DIVULGADORA DE LA DOCTRINA ESPIRITA. 2021 ARTÍCULO S
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MERCHITA 2021
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PALABRAS A LAS MADRES PRIMERO
SEGUNDO
TERCERO 1 NUMERO
Si el Señor te concedió hijos al corazón de mujer, por más difícil que se te haga el camino terrestre, no arrojes a los pequeños al vendaval de la adversidad. * Es posible que el compañero haya desertado de las obligaciones que el mismo aceptó, bandeándose para la fuga bajo la compulsión de errores, de los cuales un día se desprenderá. No le condenes, sin embargo, la actitud. Bendícelo y, cuanto sea posible, ampara a los hijos inexpertos que quedaron a la espera en los cansados brazos. ¿Quién podrá en el mundo, calcular la extensión de las fuerzas negativas que asedian, muchas veces, a la criatura sumergida en el cuerpo físico, induciéndola a transitorio olvido de los encargos que abrazo? ¿Quién conseguirá, en la Tierra, medir la resistencia espiritual de la persona empeñada al rescate complejo de múltiples compromisos remaneciéndole de existencias pasadas? * Si fuiste sentenciada a la indiferencia y, en muchas ocasiones, hasta aun mismo a extremada penuria, al lado de niños que te solicitan protección y cariño, permanece con ellos y, esposando el trabajo por escudo de seguridad y tranquilidad, conserva la certeza de que el Señor te proveerá con todos los recursos indispensables para la precisa sustentación. *
Es natural que preserves la propia independencia y que no transformes la maternidad en un cautiverio en el cual te desequilibres o desequilibres a los seres amados, a través del apego enfermizo. Más cuando los hijos aun niños te pidan apoyo y ternura, a fin de garantizar en la propia formación de la cual consigan partir en demanda al mar alto de la experiencia, dispensándote la cobertura inmediata, auxílialos, como pudieras, aun mismo al precio de sacrificio, con el fin de que marchen, dentro de la seguridad necesaria, para las tareas que están destinados. * ¡Sus hijos son pequeños!... Recuerda que las leyes de la vida aguardan del hombre la ejecución de los deberes paternales que haya asumido ante ti; entretanto, si eres madre, no olvides que la Providencia Divina, con relación al hombre, en lo que se reporta a conocimiento y convivencia, determinó que los hijos pequeños te fuesen confiados nueve meses antes.
PADRES DE FAMILIA En la Tierra, habitualmente, esperamos encontrar, en nuestros hijos, genios de grandeza moral. De igual modo, cuando estamos en la condición de hijos, deseamos poseer en los padres modelos impecables de virtud. Más largamente internados en la escuela física vamos reconociendo, poco a poco, sea cual sea la posición que nos cabe en el mundo, que somos lo que somos, criaturas aun incompletas a camino de la perfección, unidas transitoriamente unas a las otras, entre las paredes del hogar o en los compromisos domésticos para fines de rescate o mejoramiento. Reflexiona en eso. y si la vida te entregó padres o madres difíciles, que no pudieron o no te pueden presentar, por ahora, día a día, inalterablemente una certificación de inocencia, no dejes de amarlos y respetarlos a un mismo así. *
Hay quien dice que no pidió a los genitores para nacer, entretanto, esa misma criatura en rebeldía tal vez sea aquella que, antes de la cuna, se les erigía en obsesor afectivo, para rogarles repetidamente una nueva existencia en la Tierra, hasta que cedan a sus deseos, integrándose uno con el otro, para que ese hijo o hija, hoy enojados, volviendo al plano físico logren nuevas adquisiciones de progreso. * Si sufres conflictos y oyes a alguien quejarse por los traumas nacidos de la aversión, desprecio, envidia, por la vinculación afectiva o súper protección por parte de los padres difíciles que tal vez tuviste o que probablemente aun ahora te acompañan, recuerda que semejantes estudios podrán expresar la verdad del punto de vista terrestre, más no te olvides de que las leyes de la reencarnación están funcionando. Y que en la posición de padres o hijos somos seres en perfeccionamiento, demandando la inmortalidad, y que únicamente a costa de comprensión y respeto reciproco lograremos sanar los propios desequilibrios y desajustes. *
Ante padres o madres complejos, auxílialos, sin jamás provocarlos. Ellos te piden entendimiento y apoyo, a fin de acertar con los propios rumbos, tanto como recibiste de ellos apoyo y entendimiento para alcanzar la escuela humana. Todos nosotros, espíritus en evolución en la Tierra, por cuanto, nos hallamos aún muy lejos de las cualidades angélicas. Y todos nosotros, sin excepción, precisamente de amor y de amparo del amor para vivir, convivir y sobrevivir. EMMANUEL/CHICO XAVIER
JÓVENES DIFÍCILES Tendrás contigo jóvenes convenientemente en la vida.
