Revista del Ejército de Salvación Territorio de México
481 / Septiembre / 2019
Luchemos por
Justicia
El Grito
de Guerra
Contra todo mal
481-09-19
Fundador: William Booth Líder Internacional: General Brian Peddle Líder Nacional: Comisionado Oscar Sánchez Distribución y dirección de la revista: San Borja Nº 1456 Col. Vértiz Narvarte México, D.F. 03600 Tel. (55) 5559-5244
Página Web: www.ejercitodesalvacion.mx Editor: Mayora Ruth Ruiz Nuñez Diseño Gráfico: Christy Camarillo Mtz. Oficinas Divisionales Tamborel Nº 601 Col. Santa Rosa Chihuahua, Chih. 31050 Calle 19, No. 116 x 22 y 24 - Col. México Mérida, Yuc. 97128 Alicante No. 88 - Col. Alamos México, D.F. 03400 Lombardo Toledano Nº 2709 Col. Altavista Sur Monterrey, N.L. 64740
NOTA EDITORIAL
En este mes les invitamos a unirse en oración por las víctimas de la Trata de Personas y por todos los puntos que en la página 3 se describen. Isaías 42:22 dice: “Mas este es pueblo saqueado y pisoteado, todos ellos atrapados en cavernas y escondidos en cárceles; son puestos para despojo, y no hay quien libre; despojados, y no hay quien diga: Restituid.” (Reina-Valera 1960) Joel 3:3 dice: “y echaron suertes sobre mi pueblo, y dieron los niños por una ramera, y vendieron las niñas por vino para beber” (Reina-Valera 1960). Jesús enseñó que ninguno debía vivir en cautiverio físico o espiritual. Él dijo: “(El Señor) me ha enviado a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos; a predicar el año agradable del Señor” (Lucas 4:18-19, Reina-Valera 1960). Él estaba citando a Isaías 61:1-2. Más adelante, en Isaías 61 se encuentran estas palabras: “Yo, el Señor, amo la justicia, pero odio el robo y la iniquidad.” (v. 8, Nueva Versión Internacional). DECLARACIÓN POSICIONAL INTERNACIONAL SOBRE TRATA DE PERSONAS El Ejército de Salvación está profundamente comprometido con la lucha contra la trata de personas, en cualquier forma que éste se manifieste. Buscamos ejercitar la solicitud en restaurar la libertad y dignidad en aquellos que están afectados.
CONTENIDO
Número de reserva 872-102 Publicación Mensual Registro 091-0989, características 218451210 Certificado de Licitud y Contenido 3235 Licitud de Título 3939, 8 mayo 1989 Impreso en TRANS-FORMACIÓN Móvil: 55 5963-1931 e-mail: periodicotransformacion@gmail.com
DECLARACIÓN FUNDAMENTAL DE MISIÓN El Ejército de Salvación, es un movimiento Internacional y es parte de la Iglesia Evangélica Universal Cristiana. Su mensaje está basado en la Biblia. Su ministerio está motivado por su amor a Dios. Su misión es predicar el Evangelio del Señor Jesucristo y suplir las necesidades humanas en Su nombre sin ninguna discriminación.
PROPÓSITO DE LA PUBLICACIÓN
-Propagar el Evangelio de Jesucristo -Promover la vida santificada y -Procurar la participación en nuestra empresa terrenal.
Para más información o comentarios comuníquese con nosotros.
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Cómo compartir el Evangelio en la Vida Real - Michael Horton Pág. 5
Página 3 Página 4 Página 5 Página 6 Página 7 Página 8 Página 9 Página 10 Página 11
Venciendo el Mal con el Bien - Joyce Mayer M. Pág. 7
Sálvanos - Juan Gómez Pág. 10
Luchemos para Restaurar la Dignidad de las Victimas de la Trata de Personas. Lo que la Historia de David y Goliat nos enseña de los Gigantes - Jairo Nammún Como compartir el evangelio en la vida real - Michael Horton Danzando Hacia el Cielo - May. Nohemí Camarillo Venciendo el Mal con el Bien - Joyce Mayer Ministries El Verdadero Campo de Batalla - Cadete Lucia Salinas ¿Donde están los Timoteos? - May. Miguel Rodríguez Sálvanos - Juan Gómez Oportunidad de Servir - Akeem Cooper
Luchemos para restaurar la dignidad de las víctimas de la trata de personas
El Día Mundial de Oración por las Víctimas de la Trata de Personas es un día de adoración, oración y acción que enfoca el problema de la trata de personas. Cada septiembre, los Cuerpos (iglesias) de todo el mundo se unen para crear conciencia sobre la trata de personas y la esclavitud moderna y para mostrar nuestra compasión por los hombres, mujeres y niños que son explotados en todo el mundo. Como el Cuerpo de Cristo en nuestro mundo, nos unimos para comprometernos con una respuesta tangible contra el mal de la trata de personas. A través del Día Mundial de Oración, nuestras iglesias se comprometerán a tomar medidas para prevenir el tráfico y la explotación de personas en nuestras comunidades locales y globales, y para atender a las víctimas de este crimen. Juntos, podemos detener el tráfico y traer las buenas noticias de Dios de libertad para los oprimidos. Le invitamos a que ore por aquellos cuyas voces no se escuchan: los indefensos, los encarcelados y los quebrantados. Ore por la recuperación y restauración de aquellos que están esclavizados, tanto en casa como en todo el mundo. (Isaías 42:22, Levítico 19:29, Éxodo 20:14).
