Revista del Ejército de Salvación Territorio de México
483 / Noviembre / 2019
El Grito
de Guerra
Contra todo mal
483-11-19
Fundador: William Booth Líder Internacional: General Brian Peddle Líder Nacional: Comisionado Oscar Sánchez Distribución y dirección de la revista: San Borja Nº 1456 Col. Vértiz Narvarte México, D.F. 03600 Tel. (55) 5559-5244
Página Web: www.ejercitodesalvacion.mx Editor: Mayora Ruth Ruiz Nuñez Diseño Gráfico: Christy Camarillo Mtz. Oficinas Divisionales Tamborel Nº 601 Col. Santa Rosa Chihuahua, Chih. 31050 Calle 19, No. 116 x 22 y 24 - Col. México Mérida, Yuc. 97128 Alicante No. 88 - Col. Alamos México, D.F. 03400 Calle Norte # 3720 Col. Burócratas Municipales Monterrey, N.L. C.P. 64769
NOTA EDITORIAL En ésta edición podrás encontrar temas que invitan a reflexionar y a prestar mayor atención a la formación de nuestros niños, para que sean jóvenes sanos, con valores y con sentido de pertenencia. En el artículo de liderazgo "Si quieres liderar entonces tienes que amar", encontrarás el ejemplo que nos dejó Jesús, mismo que debemos seguir para ser buenos líderes. Para ser un buen lider debemos amarnos a nosotros mismos, amar a Dios sobre todas las cosas y amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Ya estamos por llegar al fin del año 2019, ¿Te has puesto a pensar, cuántas personas han pasado por tu vida?, ¿Cuánto han hecho por ti? Como tu famila que está a tu lado todos los días, tus compañeros de trabajo o de escuela, que importante es quien barre la calle, o quien se lleva la basura, o quien te sirve la comida en un restaurante, o tu Oficial Directivo o Pastor de tu iglesia, tus amigos, tus vecinos, etc. Durante los 365 días del año, alguien hizo algo por nosotros y deberíamos estar agradecidos por eso, y sobre todo demostrárselos y decirles GRACIAS. Nuestro Padre Celestial quien nos ha dado la vida, quien nos ama, quien esta a nuestro lado, a Él es a quien principalmente debemos agradecerle por todo lo que ha hecho, hace y hará por nosotros y en nosotros. Mostremos nuestra gratitud a Jesús, quien dio su vida por cada uno, para darnos salvación. Mostremos nuestra gratitud al Espiritu Santo por ser nuestro guía y nuestro consolador. Demos gracias a Dios por lo bueno y aun por las que no son buenas.
Número de reserva 872-102 Publicación Mensual Registro 091-0989, características 218451210 Certificado de Licitud y Contenido 3235 Licitud de Título 3939, 8 mayo 1989
CONTENIDO
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DECLARACIÓN FUNDAMENTAL DE MISIÓN El Ejército de Salvación, es un movimiento Internacional y es parte de la Iglesia Evangélica Universal Cristiana. Su mensaje está basado en la Biblia. Su ministerio está motivado por su amor a Dios. Su misión es predicar el Evangelio del Señor Jesucristo y suplir las necesidades humanas en Su nombre sin ninguna discriminación.
PROPÓSITO DE LA PUBLICACIÓN
-Propagar el Evangelio de Jesucristo -Promover la vida santificada y -Procurar la participación en nuestra empresa terrenal.
Para más información o comentarios comuníquese con nosotros.
