DIVULGADORA DE LA DOCTRINA ESPIRITA. 2021 ARTÍCULO S
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VOZ DEL CORAZÓN El Dr. Paul Persal, neuro psicólogo de la Universidad de Hawái (EE. UU.), En su maravilloso libro Memory of Cells, después de presentar y debatir la conocida voz del corazón, defiende su tesis, abordando con detenimiento el mecanismo de las células, su funcionamiento, su memoria y otras peculiaridades. En determinado momento, en el trabajo citado, enfatiza: ¿Sabías que el corazón piensa, recuerda, se comunica con otros corazones, ayuda a regular el sistema inmunológico, almacena información que pulsa ...?, Confirmando que también participa en nuestras decisiones. y que debemos prestar atención a su comunicación. Cuando Allan Kardec escribió El libro de los espíritus, en la pregunta número 459, preguntó: ¿Los espíritus influyen en nuestros pensamientos y acciones? Ellos respondieron: Mucho más de lo que imagináis, ya que muchas veces son ellos quienes os dirigen.
En nuestra lucha diaria, muchas veces tratamos de actuar según los dictámenes de la razón, en consonancia con la filosofía de la iluminación, incluso tocando, sintiendo, y cuando estamos decididos y avanzamos, la voz del corazón nos hace cambiar totalmente, resultando en bendición el emprendimiento que, si hubiera seguido otro camino, hubiera sido un desastre. La creencia en la inmortalidad del alma nos lleva al concepto de que siempre estamos acompañados de quienes nos amaron u nos odiaron, mientras estaban en la existencia carnal. Al responder con confianza a Allan Kardec la pregunta formulada, los guías de la Humanidad nos instan a vivir de acuerdo con los padrones dignificantes del deber, los postulados éticos establecidos, las reglas de la conducta sana. Al hacerlo, generamos una vibración de identidad con los Espíritus nobles que se acercan a nosotros y nos inspiran a comportarnos de la manera más correcta en cada momento de nuestra existencia.
Cuando eso no sucede, y nos encontramos con una mente adicta, dominada por hábitos enfermos y perversos, nos convertimos en instrumentos de Espíritus equivalentes, ya que los atraemos por afinidad vibratoria. La voz del corazón proviene de estos verdaderos ángeles de la guarda, cuando nos dedicamos a ennoblecer los logros y progresar en sus diversas facetas. Cada día nos enfrentamos a situaciones complejas y difíciles que requieren reflexión y cuidado, para que podamos mantener la tranquilidad y la alegría de contribuir al bienestar personal, así como al de la sociedad. Cuando ocurre lo contrario, aparecen obsesiones, disparates, aflicciones consumibles y desastres de diversa índole. Por tanto, tratemos de escuchar la voz del corazón, manteniendo una conducta ejemplar en todas las circunstancias.
ESTADO MENTAL DE FELICIDAD El problema de la felicidad encuentra una solución eficaz en el comportamiento íntimo del individuo en relación a la vida. ¿Por qué transferir r al futuro el momento de ser feliz, cuando se piensa en alcanzar determinados valores, que posiblemente no lograran completar el cuadro de armonía y ventura personal? Uno puede y debe ser feliz en todo momento, porque tal conquista proviene del estado de ánimo y no de los enredados recursos materiales de los que se puede disponer. El dinero resuelve algunos problemas; proyectos de personalidad; promueve socialmente al individuo, pero no resuelve las situaciones internas, en las que están las bases de la armonía como del desequilibrio. Es necesario que se valore lo que realmente puede proporcionar la felicidad y no sus complementos. Digamos, entonces, que este es un estado de ánimo, que varía de persona a persona, según su grado de evolución, por tanto, su mayor aspiración. Las conquistas materiales no tienen el poder de hacer felices a las criaturas. Pueden disminuir su aflicción, satisfacer algunas necesidades, disminuir la amargura, generar bienestar y consuelo... Con la esperanza de lograr el beneplácito de la felicidad, a través de los dones de la cornucopia de la fortuna, por ejemplo, se pierden muchos momentos felices que difícilmente volverán.
Esa felicidad dorada, sin preocupaciones, ociosa, no existe; es un espejismo que se diluye ante la realidad. Puedes alcanzar el estado mental de felicidad permanente, creyendo que es propiciada por el amor de Dios, que deposita en la pantalla de tus sentimientos, la fe que allí despliegas, dándola a otras personas. Así, a pesar de los cambios y circunstancias en las que te encuentres, alterando el ritmo de los acontecimientos y asuntos externos, ella permanecerá contigo, porque está en ti. El vendaval de las pasiones no la expulsa; La frialdad del abandono no la palidece; El granizo de la ofensa no la lastima; El oro de las ambiciones no la entorpece; El fuego de las luchas cruzadas no la alcanza. Ella permanece serena, y como llama bendita, con su luz señalando el camino seguro a seguir. Clamando las angustias del corazón. La felicidad plena y gratificante no es de este mundo. Sin embargo, germina y se desarrolla mientras el Espíritu avanza por el camino de la reencarnación, gracias a las acciones desarrolladas y el comportamiento mantenido. Reservada para el "reino de los cielos", es fundamental que el hombre conduzca las matrices íntimas a través de las cuales se desvela en el momento oportuno.