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Incuestionablemente, es preciso apoyarlos cuanto nos sea posible. Capacitémonos, sin embargo, de que ampararlos no será trazarles la obligación de copiarnos los tipos de felicidad o convivencia. Claro que no nos compete el derecho de abandonarlos a si mismos cuando aún son inexpertos. Entretanto, eso no significa debamos destruirles la vocación, robándoles la autenticidad en que se les caracteriza la existencia.
Soñaremos para nuestros hijos, en el mundo, envidiable destaque en las profesiones liberales, con primorosos títulos académicos, más es probable hayan renacido con nosotros para los servicios de la gleba, aspirando a adquirir duros callos en las manos, a fin de realizarse en la elevación que demandan. Otras veces ideamos para ellos la formación del hogar en que nos premien el ansia de poseer respetables descendientes. No en tanto, es posible estén con nosotros para largas experiencias en condiciones de celibato, cargando problemas y pruebas que les dicen al respecto al mejoramiento espiritual. Algunas veces gritamos contra ellos, exigiendo nos adopten el modo de ser. Frecuentemente, sin embargo, si eso acontece, acabamos por perderlos en manos que deslustran los sentimientos con les estragan la vida, cuando no los empurramos, inconscientemente, para la cueva de los tóxicos o para los despeñaderos del desequilibrio mental con lo que se matriculan en los manicomios.
Compadécete de los hijos que parezcan diferentes a ti. Acéptalos como son y auxílialos a cada uno de ellos en la integración con el trabajo en que se hagan dignos de la vida que vinieron a vivir. Ampáralos sin imposiciones y sin violencia. Antes de surgirte al frente como hijos de tu amor, son hijos de Dios, cuyo amor Aun mismo cuando evidencien características inquietantes, bendícelos y oriéntalos, cuanto te sea posible, a fin de que se mantengan por destellos vivos de rendimiento del bien en el bien común. Y aunque no te puedan compartir del techo y se aparte de tu compañía, a pretexto de independencia, bendícelos aún mismo así, comprendiendo que todos nosotros, desde que nos vinculamos al orden y al trabajo en el deber que nos compete, sin perjudicar a nadie, disfrutamos por ley divina el privilegio de descubrir cual es para nosotros el mejor camino de actuar y servir, vivir y sobrevivir. EMMANUEL/CHICO XAVIER
¿Escribir dignamente: será eso tan solo elevar a quien se exterioriza, a través de las letras, las alturas literarias, fijando imágenes con palabras preciosas? Ciertamente todos los escritores, aun mismo aquellos que se caracterizan por el sentido absolutamente hermético, son acreedores de respeto. Lícito, sin embargo, es considerar la importancia, por encima de todo de; escribir edificando. Entendemos que la idea gratificante materializada se destina de preferencia a los salones nobles, entre los cuales transita, suscitando creaciones educativa que honorifican a la Humanidad. Eso, sin embargo, no le suprime la función en otros sectores, con mucha más extensión de fuerza, donde atiende a objetivos diferentes. Observemos, de relance, los campos de experiencia en que se agitan millones de seres, aguardando pensamiento que se les ajuste a las necesidades. No encontramos ahí los temas de simposio o los asuntos altamente específicos, aunque siempre digno e indispensable.
En esas líneas de pruebas y luchas edificantes identificamos el hambre de ideas renovadoras que derraman consuelo y esperanza, orientación y fe, arrebatando corazones de las tinieblas de la inmoderación y de la rebeldía. Letras que traduzcan apoyo y socorro a los accidentados de orden moral, a fin de que se rehagan, ancora a los que se arrastran en la aflicción, remedio a los enfermos de espíritu, salvavidas a los náufragos de la Tierra, que se debaten en el pesado mar del desequilibrio, para que se afirmen en la playa de la seguridad. Escribir, si, más saber lo que escribimos, como escribimos, para que y a quien escribimos. Porque el sentimiento genera la idea, la idea plasma el verbo, el verbo establece la acción y la acción crea el destino. A la vista de eso, es preciso recordar que de todo cuanto escribimos en los cuadros de hoy, la vida nos traerá el reflejo claramente exacto en las telas del mañana.