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Piensa Ahora, Comparte Después Hanna Anderson Pág. 4
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Dime con Quien Andas... Comisionado Torben E. Pág. 7
Dios Plantó un Jardín Tte. Coronel Dean H. Pág. 11
Juventud Hermosa - Capitana Elena Venegas Si quieres Liderar, entonces tienes que Amar - Isaiah Allen Piensa Ahora, Comparte Después - Hanna Anderson Apertura de la Guarderia en Matamoros Dime con quién andas... - Comisionado Torben Eliasen Promoción a la Gloria Tte. Coronel Roberto Frias Cobos La Iglesia en la Unidad de Cristo - Mayor Miguel Rodríguez Dios Plantó un Jardín - Teniente Coronel Dean Hinson La Gratitud, un principio Valioso - Coronela Daisy Machado
Juventud Hermosa Dice la Palabra de Dios en Isaías 40:30-31 “Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán”. ¡Oh Juventud! ¡Hermosa Juventud!, todos somos, fuimos o seremos jóvenes en algún momento de nuestra vida. En noviembre se celebra la Semana de la Juventud, en donde se realizan actividades para y con los jóvenes de nuestros Cuerpos. Lamentablemente la juventud se está perdiendo, a los jóvenes de hoy ya no les interesa saber que hay una vida eterna, y no quieren aceptar a Cristo como su Salvador y este concepto no es exclusivo del Territorio de México, es en general, la Iglesia pasa por un problema serio con la juventud. Tuve la oportunidad de conocer a una joven alemana que tiene 27 años y ella mencionaba que dentro de su Cuerpo en Alemania ella era la más joven de ahí, la siguiente en edad era otra joven de casi 40 años. Su congregación está muriendo, ya que las personas que asisten ahí son de edad avanzada y están falleciendo. La brecha en edades es grande, cuantos cuerpos hay así, no sólo en Alemania sino a nivel mundial. Pero ¿qué estamos haciendo para que los jóvenes se queden en la iglesia? ¿Qué estamos haciendo para que ese joven que asiste a tu congregación participe e invite a otros? Dentro del Ejército de Salvación hay una cantidad de programas con los cuales podemos apoyarnos para que nuestros jóve-
nes no dejen de asistir: Jóvenes Soldados, Ligas de Jóvenes, Ligas del Hogar Juvenil, Cadetes Locales, Rayitos de Sol, Niñas Guardias, Escuela Dominical, Escuelas de Música, Clínicas de Música, Panderos, Artes Creativas. Los jóvenes en la actualidad están compitiendo con un sin fin de accesos a los que antes no se tenía, y algunas veces son confundidos, pero dice la Palabra de Dios en Proverbios 22:6 “Instruye al niño en su camino y aun cuando fuere viejo no se apartara de Él”. Realicemos actividades con los jóvenes, discipulemos a esos niños para que no se aparten de jóvenes, enseñémosle el camino y la verdad, guiemos a esa juventud para que conozcan a Cristo y salgamos a evangelizar. En The Right of Heart una conferencia para líderes de la Juventud a nivel Internacional del Ejército de Salvación se vieron los siguientes puntos: 1. Introducir un marco ministerial que establezca principios saludables de discipulado dentro de los ministerios de jóvenes y niños para: • fortalecer nuestro ministerio para niños, adolescentes y jóvenes en todos los niveles • conectar a niños, adolescentes y jóvenes con Jesús y el Ejército de Salvación. • conectar a niños y jóvenes con la misión del Ejército de Salvación. • proteger a los niños y jóvenes. 2. Aumentar la conciencia de los desafíos
actuales que enfrentan los jóvenes y los niños de hoy. • ¿Cómo son los niños y/o jóvenes de hoy? ¿Cómo es vivir en su mundo? • Sexualidad humana: comprender el de sarrollo del adolescente y los problemas relacionados con el género / identidad. • Reconociendo que 1 de cada 10 niños / jóvenes experimenta desafíos de salud mental, incluyendo depresión, ansiedad y trastorno de conducta, trastornos alimen ticios y estos diagnósticos son a menudo una respuesta directa a lo que está sucediendo en sus vidas. • Examinar los problemas de justicia social que afectan la vida de los niños y jóvenes, sus cuidadores y sus comunidades. • Desarrollar raíces profundas para la fe que ayudarán a los jóvenes a encontrar una expresión auténtica, de una fe personal en Cristo a través de sus etapas de vida. 3. Promover el intercambio internacional de conocimientos, y experiencia entre los jóvenes y los líderes de los niños. Nuestros temas principales fueron: - Fe / cultura emergente. - Discipulado (desarrollando un marco). - Sexualidad humana. - Justicia social. Todo el tiempo tenemos que preocuparnos por nuestros niños, adolescentes y jóvenes, enfoquémonos por compartir con ellos y darles un sentido de pertenencia. Cap. Elena Venegas Secretaria Territorial de la Juventud
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Si quieres LIDERAR, entonces tienes que amar Cuando éramos niños, todas las semanas después del softbol o el voleibol de la iglesia, mi papá nos llevaba a tomar un helado. Pediríamos Jim Dandies y Banana Splits, los platos más caros del menú de postres. Mi papá siempre pedía el Brownie Sundae. Para mí y mis tres hermanos, nuestras visitas a Friendly’s fueron sobre las delicias; para mi papá, se trataba de que estuviéramos juntos. Trabajando en múltiples trabajos, atesoraba esos tiempos. La vida de mi padre exhibió un patrón de amor humilde y sacrificado. Hoy en día, mi esposa y yo tenemos una breve lista de tres acciones que tratamos de hacer todos los días con cada uno de nuestros hijos: orar, abrazar y hacer un recuerdo feliz. Por la noche, a veces revisamos nuestra lista de verificación de tres puntos, mientras todavía hay tiempo. Los conocimientos, las habilidades, las credenciales y los títulos que figuran en un currículum pueden impresionar a las personas o calificarlo para un trabajo; pero no logran ganar la lealtad y el afecto de las personas, y no pueden transformar sus vidas. Para eso, necesitas mostrar amor: amor humilde, ferviente, sacrificado, cotidiano. Es el amor que "cubre una multitud de pecados" (1 Pedro 4: 8) y "expulsa todo temor" (1 Juan 4:18). Incluso tener un doctorado o un cinturón negro en Karate no puede hacer eso. Podemos fracasar si perdemos la razón (amor) y el propósito (otros) para el desarrollo del liderazgo personal. No me malinterpretes; Tener una base de conocimiento y habilidades es esencial para cualquier trabajo. Dedico mi tiempo y energía a desarrollar programas de capacitación para nutrir a los líderes para el servicio del Ejército de Salvación. Sin embargo, el amor
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nos hace buscar crecimiento continuo y competencia por el bien de los demás.
