220 flujo internacional de capitales, aunque ello pueda perjudicar a algunos empresarios españoles, se ponen trabas a la circulación internacional de trabajadores, lo que acrecienta la pobreza y el paro en los países más pobres. Desde este enfoque, se pueden explicar situaciones tan contradictorias como lo que actualmente ocurre con el superpuerto que se está construyendo en Agadir (Marruecos): entre la población canaria crece el rechazo a los marroquíes por la competencia que Agadir va a suponer para los puertos canarios; sin embargo, paradójicamente, es de origen canario una parte notable del capital invertido en el puerto de Agadir. Para los representantes de la administración del Estado en esta Comunidad Autónoma, la condición de las Islas Canarias como zona turística, que recibe anualmente varios millones de visitantes, y su cercanía al Magreb, región caracterizada por su inestabilidad político-militar, además de las entradas ilegales de subditos de los países africanos limítrofes (Senegambia sobre todo), hacen especialmente difícil el control efectivo de sus fronteras: terminales aéreas y puertos. En este sentido, se esperaba que la Ley de Extranjería fuera el instrumento jurídico adecuado para garantizar los intereses nacionales y geopolíticos en relación a los inmigrantes. Nos tememos, sin embargo, que la aplicación de la Ley va a ser discriminatoria al defender a los extranjeros ricos y bien asentados (europeos en general y empresas indias radicadas en la zona) y perjudicar a los extranjeros pobres y frecuentemente indocumentados (sobre todo africanos pero también los asalariados indios no documentados). ¿
Por parte del gobierno central de España se percibe como un peligro potencial la cercanía del continente africano y la inestabilidad político-militar que representa la región del Magreb y del Sahara Occidental. Esto hace que se tenga una visión de Canarias como "región-frontera" y una notable insensibilidad hacia la política económica del gobierno autónomo canario que buscaría mayores intercambios comerciales con los países africanos.
13.
13.1.
S I T U A C I Ó N ATIPICA DE CEUTA Y MELILLA.
Pluralidad étnica y religiosa.
Ceuta y Melilla presentan una pluralidad étnica y religiosa del todo singular, residuo o reminiscencia de una posibilidad de convivencia entre tres grandes culturas —judía, cristiana e islámica— que fue normal en la mitad-sur de la península durante la edad media,
221 mientras el poder político estuvo en manos de los árabes (Omeyas y Reinos de Taifas), pero que fue anulada violentamente cuando los reyes cristianos se hicieron con el poder(35). Esta referencia histórica es importante para c o m p r e n d e r el anac r o n i s m o histórico que representa la intolerancia y falta de sensibilidad del colectivo cristiano de Mefilla ante los musulmanes que reclaman f u n d a m e n t a l m e n t e ser tratados c o m o españoles y, por tanto, no caer bajo una "ley de extranjeros". Históricamente la soberanía española sobre Melilla y Ceuta data de los siglos XV y X V I ( 3 6 ) . En ambos casos se trató de conquistas guerreras que dieron el poder al sector cristiano sobre los musulmanes y judíos asentados en el territorio. Los cristianos d o m i n a n la a d m i n i s t r a c i ó n de la c i u d a d en todos los planos: político-judicial, e c o n ó m i c o , medios de c o m u n i c a c i ó n social, etc. (Sólo dos estamentos, el militar y el de funcionarios del Estado, representan entre ambas ciudades a unas 15.000 personas, incluyendo sus respectivas familias). Los musulmanes, si exceptuamos una minoría de comerciantes bien integrados, han sido un colectivo de segunda categoría, identificado con los vencidos por España y, t a m b i é n , con los enemigos potenciales del territorio; no han gozado —ni g o z a n — de los mínimos derechos c i u d a d a n o s y, c o m o veremos, son los más explotados en diversas formas de mercado negro presentes en ambas ciudades (servicio doméstico en c o n d i c i o n e s ilegales, compraventa semiclandestina de mercancías, etc.). Los judíos sefardíes, también antiguos en ambas ciudades, forman un pequeño colectivo fuertemente cohesionado entre sí y bien implantado en el c o m e r c i o . Según nuestras informaciones, es la p r o pia c o m u n i d a d hebrea la que se encarga de proteger a los pocos miembros judíos en c o n d i c i ó n de marginalidad.
(35) E x p u l s i ó n de los j u d í o s por los Reyes C a t ó l i c o s en 1492; definitiva e x p u l s i ó n de los m o r i s c o s en 1609 bajo Felipe III. Para la relación de las tres c u l t u r a s ver las obras de Américo Castro: España en su historia. Cristianos moros y judíos. B u e n o s Aires, 1948. y Realidad histórica de España, M é x i c o , 1954. La i n t e g r a c i ó n e n t r e m u s u l m a n e s y c r i s t i a n o s en los p u e b l o s de Castilla, i n c l u s o d e s p u é s de la t o m a de G r a n a d a , está analizada p o r J. Jiménez Lozano: Guía Espiritual de Castilla, Valladolid, 1984. El h i s t o r i a d o r f r a n cés F e r d i n a n d B r a u d e l ha t r a t a d o de e x p l i c a r la e x p u l s i ó n de los m o r i s c o s c o m o result a d o del c h o q u e de d o s g r a n d e s c i v i l i z a c i o n e s , la c r i s t i a n a y la islámica: Le Méditerranée et le Monde Méditerranéen a l'époque de Philippe II, M é x i c o , 1976. (36) Portugal había c o n q u i s t a d o Ceuta a los árabes en 1415 p a s a n d o a p o d e r de España a raiz de la batalla de A l c a z a r q u i v i r en 1578, s i t u a c i ó n q u e c o n f i r m ó el T r a t a d o de 1688 f i r m a d o entre España y P o r t u g a l .
222 Existe también en Ceuta y Melilla un pequeño colectivo originario de la India (mayoría de hindúes y minoría de sijs) que posee diversos bazares en conexión con una red internacional de producción y distribución de mercancías (red que se extiende a Canarias, Madrid, Barcelona, Valencia y otras ciudades españolas). 13.2.
Estructura de la población.
Los datos oficiales de población en estas ciudades, elaborados por las Delegaciones respectivas del Instituto Nacional de Estadística, son un ejemplo de la inadecuación que supone aplicar las pautas generales de registro de población a ciudades atípicas como Ceuta y Melilla. Aparte los 6.500 musulmanes con nacionalidad española, sólo había inscritos en el censo de población de 1981, entre ambas ciudades, 24.299 residentes de origen marroquí, cifra que es aproximadamente la mitad de la real, en opinión de casi todas las fuentes consultadas. Al dato de "residentes inscritos" hay que añadir el de "residentes no inscritos", el de "transeúntes" (concepto técnico aplicado a los militares con graduación inferior a cabo 1 . y a ciertos tipos de trabajo temporero) y el de "fronterizos" (población flotante que no pernocta en las ciudades pero que trabaja en ellas, legal o ¡legalmente). Desde el punto de vista sociológico, creemos que tanto los "transeúntes" como los "fronterizos" son "habitantes de la ciudad" lo que hace aumentar las estadísticas de población en ambas ciudades: a
C U A D R O 24 POBLACIÓN DE CEUTA Y MELILLA Tipo
Melilla
Ceuta
TOTAL
Residentes inscritos
56.741
65.264
122.005
71,8
Residentes no inscritos
12.000
10.000
22.000
13.0
Transeúntes
7.300
6.000
13.300
7,6
Fronterizos
8.000
5.000
13.000
7,6
TOTAL
84.041
86.264
170.305
FUENTE: Datos oficiales para los "inscritos" y estimación propia para las restantes categorías.
