person a / person aje
el taxidermista del museo
la apariencia de lo real
El Museo Nacional de Historia Natural es un emblema de Santiago. Es uno de los museos más antiguos de América, fue fundado en 1830 por el naturalista Claudio Gay y desde 1870 ubicado en un gran edificio neoclásico dentro de la Quinta Normal. En él se encuentra la mayor fuente patrimonial de la flora y fauna de nuestro país. Ricardo Vergara Cancino es su taxidermista desde hace más de 20 años. Conoce tan bien el museo como a los animales –inevitablemente– quietos que hay en su interior. por: jimena cruz / fotos: luis hidalgo
Esta es una historia larga. Todo comenzó allá por 1898, cuando mi abuelo Zacarías Vergara trabajó con el primer taxidermista que hubo en este museo, Federico Alber, un alemán contratado por el gobierno de quien aprendió y luego traspasó los conocimientos a sus hijos (tuvo 13): Germán, Guillermo y Carlos pasaron por este museo en distintos períodos. Esta técnica se fue traspasando dentro de mi familia de una generación a otra. Mi tío Carlos fue el que me enseñó a mi -soy de profesión Museólogo, además de profesor de museología que era una carrera técnica cuando la estudié, después hice los ramos de Pedagogía en la
42
barrio stgo � n7
universidad-, cuenta Ricardo Vergara, el taxidermista del Museo Nacional de Historia Natural para ser taxidermista hay que venir acá “Este es el único lugar en el que se puede aprender la taxidermia completa, que es una disciplina muy amplia, que abarca desde los grandes mamíferos hasta los pequeños pájaros y donde se deben manejar distintos conocimientos, desde la biología hasta la carpintería”, explica Vergara.
person a / person aje
n7 ďż˝ barrio stgo
43
person a / person aje
Cuando estudié la carrera de Museología, se impartían clases de dibujo científico, fotografía científica, conservación, entre otras, eso abría el abanico de posibilidades para desarrollarte. La carrera ya no existe, la impartía el mismo museo, fue creada por la doctora Grete Mostny, una gran directora que tuvimos, pero solo duró un tiempo, desapareció por las situaciones políticas. Estudiábamos la anatomía del animal y a medida que uno iba desarrollando el trabajo, entendía su comportamiento. La observación es fundamental en esta profesión, me encanta la otología, que se refiere al estudio de las costumbres de los animales, ver cómo reaccionan frente a las distintas situaciones.
Desde niño yo vi este oficio y siempre me gustó, crecí dentro de este museo curioseando por todas partes, rodeado de animales que podía mirar cómo eran por dentro. Llegue aquí como estudiante secundario, venía y ayudaba a mi tío, hasta que finalmente me quede acá, estoy desde los 18 años. Acá yo trabajo con muchos artistas que vienen a hacer sus prácticas, también con médicos veterinarios y profesores de biología. Es un peligro en todo caso enseñar la taxidermia porque se puede usar para malas prácticas, como un negocio que mata animales para venderlos en
44
barrio stgo � n7
el mercado negro. Hay que escoger muy bien a los practicantes, que sus intereses y capacidades sean afines y estén vinculadas a la biología y sobre todo, que demuestren amor por conservar o cuidar nuestro patrimonio. Aquí se desarrolla mucho la paciencia. el método “Valoramos la vida, por eso no cazamos animales, todos los ejemplares son útiles, no hay ninguno de más. Los conseguimos cuando mueren en los zoológicos; cuando un particular encuentra algún animalito muerto; por donaciones; y muy esporádicamente producto de alguna investigación que requiera tomar una muestra”, cuenta Roberto. Dividimos el trabajo en materiales para Estudio, Exhibición y Restauración, esas son las 3 líneas en que agrupamos los animales. Lo primero es recuperar la piel, por lo tanto, un ejemplar que vamos a preparar debe estar en buen estado, haber muerto hace muy poco y no tiene que estar descompuesto. Cuando viene descompuesto, los investigadores nos dicen ‘está malo pero nos sirve el esqueleto’, ahí lo enviamos junto con toda la documentación necesaria. Para que un ejemplar tenga valor de colección y de patrimonio debe tener como un carnet de identidad que contiene toda la información de su procedencia, cómo fue encontrado y por quién.