Este mandamiento tiene dos partes; ama al Señor y ama a tu prójimo. Creo que están entrelazados. Nuestro amor por los Aprender las Escrituras, idiomas, fútbol, demás es un reflejo del amor de Dios por ballet, matemáticas o administración re- las personas y una demostración de nuestro quiere mucho trabajo. Pero, en momentos amor por Dios. Eso es lo que sugiere 1 de claridad, recuerdo lo más importante. Si Juan 4:6–21: "Amamos porque él nos amó pudiera ser excelente en una sola cosa, me primero". gustaría destacar en amar a las personas. Tanto la lógica del amor como la capacidad de amar se originan en Dios. Como dijo Pablo: "El fruto del Espíritu es amor..." (Gálatas 5:22). Aunque el amor a veces puede ser atractivo y gratificante, a menudo es duro y costoso. No usamos el amor para ganar nada ni fingimos el amor para abusar o manipular.
Mateo 22:34–40 ha sido llamado "El Gran Mandamiento". En realidad, es una interacción del tema del amor que Jesús repite en los cuatro evangelios del Nuevo Testamento (Mateo, Marcos, Lucas y Juan). Eso lo hace importante, realmente genial. Pero, no es solo en los Evangelios. Jesús cita la Torá del Antiguo Testamento (Deuteronomio 6:5 y Levítico 19:18); Pablo lo afirma en Gálatas 5:14— “Toda la ley se cumple en una palabra: 'Amarás a tu prójimo como a ti mismo'”. ¿Quién ha ido a una boda cristiana sin escuchar a alguien leer 1 Corintios 13 (Oda al amor de Pablo)? Se afirma en todo el Nuevo Testamento.
Cuando el Espíritu lo autoriza, el amor es transformador para todos los involucrados. Las relaciones se convierten en una base para compartir el evangelio y para experimentar el evangelio. El amor es verdaderamente la marca del Hacedor de un líder cristiano. Por la gracia de Dios, la virtud de Cristo Jesús y el poder del Espíritu Santo, seamos excelentes en el amor. Aunque con demasiada frecuencia se descuida en un mundo “yo primero”, saber amar y estar dispuesto a hacerlo es fundamental para los líderes. "Maestro, ¿cuál es el mandamiento más importante de la Ley? Jesús respondió: ‘Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente’. Este es el primer y más grande mandamiento. Y el segundo es así: ‘Ama a tu prójimo como a ti mismo’. Toda la Ley y los Profetas dependen de estos dos mandamientos" (Mateo 22:36–40). por Isaiah Allen
Piensa Ahora, Comparte Después Hannah Anderson No había planeado comprar comida, pero al leer el informe meteorológico que publicó una amiga en Facebook, sabía que tendría que cambiar mis planes. Una tormenta invernal avanzaba amenazadoramente hacia nuestra región, presagiando que pasaría a la historia. Mentalmente, comencé a reorganizar mi agenda: iría de compras el jueves para evitar los estantes vacíos y las largas colas; y me mantendría cerca de casa el viernes, en caso de que las escuelas despacharan temprano a los estudiantes o suspendieran las clases. Mi esposo, que es pastor, tenía un funeral el sábado, pero la tormenta también cambiaría eso. “¡Cariño, ven acá!, le dije a mi esposo. ¿Has visto esto?”. Empezó a leer por encima de mi hombro. “Esto no puede ser verdad”, dijo, sacudiendo la cabeza. Mi esposo, algo aficionado del clima, se enorgullece de seguir de cerca el pronóstico del tiempo, pero no había visto venir esa tormenta. Alcanzó el teclado de la computadora, y desplazó el cursor a la parte superior de la página: “¿Viste la fecha?”. La advertencia de tormenta tenía un año de antigüedad. MALAS NOTICIAS Hace una década, la posibilidad de que cambiara repentinamente mis planes debido a un pronóstico meteorológico viejo, era casi nula. Pero en esta era digital, estamos a solo un clic de informaciones falsas, engañosas y simplemente caducas. Añadamos a esto, el hecho de que nuestra sociedad está perdiendo rápidamente la capacidad de distinguir entre las fuentes legítimas y las no con-
fiables, y el problema se vuelve aun más desconcertante. En muchos sentidos, vivimos en un mundo posfactual, y del cual nos previnieron los apologistas; una época definida por el Oxford English Dictionary como un mundo en el que “los hechos objetivos tienen menos influencia en la formación de la opinión pública, que los llamados a las emociones y a las creencias personales”. Dado nuestro acceso sin precedentes a la información (tanto cierta como falsa), también necesitamos sabiduría sin precedentes para procesarla y filtrarla. Como seguidores de un Salvador quien se describe como la Verdad, los cristianos deben convertirse en personas de discernimiento, personas que lo examinen todo y retengan lo bueno (1 Tesalonicenses 5:21). Pero esto no