223 Desde el punto de vista sociológico, la repartición más significativa de la población que estudiamos es la que tiene que ver con la cultura religiosa. En Melilla, además de las parroquias católicas, hay 5 mezquitas, una sinagoga hebrea y un centro religioso-cultural hindú; en Ceuta, junto a las parroquias cristianas, hay también varias mezquitas y una sinagoga. La distribución cultural-religiosa sería la siguiente: C U A D R O 25 A D S C R I P C I Ó N C U L T U R A L - R E L I G I O S A D E LA P O B L A C I Ó N D E C E U T A Y MELILLA
Religión
Melilla
Ceuta
TOTAL
%
Cristianos
46.500
55.000
101.500
64,7
MusulmanesO
27.041
25.000
52.041
33,3
Judíos sefardíes
1.000
1.000
2.000
1,3
500
500
1.000
0,6
Hindúes y Sijs FUENTE: Estimación Propia.
O No incluimos aquí los "fronterizos" que pernoctan en Marruecos.
13.3.
Algunos indicadores de la discriminación social y cultural de los musulmanes.
A partir de la Encuesta aplicada a musulmanes en Ceuta y Melilla —con una submuestra pequeña pero bien estructurada— vamos a ofrecer un perfil aproximativo de la situación social, económica y cultural de los musulmanos presentes en ambas ciudades que, por comparación con otros colectivos de inmigrantes, puede resultar muy significativo. Tómense los datos como meramente orientativos dado el pequeño tamaño y consiguiente margen de error de la muestra utilizada. — Destaca en primer lugar la antigüedad del asentamiento de los musulmanes de origen marroquí en ambas ciudades: 52% nacidos en ellas; 26% con más de 21 años; 11% entre 10 y 20 años; y sólo otro 11% con menos de 10 años. El siguiente colectivo inmigrante más asentado en España es el portugués con sólo un 2% de los encuestados nacidos en España y otro 20% con más de 21 años de antigüedad. Teniendo en cuenta que de la población cristiana presente en la ciudad muchos son de reciente origen peninsular, es probable que su antigüedad real en ambas plazas no sea muy superior a la del colectivo musulmán.
224 — El 83% de los encuestados viven con su familia y sólo el 6% reconoce tener al resto de sus familiares en Marruecos. Estos porcentajes reflejan también la estabilidad del colectivo desde el punto de vista de la agrupación familiar. — En el momento de emigrar desde Marruecos, (casi siempre desde las zonas próximas) la mayoría de los inmigrantes musulmanes eran campesinos y en menor número comerciante y obreros no cualificados. Ninguno de los representados en nuestra muestra había sido administrativo, profesional o técnico superior y muy pocos obreros cualificados. — La razón que, según ellos, les impulsó a salir de Marruecos fue mejorar el nivel de vida (94%). Este elevado porcentaje es superior al de todas las demás colonias asentadas en el Estado español lo que indica un claro predominio de "inmigrantes económicos". La mayoría (85%) tenía en Ceuta y Melilla familiares o amigos de su país de origen que les facilitaron el asentamiento en los primeros momentos. — El 37% goza de vivienda en propiedad (porcentaje no superado por ningún otro colectivo inmigrante en la península); el 30% vive en régimen de alquiler y el 22% de prestado. Este último porcentaje también es superior al de cualquier otro colectivo inmigrante y puede deberse al hacinamiento que se deriva de ocupar los hijos casados la misma vivienda que sus padres. Por último, un porcentaje significativo (del 9%) vive en pensiones y albergues. — La mayor parte de las viviendas de musulmanes son pobres o míseras (65%) y están radicadas en los barrios o pobres o chabolistas de Ceuta y Melilla (81%). También en estos aspectos dan, con mucha diferencia, los mínimos de calidad de todas las colonias asentadas en el Estado español. — El nivel educativo de los musulmanes ceutíes y melillenses es bajísimo: 48% analfabetos o sin estudios, 35% sólo con instrucción primaria; el 17% secundaria; y ninguno de los encuestados con carrera media o superior. Como cabría esperar, esta situación se traduce luego en un fracaso escolar muy notable de los hijos: sólo el 14% obtiene "calificaciones altas", el 42% "medias" y el restante 44% diversas formas de fracaso escolar: bajas calificaciones, repetición de curso o abandono de la escuela. Un significativo 8% de los niños en edad escolar, de acuerdo con nuestra Encuesta, no está escolarizado. Todos estos indicadores reflejan que el colectivo de inmigranr tes musulmanes en Ceuta y Melilla es, desde el punto de vista educativoescolar, el más marginado de España. — De la población activa, el 30% se reconoce en paro, el 24% son comerciantes, el 15% empleadas de hogar y el 13% peones y operarios no cualificados. Sólo el 4% son trabajadores cualificados. La mitad de los trabajadores no están cubiertos por ningún tipo de seguro, ni público ni privado. Los ingresos netos medios de los trabajadores se sitúan en torno a las 30.000 ptas./mes, pero mientras hay un 6% de comerciantes fuertes que tienen ingresos superiores a 100.000 ptas., otro 31% gana menos de 15.000 ptas./mes (principalmente empleadas de hogar y trabajadores eventuales). Estos ingresos declarados representan también el nivel económico más bajo de todas las colonias inmigrantes radicadas en España (les siguen muy de cerca los centroafricanos). — El 78% prefiere la nacionalidad española y sólo el 13% la marroquí. A su vez, el 85% tiene idea de seguir viviendo en Ceuta y Melilla mientras sólo el 14% proyecta retornar a Marruecos. Su pobreza y bajo nivel de vida no les impi-
225 den reconocer que, aun estando mal en España, estaban mucho peor cuando vivían en Marruecos. — Ante la Ley de Extranjería, casi el 40% dicen no conocerla. De quienes la conocen, la mitad la consideran negativa y discriminatoria, y la otra mitad "ambivalente" (40%) o positiva (9%). — Preguntados por quiénes son los inmigrantes más discriminados en España, el 48% señalan que los de origen marroquí (o sea, ellos). Esta autopercepción de discriminación sólo es superada por los negros africanos (que en el 49% de los casos señalan que son ellos mismos los más discriminados). — Sólo el 1 3 % de los encuestados en Ceuta y Melilla dice que sus relaciones habituales son principalmente con musulmanes; el 3 2 % dicen que se relacionan más con personas de origen europeo y el 65% restante con ambos sectores por igual.
