle las buenas noches a Juanito que tiene la rodilla hinchada por la caída, y al Sr. Jorge que en estos días tiene mucho dolor de piernas y no consigue dormir bien... Y para que seguir contando... será raro pensar que deja de visitar alguna cama donde ella sabe que hay un dolor que consolar. Me retiro a mi celda pensando en el recorrido que la Madre va haciendo de cama en cama y hasta puedo oír el murmullo suave de todos: esta noche sí que estaremos bien. Descubro que la Madre se va convirtiendo en un espejo en el que me voy moldeando para el servicio de consolar. Mi espejo, el espejo para vivir con tan solo el deseo de servir al pobre y alabar a Dios. La noche está avanzada... sopla un viento fuerte, las ventanas se agitan, abro los ojos... todavía no es hora de levantarse pero algo me atrae, siento la necesidad de búsqueda... me dirijo al ropero... al fondo está la tribuna donde por sus rendijas se puede ver a nuestro Señor.
El candil ilumina mis pasos... llegó cerquita... aquí está la perfecta discípula de Jesús, a sus pies, escuchándolo; aquí está apagando la ardiente sed que la consume; aquí está la íntima amiga de Jesús manteniendo vivo el fuego de su amor ; aquí está la que sabe de desolaciones y tribulaciones en suave comunicación con su Señor; aquí está con Aquel que absorbe completamente su afectuosa atención; aquí está derramando tiernas lágrimas al ardor del amor divino al herirle las aflicciones y penas ajenas... aquí el Altísimo consagra su morada para consolar a su pueblo. Siento una fuerte invitación a quedarme junto a ella... al percibir mi presencia me mira y escucho su voz con suavidad: “Aquí también está tu lugar”. Apago mi candil, me arrodillo junto ella, miro por las rendijas... el viento sigue soplando fuerte sobre nuestro valle... el día se aproxima... estoy con Él junto a ella.
Para reflexionar... Mis noches ¿en qué las ocupo? En mi vida ¿hay espacios para estar con Jesús? ¿hay coherencia entre mi orar y mi servir? ¿En qué “espejo” moldeo mi vida?
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Entrevistando a ...
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Francismary Boadas Me llamo Francismary Boadas y tengo 19 años de edad. Nací en Puerto La Cruz, Venezuela, muy orgullosa de ser venezolana. Estudio ingeniería química. Soy una chica muy soñadora, que le encanta todo lo que tenga que ver con Dios y que está enamorada de Jesús. Me alegra poder participar en esta entrevista y aportar algo a la revista consolación para seguir trasmitiendo esa alegría de pertenecer a esta familia.
“ fue una oportunidad para llenarme de fuerzas, para enriquecer mi fe...” ¿Cómo conociste el Movimiento Consolación? ¿Desde cuándo perteneces a los grupos? Lo conocí en el colegio: Nuestra Señora de La Consolación, de aquí de Barcelona. A éste entré en séptimo, cabe destacar que no quería estudiar en este colegio y ahora ni me quiero ir. Al movimiento entré como una joven COM en cuarto año gracias a la madre Maura Aranguren que me motivó mucho, realmente fue una gran luz puesta por Dios en mi camino. ¿Qué te aporta el Movimiento en tu vida cristiana? Son tantas cosas, pero una de las que tengo que estar más agradecida es mi formación, mi compromiso y mi carisma. El movimiento me ha formado, me ha enseñado... más como vivir cada vez mas fuer-
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te los valores cristianos a través de este carisma y a adquirir un compromiso con la iglesia y con Cristo, porque también me ha mostrado cuan maravilloso es Dios y como su amor lo llena todo. ¿Cuál es tu compromiso concreto en el Movimiento? Mi compromiso actualmente más fuerte es ser coordinadora de los niños del MIC, estar a la altura de
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El movimiento me ha formado, me ha enseñado como vivir cada vez más fuerte los valores cristianos...