está exento de dificultades. LOS DESAFÍOS Por lo general, malinterpretamos lo que es el discernimiento, pensando que se trata de un “sexto sentido” o de una corazonada que entra en acción cuando nos topamos con información falsa. El problema con esto es algo que los investigadores llaman sesgo de confirmación, un término que describe nuestra tendencia humana a procesar la información de maneras que confirmen las opiniones que ya tenemos. Pero esto plantea un segundo desafío. En vez de confiar en la corazonada, podemos errar en el extremo opuesto, pensando: Si tan solo investigamos lo suficiente, si tan solo encontramos ese memorándum filtrado, si tan solo ponemos al descubierto el significado oculto
en el texto que nadie más puede ver; entonces sabremos la verdad. Sin embargo, este método puede también desviarnos, especialmente si surge del orgullo. Hay una emoción en ser el único en saber algo. Pero esta es también la razón por la que los falsos maestros tan a menudo diseminan ideas “secretas”: Nos atraen con la promesa de que podemos saber lo que otros no saben. Un tercer desafío para desarrollar discernimiento es el exceso de confianza en nuestra capacidad de tomar buenas decisiones. Una vez que hayamos confirmado los hechos, debemos preguntarnos: ¿Qué significan estos hechos? ¿Qué debo hacer con ellos? Pero, de nuevo, el orgullo nos asegura rápidamente que no necesitamos escuchar a nadie más. Irónicamente, la confianza en nuestra capacidad de tomar decisiones acertadas nos lleva a tomar malas decisiones, porque no buscamos la ayuda de otras personas. O, como dice Proverbios 12:5: “El camino del necio es derecho en su opinión; mas el que obedece al consejo es sabio”. Desarrollar discernimiento no significa que dejaremos de cometer errores. Pero sí significa que cuando lo hagamos, lo reconoceremos y buscaremos recibir con prontitud corrección de aquellos que han mirado la fecha del informe meteorológico. Y, en última instancia, es esta actitud de humildad —no la excesiva seguridad en uno mismo— la que abre nuestros ojos a la verdad. Nos hace más parecidos a nuestro Salvador quien es la Verdad en sí mismo.
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Apertura de la Guardería en Matamoros Con un modelo innovador y único en su tipo, el Ejército de Salvación en Matamoros, Tamaulipas, abre las puertas de su guardería a todas las madres y padres solteros que desean dejar en manos de especialistas el cuidado de sus menores.
La guardería cuenta con personal capacitado en el área de desarrollo infantil, psicológico, social y lúdico, quienes fueron capacitados para brindar este apoyo a cada uno de los menores que se integran a este programa.
El pasado 21 de octubre, los líderes nacionales del Ejército de Salvación en México, dieron el banderazo de apertura de la guardería del Ejército de Salvación, ubicada en la calle Sonora Nº 15 de la Colonia Esperanza en la Ciudad de Matamoros, Tamaulipas.
Actualmente se cuenta con capacidad para 40 menores, de 0 a 4 años. Dentro de las instalaciones de la guardería, los niños también son enseñados con valores humanos, convivencia social y desarrollo físico y psicológico. Cabe mencionar que el personal que labora en esta guardería, son capacitados con frecuencia y se encuentran en la más alta actualización en el ramo de atención a menores.
Esa guardería nace, como resultado de la necesidad de la comunidad de tener un lugar apto en donde sus hijos puedan estar seguros, mientras sus padres están en su trabajo.
Ru i d o
“Sino que he calmado y acallado mi alma; como un niño destetado en el regazo de su madre, como un niño destetado está mi alma dentro de mí” (Salmos 131:2).
interno de conversaciones y discusiones con nuestro abogado interior, con quien razonamos para justificar nuestras acciones ante los demás, ante Dios, y ante nosotros mismos.
Gracias a los avances tecnológicos de nuestra sociedad, somos la primera generación que puede disfrutar de escuchar música las 24 horas del día. No necesitamos aprender a tocar un instrumento, juntarnos con amigos, o ir a algún evento especial para poder escuchar música. Ésta, está siempre al alcance de nuestro teléfono móvil.
Nuestro mundo nos da la oportunidad de estar siempre escuchando algo y no tener que estar a solas con nuestros pensamientos, pero llega un momento en que no podemos luchar más con todo este ruido interior. Eventualmente llega a ser demasiado, a sobrecargarnos en nuestra vida emocional, y nos desgasta trayendo ansiedad. Las presiones nos pesan y terminan despertándonos en las horas de la madrugada.