Ore por la redención de Dios en cada circunstancia de victimización. Aunque esten atados por el pecado de explotación en este mundo, ore por la libertad en Cristo. (Isaías 61:7, Apocalipsis 21:1-5, Jeremías 29:11, Isaías 58:6).
tobuses escolares, entrenadores y otras figuras de autoridad. Ore por protección sobre aquellos en riesgo, para que puedan estar protegidos contra daños. (2 Tesalonicenses 3:2-3, Isaías 41:10, Salmos 121:7-8).
Ore por quienes luchan diariamente contra la trata de personas y por aquellos que dan su tiempo, dinero y corazones para servir a las víctimas: socorristas, activistas, defensores, consejeros, trabajadores sociales y líderes de la iglesia. Ore por sabiduría, compasión, discernimiento y empatía. Ore para que se pueda mostrar una luz brillante en esta oscuridad. (Romanos 8:20-21, Gálatas 5:13-14).
Ore por la provisión de Dios: que se establezcan leyes para abolir la explotación de los seres humanos en cualquier capacidad; y al hacerlo, esas leyes entrarían en vigencia prohibiendo la venta o compra de productos hechos por esclavos. Ore para que los líderes mundiales respondan al llamado y se pongan de pie para poner fin al tráfico laboral.
Ore contra la propaganda de las mentiras impresas en la sociedad: la normalización del daño sexual. Ore para que se exponga el mal que se encuentra en la pornografía y los clubes de striptease. Ore para que Dios cambie los corazones de aquellos que ejercen poder sobre otros seres humanos, que Dios sane el corazón de la explotación y ponga fin a la demanda. (Salmos 10, Levítico 19:29). Ore por aquellos que son vulnerables: niños, aquellos que son maltratados, inmigrantes y niños en hogares de acogida. Ore por sabiduría para los cuidadores de niños, incluidos padres, maestros, líderes de la iglesia, conductores de au-
Ore para que los consumidores tomen decisiones compasivas sobre los productos que compran y apoyen a las empresas que han librado sus cadenas de suministro de mano de obra esclava. (Isaías 10:1-2, Salmos 2:10-12). Ore para que la iglesia se levante, se anime y busque justicia. Ore para que la iglesia brinde consuelo, apoyo y protección tangibles, ya que estamos llamados a ser las manos de Dios que sanan. (Isaías 61:1-3, 1 Pedro 2:9-10, 1 Tesalonicenses 4:3-5, Efesios 4:19-20). Tomado de: The Fight for Freedom Annual Day of Prayer for Victims of Human Trafficking. (La lucha por la libertad Día Mundial de oración por las Víctimas de la Trata de Personas).
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Lo que la historia de David y Goliat nos enseña de los
La victoria de David contra Goliat narrada en 1 Samuel 17 es sencillamente emocionante. ¡Qué final! ¡Cuánta valentía en este joven! Imagina al pueblo de Israel saltando de alegría, imagina a los villanos (los filisteos), ahora desanimados, pensando en que si un pequeño israelita pudo con su gran gigante, ¿qué les quedaría a ellos? El pastor débil y joven terminó trayendo la victoria al pueblo. Y ahora, en su victoria, todo Israel sería libre.
Y tú, tienes un gigante económico, un gigante de salud, o un gigante de pecado delante, lo miras y dices: “Yo tengo que ser como David. Yo tengo que ser valiente, confiar en Dios, y enfrentar a mi gigante con todas mis fuerzas”. Y al pensar así, perdemos de vista la mejor y más hermosa enseñanza del pasaje. No lo malinterpretes. Es bueno ver a David como ejemplo. Él era un hombre de fe que procuraba ver las cosas cómo Dios las veía y lo glorificaba en todo. Pero el propósito del autor del relato, no es que pienses que eres David. Es que entiendas que necesitas a un David. ¿Tratas de vencer a tu gigante? Verás, todos tenemos un enemigo adelante. De hecho, hay un ejército completo en contra nuestra. Tenemos a la muerte siempre ante nosotros, el pecado está siempre a la amenaza, listo para destrozar nuestras familias, trabajos y ministerios, y Satanás mismo anda como león rugiente buscando a quién devorar (1 Pedro 5:8). ¿Cómo enfrentar a estos enemigos? Nuestra tendencia es buscar tener o ser un Goliat: buscamos la mayor fortaleza económica, buscamos la mejor salud posible, buscamos ser los mejores en lo que podamos ser y portarnos de la mejor manera que posible. Nos ponemos la armadura, tratamos de vernos más altos, y con nuestras propias fuerzas vamos a luchar. Pero también tenemos una tendencia a responder como un “Goliat espiritual”. Decimos: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”.
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gigantes
“No importa lo que venga, yo tengo a Jesús y por eso avanzo hacia adelante”. Pero eso es usar a Jesús como una armadura. Eso no es más que un toquecito por encima del evangelio de la prosperidad, la idea de que todo te va a salir bien si confías en Dios. Eso es justo lo que hicieron los Israelitas con el Arca del Pacto, que pensaron que con solo llevarla a la batalla iban a ganar (1 Samuel 4).