Cuando salgo a terreno lo primero que hago es observar, me fijo en un ave o en un mamífero y observo detenidamente cómo se para, cómo vuela, cómo mira, para luego poder plasmarlo en el trabajo. En las aves ocupamos bórax y a veces arsénico, las plumas tienen distintos procesos de lavado, con agua, detergentes y champús neutros. Después que sacamos la piel y el cuerpo completo, porque los animales no se destripan ni se inyectan, se separan el cuerpo (los órganos) a un lado y la piel al otro. De la piel solo se conservan las patitas y el cráneo, parte de las alitas y algunos huesos. Luego hacemos una reproducción exacta del cuerpo, un molde con varias materias primas. Antiguamente mi abuelo utilizaba paja, a veces yeso, pero quedaban muy pesados. Mi abuelo ganó varios premios con las técnicas que desarrolló que incluso hasta hoy se mantienen, la diferencia es que yo les he agregado nuevos materiales como el polietileno o la resina plástica. Hoy se puede hacer el molde tradicional, que es la viruta de madera o paja de arroz, con resina plástica, que permite hacer grandes moldes como de caballos. Polietileno expandido (que es como el plumavit) es lo que llevan dentro los animales. El resto del cuerpo también se utiliza, el investigador selecciona las partes de su interés de acuerdo a su tema de estudio.
person a / person aje
dominar el bisturí Este es un arte antiguo, ancestral, que viene de los egipcios, aunque ellos utilizaban la técnica del embalsamamiento, que conserva los interiores, al cadáver se coloca dentro unos bálsamos para conservarlos. Los cuerpos quedan estáticos, como momias. La taxidermia en cambio, es la reconstrucción de la figura del animal. Los instrumentos básicos que debiera tener un taxidermista van desde un bisturí hasta una galletera. Los animales más complicados para trabajar son los de agua, porque tienen un proceso distinto, hay que dominar muy bien la técnica para hacerlo. Un ave es lo más sencillo, no tiene tanto proceso como un mamífero, la piel es diferente. Una paloma, por ejemplo, es muy rápido hacer el molde, no puede tardar más de 3 semanas entre los tiempos necesarios de secado, el orden de plumas, etc. El mayor desafío que he enfrentado como taxidermista han sido los animales grandes, para ellos se requiere de un trabajo de equipo de al menos 6 meses o un año para trabajar en caballos o novillos. Una vez me tocó un tigre. La mayoría de los trabajos que están en exhibición en el museo los hice yo.
Si viene buena la piel, la recuperamos, en invierno un cuerpo puede mantenerse bien por dos días, pero en verano medio día, nada más. Cuando el cuerpo está bueno y recuperamos la piel se curte con sal y piedra lumbre en el caso de los mamíferos para que no pierdan los pelos. dentro de la casa Jamás tendría un animal disecado en mi casa, pero soy empático porque me ha tocado atender varias señoras y también señores a los que les cuesta mucho desprenderse de sus regalones. Me encantan los animales, vivo en Curacaví, tengo mis perros y un pequén que vive libre, que se para a cantar en un palo y conversamos. Tengo hijos, pero solo uno de ellos se interesó por la taxidermia y a veces trabajamos juntos, él ha hecho varias cosas para artistas que combinan el arte y la taxidermia. Mi otro hijo es un volado, se ríe y continua, es aviador de la aeronáutica civil. Mi mujer es artista.
n7 � barrio stgo
45
person a / person aje
Taxi en latín es ordenar, disponer y Dermis es piel. Entonces taxidermia es ordenamiento de la piel, darle apariencia de vida, esa es la gran diferencia. animales en acción Este museo estuvo cerrado por casi 3 años y esta reabriéndose de a poco, pero tiene mucho público, la gente está reencantándose. Ha sido un proceso lento pero va muy bien encaminado, recibimos mucho cariño de parte de los niños. Es importante que podamos recuperar los espacios perdidos del museo, imagínate que solo está abierto el primer piso. Con el tiempo, este va a llegar a ser el museo de ciencias que Chile merece. Por mi parte ya me tengo que jubilar, aunque nadie quiere que lo haga porque este es un oficio que está desapareciendo, pero después de una vida dedicado a la taxidermia, tengo otros proyectos que me motivan mucho: estoy instalando un vivero, me gustan mucho las plantas y preparo una exposición en la que voy a mezclar el arte con la taxidermia. Necesito mucho tiempo para trabajar en ella, será algo totalmente nuevo, todavía no le he puesto nombre pero será algo como "Taxidermia en Movimiento", se podrán ver ejemplares más comunes pero con una dinámica especial, animales en acción.
46
barrio stgo � n7
Página web: www.mnhm.cl