poder trasmitirle este carisma y este amor a Dios es un gran reto. También soy monitora del COM y mi compromiso es seguir llamando a más jóvenes para que como yo conozcan y vivan su fe católica siguiendo las huellas de María Rosa Molas. ¿Cómo vives día a día el carisma de la Consolación? Este carisma para mi abarca tantos aspectos que día a día es un entero consolar, desde los pequeños gestos como una sonrisa que puede aliviar el corazón, alegrar a las personas, escucharlas, abrazarlas, aconsejarlas, ayudarlas en los momentos más difíciles y en los más comunes, siendo llama de esperanza, recordándoles en cada momento que con Dios todo lo podemos, incentivándolos a la ora-
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ción y yo misma en una constante comunicación con Dios, para que siga iluminando mi caminar y me ayude a seguir siendo CONSOLACIÓN PARA EL MUNDO. Nos hemos enterado que has participado en la JMJ de Río de Janeiro. ¿Qué ha supuesto para ti esta experiencia? El que viva una JMJ concordaría conmigo en que no existen palabras para describir todo lo que esta experiencia suscita en uno. Realmente creo que fue una oportunidad para llenarme de fuerzas, para enriquecer mi fe a través de todas las catequesis, de todos los momentos de oración y principalmente de las palabras del Santo Padre Francisco y del encuentro con Jesús en todo momento. Me caló mucho la confianza que tienen en todos los jóvenes, y solo pensar que Dios cuenta conmigo para seguir construyendo su reino es una llamada grandísima la que me hace y que necesita de mi mayor compromiso y entrega. Jesús me sigue
abriendo los ojos del corazón a su amor, y me asombro cada vez más de cómo actúa en cada uno de nosotros y como nos sigue uniendo a través de su iglesia. Pudiera seguir contando mil maravillas y mil emociones pero mejor los invito a que ustedes mismo se animen a vivir esta experiencia y puedan, como yo, sentir la felicidad de ser hijos de Dios y miembros de la iglesia católica que van caminando de la mano de María contracorriente.
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Jornada Mundial de la Juventud, Río 2013
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¡EU FUI¡, estas letras me describen en totalidad, porque describe que yo, participé en la JMJ 2013 RIO. Una de las experiencias más gratas que he podido vivir. Dios ha sido muy bueno conmigo brindándome anteriormente la oportunidad de participar en la JMJ 2011 Madrid, donde me llamó a seguir su camino y ahora en esta, donde me llamó a ser un discípulo. Guapimirim, nuestro lugar de acogida, inicialmente, era amor hecho pueblo. Cada persona y cada detalle que ellos tenían para con nosotros era grande y hermoso, era amor de hermanos, ese era amor de Dios. Las palabras del padre Joao que a todos nos tocó el alma, palabras sinceras de amor, esa alegría que nos invadía en la vivencias de la semana misionera en la “Parroquia Nossa Sra de Ajuda”. Continuamos nuestra experiencia en un pueblo llamado Petropolis, hermoso y lleno de esa alegría que invadía cada calle, esa alegría de ser amigos de Jesús. El cansancio no nos desanimó, nos motivó. Compartimos y
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vivenciamos el ser enviados a predicar, siendo lo que debemos ser, ejemplo de vida. Vivimos muchas experiencias, las catequesis que nos motivaban y nos hacían reflexionar de una manera increíble. Los testimonios, que fueron de gran ayuda para mí, un encuentro cercano, personal y único con Dios, con mi padre, con María. Sentí ese llamado que decía “Yo estoy aquí, no te sientas sola que TE AMO” y ese amor no podía quedármelo para mí, cuando uno recibe debe dar, compartir ese amor, ese carisma que el Señor inculcó en mí, ese es el compromiso que adquirí, lo que Dios espera de mi. Vivimos la vigilia en un clima de suave brisa como una caricia de Dios. Esa oración especial acompañados de millones de jóvenes que se mantenían allí a pesar de las adversidades, es una enseñanza tremenda, mantenerse firme en su fe recibiendo con un sí en el corazón el llamado de ir y hacer discípulos en todas las naciones.
¡Qué grande es el amor de Dios! Qué sentimiento de calma, alegría y esperanza envolvió mi corazón al momento que el Santo Padre pasó a nuestro lado cuando se dirigía a celebrar la eucaristía, con aquella sonrisa y esperanza en los ojos que le brillaban de emoción junto a nosotros, ¡inolvidable!. Todos nos recargaron las pilas con palabras llenas de energía que dirigió el Papa: “Con su testimonio de alegría, de servicio… Ustedes hacen florecer la civilización del amor”. Seamos católicos de Amor, seamos iglesia de calle, vayamos firmes en la fe como Discípulos y Misioneros dispuestos a consolar, todos juntos “Unidos por una experiencia vivida en el corazón, Dios nos da su consolación”… ¡Porque unidos, somos CONSOLACIÓN! Grecia Guevara
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Desde el primer día sabía que se avecinaba una experiencia inolvidable, oportunidad de crecer como persona, de renovarse. Descubriendo nuevos dones, virtudes e incluso defectos, la emoción de los jóvenes se sentía desde lejos. No fuimos reunidos solo para ver al papa Francisco sino para ver a Jesús reflejado en su rostro y en el de miles de jóvenes, Algo que me causó un fuerte impacto fue el momento de la vigilia, eran cientos de miles de personas congregadas en Copacabana. Todo era ruido, música... Y de repente, casi instantáneo, cuando fue la hora de adorar al Santísimo, se hizo un silencio absoluto donde sólo se escuchaban las olas fue sin duda ¡Impresionante! Todos los jóvenes en silencio, cada uno en su momento profundo con Dios. “Vayan sin miedo, sin miedo, de servir” Debemos ser constructores de la iglesia y de la historia porque somos precisamente la apertura del futuro... Sin tener miedo de servir.