El propósito del texto no es que tratemos de ser como Goliat o busquemos ser David. Más bien, nosotros, la Iglesia, ya estamos en esta historia. Somos el pueblo de Israel. Somos los que están asustados, los que se enfrentan a enemigos demasiado grandes, los que no podemos vencer por nosotros mismos. Tim Keller comenta este pasaje diciendo: “¿Qué le da Dios a su pueblo asustado? No les da un ejemplo, él no les da instrucción: Él les da un Salvador. Él no resuelve sus miedos con inspiración y emulación, sino con sustitución e imputación”. Y eso es justamente lo que Él nos da. Alguien mejor que David 1 Samuel 17 nos narra la historia más famosa de uno de los personajes más famosos de la Biblia. Pero hay uno más famoso que Él. Solo abre tu Biblia a las primeras palabras del Nuevo Testamento y mira qué dicen: “Libro de la genealogía de Jesucristo, hijo de David”. Amado hermano, así es como la historia de David nos apunta a Jesús: David salvó a su pueblo poniendo en riesgo su vida; Jesús salvó a su pueblo entregando su vida. David pasó por el valle de la sombra de muerte por Israel; Jesús fue al mismo vientre de la muerte por nosotros. David, el ungido, fue despreciado por sus hermanos, siendo inocente; Jesús, el Mesías, fue despreciado por todos, aun sin nunca haber hecho mal. David se desvistió de las vestiduras reales que no le servían; Jesús se desvistió de sus vestiduras reales, que le quedaban perfectas, para vestirse de las ropas de dolor y debilidad que nos pertenecen. David buscó cumplir la voluntad del Señor en valentía; Je-
sús cumplió cada mandato de Dios hasta su muerte. David sería el mejor rey de la historia de Israel; Jesús es el Rey eterno de toda la creación. David venció al gigante terrenal a través de su debilidad; Jesús venció al gigante de la muerte a través de su muerte y selló su victoria para siempre a través de su resurrección.
Como leemos en 1 Corintios 15:55-57: “‘¿Dónde está, oh muerte, tu victoria? ¿Dónde, oh sepulcro, tu aguijón?’ El aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado es la ley; pero a Dios gracias, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo”. Confía en Jesús Nuestro campeón nos da la victoria. Nos regala nuestra libertad, nos otorga nuestra salvación, nos concede paz, nos otorga vida eterna. Jesús vence a los gigantes por nosotros y ahora, en su victoria, nosotros somos victoriosos. Entonces ¿cómo podemos vencer a nuestros gigantes? Nosotros no podemos. Esa es la lección del relato. La historia de David y Goliat es un llamado a la fe. Es un llamado a confiar en el Dios que da un mediador a su pueblo. Es a dejar de ver al gigante Goliat, o a David, o a la gigante muerte, es ver al único gigante que dio su vida por nosotros: al gigante Mediador, a Jesús. Si eres cristiano, y estás ante dificultades que no puedes entender, confía en el Mediador. No confíes en tus fuerzas ni riquezas. Pide perdón a Dios por tu deseo de autosuficiencia y protagonismo. Y pide a Cristo que interceda, rindiéndote a Él. Dios no te quiere luchando con goliats. De hecho, Él quiere que bajes tus armas, admitas tu debilidad, y confíes en su Mediador.
Jairo Namnún
Cómo Compartir el Evangelio en la vida real
Anteriormente era popular darle a las personas tratados o ir de puerta en puerta con una serie de preguntas. Estoy seguro de que Dios bendijo estas herramientas, pero sólo son herramientas y probablemente no sean tan efectivas. Hoy en día, las personas están acostumbradas a las llamadas de ventas, los mormones o los testigos de Jehová que se presentan en la puerta y no queremos incomodar a las personas con las que realmente tenemos la oportunidad de compartir el evangelio. Las personas que realmente saben lo que creen y por qué lo creen, están en una gran posición para compartir su fe en todas las circunstancias normales del diario vivir. Pedro nos recuerda, “sino santificad a Cristo como Señor en vuestros corazones, estando siempre preparados para presentar defensa ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros, pero hacedlo con mansedumbre y reverencia” (1 Pedro 3:15). Muchos cristianos con los que hablo, están nerviosos por compartir su fe, porque aunque confían en Cristo, no saben lo suficiente o les preocupa que no puedan explicarlo lo suficiente. Pero cuanto más sabemos y podemos expresarnos con nuestras propias palabras, más fácilmente nos llega la comunicación.
