El león que perdió su melena (niño protagonista)

Kevin y el leรณn que perdiรณ su Melena

“Para nuestra amado hijo Kevin, la luz de nuestros días.

Siempre sueña en grande.

Eres nuestro mayor tesoro.”

Mamá y Papá

Kevin Willis Mujica Naciรณ el 7 de Octubre de 2015.

Le encanta bailar al ritmo de las canciones rock que canta su papรก y de la granja de Zenรณn. Le gusta acariciar a su gata Lola. Ha sido promovido a hermano mayor :).

Kevin vivía con sus papás Ryan y Mildzy en una casita en la sabana africana. Era un niño muy feliz y le gustaba vivir muchas aventuras, pero tenía un gran miedo a la oscuridad.

Kevin en uno de sus paseos encontró al león Melenitas llorando sin consuelo.

-Alguien se robó mi hermosa melena mientras dormía! Ahora todos se burlarán de mi -dijo entre sollozos.

Kevin decidió ayudar a Melenitas y emprendieron la búsqueda de su melena. Se encontraron al gracioso mono pero no sabía nada.

-Uh, Uh, Ah, Ah. Ahora te llamaré Calvita -dijo riéndose.

Kevin y Melenitas encontraron al elefante y tampoco pudo ayudarlos.

-Uuuuhhh. Yo me muero si se llevan mis colmillos -dijo agitando su trompa.

Kevin y Melenitas descubrieron una boa debajo de un árbol y quisieron marcharse, pero la boa les dijo: -Psss. Sé que me evitan por mi apariencia pero yo vi cuando las hienas robaron la melena, les enseñaré el camino, sean cuidadosos -dijo.

Kevin y Melenitas llegaron a la madriguera de las hienas, tan oscura como la noche.

Kevin tenĂ­a mucho miedo de entrar pero al ver tan triste a su amigo Melenitas, decide vencer sus miedos.

Ni bien Kevin y Melenitas ingresaron a la madriguera, las hienas con su risa burlona, se les acercaron, rodeĂĄndoles y enseĂąando los colmillos. La melena del leĂłn colgaba de la pared como un trofeo.

Kevin tomó la pata de Melenitas y dijo: -Tú eres el rey de la selva sin importar cómo luzcas. Tu valor viene de tu interior. Ayúdanos a salir de aquí.

Melenitas sintió su fuerza renacer y con un sonoro rugido espantó a las hienas.

A salvo. Melenitas agradeció a Kevin la lección. Ya no necesitaba la melena como prueba de su fuerza y regresaría a su manada calvito. Kevin desde ese día ya no volvió a tener miedo a la oscuridad ni a ninguna otra cosa.

Un cuento personalizado sobre la conquista de los miedos y lo erróneo de fijarse sólo en las apariencias. ¡Disfrútalo!

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