Naibeth Chirinos
No estábamos por casualidad sino porque Dios así lo quiso. Fuimos los protagonistas de la experiencia misionera, testigos de este gran acontecimiento que tenía como principal tema el encuentro en la oración en torno a la misma Iglesia en la figura máxima de la iglesia católica que es el Papa Francisco. Con sus palabras nos invita a ser constructores de la iglesia, nos dice “ustedes son el campo de la fe, son los atletas de Cristo. Jesús nos pide que seamos sus discípulos, que juguemos en su equipo”. El Papa nos ha hablado de los entrenamientos para seguir a Jesús, la oración, los sacramentos y el servicio a los demás, que no le tengamos miedo al servir y transmitamos esta experiencia a todos, que renovemos nuestra Iglesia. En mi experiencia personal he vivido un cambio, he fortalecido mi fe y el carisma de ser Consolación; el Señor me ha permitido vivir grandes momentos y me llama a hacer realidad todo lo que he vivido allí. Que seamos discípulos, no tengamos miedo. Digámosle al Señor “aquí estoy”, aquí está mi tiempo, aquí están mis horas. Mi vida la quiero invertir en ti, Señor. María de Gouveia
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Llegado el día de partida desde Venezuela hasta Río de Janeiro mi corazón palpitaba de mucha alegría al saber que compartiría la misma FE con muchos jóvenes de distintos países, con costumbres, tradiciones e idiomas distintos. La semana misionera en la población de Guapimirin fue una gran experiencia de vida compartida con los pobladores de esa región, siempre estaré agradecido con la familia que me acogió, me hicieron sentir como un miembro más de la familia. Las actividades fueron fuertes hasta el punto de estar agotados, pero el gozo era más grande cuando llegaba a casa a compartir lo vivido. Reforzó muchas cosas en mi vida, una de ellas es la oración en comunidad, no te hace sentir solo o que Dios solo te va a escuchar a ti, si no más bien que sientes la presencia del verdadero consolador de mundo Jesucristo mismo, el valor de la amistad lo he reforzado a partir de esa semana, como las personas sin conocerte de daban cosas sin esperar nada a cambio, desde una simple sonrisa hasta cosas materiales. El día de misionar casa por casa observé a Cristo vivo en cada rostro de las personas que abrían sus puertas y de recibir a
Jornada Mundial de la Juventud Río, 2013 los misioneros de otro país, ese día fue muy gratificante de ver como abrían las puertas de sus corazones al llamado que Dios nos hace día a día de seguirlo y ser su Discípulo y Misionero. Al llegar a Río nos recibió otra familia que de igual manera nos hicieron sentir como un miembro más de la familia. El primer encuentro que tuve con miles de jóvenes que comparten una misma Fe en Dios, sentí que mi corazón era muy pequeño para todo el AMOR que se reflejaba en ese momento. En la homilía de la vigilia el Santo Padre Francisco nos invitaba a ser los atletas de Cristo y de ganar ese gran trofeo de toda la vida, también nos decía que el Campo Fidei es nuestro corazón que debe acoger a Cristo y su palabra y de hacerla vida en cada momento de nuestras vidas, dando muchos frutos para poder ser verdaderos Discípulos y Misioneros, de contagiar a otros jóvenes que van por caminos equivocados. Dicho por el Santo Padre “Cuando preguntaron a la Madre Teresa qué era lo que debía cambiar en la Iglesia, respondió: Tú y yo. Queridos amigos, no se olviden: ustedes son el campo de la fe. Ustedes son los atletas de Cristo”. Nosotros mismos somos los
que primero debemos de cambiar para poder hacer el cambio que el mundo necesita. Día a Día invoco la presencia de Dios para que sea el quien actúe en mi vida y pueda realizar todas las cosas para el bien de los demás. Que Dios y la Virgen María nos acompañen en nuestro caminar y Bendigan nuestras acciones. AMEN. Torres Richar