¿Por dónde empezar? Todo depende de la persona y de la conversación. A veces comienzo hablando de mis propias luchas y por qué necesito un Salvador para rescatarme. Pero esto es solo para entablar la conversación. A veces, cuando los cristianos piensan en “dar su testimonio”, primero piensan en su propia experiencia de haber sido convertidos en cristianos y en la diferencia que Jesús ha hecho en sus vidas. Está bien, como dije, eso puede ser una buena forma de empezar. Pero el evangelio no es yo y mi experiencia, ese es el impacto, pero no el evangelio en sí. El evangelio es lo que le ocurrió a Jesús, no lo que me sucede en o para mí. Es interesante que los apóstoles, –que conocieron a Jesús íntimamente–, nunca hablaron mucho sobre sus propias experiencias. Para ellos, “dar su testimonio” o “ser testigo” significaba contarle a la gente lo que habían visto y oído acerca de Jesús de Nazaret: Su vida, muerte y resurrección por los pecadores. Pablo “razonó” con los del mercado y la sinagoga. Por supuesto, sus argumentos fueron diferentes, dependiendo de la audiencia. Pablo podría comenzar con Jesús como el Mesías, pero los griegos necesitaban más contexto para esa afirmación. Si conocemos la trama básica, con Jesús como Él está vestido en su evangelio, y estamos armados con
buenos argumentos y evidencia de la resurrección de Cristo y sus afirmaciones acerca de Sí mismo, entonces sabremos qué decir y cuándo decirlo en la conversación. Entonces, finalmente, tienes que dejar que la otra persona hable. Esa es la clave. No lo sabemos todo. Recuerda, Pedro dice que debemos estar listos para defender la fe, “pero con mansedumbre y reverencia“, no como si tuviéramos un discurso para hacerse público y tener que cerrar el trato. Finalmente, no solo es liberador evangelizar a otros cuando conoces tus propias convicciones y cómo compartirlas. También es liberador saber que no tienes que convertirlos. De hecho, no puedes convertirlos. Solamente el Espíritu Santo puede hacer esto y Él lo hace no sólo a través de tu testimonio, sino también de los demás. Entonces, Él podría usarte para plantar una semilla y alguien más para regarla. Tal vez nunca veas a esa persona con la que has hablado en el avión, para llevarla a la fe, pero tal vez el Señor te permita plantar la semilla. ¡Regocíjate en eso! ¡Y prepárate para la próxima persona que el Señor te envíe! Michael Horton
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"Danzando hacia el cielo" Campamento de la Liga del Hogar División Río Bravo 2019
Que grato es pensar que podemos alabar a nuestro Buen Dios en todo tiempo: en tiempo de alegría, de tristeza, en enfermedad, en salud, cuando tenemos dinero, cuando no lo tenemos, cuando tenemos amigos, aún cuando tenemos enemigos, etc., fue algo que pudimos aprender en nuestro Campamento de la Liga del Hogar de la División Río Bravo. Damos gracias a Dios porque tuvimos la bendición de tener como invitadas especiales a la Comisionada Ana Sánchez (PTMF), quien dio el mensaje de la Palabra de Dios en las Reuniones de Bienvenida y Clausura, también enroló a 2 socias para la Liga del Hogar Juvenil (Torreón), a 7 socias para la Liga del Hogar (Cd. Madero, Piedras Negras, Saltillo, Tampico y Torreón) y comisionó a 4 Oficiales Locales para impulsar el trabajo de los Ministerios Femeniles en los Cuerpos de Reynosa, Saltillo y Torreón. ¡Gloria a Dios! Nuestra otra invitada especial fue la Mayora Saraí Ortiz (CSDN), quien tuvo a cargo la exposición de las Sesiones donde pudimos aprender a través de la vida de Miriam, la hermana de Moisés, que "Somos una pieza clave para el éxito" (Éxodo 2:4-10). Así como Dios usó a Miriam para seguir a su hermanito Moisés por el Río Nilo y pudo ser tan astuta e inteligente para que su propia madre pudiera cuidar a quien años más tarde sería el libertador del pueblo de Israel, así nosotras debemos confiar en el éxito
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que Dios nos da día a día y aún estar seguras que estamos colaborando para que otros (esposo, hijos, vecinas) puedan obtener éxito en ésta vida. Aprendimos que debemos ser "Fuertes en la Adversidad" (Éxodo capitulos del 5 al 13). Sin duda que Miriam vivió momentos agobiantes en todo el tiempo que el pueblo de Israel estuvo como esclavo en Egipto. Sin duda que hubo problemas entre sus padres o sus hermanos, sin duda pasaron hambre, escases, enfermedad, enojo, cansancio, fastidio... la vida no es fácil. Todas debemos aprender a ser fuertes, debemos pedirle a Dios su fortaleza, provisión y protección cada día. Finalmente, aprendimos a "¡Celebrar en grande!" (Éxodo 15:20-21), Miriam encabezó con pandero y danza la alabanza y exaltación a Dios por liberarlos con mano poderosa del ejército del Faraón. Todas podemos alabar a Dios por lo Grande que es y por las proezas que día a día realiza en nuestras vidas. Alabarlo, exaltarlo y bendecir Su Nombre con cantos, con pandero, con danzas, con artes creativas. Ser adoradores en espíritu y en verdad, porque Él lo merece. Doy gracias a Dios porque 72 mujeres nos pudimos gozar en la presencia de Dios. Tuvimos una Cena de Gala para honrar a las Madres Estrella de Plata, también hubo Noche de Alabanza, Noche de Amigas, Devocionales, testimonios, manualidades, uñas,
alberca, hermosas danzas especiales por la señorita Perla Córdoba (Soldado de Matamoros, Tamps.). Tuvimos un tiempo en el que se agradeció a las Oficiales de nuestra División que se jubilan éste año: la Mayora Ana Flores, Capitana Clara Rodríguez y la Mayora Victoria Ortiz. Estoy segura que todo lo planeado e invertido fue muy bien aprovechado por cada una de nuestras queridas hermanas y amigas de todas las Ligas del Hogar de ésta hermosa y bendecida División Río Bravo. Que nuestro buen Dios nos permita seguir celebrando, sabiendo que cada día es un paso más qué estamos dando hacia el cielo y que mejor que hacerlo "Danzando con gozo para Él". Bendiciones abundantes. Mayora Nohemí Camarillo
Directora Divisional de los Ministerios Femeniles División Río Bravo
Venciendo el Mal con el Bien ¿Alguna vez alguien ha lastimado tus sentimientos? Tal vez te diste cuenta de que alguien te mintió o no recibiste el aumento de sueldo en el trabajo que merecías, o tal vez fuiste rechazado o abusado físicamente. Una de las cosas más importantes que debemos aprender es, cómo confiar en Dios y caminar por la fe cuando las personas no nos tratan como deberían. Nuestra respuesta natural es enojarnos cuando nos maltratan, y sentirnos enojados no es malo. Pero la Palabra de Dios nos recuerda que no debemos devolver mal por mal o ira por ira.