13.4.
La comunidad musulmana de Melilla.
Para elaborar este apartado, además de diversas fuentes objetivas — n o cuestionables—, nos hemos servido de informantes cualificados de la c i u d a d que con frecuencia disentían en sus j u i c i o s y opiniones sobre la realidad (37). Sopesando los argumentos de unos y otros, y teniendo c o m o criterio la mayor neutralidad posible, hemos llegado a nuestras propias conclusiones; sólo en algunos casos reflejaremos las diversas versiones existentes.
13.4.1.
Rasgos particulares de la ciudad de Melilla.
Melilla está enclavada en pleno territorio marroquí, a 200 kilómetros de la costa española (Málaga) y a 300 de Ceuta, la otra plaza española en el norte de África. Tan notables distancias hacen que el flujo cotidiano de la ciudad —en personas y mercancías— sea más fuerte con Marruecos que con la península, a pesar del gran volumen de pasajeros y de fletes recibidos por aire y por mar (38). Para los españoles, Melilla tiene un carácter "insular"; para los marroquíes de
(37) De las f u e n t e s c o n s u l t a d a s , el a l i n e a m i e n t o era d o b l e : por una parte, la a d m i n i s t r a c i ó n y a l g u n o s m e d i o s de c o m u n i c a c i ó n ; por otra, los líderes m u s u l m a n e s , ei representante de C C . O O . y las i n s t i t u c i o n e s de a y u d a no g u b e r n a m e n t a l e s . No t u v i m o s o c a s i ó n de e n t r e v i s t a r a s e c t o r e s de d e r e c h a o de e x t r e m a d e r e c h a , presentes en la c i u d a d , ni a representantes de las fuerzas armadas asentadas en la plaza. (38) M e n s u a l m e n t e el t r á f i c o de pasajeros q u e llegan a Melilla por vía aérea es de u n o s c i n c o mil y por vía m a r í t i m a en t o r n o a 12.000 (30.000 en j u l i o y a g o s t o ) . Ver B o l e tín de Estadística e I n f o r m a c i ó n M u n i c i p a l ( t r i m e s t r a l ) . E x c e l e n t í s i m o A y u n t a m i e n t o de Melilla.
226 la región de Nador, se trata de un importante centro de transacciones comerciales, "cáncer para la economía del norte de Marruecos" según algunas versiones. Hasta finales del siglo XIX Melilla fue una ciudad-puerto insignificante (1.517 habitantes en 1877). Entre los años 1900 y 1910 experimentó el mayor salto demográfico de su historia pasando de 8.596 habitantes a 39.852 ( + 445%). Entre 1910 y 1950, coincidiendo con la época del Protectorado español sobre el Noroeste de Marruecos, creció continuamente llegando a la cota máxima de 95.841 en 1949. Después, este número decreció paulatinamente (79.056 en 1960) hasta estabilizarse en los años setenta y ochenta en torno a las 60.000, según las cifras oficiales del Instituto Nacional de Estadística.
13.4.2.
Situación
laboral.
Aparte los 2.500 musulmanes nacionalizados, con carnet de identidad español, sólo 80 ó 90 personas de origen marroquí tienen permiso de residencia en toda regla (pasaporte marroquí más documento unificado de residencia y trabajo). La principal causa de esta situación anómala es, por parte española, el rechazo a concederles la nacionalidad y, por parte marroquí, la no concesión de pasaportes a quienes viven en Melilla ya que ello implicaría aceptar la soberanía española sobre dicha ciudad. Quienes trabajan legalmente en Melilla lo hacen con el permiso de trabajo de "validez restringida" que, desde el punto de vista legal, no incluye la "residencia". En noviembre de 1985 tenían este tipo de permiso 1.620 personas, de ellas casi la mitad "por cuenta propia" (742) y el resto "por cuenta ajena". Los trabajadores "por cuenta propia" tienen sobre todo comercios o bazares y puestos de hortalizas, pescado, etc. en los mercados. Dos tercios tienen "Tarjeta de Estadística" por lo que oficiosamente se les reconoce que viven en la ciudad, y un tercio tiene documento de identidad marroquí y en teoría no pueden pernoctar en Melilla (aunque de hecho muchos lo hagan). La notable presencia de musulmanes en el sector comercial de la ciudad se debe a su dominio del idioma árabe y su empatia cultural con los clientes mayoritarios que son precisamente marroquíes. De los trabajadores legales "por cuenta ajena" sólo el 35% tiene "Tarjeta de Estadística" y el resto documentación marroquí, lo que legalmente les obliga a pernoctar fuera de la ciudad. Por sectores, 282 permisos eran para trabajar en los "saladeros" (salazones de
227 pescado), trabajo eventual que depende de las temporadas pesqueras y que da trabajo sobre todo a mujeres marroquíes. Según nuestras informaciones, no es que a los españoles no les guste este trabajo sino que las condiciones laborales y de remuneración son totalmente abusivas (se señala que los patronos declaran 50.000 ptas./mes y pasan de hecho 25.000). Otro sector de trabajadores legales por cuenta ajena son obreros cualificados en el sector de la construcción. Todos estos trabajadores musulmanes, aun teniendo "tarjeta de estadística" y "permiso de trabajo" no tienen "derecho al subsidio de desempleo" ni a ser registrados en el INEM, ello a pesar de que muchos son melillenses de nacimiento (se señala el agravio comparativo con los trabajadores musulmanes de Ceuta con tarjeta estadística que sí cobran el paro). Esto supone que oficialmente sólo hay parados de origen europeo (unos 3.000) pero no parados musulmanes en la ciudad. En realidad la mayoría de los musulmanes no nacionalizados trabajan en la economía sumergida. En primer lugar, el contrabando o paso no reglado de mercancías desde Melilia a Marruecos. Cada día los tres pasos fronterizos —sobre todo el de Beniazar que comunica con Nador— registran un paso de 8.000 a 10.000 marroquíes y musulmanes melillenses que esconden bajo sus silabas y bultos infinidad de mercancías (pilas, transistores, cubiertos, mantas, material de labranza, piezas de coches...). Sobre todo, se puede ver a mujeres, muchas de edad avanzada: esperan ante la guardia real marroquí hasta que, en un momento de fortuna y mediante entrega de dinero, les dejan pasar. Se señala que también se traspasan mercancías campo a través o mediante barcas por mar. En sentido inverso, de Marruecos hacia Melilia, también se traspasan mercancías (hortalizas, carne y pescado, aceite, prendas de cuero, etc.) pero el contrabando es menor ya que un alto porcentaje se declara en la frontera y paga sus impuestos. Todas las fuentes nos indican que se consume mucha droga en Melilia, sobre todo en el Cuartel de Caballería y en la Legión (en Marruecos está prohibido el alcohol pero no el hachís). Otro sector laboral importante son las "empleadas de hogar". Legalmente ya vimos que sólo están registradas 350; sin embargo, en la propia Delegación de Trabajo se nos dice que son "un ejército". Las estimaciones van desde 2.000 a 8.000, incluyendo también a las que trabajan por horas. Todos reconocen que la mayoría de los hogares cristianos de la ciudad tienen "criada musulmana" lo que inclina más la estimación hacia la segunda cifra. Por término medio
228 cobran entre 10.000 y 20.000 ptas./mes (esta última cantidad ya se considera excesiva), los horarios de trabajo son elevados y no suelen tener ningún tipo de seguro. En cuanto a obreros no cualificados, fuente de tipo sindical nos indican que sigue habiendo mucha contratación ¡legal de musulmanes en diversos sectores, en especial la construcción (téngase en cuenta que para un trabajo legal, tienen de hecho preferencia los españoles o nacionalizados, concediéndose dicho puesto a un musulmán no nacionalizado sólo cuando nadie de aquellos lo demande). Como conclusión final, en lo relativo al mercado de trabajo, resulta evidente la discriminación ejercida oficialmente sobre los musulmanes residentes en la ciudad, desprotegidos por. la ley y obligados para sobrevivir, a aceptar condiciones infames, cuando no al "trapicheo" y al contrabando.