************************** Para mí la Jornada Mundial de la Juventud ha sido el acontecimiento más importante de nuestra Iglesia en el que he participado. Ha sido fundamental para reforzar mucho más mi fe. Guardaré para siempre en mi memoria aquella multitud de jóvenes de diferentes nacionalidades con un único propósito: seguir a Jesucristo. En las calles de Río de Janeiro que pasamos durante la peregrinación, me emocioné bastante al ver tantos jóvenes rezando y cantando en distintos idiomas, en muchos momentos parecía un lenguaje universal que todos entendían y glorificaban a Jesucristo. Ver a nuestro Papa Francisco también fue una experiencia increíble y emocionante, me quedé sin palabras en el momento en que le vi pasar en el “papamóvil”. Sus homilías fueron muy ricas y sabias. La homilía del Papa que más me marcó fue una en que dijo que necesitaba jóvenes para rezar y llevar el evangelio a los diferentes lugares, y que la verdadera jornada comenzaba a partir del momento en que aquel acontecimiento terminaba, pues, después de la JMJ era el momento de anunciar y evangelizar. Me quedé impresionado también con la fuerza de nuestra Iglesia, al ver tantas personas reunidas y contentas de ser católicas. Me siento privilegiado por haber participado en a la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro, creo que todos los jóvenes que fueron y vivieron el verdadero objetivo del acontecimiento volvieron a sus casas con una fe mucho más madura. Y a partir de ahora nos prepararemos para ir a Polonia en 2016. Wilson Moreira Bezerra
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EXPERIENCIA SEMANA MISIONERA, PARROQUIA NOSSA SENHORA DA AJUDA, GUAPIMIRIM Al llegar a la parroquia Nossa Senhora da Ajuda en Guapimirim - Río de Janeiro, inmediatamente nos hicieron sentir bienvenidos. Me sorprendió la disposición y alegría de las familias acogedoras al recibir a los peregrinos. Todos desbordábamos una alegría especial característica de los católicos que sólo se siente al estar cerca de Dios. En la Semana Misionera se llevaron a cabo diversas actividades tanto religiosas como recreacionales. Las misas que se celebraron me llenaron de mucha fe y alegría ya que aunque eran casi todas en portugués, me hizo ver que Dios siem-
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pre nos une superando las barreras del idioma. En los diversos paseos culturales, pude observar y admirar, en la naturaleza, la belleza de la creación del Señor y cómo Él está en todas las cosas aunque no siempre nos demos cuenta. Participamos en un par de fiestas tradicionales brasileras. También fuimos a misionar en distintas zonas del pueblo. Muchos nos abrían las puertas de sus casas y nos recibían con alegría para compartir la palabra del Señor. Pienso que lo mejor de esta semana, fue ver cómo Dios mismo nos habla a través de la experiencia de los demás, de su testimonio y de su fe que no es tan distinta a la mía. Sara Sierra
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Vida de grupos
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Otro lugar, un mismo corazón... Bajo el lema de “Otro lugar, un mismo corazón” nos reunimos en la aldea del Rocío (Huelva) alrededor de cinco mil personas para celebrar juntos la JPJ. Los Obispos andaluces, conscientes de las dificultades que entrañaba el viaje hasta Brasil, han querido facilitar un punto de encuentro para todos los jóvenes andaluces, coincidiendo con la JMJ, reunirse para compartir, aunque sea en la distancia, la experiencia de todos los jóvenes del mundo que peregrinaron en esos días a Río de Janeiro.
El encuentro ha tenido lugar del 25 al 28 de Julio en el marco incomparable de la Aldea del Rocío. El mismo, estuvo destinado a jóvenes de todas las diócesis andaluzas. Allí hemos vivido una experiencia de oración y de comunión con jóvenes de toda Andalucía y con los jóvenes de todo el mundo que, durante esos días, y no sólo en Río de Janeiro, se han reunido para dar respuesta a la llamada que el Santo Padre Francisco hacia a todos los jóvenes del mundo. También la Consolación ha estado presente allí y un grupo de cuatro hermanas, dos novicias y dos jóvenes del movimiento de Úbeda y Lahiguera hemos tenido la gran suerte de vivir y compartir la experiencia de la JPJ. Comenzamos la JPJ peregrinando desde Almonte a la aldea del Rocío donde los jóvenes de Huelva con mucho entusiasmo y alegría fueron acogiendo a los grupos de otras diócesis. Las actividades eran las mismas que en la JMJ pero con un aire muy andaluz haciéndola distinta y muy especial a la vez: celebración de la Eucaristía, catequesis con los Obispos, talleres, Vigilia mariana, feria de pastoral juvenil, feria de los carismas y la gran Vigilia del sábado donde pudimos comprobar a través de distintos testimonios el gran compromiso que los jóvenes cristianos tienen en su vida de cada día; fue una noche muy especial. Desde aquí agradecemos a la diócesis de Huelva su acogida y el gran regalo de pertenecer a la Iglesia universal donde debemos ser testigos vivos de un Dios que se hace presente en nuestra historia. Nos encontramos en Polonia!!!