¿Qué bien tiene la ira? ¿Has notado que el estar enojado nunca mejoran las cosas? Lo sé porque yo solía tener mal genio. De hecho, yo pasaba más tiempo de mi vida de mal genio. A veces expresaba mi agresión, y otras veces solo la dejaba hirviendo en mi interior. El problema es que, si tenemos ira sin resolver, explotamos o colapsamos; o estallamos con alguien, o nos desmoronamos por dentro. Y muchas veces lo hacemos con una persona que no tiene nada que ver por lo que estamos enojados. Es solo una forma infeliz de vivir. Pero enojarse no es la forma en que Dios quiere que luchemos nuestras batallas. En cambio, cuando alguien nos lastima, podemos elegir confiar a Dios nuestro dolor o injusticia y vencer la ira con el bien. Romanos 12:17-21 dice: "No paguen a nadie mal por mal. Procuren hacer lo bueno delante de todos. Si es posible, y en cuanto dependa de ustedes, vivan en paz con todos. No tomen venganza, hermanos míos, sino dejen el castigo en las manos de Dios, porque está escrito: Mía es la venganza; yo pagaré, dice el Señor. Antes bien, si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; si tiene sed, dale de beber. Actuando así, harás que se avergüence de su conducta. No te dejes vencer por el mal; al contrario, vence el mal con el bien". Lo que Dios está diciendo en esos versículos es que hay una manera correcta e incorrecta de responder a la injusticia. Podemos enojarnos y desquitarnos con la persona que nos lastimó, o podemos luchar de la manera en que Dios lucha, confiando en que Él será nuestro vindicador, mientras bendecimos a nuestros enemigos y hacemos el bien (Salmos 37:1-3). Ciertamente no es fácil amar a nuestros enemigos y bendecir a las personas que nos han lastimado (Lucas 6:27). De hecho, este es probablemente uno de
los versículos más difíciles de seguir en la Palabra de Dios. Mi padre me abusó sexualmente durante casi 15 años, así que comprendo lo doloroso e imposible que puede parecer creer que realmente puedes amar a tus enemigos. No estoy tratando de tomar esto a la ligera. Pero hay verdadera libertad en hacer lo correcto. Y podemos elegir hacer lo que sea correcto sin importar cómo nos sintamos. Tenemos que dejar de tener miedo de las cosas difíciles, seguir adelante y confiar en Dios, porque la verdad es que Él nos dará la fuerza y la gracia para hacer todo lo que necesitemos hacer. La Oración trae paz Es mucho más difícil vivir con ira que vivir con paz, el amor y la alegría de Dios. Y tenemos que asumir la responsabilidad de nuestro comportamiento. Una de las mejores cosas que podemos hacer es aprender a orar por las personas con las que estamos enojados. Lo primero que debes hacer cuando alguien te maltrata, es orar: "Dios, esto duele y estoy enojado por eso, pero sé que mi ira no resolverá el problema ni cambiará a la persona. Así que confío en Ti. Voy a actuar en la dulzura y seguir siendo amable. Seguiré haciéndolo bien, porque para eso me pusiste aquí. Y mientras confío en Ti y bendigo a otros, voy a verte vindicarme y verte hacer lo que sea necesario en esta situación". ¡Esa es la forma de luchar y ganar tus batallas! Toma hoy la decisión de que vas a negarte a vivir enojado. Pídele a Dios que te ayude a tomar el control de tus sentimientos. Y si te enojas, confiésalo y Dios te perdonará. Habrá muchas batallas en la vida, ¡pero Dios tiene un plan increíble para ti! A medida que te enfoques en Él como tu Vindicador, cada vez será más fácil vencer los sentimientos de enojo y caminar en paz. ¡Y serás una bendición al vencer el mal con el bien! Joyce Mayer Ministries
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El Verdadero Campo de Batalla (PRÁCTICA)