Pero con los avances tecnológicos y los bellos sonidos que podemos oír, muchas veces viene la saturación y la creación de rudio. Vivimos en un mundo inundado del ruido de las ciudades, los medios de comunicación, y otras tecnologías que saturan nuestras vidas. Interesantemente, hay otra clase de “ruido” que nos afecta. Es el ruido
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Mayor Miguel A. Rodríguez Secretario Territorial de Rel. Públicas
Esto no es un mal de nuestra sociedad contemporánea. Es la realidad del corazón cargado por su propio sentido de justicia, que lucha sobre en qué poner su esperanza. Nuestro corazón anhela una justificación objetiva y externa, así como una esperanza firme y segura. Esto lo vemos en el Salmo 131. En los
¿Dime con quién andas...?
primeros versículos, el salmista reconoce su necesidad de humillarse ante el Juez Supremo, y en el último versículo concluye, “Espera, oh Israel, en el Señor, desde ahora y para siempre” (v. 3). Las buenas noticias para ti y para mí son que, aunque vivimos en la realidad externa del mundo contemporáneo y en la realidad interna de nuestras luchas en el corazón, nuestro buen Padre celestial, en la obra de su Hijo por nosotros y en nosotros, nos permite calmar nuestro corazón y descansar como un bebé en el regazo de su madre. Piensa en esto hasta que tu corazón responda gozosamente en adoración. Juan Gómez
El dicho popular: ¡Dime con quién andas y te diré quién eres! Nos lleva erróneamente a pensar que si andamos en malas compañías somos malas personas, pero si andamos en buena compañía somos buenas personas. Ese entendimiento ha quedado en el subconsciente de la iglesia y nos induce a acercarnos a las buenas personas para ser mejores y alejarnos de las malas para no ser contaminados.¡Entre tanto no hay comportamiento más contradictorio a las enseñanzas de Jesucristo que ese! Jesús en muchas ocasiones fue visto en compañía de gente con mala reputación, entre otros, anduvo con mujeres de mala fama, frecuentó casas de corruptos e interactuó con locos alucinados. Por eso, los religiosos de su época lo censuraban y los religiosos de hoy también censuran a aquellos que así proceden. Aún má, según la compañía de quien se trate el tema es ¿Quién influencia a quién? ¡Jesús influenciaba mejor a todos aquellos con quién andaba! Si en nuestra red de amistades y conocidos sólo tenemos santos ¿cuándo y cómo testificaremos de Jesús a los pecadores? Como salvacionistas no podemos ser prejuiciosos, debemos seguir a Jesús sin evitar a las perso-
nas que encontremos por el camino, y así podemos andar con todas ellas e influenciarlas positivamente. ¡Jesús nos lleva a salir del salero y salar al mundo! Sí quedamos en el salero no salaremos a nadie. Ciertamente tenemos familiares y conocidos ignorantes o desobedientes a la Palabra de Dios, por eso tenemos el privilegio y responsabilidad de acercarnos a ellos, andar juntos, y permitir que el Espíritu Santo a su tiempo les convenza del pecado, justicia y juicio. No es nuestra tarea forzar a las personas a aceptar a Jesús, pero sí compartirlo con ellos. ¡Dime con quién andas y te diré si eres! Si andas con todos, sin discriminar buenos y malos, sí buscas influenciarlos positivamente, entonces eres como Jesús
Comisionado Torben Eliasen
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Tte. Coronel Roberto Frías Cobos
6 de Febrero de 1938 – 24 de Octubre de 2019
Roberto Frías Cobos nació en Torreón, Coahuila el 6 de Febrero de 1938.
"Mas él, conociendo los pensamientos de ellos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo, es asolado; y una casa dividida contra sí misma, cae" (Lucas 11:17).
Desde muy joven él sintió el llamado para servir a Dios dentro del Ejército de Salvación, y el 25 de Marzo de 1957 fue comisionado como Teniente iniciando su vida como Oficial en el Cuerpo de Ciudad Juárez como asistente. Se casó con Martha Guerrero en el año de 1960 y tuvieron tres hijos, Martha Lidia, Eunice y Roberto. A través de los años él tuvo nombramientos a lo largo y ancho del país, como en Monterrey, Tijuana, Puebla, Escuela de Cadetes, Mérida, Cuerpo 1, Acapulco, Secretario Divisional en la Cd. de México, Comandante Divisional en Río Bravo, Comandante Divisional en la División Capital, fue Secretario en Jefe en el Territorio de Sudamérica Oeste, Secretario en Jefe en nuestro Territorio y fue transferido al Territorio Este de EUA como Evangelista. El 12 de Diciembre de 2002 fue jubilado, teniendo 45 años de servicio activo ininterrumpido como Oficial del Ejército de Salvación. Ya jubilado el Coronel siguió activo dentro de la fraternidad de pastores en la Cd. de México representando al Ejército de Salvación. También siguió siendo miembro activo de la Junta de Consejeros del Cuartel Territorial.