INVITACIÓN A LA REFLEXIÓN "¡Si yo lo supiera!... " “¡Ahora es tan tarde!... " “No tuve la oportunidad... " “Confieso que mis intenciones fueron buenas... " "¡No daré marcha atrás, nunca!" "¡Todo está arruinado ahora!" "¡Perdí y me rindo!" "Sólo hay una salida: ¡la muerte!" Estos y muchos otros conceptos se enumeran para justificar los fracasos y rebeliones en los emprendimientos de la vida. Expresiones derrotistas y fraseología de lamentación deplorable son presentadas a fin de traducir los estados del alma, derrotada, en una actitud mórbida como “lavarse las manos” ante hechos que resultan de fracasos en la lucha. La mayoría de las veces, sin embargo, tales compromisos desafortunados son el resultado de la falta de consideración como consecuencia de los engaños que el hombre se permite a sí mismo por ambición ilimitada o precipitación.
Paulatinamente el sano ejercicio de la reflexión es marginalizado y la criatura, incluso ante la severidad de las lecciones serias, no se retira a la meditación, cuyo trabajo podría almacenar una valiosa cosecha. Antes, por tanto, de actuar, reflexiona: después de actuar, reflexionar. La reflexión nos enseña a atesorar incomparables joyas de paz y bienes incorruptibles que nadie ni nada puede tomar o destruir. ¡En cualquier circunstancia, por tanto, reflexión! Ella te concederá el sol de la armonía en beneficio de la iluminación interior, si llamases a su puerta y esperas a que sea abierta. Por: Joanna de Angelis, Médium: Divaldo Pereira Franco
VIGILANCIA Nadie desconsidere el impositivo de la vigilancia en las tareas de ennoblecimiento abrazado. La vigilancia funciona como actitud de respeto y de consideración al emprendimiento asumido. Carro sin freno, desastre a la vista. La vigilancia dirá de las necesidades imperiosas del equilibrio ante las circunstancias y de los factores animosos que impiden un proceso natural de evolución. El egoísmo trabaja para el desespero. La maledicencia responde por el tumulto. La intriga promueve enemistades innecesarias. El orgullo engendra tormentos íntimos. La paz, todavía, discurre de una consciencia que se iliba en la acción superior de la vida. La sensualidad conclama a las pasiones morbíficas. El odio grita en la dirección a la locura. La caridad serena el espíritu. La paciencia confía y resuelve dificultades. El amor es la vida misma que actúa en nombre de la vigilancia del Celeste Padre a beneficio de la criatura humana. Nadie descuide su programa de vigilancia
Vigilancia al pensar. Vigilancia en el decir. Vigilancia en el actuar. Actuando de manera ennoblecida y vigilando los sentimientos del corazón, donde proceden las buenas como las malas cosas, el candidato a la redención espiritual llega a la cima de la ascensión y al final es liberado en plenitud de paz. Por: Joanna de Angelis, Médium: Divaldo Pereira Franco
OPORTUNIDAD Y DESASTRE
Te quejas, amargado, ante los problemas que se suceden, considerando no haber sido favorecido con deseos de ventura y triunfo de los que otros se benefician. Las tuyas han sido luchas sin cuartel, provocadoras de desatinos que te erosionan los propósitos de ennoblecimiento. Los días se suceden cansativos debilitando tus fibras morales de tal modo que, incluso emulado a una reacción saludable, no estás dispuesto a ponerlo en práctica. Paisajes grises, sacudidos por tormentas desalentadoras, constituyen los horizontes de tu camino. Los desastres y el pesimismo son los estados de ánimo que marcan la marcha. Una vez soñaste; ahora te enfrentas a pesadillas. Antes creías; ahora te azotan las dudas.
Al principio sonreías; después frunciste el ceño dureza en la expresión. Ayer el entusiasmo hizo estallar sus aspiraciones; hoy la visión de la esperanza está llena de amargura. Torpe con los resultados a los que has llegado, estas sin rumbo y preguntas: "¿Qué hacer?" Solo hay una opción: seguir adelante, poniendo el sol de la alegría en la sombra del dolor. Sin embargo, no todo sucedió, como te parece. Yerras en el concepto con el que interpretas la vida, como te equivocaste en las actitudes asumidas. Ideal y acción, palabra y vida son situaciones muy distintas. Es imperativo discernir con lucidez para acertar con seguridad. Cuando las concesiones de la juventud extorsionaron tu cuerpo, hiciste compromisos perniciosos y gastaste tus energías en el juego ilusorio del placer inmediato. En periodos de paz, te olvidaste de elaborar un exquisito programa de trabajo, entregándote al descanso, desconcertante. A las adquisiciones significativas en forma de amistades, afectos, estudio, meditación, actividad cristiana, intercambio fraterno, preferiste otros valores... Es natural que te enfrentes al vacío referente a lo íntimo y las dificultades se tornen en obstáculos en el exterior. Echa fuera la nube de la queja y ofrécete la bendición lenificada de un reexamen reflexivo con una nueva disposición.
Siempre es hoy, el momento precioso para un recomienzo santificando, así, las horas que aun tendrás. No lo pospongas apoyándote en la cruz inútil de la autocompasión. La oportunidad perdida, aunque se repita, las circunstancias y condiciones ya no son las mismas... Se una voz y un ejemplo. Palabras felices y actitudes superiores. Idealismo abrasante y dedicación integral. Amor insuperable y deber imperioso. Con esas insignias Jesús cambió las rutas del pensamiento humano; no obstante sufrió las más pérfidas humillaciones que culminaron en una cruz de desprecio que El santificó y en un tumulto vacío, como portal de incomparable libertad para todos nosotros. Por: Joanna de Angelis, Médium: Divaldo Pereira Franco