13.4.3.
Condiciones de vida.
Comparando los datos oficiales de trabajadores legales con las estimaciones estadísticas de musulmanes no nacionalizados, se deduce que en torno al 80% de la población activa de ese colectivo se sitúa en la economía sumergida o viven situaciones de subempleo y paro. De hecho, todos los indicadores de nivel de vida apuntan a que la mayoría de los musulmanes de Melilla son pobres y marginados. La vivienda en Melilla es ya un problema grande para los residentes legales, pero resulta "pavoroso" para los musulmanes (la relación precio/calidad en vivienda es la más cara de España). Durante bastantes años se ha tenido miedo a invertir "por la psicosis de entrega de la colonia" y ahora la construcción se ha puesto en marcha cuando los alquileres han subido hasta tal punto que resulta más barato comprar a plazos una nueva vivienda. La mayoría de los musulmanes ocupan los barrios periféricos y semichabolistas de la ciudad: Cañada de la Muerte, Monte Cristina, Los Cuernos, Canteras del Carmen, etc. las condiciones de vida, sobre todo en la Cañada de la Muerte, son infrahumanas: sin agua corriente (dos duchas públicas cerradas durante muchos años) y sin luz (el alumbrado llegó en 1984). El hacinamiento es también muy elevado (no es infrecuente que duerman sobre mantas en una sola habitación más de 10 personas).
229 Un pequeño sector de musulmanes, bien situados en el c o m e r c i o o en el c o n t r a b a n d o , tiene mejores c o n d i c i o n e s de vida, a veces incluso lujosas (si bien suelen cuidar una apariencia exterior modesta, sobre t o d o los no documentados). En lo sanitario, gran parte de los musulmanes no está adscrito a la Seguridad Social ni tiene seguro médico privado. Sin embargo, bastantes acuden c u a n d o lo necesitan a consultorios privados (que "se f o r r a n " con esta clientela, según varios informantes). Los más pobres suelen acudir a Caritas o al A y u n t a m i e n t o d o n d e solicitan, c o m o beneficiencia, la cobertura de sus necesidades sanitarias (partos, afecciones graves, medicamentos...). Los musulmanes tienen pánico al hospital de Nador y prefieren ser asistidos en Melilla. El a y u n t a m i e n t o , a su vez, se queja de que la cobertura sanitaria de los musulmanes les supone un gasto adicional muy grande ("Son adictos a los medicamentos...", "la hospitalización cuesta más de 10.000 ptas./día..."). Esto hace muy difícil el acceso de los musulmanes al hospital. En lo escolar, todos los niños de familias documentadas o inscritas en el registro civil llevan a sus niños a la escuela; también acude un sector de los no d o c u m e n t a d o s . Pero a pesar del deseo de la administración actual de acoger a todos los niños todavía hay m u c h o s no escolarizados. La administración española no concede becas a los musulmanes y, según se nos informa, la enseñanza u n i versitaria les está vedada. La marginación del colectivo musulmán ha atraído hacia ellos a diversas instituciones de asistencia (Caritas y Congregaciones religiosas) que se han esforzado por cubrir el hueco que deja la a d m i nistración: dispensarios, guarderías, comedores, escuela-puente con enseñantes voluntarios, centro para empleadas de hogar musulmanas, asistencia social, etc. Las " m o n j a s " (Hijas de la Caridad, Religiosas de María Inmaculada) son queridas por los musulmanes ("nos hacen muchos favores") lo que no obsta para que su acción sea del t o d o insuficiente para cubrir las necesidades sociales, sanitarias y educativas del colectivo.
13.4.4.
Asociacionismo.
La asociación de musulmanes más antigua de Melilla es la " A s o ciación Musulmana de Melilla" registrada c o m o entidad religiosa en el Ministerio de Justicia. Cuenta con unos 150 socios cotizantes y su tarea consiste en atender el culto religioso de cuatro mezquitas de la ciudad (otra mezquita depende directamente de Marruecos).
230 La "Asociación Socio-cultural Terra Omnium" se acogió a la Ley de Asociaciones en octubre de 1984. En ella predominan personas jóvenes, siendo su líder Aomar Mohamedi Dudú. Esta Asociación ha sido la más combativa del colectivo musulmán y su líder se siente —y es considerado por muchos— como representante de todos los musulmanes de Melilla. En 1986 se ha registrado el "Partido de los Demócratas de Melilla" a partir de la citada asociación. Por último, la "Agrupación de la Comunidad Musulmana de Melilla", liderada por Mohamed Ahmed Moli, se acogió a la Ley de Asociaciones en 1985 si bien funcionaba desde 1982. Cuenta con 500 socios musulmanes. La relación entre las dos asociaciones civiles musulmanas fue tensa y, según nuestros informantes, la administración española trató de fomentar las diferencias. Pero los acontecimientos vividos en la ciudad a raíz de la promulgación de la Ley de Extranjería han obligado a las asociaciones a entenderse y adoptar una estrategia convergente, bajo el liderazgo de Aomar Mohamedi.
13.4.5.
Conflictos surgidos a raíz de la Ley de Extranjería.