Recuerdo cuando cursaba la escuela secular, mis maestros me daban clases que me parecían muy aburridas, con mucha teoría y muchas anécdotas de lo que los profesores habían vivido ejerciendo su profesión, y en aquel tiempo no me daba cuenta de que me estaban preparando para la vida real, el “verdadero campo de batalla”. La Biblia también nos prepara para todo eso. Hace unos meses terminé mi primer año en la Escuela de Cadetes y el sistema escolar tenía algunas similitudes con otras escuelas en las que he estado, ya que, teníamos que cumplir con nuestras materias de cada periodo: tareas, exámenes, horarios e incluso cuando llevamos a cabo la Campaña de Semana Santa, (salir a un Cuerpo/iglesia y prácticar lo aprendido), era similar a estar haciendo mi trabajo social. Pero cuando me dieron mi "Nombramiento de Verano" (tiempo de servicio / práctica) entraron a mi mente algunas dudas, ¿Podré con este desafio que está delante de mi?, ¿Podré recordar todas las enseñanzas que mis maestros compartieron conmigo a lo largo de todo mi primer año? Y fue entonces cuando el Señor habló a mi a través de un pasaje en la Biblia, en Mateo 14:22-33, donde encontramos la historia cuando “Jesús anda sobre el mar” y nos muestra una gran lección, de poner a prueba nuestra fe, poner en práctica lo que hemos aprendido en este proceso. En esta historia nos muestra como los discípulos, aun con la experiencia en la pesca y la navegación, temblaban de miedo al ver la fuerte tormenta, y al notar esto, su Maestro va hacia ellos causando aun más miedo. Pero esto no queda ahí. Uno de sus discípulos, digamos el más impulsivo, “Pedro”, quien era de descendencia judía, por lo cual tenía claro que si su Rabino, en este caso, Jesús le daba la orden de ir, él lo tendría que hacer. —Su Maestro le dice ¡ven!, le manda que ande sobre el mar y vaya hacia él.– Pedro obedeció, pero empezó a “dudar” de lo que estaba logrando, a pesar de que él había sido testigo de las maravillas que
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era capaz de hacer su Maestro Jesús. Pedrro empezó a dudar de sí mismo, de si era lo suficientemente capaz para ser discípulo de Jesús. Su meta era llegar a ser como él en todos los sentidos. ¡Qué campo de batalla, tan complicado! En este punto, al igual que Pedro, cuando nosotros "andamos sobre el mar" en nuestro campo de batalla, en nuestro diario andar, con lo que más batallamos" y comenzamos a dudar de nosotros mismos y empezamos a sentir que nos hundimos, pensamos si seremos lo suficientemente capaces de llegar hasta Jesús. Jesús nos ha dado la orden y nos dice “ven”. ¡Gloria a Dios! porque comenzamos a dar los primeros pasos. ¡No te hundas por tus dudas!, recuerda sus enseñanzas, recuerda sus promesas, confía en Él y él hará. Pedro estuvo en la mejor Escuela de Cadetes, con el mejor Maestro, y aun así, falló. No fue culpa de la escuela, no fue culpa del plan de entrenamiento, ni del Maestro de maestros. Fue únicamente por dudar y por su falta de fe. Comencemos a despejar las dudas. Nuestro Maestro cree en nosotros y sabe que podemos hacerlo. El evangelio no se trata de salvarte de algo, sino de llegar a ser como alguien. ¡Esfuérzate, sé valiente y confía siempre en Él! Permite que Dios siga con tu proceso de aprendizaje. Aprovecha tu tiempo, entrénate en nuevos hábitos como: leer su Palabra, la oración y el ayuno. No deseches el esfuerzo de tus maestros y tutores y ¡ve a la conquista de la tierra que te dio! Agradezco a Dios por el tiempo que pude estar en el Cuerpo (iglesia) y Hogar de Niños de Villahermosa, el cual fue de gran bendición para mi vida y ministerio. ¡Que Dios nos siga preparando para su obra! Cadete Lucia Salinas Treviño Sesión "Mensajeros del Reino"
Vivimos en una época en la que se avecina una amenaza mundial de explosión nuclear o química planificada. El corazón de millones de personas les está fallando por temor, y la Iglesia de Jesucristo está siendo desafiada como nunca antes en la historia. Estamos mirando a un mundo que está girando hacia el caos. Al examinar todo esto, pregunto: "¿Dónde está la voz de autoridad en Cristo? ¿Dónde están los pastores, las congregaciones, los cristianos laicos que están pensando como Jesús? ¿Dónde están aquellos que no persiguen sus propias agendas, sino que buscan la mente del Señor en estos tiempos?" Aquellos que se centran sólo en mejorarse a sí mismos, se están alejando de la intimidad con Cristo. Pueden predicar a Cristo, pero lo conocen cada vez menos. Y se están abriendo a grandes tentaciones. Les pregunto: ¿Está su iglesia próspera, pero nadie parece estar afines a Pablo, poniendo sus afectos en las preocupaciones de Cristo? ¿Y tú? Cuando ves a alguien que está desempleado, ¿oras por él? ¿Buscas maneras de ayuda o de servir?