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Equipo del Rocío 2013
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Conmigo lo hicisteis...
Creo en Ti ...
Desde 11 lugares diferentes nos reunimos el 30 de junio en el colegio Nuestra Señora de la Consolación de Madrid para colaborar en tareas solidarias en un barrio marginal de Madrid. Desde el primer día todos formamos comunidad.
Desde el Movimiento Consolación para el Mundo se organizaron, el pasado mes de julio en “Las Rositas” (Roquetes - Tarragona) ejercicios espirituales a los que tuve la suerte de asistir junto con otras participantes procedentes de Castelló, Valencia, Madrid, Villacañas, Caspe, Villareal y Reus. Dirigidos por la Hermana Ana Edo fueron una auténtica comunión de grupo.
Para atender el campamento de niños nos dividimos en dos grupos: unos trabajamos con el Secretariado Gitano y otros con Cáritas. Cada mañana, orábamos juntos y nos preparábamos para vivir a lo largo del día experiencias únicas, que luego podíamos compartir entre nosotros y liberarnos. Los chicos del campamento tenían desde 6 hasta 16 años. ¿Cómo eran? muy amigos de sus amigos, les gustaba jugar hasta el extremo. Son de diferentes culturas: gitanos, marroquíes, rumanos… Viven en una zona muy marginal de la Cañada Real y en unas condiciones infrahumanas. Son muy participativos. Les gusta aprender, compartir, reír ... ¡Son niños! El primer día no podíamos decir nada bueno ni bonito. Nos pareció estar en una jaula con leones. Estábamos impactados por la manera que tenían de relacionarse. Tenían mucha energía y su forma de expresarlo era con la agresividad, sin responder a normas. Tenían como una coraza que con nuestra paciencia, fuimos rompiendo hasta llegar al último día que nos sorprendieron con una despedida emotiva en la que algunos monitores no pudieron retener algunas lágrimas. Para terminar, quiero recordar las “buenas noches”. Decidimos compartir y todos nos lanzamos a expresar la huella que Dios estaba dejando en nosotros. Pudimos expresar miedos, ilusiones, desilusiones, injusticias, impotencias, ánimos, desánimos... Todos terminamos sintiéndonos identificados de alguna manera con el otro, y no hay mejor terapia que poder sacar lo que llevas dentro, sentirte que estás en casa, que estás con la familia Consolación y evaluar el día para finalizarlo con una sonrisa. Pamela Salvador Fajardo
En grupo compartimos las eucaristías, los momentos de oración conjunta y las sesiones de motivación y de taller de oración y, al final del día la puesta en común. A nivel personal destaco la puesta en común. Era el espacio en el que, con el corazón en la mano, cada una de nosotras mostraba o bien con palabras, o en silencio, incluso con música el resumen del día. Sabía que la experiencia cristiana se basa en la fe y en la comunicación de la vida divina, dos elementos que son dones de Dios, por tanto son iniciativa de Dios y, la persona da o no respuesta si está dispuesta a ver con los ojos de la fe. Y han sido los EE los que me han permitido abrir los ojos de la fe, los espacios sagrados; en última instancia: mi corazón. En este punto, quiero citar a uno de mis dos leit motiv para estos Ejercicios. Es el 1Sm 16, 7: “Lo que vale no es aquello que el hombre ve: el hombre ve la apariencia, el Señor ve el fondo del corazón”.