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Actualmente estamos viviendo tiempos muy difíciles, tiempos en donde cada vez vemos con más frecuencia la división dentro de las familias, grupos, equipos, amigos e iglesias. Lamentable ¿verdad? Pero ahora, más que en cualquier otro tiempo debemos estar unidos y unificarnos. La Palabra nos enseña:
"Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros. Quedó viudo en abril de 2013 y en 2014 se casó en segundas nupcias con Pilar G. Celis Fernández. La noche del 24 de Octubre de 2019, a la edad de 81 años fue promovido a la gloria Roberto Frías Cobos. “Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu Señor” (Mateo 25:23).
La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno" (Juan 17:11, 22). Y no me refiero a la tendencia de poner a todas las religiones juntas y así comprometer nuestra fe en Dios, ¡claro que no! Me refiero a la unidad de la iglesia de Cristo. El mismo Jesús oró por esta unidad. ¿Cómo es posible que el mundo puede reconocer este concepto a través de la unión de estados, unión de partidos o unión de barrios, y nosotros que tenemos al Espíritu Santo, nosotros que hemos sido confiados con la Sabiduría de Dios, no podemos ver este principio tan importante? No somos un equipo deportivo que está compitiendo los unos contra los otros. Somos el cuerpo de Cristo y nuestra batalla no es contra otros hermanos en la fe, sino contra Satanás, quien cada día hace más daño en nuestros medios y quien arrebata más vidas para el infierno. A Dios no puede agradarle que, en lugar de trabajar juntos, cada uno quiera ser amo de su propio redil, y solo apoyemos a aquellas personas que piensan exactamente como nosotros o que nos benefician materialmente. ¿Cómo pueden hermanos minis-
La Iglesia en Unidad en Cristo tros llamarse falsos profetas los unos a los otros, solo porque estos no hacen las cosas como ellos quieren? "Jesús dijo: entonces respondiendo Juan, dijo: Maestro, hemos visto a uno que echaba fuera demonios en tu nombre; y se lo prohibimos, porque no sigue con nosotros. Jesús le dijo: No se lo prohibáis; porque el que no es contra nosotros, por nosotros es" (Lucas 9:49-50). Los concilios de iglesias o reuniones con otras iglesias que profesan la misma fe son necesarios, porque así nos mantenemos unidos y trabajamos bajo autoridad y no como rebeldes. Pero los concilios o estas reuniones de iglesias no son amos de las iglesias, Cristo es el amo de la iglesia. No podemos estar continuamente poniendo a otros hermanos en mal delante de los ojos del mundo y comiéndonos los unos a los otros. ¿Cómo puede un pastor creer que solo él tiene la verdad? ¿Cómo puede continuamente estar haciendo juicio de otros hombres y mujeres de Dios? Así no se ganan las almas para el reino de Dios. Lo único que esto hace es que tengamos seguidores de nosotros y no seguidores de Cristo.
empezar a poner nuestra mirada no en el galardón que tendremos en esta tierra, no en los títulos que tendremos en esta tierra, no en las posiciones y posesiones que tendremos acá, sino en el galardón que nos espera allá. Si nadie nos reconoce, si nuestras familias nos miran en menos, está bien; también Cristo fue despreciado. Pero lo que cuenta, es si realmente cumplimos con nuestro ministerio, si no fue un tiempo invertido en mí, y no un tiempo invertido en el reino de Dios. Basta ya de estar detrás de títulos donde ni siquiera las vidas se nos pueden acercar porque parecemos ser más importantes que el mismo Dios, donde nos creemos que nadie más sabe interpretar la Palabra de Dios y donde hacemos sentir aquellos que son pobres y humildes como si no fuesen personas capaces de ser usados por Dios en poder.
Basta ya de juzgar por apariencias y de ignorar el corazón de cada persona y el potencial de cada persona. Tenemos a siervos y siervas de Dios sentados, porque en nuestra opinión no pueden para más, sin embargo, para Cristo son joyas preciosas que si se les da una oportunidad pueden lograr tanto. La iglesia no es para manipular ni para humillar, sino para equipar y enviar. La iglesia no es para tener muchos miembros y así vender muchos libros y cd´s. La iglesia es para evangelizar al mundo entero y que las iglesias se llenen, aunque no sea en la que yo me congrego. Si Dios nos ha dado de su unción, de su perfume, es para destruir las obras de Satanás, no a mis hermanos. Levantémonos en la fuerza que da la unión en Cristo Jesús. Prediquemos a Cristo, sin buscar logros personales, concentrémonos en predicar un evangelio puro y no un evangelio comercializado. No es un evangelio de hombres, no es un evangelio de dinero, no es un evangelio de edificios, no es un evangelio de legalismo, no es un evangelio de muerte y de ataduras es un evangelio de vida y libertad.
