La renovación anual del puente Q'eswachaka es una práctica que se celebra desde hace más de cinco siglos. Es un proceso que involucra mucho más que la construcción de una vía de comunicación. Ciertamente, el puente ha cedido su uso funcional de senda de tránsito para convertirse en un vehículo de identidad local que recrea una parte de la historia de los habitantes de las comunidades de Canas, en Cusco, que están involucradas en su reconstrucción y reafirma los valores culturales que les han sido legados a estos pobladores por generaciones.