Consciente de la necesidad de una transformación interior para hacer experiencia de Dios, los ejercicios me ayudaron a tomar conciencia de dónde estaba y desde dónde partía para emprender el viaje de encontrarme a solas con Dios. Así, dispuesta a entablar un diálogo con Quien ha llamado a mi puerta, me entregué y puse mi confianza en el Señor. Con actitud contemplativa, con calma, con lentitud, intentaba, e intento, saber qué me quiere decir Dios a través de la experiencia que he vivido. Acabo dando gracias por el regalo que ha significado poder participar de los Ejercicios Espirituales en “Las Rositas”. Y, gracias por poder compartir espacios, silencios y oración con Elena, Reme, Marga, Susana, Cristina, María, Raquel, Ana, la Hermana Ana y con “los cocineros” que tan bien nos cuidaron. Montse Trias
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De Roma 2000 a Río 2013 Participar de la Jornada Mundial de la Juventud, ha supuesto en definitiva renovar mi fe. He participado en dos jornadas. La primera fue en Roma el 2000, con los jóvenes del COM. Y la segunda fue esta última en Río de Janeiro. Al final de esta última, una persona me preguntó si conseguí revivir lo que había vivido en Roma. Le dije que revivir es imposible, pues las épocas son diferentes, los sentimientos son diferentes, y acabé por concluir, después, yo sola que es porque estoy diferente. En Roma yo tenía 16 años, ahora tengo 29 años. Muchas cosas cambiaron en mí. La experiencia del Amor de Dios es diferente. Intentaré hacer una comparación. A los 16 años lo que más me marcó fue la grandiosidad de la Iglesia, la alegría de todos y principalmente la unidad de la Iglesia Católica. No entendía mucho, pero estaba impresionada con todo y con todos. Sentía una alegría inexplicable. Todo era fiesta y novedad.
Familia Consolación A la vuelta sucedieron muchas cosas. Quizá por no entender, acabé por perderme en mis actitudes y comencé a deslumbrarme con el mundo, me decepcioné con la Iglesia. Fui alejándome de Dios. Intenté mantenerlo lo más distante posible. No participaba de las misas. Pero siempre faltaba algo. Un día comencé a preguntarme porque me sentía tan vacía, comencé a conversar con Dios y a escribir una carta. Hablé de mi vida, de mi familia y de una persona que me pudiese ayudar a acercarme más a Él. Fueron pasando los días y cada vez que pasaba por delante de la Iglesia, sentía algo extraño. Sentía unas ganas enormes de estar con Dios. De sentir nuevamente la alegría que no sentía hacía mucho tiempo. Le conté a un compañero de trabajo como me sentía entonces él me dijo que no me resistiera y volviera. Al domingo siguiente fui a misa. Al final el coro cantó una canción que decía así: “¡Ríndete! Aún hay tiempo de volver. ¡Ríndete! Vida Nueva recibirás. ¡Ríndete! Abandónate sin reservas…”. Derramé muchas lágrimas, sentí la misericordia de Dios sobre mí. Cuando salí de la Iglesia me invitaron para cantar en el coro. Sentí miedo de comprometerme y dije que solo iría a los ensayos para ayudarme a tener un mayor diálogo con Dios. La alegría de estar nuevamente con Dios fue tomando fuerza. También conocí a la persona que le había pedido a Dios. Llegar a Río de Janeiro costó mucho y fue muy cansado. Muchas horas de viaje, muchos kilómetros andando para llegar a las catequesis diarias y no teníamos espacio en la arena de la playa de Copacabana. Como pude busqué un espacio en la arena para prestar atención a las palabras del Papa Francisco. El comenzó diciendo que Dios quería hablar conmigo individualmente y habló de edificar la Iglesia. Sentí que él me decía que yo era responsable de la construcción de la Iglesia y de su permanencia y crecimiento. Nos animó a no acobardarnos ante las dificultades, a buscar fuerza en los sacramentos, la oración y ayudar al prójimo, a no ser un cristiano de fachada y a abrazar la causa de Cristo y de su Iglesia. En la Misa del envío, al escuchar los cantos de la Eucaristía, los mismos que cantamos en mi parroquia, parecía que Dios reforzaba el deseo de él, de hacer una Iglesia mejor a través de mí. Pedí perdón y me sentí perdonada. Canté el Gloria con lágrimas y durante toda la celebración me emocioné mucho. Me sentí enviada por el Papa Francisco a evangelizar y a contar a todos mi historia de fe, de caídas y de cómo él me levantó. ¡Quiero una Iglesia Santa!