La iglesia de Cristo debe entender que estamos entrando en los últimos días antes de Su venida y debemos de trabajar juntos, no por interés personal sino por interés de que las almas se salven. Tenemos que
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Dios Plantó un Jardín
Teniente Coronel Dean Hinson "Entonces el Señor Dios plantó un jardín en el Edén en el este, y allí colocó al hombre que había hecho" (Génesis 2:8). En la historia de la creación, en el segundo capítulo de Génesis, se afirma en el versículo 8 que "Dios plantó un jardín". En Génesis 1:11, Dios habló, y "la tierra produjo vegetación, todo tipo de plantas con semillas, y árboles con frutos que producen semillas”. Al preparar un lugar para que el hombre viviera, no construyó una ciudad o una casa; Él construyó un jardín que el hombre debía "cuidar y vigilar". Imagínense: ¡Dios plantando un jardín!
todavía estaríamos viviendo en este lugar cuando la fruta estuviera lista para disfrutarla (lamentablemente, recibimos órdenes de marcha y nos mudamos a otra ciudad, dejando el jardín a quienes nos siguieron).
Una mirada a través de las Escrituras revela la importancia de los jardines. La Palabra de Dios a menudo usa historias o ilustraciones de plantas, árboles, viñedos, campos, sembrando, cosechando y dando fruto para revelar verdades espirituales (por ejemplo, Salmo 1, Isaías 5:1-7, Juan 15:1-8, Marcos 4, Gálatas 5:22-23, Apocalipsis 22:1-2). La historia de Dios, que comienza en un jardín en el Edén, alcanza un clímax en un jardín con una nueva tumba (Juan 19:41). ¡No es casualidad que fue en un jardín donde apareció el pecado por primera vez y donde el pecado fue finalmente derrotado por la resurrección de Jesucristo!
Cuando pienso en Dios plantando un jardín, surgen ciertas verdades. Primero es la preparación necesaria: limpiar y arar el suelo, decidir qué plantas florecerán en este lugar y luego comprar semillas. Una vez que se lleva a cabo la siembra, existe una protección continua de las nuevas plantas contra insectos, animales y tormentas. Se necesita una barrera o muro para mantener alejados a los visitantes no deseados, además de aplicar fertilizante y agua según sea necesario. Luego viene la perseverancia, esperando pacientemente a que las flores emerjan en las plantas que finalmente se convierten en fruto. Esto se acompaña de la extracción de malezas y la poda de las plantas para fomentar un mayor crecimiento. Lo más importante es la presencia requerida. No se puede plantar un jardín y dejarlo solo para producir fruta por sí solo.
¿Alguna vez has plantado un jardín? Es un trabajo muy duro. Hace muchos años, decidí plantar un jardín en nuestro patio trasero. Hice que un amigo viniera y arara el suelo con su cultivador, preparándolo para sembrar las semillas. Llamé a esto mi "Jardín de la Fe", porque tenía fe en que cosecharíamos cuando llegara el otoño. También ejercí fe en que no recibiríamos un cambio de nombramiento, de modo que
En Génesis 2, vemos el primer ejemplo de Dios y el hombre trabajando juntos para producir fruto. Dios plantó, y el hombre atendió y vigiló el jardín (2:15). Dios sembró, y el hombre disfrutó la fruta hermosa y deliciosa (2:9). El Capítulo 3 nos dice que Dios caminó por el jardín que plantó, pasando tiempo con Adán y Eva cuando soplaba la brisa fresca de la tarde (3:8). Aunque el pecado estropeó esta relación, la promesa
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de Dios de su presencia continúa hasta nuestros días. Al igual que las referencias a la jardinería que se encuentran en las Escrituras mencionadas, la promesa de la presencia de Dios se puede encontrar desde el Génesis hasta el Apocalipsis. El pacto con Abraham dice: "Este es el pacto eterno: siempre seré tu Dios y el Dios de tus descendientes" (Génesis 17:7). En la zarza ardiente, Dios le prometió a Moisés: "Estaré contigo" (Éxodo 3:12). Esa promesa continuó para Josué: “… porque el Señor personalmente irá delante de ti, Él estará contigo; él no te fallará ni te abandonará” (Deuteronomio 31:8). La promesa continúa, cuando Jesús les dice a sus discípulos: "Y estén seguros de esto: yo estoy con ustedes siempre, hasta el fin del mundo" (Mateo 28:20). La promesa en Apocalipsis dice: "¡Mira, el hogar de Dios ahora está entre su pueblo! Vivirá con ellos, y ellos serán su pueblo. Dios mismo estará con ellos ”(Apocalipsis 21:3). A medida que continuamos explorando las metáforas e ilustraciones de jardines, siembras y frutos en los próximos meses, hagamos convenio de pasar tiempo en Su Palabra, caminando con Dios en la fresca brisa de la tarde. Josué 1:8 ordena: “Estudie este libro de instrucciones continuamente. Medite en él día y noche para asegurarse de obedecer todo lo escrito en él. Solo entonces prosperarás y triunfarás en todo lo que hagas”. ¡Mientras lo haces, observa y disfruta la fruta que comenzará a crecer en tu jardín!
