NADA ES SUPERIOR AL AMOR Mercedes Cruz Reyes En él está la raíz de todas las virtudes del alma. El bien del Padre Celestial y, como tal, constituye una energía sublime e incomparable. Hasta en las horas de discusión violenta es posible hacer brotar el amor. Basta callar para no herir al interlocutor. Evitar el responder. Esforzarse para pronunciar la palabra de calma. Acuérdese de que el amor es el remedio que cura las enfermedades del espíritu. El todo transforma y hace en la deuda y el desespero nacer la paz. Amar es transmitir a Dios por usted. Cuando nuestro Divino Maestro Jesús pasó por la Tierra, el mayor legado que nos dejo fue su infinito amor por todos nosotros. El vino
especialmente para enseñarnos a amar. Primeramente a Dios y en consecuencia a prójimo como a nosotros mismos. Él dijo que todos sus enseñanzas se reducían a esa máxima “Amarás al Señor tú Dios de todo corazón”. Para muchos es difícil practicar esta enseñanza, más si nos paramos para pensar podremos notar que no es tan difícil hacerlo así. Todas las veces en que nos preocupamos por el dolor del prójimo, procurando ayudarlo, estamos poniendo el amor en práctica Todas las oportunidades que aprovechamos para practicar el bien, auxiliando, confortando al prójimo, llevándole una gota de esperanza, de confianza y de fe, estamos practicando el amor y la caridad en favor del otro. Practiquemos el amor, como Jesús nos enseñó, pues cuanto más practicamos, más ese amor aumentará en nosotros y más amor recibiremos también. Todo lo que hiciéramos de bien retornará a nosotros en forma de bendiciones de amor, paz y alegría. El Amor es el más puro y significativo sentimiento que podemos tener. El mejor Amor es aquel que no hay necesidad de estar a todo instante diciendo que se Ama, mas si aquel en que todos os instantes estamos regando como una simiente a germinar, porque este tipo de Amor es eterno. Existen muchas confusiones, entre Amor y Pasión. La Pasión nos arrasa, devasta todo y a todos, creemos que estamos volando y luego caemos al suelo sin amortiguadores. el Amor nos remite a reflexiones calmadas y profundas, suaviza todo a nuestro alrededor, Amor nos completa y tenemos la certeza de lo que queremos y las dudas no nos asombran porque las dudas quedan para los que no Aman verdaderamente. Por eso entre la Pasión y el Amor existe un abismo tan grande, porque el verdadero amor es eterno y las pasiones tienen un tiempo para acabar. Al contrario del Amor, que cuando acontece, pasa el tiempo, pasan los problemas y el en todo tiempo es renovado es fortalecido.
Por eso vale recordar que el mejor Amor es aquel que acontece lentamente, porque es en el que nos fortalecemos, es en él que maduramos y es en el que construimos algo verdadero. Rompe las cadenas - si tu mente no es libre, tu cuerpo y tu alma tampoco. El amor debe ser visto como el agua, aunque se riegue no se desperdicia, sino que se aprovecha de diferentes maneras. Imagina al amor dentro de ti como una cantidad de agua en un recipiente, ¿qué ocurre si la cambias de recipiente? ¿Qué ocurre, si en vez de cambiar de recipiente, se rompe este? Si cambias el agua de recipiente esta “mágicamente” adopta la forma del nuevo contenedor. No haya ningún inconveniente, no se queja, no reprocha, tan solo se deja guiar por su propia naturaleza; la de ser. No hay mayor complicación en ello sabes? Tan solo es cuestión de forma, la esencia es la misma, siempre seguirá siendo agua, totalmente aprovechable esté donde esté. Aunque muchas personas digan que se desperdicia si cae al suelo, la verdad es que no es así, el agua refresca, sirve de base para la vida, se evapora, se condensa y luego vuelve a nosotros en forma de lluvia, es un ciclo. Las personas están acostumbradas a ver las cosas solo desde la perspectiva humana, deberíamos ver todo desde la perspectiva natural, universal. Ojo, no digo que intencionalmente la desaprovechemos, no se trata de eso, esa acción sería un tonto capricho, no sería algo natural. Solemos ser caprichosos y auto destructivos, cualidades negativas que deben ser mejoradas para nuestra evolución La energía no se crea ni se destruye, solo se transforma; el amor es energía. Imagina el amor como el agua que cambia de forma así como cambia su recipiente, que se auto nivela así como la marea, que adopta varios estados según el clima. Así mismo es el amor. El amor cambia de forma, cambia de dosis según el emisario y según el receptor pero sobre todo no deja de ser amor. El amor es mucho más que tú y tu pareja, el amor es más que extrañar las caricias de un amante, el amor es más que el sexo y su placentero aroma. Si "amas" solo a una persona, pues no es amor. El amor es una dosis perfecta para cada uno de nosotros, para cada
ser que nos rodea, el amor no es, ni jamás será solamente una canción romántica, una taza de café en las mañanas, un beso al despertar, ni un abrazo antes de dormir, el amor es todo junto y mucho más. El amor es un hermano, una tía, una mascota, un hijo, los amigos, las personas apreciadas llevan su dosis de amor y nos la brindan también. El amor no muere, aunque la muerte no sea más que mera transformación, el amor no muere. El amor se extiende, se multiplica, se adapta, es humo en el aire, es agua en la tierra, es viento; siempre produce. Genera sensaciones, emociones, latidos, respiraciones, pensamientos. No se puede negar. No se ve, no se toca pero se siente. Somos recipientes diversos y como tales alojamos distintas cantidades de agua, así mismo cuando nos toca dar amor lo damos en dosis diversas a cada persona. El amor es agua, imagínalo! es energía que fluye de manera viva, de forma natural. No puedes detenerla, ejerce demasiada presión, busca su espacio. Muchas personas han intentado desviarla, atraparla, dominarla pero al final no se puede. Los que han hecho represas han tenido que liberarla, los que han hecho canales y ríos artificiales han visto como se desborda y más problemas han tenido quienes han querido controlar su cauce. Bueno, así es el amor, incontrolable, inmensurable, indomable; déjalo fluir naturalmente! ¡Libre! Extraído de diversos textos de internet