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Manuela Bueno
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VIENTO EN POPA A TODA VELA… El pasado 8 de julio un grupo de niños y niñas del MIC de Burriana y Onda con sus monitores iniciamos unos días de campamento en Biar (Alicante) con el lema: “NAVEGA HACIA LA ALEGRÍA”
do a valorar más las pequeñas cosas que el Señor nos ofrece cada día. María y Jazmina
Con nosotros estuvo siempre alguien muy especial para todos: JESÚS, él fue nuestro capitán durante este largo recorrido y junto a Él vivimos miles de experiencias y aventuras inolvidables. Los niños se lo pasaron en grande con cada una de las actividades preparadas por los monitores tales como: Gymkanas, veladas, juegos deportivos, día del agua, caminatas, rastreos, oraciones, multiaventura… Tanto a los niños como a los monitores esta experiencia nos ha servido para crecer como personas hemos aprendido de unos a otros, y tambien hemos aprendi-
Cursillo de Monitor de Tiempo Libre Castellón 2013 Hacía ya mucho tiempo que los monitores del Movimiento estabamos reclamando a gritos que se nos diera la oportunidad de poder acceder a una formación de calidad para poder dar lo máximo con nuestros niños y nuestros jóvenes, pues bien, cuando llegó a mis oídos que las Hermanas nos ofrecían la oportunidad de asistir a un curso de monitor de tiempo libre en el que además se le iba a prestar especial atención al Carisma de la Consolación, no me lo pensé dos veces, acepté de inmediato. A parte de dedicarle el tiempo que nos fue posible a conocer y profundizar más en el Carisma, en el cursillo pudimos aprender muchas cosas que seguro que nos servirán de mucho en un futuro. Cosas como por ejemplo: la educación en el tiempo libre, el rol del monitor; planificación, programación y evaluación de actividades, legislación, dinámicas de grupo, primeros auxilios, trabajo en equipo... son cosas que la mayoría de nosotros ya habíamos adquirido sin saberlo gracias a la experiencia pero que estuvo genial que se nos presentaran desde un punto de vista más teórico. En lo que se refiere a lo personal me gustaría compartir con toda la familia de la Consolación que ya
tenía ganas de volver a meterme de lleno en la vida dentro del movimiento, hacía un tiempo que estaba apartado. Quiero gradecer a la gente del cole de Castellón por permitirme hacer las prácticas en el MIC de Castellón ya que tenía ganas de sentirme otra vez monitor, echaba mucho de menos realizar la labor de entretener educando que había realizado durante años, espero que sea un gran año y poder dar lo mejor de mi mismo con los niños del MIC. Y no quiero acabar este apartado de agradecimientos sin hacer una mención especial a las Hermanas por dejarnos su casa y acogernos como siempre hacen, con todo su cariño y su amor; cuando antes de salir de casa mi madre me preguntó: -¿Estarás bien? Yo le respondí lo que le respondo siempre: -Tranquila mamá, me voy con mis monjas... También me gustaría agradecer por toda su dedicación de manera especial a todos los formadores que tan bien han desarrollado su cometido y por supuesto a todos los compañeros de cursillo, quiero que sepáis que nunca os voy a olvidar, a nadie, y que formáis parte de mi vida y mi corazón para siempre. Un abrazo y ojalá nos veamos pronto. Toni
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Noticias
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Orar con... - Carmen Aloys
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UN CAMINO POR DELANTE Sitúate en el lugar y postura adecuados.
Sereno, tranquilo, relajado… concéntrate, toma conciencia de ti mismo. Vas a orar a tu Dios y a estar con Él. Siéntele presente en el aire que respiras, en la brisa que acaricia tu rostro, en los ruidos que te rodean. Después de un largo rato de silencio y de disfrutar las maravillas que hace Dios en ti y en cuanto te rodea, prepárate para hacer una lectura espiritual profunda y eficaz. Busca en el evangelio de Mateo el Sermón de la Montaña, Capítulo 5, 13-48. Con mucha paz y calma, mirando a tu interior, vas leyendo despacio…sin mucho elucubrar, detente donde la Palabra te dice algo, déjate inundar de esa Palabra…deja que cale, que entre en tu vida y que te interrogue. ¿Qué sentimientos experimentas? ¿Paz? ¿Responsabilidad? ¿Sorpresa? ¿Temor?
Abre nuevamente tu biblia, en Mt. 5,1-12, no te canses. Es Dios que ilumina y urge tu corazón: y compara lo que Él dice con la lista que has hecho, ¿Se parecen en algo? ¿Comprendes un poco más ahora lo que has leído? Quizás te preguntes ¿qué tienen que ver la pobreza, las lágrimas, la persecución, con la felicidad a la que aspiras? Según el texto de Mateo, Jesús anuncia la felicidad a quien está abierto a recibir el Reino y a extenderlo: y ellos son los pobres en espíritu, los sencillos, los afligidos, los humildes, los que luchan por la paz. Dice Jesús que los que asumen actitudes netamente cristianas también están dentro de ese reino de felicidad: los misericordiosos, aquellos que tienen un corazón propicio y amigo, para todos sus semejantes;
Quédate con aquel contenido o frase que te haya impactado. Repítelo en tu interior largo rato. Es la Palabra de Jesús para ti, hoy.
