“DOCUMENTO LO QUE VIVIMOS CON EL ETERNO DESEO DE COMPARTIR Y CONECTAR”

¿Qué crees que es lo mejor que estás haciendo por tus hijas?

Dándole las herramientas para que puedan ser sanas, por dentro y por fuera.

¿Qué es para ti lo más difícil de ser madre?

Lo más difícil es que no se apaga, no hay una pausa de “ya no tengo que preocuparme que estén bien.”

Es intenso y no se apaga jamás.

A tu entender, ¿ Cuál es el ingrediente secreto para ser una madre moderna?

Saber que los tiempos cambiaron y lo que era escandaloso antes ya no lo es. Saber que la ética y la moral no se relajan, pero se transmiten de forma diferente.

Eres psicóloga de profesión, ¿Cómo aplicas estos conocimientos desde tu posición como madre?

La mayor bendición que le agradezco a Dios es esa, tener a mi disposición un repertorio de recursos que me hacen el reto menos difícil.

¿Cómo eres en el plano personal?

Tal cual en el público: honesta, divertida y sin poses.

La vida es muy corta para estar estresados por lo que piensa el otro.

¿Cómo defines tu familia?

Mi mayor logro, mi mayor orgullo, mi mayor bendición. Lo más grande que tengo, lo único que es no-negociable ante absolutamente todo.

¿Cómo recuerdas ese momento que conociste a tu esposo Ray Fernández?

Cuenta la leyenda que para él fue amor a primera vista, yo estaba gozando bailando y no me recuerdo muy bien, pero si, me gustó.

¿Cómo definirías tu esposo?

Perseverante, intenso, honrado, serio, detallista, sensible, romántico y noble.

¿Cómo te sientes de ser un referente para otras mujeres?

Leo esto y me cuestiono si es verdad; no soy buena entendiendo eso, pero lo asumo como una responsabilidad de vivir a la altura de esa expectativa.

Hablemos un poco de tu rutina diaria. ¿Cuál dirías que es el top 3 de las cosas que más ocupan tu tiempo?

Leer, aprender, investigar, todo esto después de ser la coordinadora de logística de mis hijas.

¿Cómo cumples con tus roles de esposa, madre e influencer?

Los turno por horas para hacerlo bien, no los hago todos a la misma vez.

¿Qué te inspiró a crear La Peccata Minuta?

Quería ofrecerle a las mujeres información que les facilite sus vidas, esas estrategias que yo hago por naturaleza y por las enseñanzas de mi mamá no las tienen todas las mujeres. Fue una dicha crecer así y me gusta poder darle de eso a quienes no lo tuvieron.

¿Por qué el nombre de La Peccata Minuta?

¿Cuál es tu prenda favorita ahora mismo?

Mi eterno afán de cuestionar el status quo. Dicen que “Peccata minuta” es aquello que no es importante, por tan pequeño es insignificante. Yo propongo que los detalles SI marcan la diferencia.

¿Cuál es tu primer recuerdo asociado con la moda?

Mi mamá usaba labial rojo para ir al gimnasio, creo que eso lo resume todo. Ella siempre anda bella y lo disfruta, por pura ósmosis me lo traspasó. Mi papá me regaló saber ser original, no buscar andar como el resto. El me compraba Vogue con 8 años, cuando él iba a Geyda a buscar su GQ. Ambos andaban siempre con un estilo muy único y eso me traspasaron.

Mis anillos de matrimonio, les hice un cambio luego de 18 años y me tienen obsesionada.

¿A qué le temes?

A faltarle a mis hijas. Pero honestamente, Dios me da La Paz de saber que todo, absolutamente todo, siempre va a estar bien.

¿Trucos de bellezas que prácticas a diario?

No salgo sin tapa ojeras, el mundo es más lindo cuando te untas tapa-ojeras.

¿Qué tipo de gastronomía prefieres?

Italiana o Mexicana, soy fija en Angiolino y pudiera ir diario sin cansarme.

MAYOR

¿Disfrutas viajar?

Amo viajar, siento que soy mejor persona cuando aprendo sobre otras culturas.

¿Un lugar que siempre quisieras volver?

Madrid, por siempre, Madrid.

¿Playa o montaña?

Playa mil veces.

¿Cuáles son tus hobbies?

Leer y aprender.

¿Practicas algún deporte?

Realmente no, pero este verano quiero jugar tenis para compartir con mi hija mayor antes de que se vaya a vivir fuera.

¿Qué tipo de música prefieres?

Mi repertorio va desde Luis Miguel hasta Nicky Jam, pero con un tenue feliz.

¿Cómo definirías este momento de tu vida?

Estoy honestamente en el momento más feliz, todo está en su lugar y eso me da una paz intensa que me permite crear.

Al final de los días, ¿cómo quisiera ser recordada?

Como una buena persona que ayudó a los demás, sacarle partido a los dones que Dios me dio para hacer el bien y servirle a El de instrumento.