La Ley de Extranjería obligaba a más del 80% de los musulmanes de Melilla a confesarse "extranjeros en su ciudad" y, lo que es más grave, les conminaba a regularizar su situación teniendo que reunir unas condiciones que resultaban inalcanzables para la inmensa mayoría (sobre todo la condición de tener un trabajo legal o justificar medios de subsistencia). La rebelión de los musulmanes se inició después de la entrada en vigor de la Ley con la "protesta de las cacerolas", muy secundada en la Cañada de la Muerte y algo menos en Monte Cristina y Los Cuernos. En noviembre de 1985 tuvo lugar una polémica "asamblea de musulmanes" para abordar el tema de la Ley. El 23 del mismo mes más de 10.000 musulmanes (4.000 según la Delegación del Gobierno y 22.000 según los organizadores) se manifestaron en la ciudad contra la ley de Extranjería y contra la discriminación. El 6 de diciembre, día de la Constitución, los "cristianos" de la ciudad, presididos por las autoridades, reaccionaron con otra gran manifestación a favor de la Ley de Extranjería y de la españolidad de Melilla. El 28 de enero de 1986, dos mil mujeres musulmanas volvían a protestar en la Plaza de España de Melilla contra la Ley de Extranjería con un saldo de 15 heridos. De este modo, la brecha quedaba abierta a las acusaciones de racismo por parte d e j o s líderes musulmanes, un comunicado oficial
231 del PSOE respondía: "Declaramos nuestra repulsa a la manipulación que determinadas Asociaciones o individuos sin escrúpulos han efectuado con la manifestación del pasado día 23 haciendo intervenir en ella a personas extrañas a nuestro territorio y sin vínculos con nuestra ciudad, tergiversando el contenido y el espíritu de la Ley de Extranjería y confundiendo al colectivo que dicen representar, sin importarles crear un peligroso clima de enfrentamiento en una ciudad donde hasta ahora había sido modélica la convivencia étnica, religiosa y humana". El problema de la ciudad se volvió pronto un problema nacional que tuvo como principales interlocutores al gobierno central y al colectivo musulmán presidido por Aomar Mohamedi Dudú. La primera concesión del gobierno fue aplicar a los supuestos marroquíes de Meiilla el artículo 22 de la Ley de Extranjería que les convertía en "apatridas", ello con el único fin de poder conceder la "residencia" sin quebranto formal de ¡a ley a los que no podían justificar un trabajo ni medios de subsistencia. Luego fueron las promesas de nacionalización, objetivo perseguido por los musulmanes pero que todavía no se ha hecho efectivo (creemos que por temor a las consecuencias políticas de tal medida). Finalmente, el permanente vaivén de la administración española ha planteado la posibilidad de conceder nacionalizaciones "provisionales" hasta que se otorguen las definitivas. Paralelamente, el problema de Meiilla, trasladado enseguida a Ceuta, ha tenido otros muchos efectos, como la consecución de fuertes partidas económicas para mejorar las condiciones de vida de los musulmanes o, en otro orden de cosas, la victoria en Meiilla de la Coalición Popular sobre ios socialistas en las elecciones generales del 22 de junio. El sector cristiano de la ciudad, que es el que vota, castiga así lo que consideran ambigüedad y blandura del gobierno socialista frente a los musulmanes. Por otra parte, Aomar Mohamedi Dudú, era elegido asesor del Ministerio del Interior, cargo que posteriormente rechazó, a la vez que se replanteaba el tema del carácter árabe y marroquí de Meiilla y Ceuta. Desde el punto de vista de nuestro objeto de estudio, los musulmanes melillenses empezaron cuestionando radicalmente la Ley de Extranjería, hasta poner en evidencia que había sido hecha de espaldas a la realidad de los inmigrantes. Sin embargo, a medida que fueron consiguiendo un trato de favor en relación a la citada ley, parecen haberse olvidado de que la ley era "mala", no sólo para ellos, sino para todos aquellos inmigrantes asentados en España y que no estaban documentados; incluso han llegado a reconocer públicamente que se trata de una ley aceptable para España en general. De este modo, lo que podía haber sido un éxito para todos los inmigran-
232 tes asentados en España y discriminados por la ley, se ha convertido en una victoria local, insolidaria con los inmigrantes de otras regiones con los mismos problemas básicos, o sea inmigrantes marroquíes en la península.
13.5.
13.5.1.
La comunidad musulmana de Ceuta.
Rasgos particulares de la ciudad de Ceuta.
Ciudad hermana de Melilla, por su historia y por la estructura pluricultural de su población, se distingue de ella por su proximidad a la península y por su posición estratégica de lugar de paso entre el Mediterráneo y el Atlántico. El puerto ceutí, seguro y de gran calado, sirve como base de aprovisionamiento a una gran flota mercante (39) y es también base de una importante actividad pesquera. A su vez, una parte considerable del turismo europeo hacia África (sobre todo el "turismo barato") recala en Ceuta como primera o última etapa de viaje. Todo esto hace que esta ciudad sea menos dependiente de Marruecos que Melilla. El mayor crecimiento de Ceuta se corresponde con la época del Protectorado Español sobre el norte de Marruecos (1906-1956) habiéndose estabilizado su población en las últimas décadas (69.148 habitantes según el Censo de 1981). Hasta los años veinte del presente siglo los marroquíes tenían prohibido pernoctar en la ciudad; al caer la tarde, se levantaban las puertas y no quedaba ni un musulmán dentro del recinto urbano. Fue en los momentos de mayor tensión política y militar cuando, para evitar linchamientos por parte de quienes les consideraban "traidores", se les autorizó a residir dentro de la ciudad.
13.5.2.
Situación
laboral.
Las causas que han hecho crecer al colectivo musulmán de Ceuta no han sido políticas, ni por oposición al régimen autoritario de Hassán, ni como quinta columna contra España para defender la soberanía marroquí, sino de orden económico; buscan ganarse la vida
(37) 50.000 b a r c o s atraviesan a n u a l m e n t e el E s t r e c h o de G i b r a l t a r , de ellos 7.800 p e t r o l e r o s . El a p r o v i s i o n a m i e n t o se lo reparten entre C e u t a y A l g e c i r a s - L a Línea.
233 a través de las oportunidades de trabajo que les brinda la oiudad: c o mercio de verduras y pescado, diversas formas de contrabando y economía sumergida, empleadas de hogar, peonaje en el puerto o en la c o n s t r u c c i ó n , etc. Un sector de musulmanes, c o m o ocurría en Melilla, está muy bien situado en la actividad comercial de la ciudad lo que les aproxima a los sectores cristianos que también detentan poder e c o n ó m i c o o político. T a n t o este sector c o m o otros situados en un rango intermedio ven la fuente de su bienestar actual y futuro en permanecer v i n culados a España. Es más, hasta quienes tienen que soportar duras condiciones de vida y de trabajo prefieren mantener su actual situación antes que volver a Marruecos; incluso, se nos informa, los p r o pios jóvenes abocados al paro y que, para subsistir, se introducen en el tráfico de drogas o en la prostitución, hacen depender su fuente de ingresos del mantenimiento del actual estatuto de la ciudad.
13.5.3.
Condiciones de vida.