¿Dónde están los jóvenes Timoteos de hoy? ¿Dónde están los hombres y mujeres jóvenes de Dios que rechazarán la llamada a la sirena del éxito y al reconocimiento? ¿Dónde están aquellos que pondrán su corazón en oración ferviente, llevando todo en sus vidas, sometidos a ser verdaderos siervos de Cristo y de Su iglesia? Nuestra oración debe ser: "Señor, no quiero concentrarme sólo en mí mismo, en un mundo que gira fuera de control. No quiero preocuparme por mi propio futuro. Sé que tienes mi camino en tus manos. Por favor, Señor, dame tu mente, Tu pensamiento, Tus preocupaciones. Quiero tener el corazón de tu siervo." "Timoteo, compórtate como es debido, y ten cuidado de lo que enseñas. Sigue
haciendo esto, y no sólo te salvarás a ti mismo, sino que también salvarás a los que te escuchen.(1 Timoteo 4:16 Traducción lenguaje actual).
Mayor Miguel Ángel Rodríguez Secretario Territorial de Relaciones Públicas
Enrolamiento de Jovenes Soldados en Hermosillo Damos gracias a Dios porque el pasado 9 de junio, en el Cuerpo de Hermosillo, Sonora, tuvimos el privilegio de celebrar el Día del Pentecostés, enrolando 9 pequeños santos como Jóvenes Soldados, quienes han demostrado ser fieles y perseverantes seguidores de Jesucristo y servidores de Dios en el Ejército de Salvación.
Estos niños y niñas antes de ser enrolados tuvieron varias lecciones en las que aprendieron muchas cosas acerca de la Palabra de Dios para ser aplicado a sus vidas y también les enseñaron la historia del Ejército de Salvación.
Este ha sido un día de victoria en el que sin duda fuimos llenos del amor de Dios y el poder del Espíritu Santo.
Capitana Virgen Hernández de Yáñez O. D. Cuerpo de Hermosillo
Oremos para que crezcan en gracia y sabiduría.
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Estaban los discípulos aterrorizados en la barca, en medio de un fuerte viento y olas que los azotaban, pero esta vez no por temor a morir sino porque vieron a un hombre caminando sobre las aguas, y no lo reconocieron hasta que Jesús se presentó a ellos. Los discípulos estaban turbados ante semejante escena, e incluso ¡pensaron que se trataba de un fantasma! (v. 26). Así que Pedro, queriendo confirmar la identidad de aquel misterioso hombre, le dijo: “Señor, si eres Tú, mándame que vaya a Ti sobre las aguas” (v. 28). Jesús le dijo: “Ven”. Entonces Pedro salió de la barca, y empezó a caminar hacia Jesús pero, al ver la fuerza del viento tuvo miedo y cuando empezó a hundirse gritó: “Señor, sálvame!” (v. 30). “Al instante Jesús, extendiendo la mano, lo sostuvo y le dijo: "Hombre de poca fe, ¿por qué dudaste?"(v. 31). Confieso que siempre leí este último versículo como si se tratara de un regaño de Jesús a Pedro por su falta de fe. Pero en la medida en que sigo conociendo el carácter de Dios y de Jesús, me doy cuenta de que mi visión de un Dios lleno de juicio, y condenación es más bien una idea nublada y distorsionada de la verdad. De la misma manera, entendía que el arrepentimiento era más bien una especie de castigo, reprimenda, y penitencia que debíamos cumplir con el fin de aprender la lección de una manera u otra. Pero el pasaje no nos enseña nada de esto. Ciertamente Jesús le dijo a Pedro: “Hombre de poca fe, ¿por qué dudaste?”. Pero, ¿qué pasaría si leemos y entendemos estas palabras con un tono de ánimo, lleno de gracia y confianza, con el fin de recordarle que si Jesús es quien le ha llamado a caminar sobre el agua, aún en medio de fuertes vientos, todo estaría bien? ¿Qué pasaría si entendemos el arrepentimiento como una invitación a volver en sí y gozarnos, y no como una penitencia? Jesús relata que el hijo pródigo, al verse en su condición más crítica,
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Sálvanos Juan Gómez “volvió en sí” (Lucas 15:17), como diciendo: “¿Qué estoy haciendo aquí, actuando como un huérfano, cuando tengo un hogar y un buen padre que me ama?”. Él sabía que debía regresar en arrepentimiento, con la esperanza de que el padre le recibiera de nuevo. Y efectivamente, en lugar de encontrarse con una reprimenda, condenación, o rechazo por parte de su padre, lo que aquel hijo recibió fue una celebración de gozo inexplicable. Las buenas noticias para ti y para mí son que Jesús reprendió a la tormenta, y no a sus discípulos (Lucas 8:24). Él señaló nuestra falta de fe como extendiendo una invitación amorosa a “regresar a nuestros sentidos”, a recordar que no somos huérfanos y que tenemos un Buen Padre Celestial en control de cada circunstancia, y que cuida de sus hijos. Esta comprensión es la que produce en nosotros una confianza y gozo que nos impulsa a dar nuevos pasos de
fe, sabiendo que Él está siempre con los suyos, como ya lo demostró en la cruz del Calvario, por nosotros y a nuestro favor. Piensa en esto y encuentra tu descanso en Él.
“Pero viendo la fuerza del viento tuvo miedo, y empezando a hundirse gritó: ‘¡Señor, sálvame!’”, Mateo14:30.
Oportunidad de Servir de cama, comida, refrigerios y agua, por lo que los Cooper tomaron lo que pudieron para pasar el tiempo, esperando una prueba duradera. "A las 8 p.m. [el 1 de septiembre] comenzamos a sentir los vientos y empezó a ponerse más fuerte", observa Akeem. "No podíamos ver afuera pero todavía había electricidad adentro, así que nos sentimos bien".
