Introducción Los parásitos son seres vivos que viven de otros seres vivos, como del cuerpo humano, para alimentarse y tener un lugar donde vivir. Se pueden contraer por medio de los alimentos o el agua contaminada, la picadura de un insecto o por contacto sexual. Algunas enfermedades parasitarias son más fáciles de tratar que otras. Los parásitos varían en tamaño desde muy pequeños, organismos unicelulares llamados protozoarios, hasta gusanos, que pueden observarse a simple vista. En los Estados Unidos existen algunas enfermedades parasitarias. El suministro de agua contaminada puede causar infecciones por Guardias. Los gatos pueden transmitir toxoplasmosis, peligrosa para las mujeres embarazadas. Otras, como la malaria, son comunes en otras partes del mundo. Si va a viajar, es importante que beba solamente agua que usted sepa que es potable. La prevención es especialmente importante. No hay vacunas para las enfermedades parasitarias. Existen algunos medicamentos disponibles para el tratamiento de estas infecciones.
Causas
Tomar agua sin hervir, clorar o que no sea potable. Comer alimentos sin desinfectarlos adecuadamente, o verduras o frutas con cáscara, sin lavar. Comer carne a media coser o no fresca. Comer fuera del hogar donde no se conserva la higiene. Tener animales cerca de los alimentos. No lavarse bien las manos después de ir al baño y antes de preparar e ingerir alimentos. No lavar las manos de los niños después de jugar en la tierra, en el suelo o con algún animal.
Síntomas Los parásitos intestinales, alojados dentro del cuerpo humano, ocasionan: Palidez general y anemia, dolores de cabeza y de vientre, cólicos, tos intensa, adelgazamiento, cansancio, fiebre moderada, diarrea, falta de apetito, convulsiones, vómitos, carácter violento o irritable.
Principales parásitos intestinales Giardia Lamblia: ataca cuando se depositan en el suelo las materias fecales que contienen huevecillos del parásito. Contamina el agua, las frutas o los alimentos ingeridos. Puede llevarse a la boca por manos sucias o moscas que contaminan los alimentos donde se ubican.