La población musulmana se concentra sobre t o d o en dos barrios: Hadú-San José, en t o r n o al Cuartel de Regulares, d o n d e habitan también m u c h o s cristianos, y el barrio del Príncipe Alberto, c o n t i g u o a la frontera y casi pegado al mar. En este barrio viven cerca de 12.000 musulmanes, la mitad de los que hay en Ceuta, hacinados en cientos de chabolas, rodeados de basura y sin apenas servicios públicos. Un laberinto de callejones y recovecos configuran este núcleo de población marginada y maltratada desde hace décadas. Los intentos de erradicar el chabolismo han sido estériles. En algún m o m e n t o , según se nos informa, se llevó una política de lucha contra las barracas c o n s t r u y e n d o viviendas y con la promesa de ir destruyendo paralelamente las barracas; pero de hecho éstas no se destruían sino que se revendían a otros inmigrantes. Hoy apenas se c o n s t r u y e n . Y los residentes españoles empiezan a construirse casas al otro lado del estrecho (bastantes, bajo cuerda, venden las viejas a marroquíes). Las peores c o n d i c i o n e s de los musulmanes en servicios sociales explican que, de hecho, el montante casi total de beneficiencia del A y u n t a m i e n t o se dedique a ellos y lo mismo el 80% de los efectivos de Caritas. La escuela española está abierta a los musulmanes si bien un sector de éstos se queja de que no se cultive su idioma y cultura propia (enseñanza bicultural). Los responsables religiosos de la c o m u n i d a d
234 musulmana llegaron a traer dos maestros de Marruecos con el objetivo confesado de enseñar la lengua árabe en .cuanto que ésta es vehículo del conocimiento religioso para los niños. Según han manifestado los dirigentes de la comunidad, están muy preocupados por la pérdida de la fe religiosa por parte de la población juvenil a causa del contacto con el mundo occidental.
13.5.4.
Asociacionismo.
En comparación con Melilla, se detecta en Ceuta una menor discriminación hacia los musulmanes, al menos desde el punto de vista subjetivo de la gente. Esto puede explicar que los movimientos asociativos sean más débiles y tengan menos capacidad de convocatoria. Además de la "Comunidad Musulmana de Ceuta", liderada por Ahmed Mohamedi y de carácter religioso, está la "Asociación Musulmana", liderada por Mohamed Alí. De todos modos, el corrimiento de la problemática socioeconómica y política entre los colectivos musulmanes de Ceuta y Melilla nos parece inevitable ya que es mucho más lo que les une que lo que les separa. La unidad mostrada en el proceso de negociación con la Administración central para que no les fuera aplicada la Ley de Extranjería es buena prueba de ello.
13.6.
Ceuta y Melilla en los medios de comunicación durante 1985.
Del vacio sistemático de la información sobre "extranjeros" aparecida durante 1985 en tres grandes periódicos (ABC, El País y El Periódico), destaca, en primer lugar, la gran extensión que se otorga a lo sucedido en Melilla y Ceuta: 32% en ABC; 30% en El País; y 10% en El Periódico de Barcelona. La diferencia de los porcentajes evidencia el carácter mas regional de El Periódico (más interesado en los problemas propios de los extranjeros residentes en Cataluña), mientras ABC y El País hacen del problema de los musulmanes de Ceuta y Melilla un problema nacional.
13.6.1.
ABC: defensa de la integridad de España.
Ya en febrero de 1985 una Tribuna Abierta de ABC planteaba lo siguiente: "La promulgación de la Ley de Extranjería (...) ha removido fondos turbios en toda España, pero con especial virulencia en
235 Ceuta y Melilla, donde la convivencia con minorías musulmanas, en una indefinición de su nacionalidad fomentada por la permisibilidad administrativa y por la innegable comodidad que en ciertos aspectos representa para esta minoría, ha saltado por los aires al pretender aplicar esta Ley. Antes existía un régimen legal similar no aplicado por una especie de acuerdo tácito, pero ahora, al intentar aplicar la Ley, revienta el sistema y quedan al aire lacras, fisuras, lamentaciones y, especialmente, se inicia un foso racial, hasta entonces insospechado entre las distintas religiones". Sin embargo, para ABC, "la Ley de Extranjería es una de las más generosas y progresistas de toda Europa Occidental, y aunque tenga algunas lagunas (...) sirve perfectamente para resolver los problemas de inadaptación y marginación que sufren los 'moros' de las dos plazas de soberanía"(6/XII). De todas maneras, "el principal escollo con que tropieza la aplicación de la Ley de Extranjería es la existencia en la ciudad de varios centenares de musulmanes que, a pesar de haber nacido en la ciudad o de llevar viviendo muchos años en ella, se encuentran sin ningún tipo de documentación que les acredite"(24/XI), "la tarjeta de estadística era un documento de dudoso valor legal que impedía a sus beneficiarios salir de la ciudad sin permiso gubernativo"(6/XII). Tal es la situación en torno a la que se han desarrollado las prácticas de los actores implicados: manifestaciones y contramanifestaciones, tensión entre líderes musulmanes y Delegado del Gobierno, intervención del Defensor del Pueblo, respuestas del Ministerio del Interior, repercusiones en países árabes, etc. Hay que resaltar que el peso mayor de la información está centrado en Melilla: "la promulgación de la Ley de extranjería tuvo repercusión inmediata y especial en Melilla"(7/XII). Los titulares sobre la dinámica de manifestaciones y contramanifestaciones son del siguiente tenor: — "La concentración de musulmanes en Melilla resultó un fracaso"( 107X1); — "Seis mil musulmanes se manifestaron en Melilla contra la Ley de Extranjería. El Alcalde, indignado por la protesta de unos 'ilegales"'(24/XI); — "Melilla: crispación y protesta de las dos comunidades"(30/XII); — "En Melilla temen que los musulmanes lleguen a alcanzar los poderes municipales. La manifestación de hoy exigirá firmeza al gobierno"(6/XII); — "La manifestación en Melilla a favor de la Ley de Extranjería fue un acto de afirmación Española"(7/XII); — "Los musulmanes de Melilla mantuvieron los comercios cerrados todo el día. Protestaban por el apoyo dado a la Ley de Extranjería"(8/XII); — "Los musulmanes de Melilla irán a Madrid en solitario contra la Ley de Extranjería"(11/XII).