La experiencia de un joven bahameño en el huracán Dorian. A medida que se avecinaba la tormenta más grande en las Bahamas en el Océano Atlántico, Akeem Cooper, de 16 años, estaba ayudando a otros. El es Joven Soldado en el Ejército de Salvación, y ayudó al Oficial del Cuerpo (líder de la iglesia) el Mayor Hendrik Sumter a reforzar las instalaciones de Freeport en Gran Bahama. "Estaba en la sala del Cuerpo (iglesia) ayudando a cerrar las ventanas", explica, "pero finalmente tuve que irme a casa e ir ayudar a mi madre y mis hermanos a asegurar nuestra casa". A medida que las condiciones climáticas se deterioraron, los pensamientos de Akeem se volvieron hacia su familia. Neighborhood mi vecindario estaba tranquilo y mi familia y yo estábamos ansiosos. Fue entonces cuando envié un mensaje de texto al Mayor Hendrik para preguntarle si podía recogernos y llevarnos al refugio cercano. Eran alrededor de las 11:15 de la mañana", recuerda Akeem. "El Mayor dijo que nos daría una hora para prepararnos". Después de que el Mayor Sumter dejó a la familia Cooper en el refugio, Akeem y sus hermanos Joshua (17), Lamah (15), Tamal (8) y su madre, pasaron por el proceso de registro. Cualquier persona que se hospedara en un refugio en Gran Bahama debía traer su ropa
A medida que avanzaba la noche, el huracán Dorian, de categoría 5, avanzó tierra adentro desde el este de Gran Bahama, pero avanzó muy lentamente. El servicio de telefonía celular todavía estaba disponible en la mayor parte de la parte central y occidental de la isla, por lo que todavía había alguna forma de comunicarse con familiares y amigos. Alrededor de la medianoche, el huracán pareció detener por completo su camino hacia el oeste y se cernió sobre gran parte de la isla. El Centro Nacional de Huracanes informó que en este punto, el ojo de la tormenta tenía aproximadamente 23 millas (37 km) de ancho y abarcaba más de 45 millas (72.4 km) de ancho. Poniendo esto en contexto, Gran Bahama tiene solo 17 millas (27.3 km) frente a su punto más ancho de norte a sur. Viajar a una velocidad de solo una milla por hora (1.6 km / h), y a veces quedarse quieto, convirtió al huracán Dorian en uno de los más peligrosos para volar en un lugar de tierra durante un período prolongado. Si bien las tormentas tropicales son comunes en el Caribe, Akeem dice: "¡Nunca he estado en un huracán tan malo y por tanto tiempo! Casi dos días de viento y lluvia y de estar en la oscuridad sin electricidad, sin agua corriente, el teléfono celular muerto y cargadores portátiles, y desagües desbordados. En un momento el refugio comenzó a inundarse". Todos los que buscaron refugio en el refugio, incluidos Akeem y su familia, tuvieron que mudarse a un piso superior. "Sabía que como cristiano tenía que confiar en Dios, pero no
saber lo que sucederá, es terrible", confiesa Akeem. Las condiciones en el refugio comenzaron a deteriorarse y el martes por la tarde, la madre de Akeem decidió que quería regresar a casa. Incluso ahora, los vientos aún no habían disminuido por completo y, a regañadientes, Akeem acompañó a su madre y a sus dos hermanos menores en el camino a casa. Cuando entraron por la puerta de su casa, un vecino les gritó que el agua era tan alta como cinco pies (1,5 metros), y cuando entraron a su casa todavía tenía menos 45 cm. de agua. El hermano Joshua se había quedado en el refugio para vigilar lo poco que se habían llevado con ellos, así que después de dejar a su madre y sus hermanos en casa, Akeem regresó al refugio a pie. "Los vientos seguían siendo fuertes y una rama de un árbol sopló y me golpeó en la espalda", relata Akeem. "No lo vi venir porque vino de atrás". Durante la tarde del miércoles, Joshua y Akeem regresaron a casa. Fueron sobrevivientes de uno de los huracanes más devastadores que jamás cruzaron las Bahamas y, en particular, la Isla Gran Bahama. Las islas cercanas de Abaco fueron las más afectadas y la recuperación llevará mucho tiempo, tal vez varios años. Debido a que Nassau, la ciudad capital ubicada en la isla de Nueva Providencia, se vio menos afectada que otras partes de la nación, el gobierno de las Bahamas ha ofrecido un pasaje gratuito allí a cualquiera que esté dispuesto a trasladarse. Pero Akeem y su familia han decidido que Freeport seguirá siendo su ciudad natal. Mientras las aguas han retrocedido, las casas y negocios en las islas han sido destruidos. Pero mientras los bahameños están sufriendo, Akeem volvió a aparecer en Freeport Corps junto con tres amigos para ofrecer asistencia. Él sabe que los sobrevivientes vendrán al Ejército de Salvación en busca de apoyo. "Me encanta ayudar a otras personas", dice Akeem. "Me alegro por la oportunidad de servir". Akeem Cooper habló con el Mayor Hendrik Sumter Oficial del Cuerpo Freeport, Gran Bahama.
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