los limpios de corazón, los que no tienen intenciones retorcidas y miran de frente y a los ojos de sus hermanos, porque no tienen nada contra nadie;
El sermón del Monte lo inicia Jesús, proclamando un estilo de vida que conduce a la felicidad: “Dichosos (felices) los pobres en el espíritu…Dichosos (felices) los afligidos…dichosos (felices) los que son perseguidos.., dichosos (felices)….los humildes… Antes de seguir adelante: Haz una lista de situaciones en las que tú sueles felicitar a la gente, a tus amigos. Enumera tres valores que para ti son importantes.
los que luchan por construir la paz a su alrededor y renuncian a tener siempre la razón porque sólo les interesa que el otro se exprese y que se construya una relación de hermanos. Revisa nuevamente las Bienaventuranzas, escoge una. Haz tu oración con ella y piensa cómo asumirla en tus actitudes de vida, verás cómo te proporciona una sensación de paz y felicidad, de bienestar interior y de compromiso con los demás.
SALMO DEL SEGUIMIENTO Iré detrás de ti, si tú vienes a mí, buscando horizontes más amplios para volar. Iré a enseñar a todos que tú eres libertad, que sólo en ti se encuentra el manantial, la felicidad, la verdadera paz. Iré siempre en tu nombre, despojado de mis cosas… Iré a decirles a todos que tú eres alegría, la eterna oferta de un amor total.
Iré a buscar caminos detrás de cada lucha, donde los hombres sufren llanto y soledad.
Iré si tú me llamas a ser siempre tu amigo, sin importarme nada, iré diciendo a todos, iré contando siempre, gritando a cada paso que tú eres la luz, el camino y la verdad. Anónimo
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EL LADO BUENO DE LAS COSAS Director: David O. Russell Reparto: Jennifer Lawrence, Bradley Cooper, Robert De Niro, Jacki Weaver.
“EL LADO BUENO DE LAS COSAS” Para comenzar se puede hacer un ejercicio evaluando hacia qué lado nos decantamos más en nuestra vida. En un papel en blanco, por un lado escribe el lado bueno y por el otro el lado negativo. Piensa en situaciones concretas (de trabajo, clase, amigos, familia…) y escribe los aspectos positivos y negativos. Al finalizar valora cuál de los dos aspectos ha tenido más peso en tus reacciones y acciones.
EL MUNDO DE LA ENFERMEDAD La película nos muestra el día a día de una persona que ha sido diagnosticada bipolar y cómo lucha para salir y normalizar su vida. Nos abre al mundo de la enfermedad mental y en general a los enfermos. ¿Cómo es nuestra sensibilidad hacia ellos? ¿Cómo nos situamos cuando lo vivimos en nuestro entorno más cercano? ¿Hay cerca de nosotros algún campo de voluntariado donde se necesite consolar? ¿Te atreves a mirar más allá de ti para salir a llevar esa consolación?
Sinopsis: Tras pasar ocho meses en una institución mental por agredir al amante de su mujer, Pat (Bradley Cooper) vuelve con lo puesto a vivir en casa de sus padres (Robert De Niro y Jacki Weaver). Determinado a tener una actitud positiva y recuperar a su ex-mujer, el mundo de Pat se pone del revés cuando conoce a Tiffany (Jennifer Lawrence), una chica con ciertos problemas y no muy buena fama en el barrio. A pesar de su mutua desconfianza inicial, entre ellos pronto se desarrollará un vínculo muy especial que les ayudará a encontrar en sus vidas el lado bueno de las cosas.
A NIVEL PERSONAL También podemos encontrar en nosotros algún desajuste que hay que abrazar y amar. Pat vuelve a ver la maravilla de los domingos por la tarde cuando Tiffany le cura de su obsesión con su aceptación y amor. Puede ayudarte a mirar hacia dentro el poema de Silvio Rodríguez “Lo que debes amar”: Debes amar la arcilla que va en tus manos. Debes amar tu arena hasta la locura. Y si no, no la emprendas que será en vano. Sólo el amor alumbra lo que perdura. Sólo el amor convierte en milagro el barro. Debes amar el tiempo de los intentos. Debes amar la hora que nunca brilla. Y si no, no pretendas tocar los yertos. Sólo el amor engendra la maravilla, sólo el amor consigue encender lo muerto.
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