236 El origen de esta gran polémica se sitúa en las posiciones encontradas a propósito de la aplicación de la Ley de Extranjería: "Los musulmanes (...) solicitan que la Ley no se aplique en la ciudad con las mismas características que en el resto de España"(24/XI) porque "puede suponer la expulsión del territorio nacional de unos seis mil marroquíes establecidos en Mejilla al margen de las Leyes españolas de lnmigración"(30/XI); piden "nada menos que la Ley —aprobada por las Cortes con notable unanimidad— sea revocada, y que se otorgue la nacionalidad española no sólo a los 20.000 indocumentados que malviven en Melilla (...), sino también a cuantos emigrantes clandestinos llevan viviendo en la ciudad más de un año"(6/XIII). Frente a esto "los vecinos de Melilla exigen la aplicación rigurosa de la Ley de Extranjería al igual que cualquier otra ciudad española sin excepciones de ningún tipo"(11/XII). Se trata de "no querer ser diferente al resto de España (...), Melilla es una ciudad española donde la Ley se aplica con el mismo rigor que en el resto de la nación, ya sea la Ley de Extranjería o la Ley de Aguas"(7/XII). La valoración que se hace de los dirigentes musulmanes de Melilla es del siguiente tenor: — "Al dar la policía el tercer y último aviso, que suponía la carga de la fuerza pública (en la primera concentración de musulmanes contra la Ley de Extranjería), hizo su aparición el organizador del Acto Aomar Mohamedi Dudú, hasta e n t o n c e s e n p a r a d e r o desconocido"(10/XI). — "Los dirigentes de la Organización Terra Omnium y su líder Dudú, han aprovechado la marginación legal y social de más de siete mil musulmanes, para lanzar un desafío al Delegado del Gobierno (...), y a través de él al PSOE local. Este desafío se extendió después a toda la colectividad política melillense (excepción hecha de CC.OO. y el Partido Comunista que, más por oportunismo que por convicción, apoyan a Dudú) y finalmente al propio Gobierno de la nación. Terra Omnium desea convertirse o reconvertirse en partido político —Partido de los Demócratas Musulmanes— y ha visto en la reivindicación actual una magnífica plataforma de lanzamiento. (...) En un maximalismo un tanto ciego, Terra Omnium y Aomar Dudú desean nada menos que la Ley (...) sea revocada (...). El techo de la reivindicación es tan inalcanzable que parece obligado preguntar por qué lo han elevado tanto sus promotores (...). S i g u e n s i e n d o d u d o s a s las i n t e n c i o n e s del grupo aglutinado en torno a Terra Omnium o a Dudú"(6/XII). — "El líder musulmán Mohamedi Dudú practica en estos momentos una estrategia de v i o l e n c i a v e r b a l , (...) no auda en calificar (la manifestación en favor de la Ley de Extranjería) de fascistoide y en llamar racistas a los que la organizaron y a los que en ella participaron. (...) Toda esta violencia verbal por parte de Mohamedi Dudú, aunque le ha dado un prestigio entre los sectores radicales de la colectividad musulmana, ha hecho que los canales de comunicación entre las autoridades y dicha comunidad estén prácticamente rotos"(8/XII).
237 En cuanto a los dirigentes musulmanes ceutíes. se nos da la siguiente visión: — " D i v i s i ó n e n el m o v i m i e n t o m u s u l m á n e n C e u t a . (...) D e s d e u n p r i m e r m o m e n t o p u d o e v i d e n c i a r s e el c l i m a d e e n f r e n t a m i e n t o i n t e r n o q u e e n la a c t u a l i d a d d i v i d e al c o l e c t i v o m u s u l m á n r e s i d e n t e e n la c i u d a d . D e u n a p a r t e el s e c t o r e n c a b e z a d o p o r M o h a m e d A l í , p r e s i d e n t e d e la A s o c i a c i ó n M u s u l m a n a d e C e u t a , c u y o s e s t a t u t o s e s t á n r e c o n o c i d o s p o r la D e l e g a c i ó n d e l G o b i e r n o , y d e o t r a , el q u e l i d e r a A h m e d S u b a i r e , d i r i g e n t e d e la q u e se a u t o d e n o m i n a C o m i s i ó n G e s t o r a d e la C o m u n i d a d M u s u l m a n a d e C e u t a q u e h a s t a la f e c h a n o t i e n e r e f r e n d o l e g a l a l g u n o " ( 7 / X I I ) ; — " L a s d i f e r e n c i a s e n t r e el D e l e g a d o d e l G o b i e r n o e n C e u t a y la C o m u n i d a d M u s u l m a n a d e e s t a c i u d a d se h a n a g r a v a d o al n e g a r s e el r e p r e s e n t a n t e o f i c i a l a r e c i b i r a A h m e d S u b a i r e , t r a s m o s t r a r s u a c a t a m i e n t o 'a la C o n s t i t u c i ó n y l o s p r i n c i p i o s d e m o c r á t i c o s d e la n a c i ó n e s p a ñ o l a ' , se m o s t r ó c o n t r a r i o a c u a l q u i e r t i p o d e v i o l e n c i a o i n t i m i d a c i ó n , a u n q u e p i d i ó al g o b i e r n o f l e x i b i l i d a d y g e n e r o s i d a d p a r a e v i t a r q u e la L e y d e E x t r a n j e r í a se c o n v i e r t a e n u n 'aval d e la e s c l a v i t u d ' . (...) S u b a i r e se m o s t r ó r e t i c e n t e c o n la i d e a d e u n a ' m a r c h a s o b r e M a d r i d ' , q u e f i n a l m e n t e o r g a n i z a r á n s o l a m e n t e los m u s u l m a n e s radicales de Melilla"(16/XII).
En cuanto a la actuación del gobierno, se le considera blando: — " L a n u e v a L e y d e E x t r a n j e r í a (...) n o a f e c t a r á a l o s c i u d a d a n o s d e o r i g e n m a r r o q u í r e s i d e n t e s e n C e u t a s e g ú n h a m a n i f e s t a d o el D e l e g a d o d e l Gobierno"(31/X); — " E l M i n i s t r o d e l I n t e r i o r (...) y el D e l e g a d o d e l G o b i e r n o e n M e l i l l a (...) a c o r d a r o n r e g u l a r i z a r la s i t u a c i ó n j u r í d i c a d e l o s m a r r o q u í e s r e s i d e n t e e n M e l i l l a y p r o c u r a r s u i n t e g r a c i ó n e n la s o c i e d a d e s p a ñ o l a . (...) El t i t u l a r d e la c a r t e r a d e I n t e r i o r c o m e n t ó t a m b i é n q u e su d e p a r t a m e n t o p r o p o n d r á al C o n s e j o d e M i n i s t r o s u n a s e r i e d e i n v e r s i o n e s a r e a l i z a r e n los n ú c l e o s d o n d e r e s i d e la m a y o r p a r t e d e esa p o b l a c i ó n , p a r a m e j o r a r s u s c o n d i c i o n e s d e v i d a . (...) L a s m a n i f e s t a c i o n e s d e l M i n i s t r o d e l I n t e r i o r h a n c a u s a d o h o n d o m a l e s t a r e n la . m a y o r p a r t e d e las f u e r z a s p o l í t i c a s m e l i l l e n s e s q u e c o n s i d e r a n e s t e a c u e r d o c o m o 'una nueva debilidad del gobierno"'(30/XI); — " E l G o b i e r n o h a r e s p o n d i d o a las r e i v i n d i c a c i o n e s d e T e r r a O m n i u m c o n p r u d e n c i a e h i p o t é t i c a f i r m e z a . D i g o ' h i p o t é t i c a ' p o r q u e hasta a h o r a ha habido más concesión que represión, y esto p r e o c u p a a no p o c o s m e l i l l e n ses q u e , t a l v e z d r a m a t i z a n d o , a d i v i n a n e n el l a x i s m o g u b e r n a m e n t a l el p r i n c i p i o d e l f i n . (...) T a n t o m i m o y p r u d e n c i a e n la a p l i c a c i ó n d e la L e y d e E x t r a n j e r í a n o e n t u s i a s m a p r e c i s a m e n t e a s e c t o r e s i m p o r t a n t e s d e la c o m u nidad española de Melilla"(6/XII).