La Gratitud, un principio Valioso MOSTRAR GRATITUD a quien nos sirve, debería ser algo tan natural como respirar. ¿Por qué, entonces, a algunos nos cuesta tanto hacerlo? Los Salmos contienen cánticos, alabanzas, bendiciones y toda clase de exclamaciones que son equivalentes al agradecimiento: “Gracias te damos, oh Dios, gracias te damos, pues cercano está tu nombre; los hombres cuentan tus maravillas” “Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios” (Salmos 75:1), “¡Cuán innumerables son tus obras, oh Jehová!" (Salmos 103). Hiciste todas ellas con sabiduría; la tierra está llena de tus beneficios” (Salmo 104:24), para mencionar algunos. Qué sensación tan mala nos deja observar la ingratitud de algunas personas. Si eso es así con nosotros, imaginemos cuánto más sentirá Dios cuando olvidamos darle las gracias por tantas y tantas misericordias que son nuevas cada día y que recibimos continuamente de Él. Sobre todo en estos días, con la tragedia que significa para el medio ambiente que el “pulmón del mundo” se queme. En cuanto a ello, podemos recordar que la Biblia nos dice que Dios, luego de haber creado los cielos y la tierra, creó al hombre y lo puso allí para que la labrara y la resguardara (Génesis 2:16). Me imagino que Dios, habiendo creado todo, y encontrado que era bueno, ha de sentirse muy triste al observar con cuánta ingratitud descuidamos su creación. Cada vez que hacemos algo que afecta a nuestro planeta, nuestro ambiente, ciertamente mostramos que no estamos siendo agradecidos; al contrario, tratar con el debido cuidado al ambiente que nos rodea y nos provee de todo lo que es necesario para vivir, es una expresión de gratitud a Dios.
La Biblia relata que diez leprosos acudieron a Jesús pidiéndole misericordia y sanidad, y nos dice que todos fueron “limpiados”. Nueve tomaron su camino, mientras que uno solo regresó a darle las gracias. “Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los
carceleros que se extrañaron al ver su actitud, por lo que uno de ellos se convirtió así como toda su casa. La Escritura indica que la voluntad de Dios es que demos gracias. Y si, como dice Romanos 8:28, “todas las cosas obran para bien a aquellos que le aman”, está claro que hemos de agradecerle por todo. Todo lo que viene a las vidas de los que le temen les es enviado por Dios. Sin embargo, muchas de esas cosas nos son enviadas mediante otras personas, como vemos en la historia de José. En su caso, sus hermanos fueron usados por Dios como intermediarios, pero si bien ellos lo hicieron “pensando mal para él”, José no les guardó rencor porque entendió que en realidad habían sido enviados por Dios a hacer aquello para el bien de todos. “No temáis, ¿acaso estoy yo en lugar de Dios? Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a muchos pueblos”. Y es por eso por lo que debemos dar gracias en todo. No solo por las cosas buenas que nos vienen, sino también por aquellas que nos parece que no lo son.
nueve, ¿dónde están?” El resultado fue que este no solamente fue sanado, sino que también fue “salvado” (Lucas 17:19). Podríamos decir que el agradecido obtiene mayor favor. Algo parecido encontramos cuando Pablo y Silas, presos en una mazmorra llena de ratas por compartir el evangelio, comenzaron a cantar alabanzas a Dios. La Escritura dice que “dieron gracias” y, entonces, las puertas se abrieron. Sin embargo, ellos no huyeron, sino que se quedaron a compartir su fe con los
En mi propia vida, hubo ocasiones en que no pude ver la mano de Dios en ciertas decisiones hechas por otros y que afectaban directamente a nuestra familia, pero al pasar el tiempo pude entender la intervención divina en tal decisión, por lo que debía mostrar mi sincero agradecimiento a Dios. No olvidemos, entonces, que hemos de dar gracias a Dios cada día por todas sus misericordias; ya que a los que le amamos, aun las cosas que no sean buenas, Dios hará que trabajen para nuestro bien. Coronela Daisy Machado
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El ABCD de la Salvación Arrepiéntete de tus pecados “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios” (Romanos 3:23).
Busca el perdón de tus pecados “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad” (1ª Juan 1:9). Cree en Cristo “Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa” (Hechos 16:31). Decide aceptar a Cristo como tu Salvador personal “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en Su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios” (Juan 1:12). Siente pesar por tus pecados y a través del poder de Cristo, aléjate de ellos. Comienza a vivir para Cristo. Él te dará fortaleza, poder, victoria, propósito y vida eterna.