27/02/2019
América Paola Lima Pérez
Mi Anécdota actividad3LasTecnologias.blogspot.com
América Paola Lima Pérez
Mi Anécdota
Mi Anécdota Cursaba el sexto grado de primaria cuando me uní a la escolta de la escuela, todos los días salíamos a ensayar en el patio de la escuela. La mayoría de mis compañeras era del mismo grupo en el que iba, a excepción de una o tal vez dos niñas. El profesor de educación física siempre llevaba a concursar a las escoltas. Comenzamos a ensayar más de lo normal, tanto así, que algunas veces no entrabamos a clases en todo el día. El primer concurso fue en una escuela ubicada no muy lejos de la escuela a la que yo asistía, ese día estaba bastante soleado, así que al nombrarnos ganadores ya no regresamos a la escuela, cada quien fue a sus respectivos hogares para descansar. El segundo concurso fue en nuestra escuela, ¡que sorpresa! Recuerdo que en la entrada se podía leer “Concurso Regional de Escoltas”; pronto, comenzaron a llegar muchas personas, comenzó un gran ruido que le provocaría migraña a cualquiera, esta vez no estábamos expuestos al sol ya que nos protegía el domo. Ese día pude reencontrarme con una buena amiga, hablamos y reímos una vez más hasta que el concurso comenzó y ella tuvo que ir a su lugar. Esa vez también obtuvimos el primer lugar. No paso mucho tiempo cuando nos dijeron que el próximo concurso seria hasta Huauchinango, esa vez me sorprendí, “¿acaso existe un lugar llamado así?” ¡No lo sabía! Un día antes del concurso partimos hacia el lugar donde se llevaría a cabo el concurso estatal, habían conseguido un transporte de viajes, recuerdo haber conocido a las madres de mis compañeras, puesto que no podíamos ir solas; la noche cayó muy rápido y todos nos dormimos. Recuerdo que fui despertada por mi mama, alce la mirada hacia las ventanas y me encontré con una vista maravillosa, es cierto cuando digo que amo la naturaleza, amo sentir el aire en mi rostro cuando estoy cerca de un árbol, cubrirme con su sombra, unos más altos que otros, unos acompañados de hermosas flores de diversos colores, el lugar era así pero aún más imponente, casi podía sentir lagrimas por la espectacular vista que la naturaleza me otorgaba. América Paola Lima Pérez 2
América Paola Lima Pérez
Mi Anécdota Transitar por Huauchinango era un poco difícil, pues las calles eran muy estrechas y era difícil que el transporte girara en alguna esquina. Llegamos a la escuela donde sería el concurso y comenzamos a prepararnos, mi proceso era as duro que el de las demás, puesto que debía alaciarme el cabello para ir igual que mis compañeras. Vimos hacer el recorrido de cada escolta, unos iban tan agotados o más que nosotras, parecía que el viaje había surtido efecto en la mayoría. Dieron a conocer los resultados y no conseguimos tener uno de los primeros tres lugares, sin embargo, no permitimos que nos afectara y fuimos en busca de peleterías para refrescarnos del intenso calor que sentíamos. Las calles eran pesadas, en unas subías en otras bajabas, fuimos a una plaza y convivimos un rato, contando como se sintió cada una de nosotras. Las personas nos miraban de forma extraña, al parecer fue muy notable que no éramos de por ahí. Ese día, no recuerdo cuantas veces agradecí este viaje de camino a Puebla, había sido un viaje maravilloso, rodeada de mis padres, amigas y hermosa naturaleza, agradecí demasiado a pesar de que no habíamos ganado.
América Paola Lima Pérez 3
América Paola Lima Pérez
Mi Anécdota
América Paola Lima Pérez 4