En cuanto al Defensor del Pueblo, Ruiz-Giménez, pide aplicación 'matizada' de la Ley de Extranjería. (...) Las declaraciones de Ruiz Giménez han encontrado eco inmediato y distinto en la ciudad de Melilla. Mientras las comunidades musulmanas no dudan en mostrar su satisfacción a este respecto, la actitud de los partidos nacionalistas, Alianza Popular y el propio PSOE es ambigua y deja entrever un temor c o n t e n i d o ante la respuesta que el Defensor del Pueblo reciba
238 del Gobierno"(14/XII). "El Defensor del Pueblo ha elaborado dos informes sobre la cuestión que han sido enviados a los Ministerios de Interior y Justicia, en los que recomienda una aplicación matizada de la llamada Ley de Extranjería teniendo én cuenta las peculiaridades de la población musulmana. (...) En opinión del Sr. Ruiz-Giménez 'la religión está actuando como trasfondo del problema, lo que sería completamente anticonstitucional'. Los dos líderes musulmanes expresaron al Defensor del Pueblo su agradecimiento por el apoyo prestado a sus tesis e insistieron en su objetivo, lograr que no se aplique la Ley de Extranjería 'ya que somos españoles y no extranjeros"'(18/XII). A B C también se hizo eco de las reacciones exteriores contra la Ley, sobre todo en Libia (6/XII) y en Marruecos (26/XI, 12/XII, 26/XII). La actitud de este último país es valorada del modo que sigue: "Otro aspecto sobre el que se ha especulado sin demasiado fundamento durante los últimos días es el de la posible implicación marroquí en la tensión de Melilla. Nada permite aparentemente confirmarla. Las autoridades de Rabat siguen, naturalmente, con cuidado la evolución del problema, pero no parece que haya habido hasta ahora implicación alguna de cualquier servicio marroquí en la agitación. Para Marruecos, cualquier cambio en el 'statu quo" actual resulta preocupante"(6/XII). "El gobierno de Marruecos lo ha entendido lúcida y realistamente en esta ocasión y se ha limitado a plantear al Gobierno Español el negociar el 'status' de los marroquíes que viven en nuestro territorio nacional. Esto siempre será negociable, porque de hecho lo es, y responde a la costumbre internacional (...). Pero es que, además, en este caso parece una alternativa del todo conveniente, puesto que con ella se podrá deslindar qué corresponde convenir y negociar entre España y Marruecos y qué no cabe convenir y negociar porque es innegociable. Tan necesario como que se arbitren unas soluciones lo suficientemente comprensivas y humanas para el 'status' de los marroquíes, es que el gobierno de Marruecos comprenda que la relación con Melilla y Ceuta no es una relación posesiva por parte de España, sino una relación de constitutiva identidad como la que existe entre las partes que componen un mismo todo"(7/XII).
13.6.2.
El País: defensa de los derechos
constitucionales.
De los 53 textos que El País dedica en 1985 al tema de la Ley de Extranjería, 32 están relacionados directamente con la cuestión de Ceuta y Melilla, sobre todo con esta última ciudad. Entre estos textos
239 nos encontramos con dos editoriales, dos primeras páginas y el hecho de ser este medio el único que sistemáticamente ha destacado enviados especiales a cubrir la situación generada por la aplicación de la Ley en estas ciudades; todos estos datos revelan el interés de El País por este tema. La posición editorial del medio puede expresarse en los siguientes puntos: — "Si la Ley es de por sí mala, resulta peor cuando se contempla a la luz de sus efectos sobre (los) musulmanes"(24/XI). "Los melillenses de religión musulmana y de origen marroquí (...) se sienten amenazados por la entrada en vigor de la Ley de Extranjería"(17/XII). "Aunque muchos de ellos son nacidos en la propia Melilla, son apatridas y sus derechos como ciudadanos no alcanzan los niveles mínimos de dignidad en un país con régimen democrático. (...) La Ley de Extranjería ha sido la oportunidad perdida para arreglar esta situación"(24/XI). — "Los problemas (...) deben ser planteados y resueltos en términos políticos. No se trata sólo de las negativas consecuencias que esta insólita situación de inseguridad jurídica pudiera acarrear para la estabilidad de esa plaza de soberanía (...) y para nuestras relaciones con el Reino de Marruecos. Casi mayor importancia revestirían los negativos efectos que pudiera producir sobre la cultura cívica de los españoles, la salud de las instituciones democráticas y la vigencia de la Constitución de 1978 una política discriminatoria coloreada de racismo, entroncada con las peores tradiciones del integrismo religioso y negadora de los principios más elementales de respeto a la dignidad de la persona humana"(17/XII). — "Pero las leyes están no sólo para ser cumplidas, sino también para ser cambiadas cuando la justicia lo requiere. Sea cual sea el punto de vista (...) que se utilice, resulta muy difícil negar a los melillenses y ceutíes de origen marroquí residentes en ambas ciudades sus derechos a recibir, si así lo desean, la nacionalidad española en los términos y en los plazos más razonables"(17/XII). — "Resulta un sarcasmo que ese pronunciamiento programático en contra de cualquier discriminación de los españoles por motivos étnicos, religiosos, o de procedencia (que es la Constitución), sea obviado en la práctica mediante el procedimiento de negar o dificultar la condición de tales a quienes no presenten credenciales de cristianos viejos, una ascendencia mesetaria o una tez sonrosada"(17/XII). — En definitiva, se denuncia el "ciclo discriminatorio" y las "coacciones a las que tuvieron que hacer frente los musulmanes (...), una situación que cubre de lodo la moral política del gobierno y arroja sombras preocupantes sobre la estabilidad política y el futuro real de (aquellas plazas) de soberanía"(24/XI). Desde la perspectiva que marca esta línea editorial, la información que resta puede ser agrupada en los siguientes bloques: una determinada situación problemática, una dinámica de manifestaciones y contramanifestaciones que tienen como centro la aceptación o
240 el rechazo a la Ley y las gestiones ante el gobierno junto a la posición de éste al respecto. a) Situación problemática: "Esta Ley puede suponer la expulsión de España de miles de musulmanes o, en el mejor de los casos, la concesión de las denominadas tarjetas de extranjería a personas residentes desde hace años en Ceuta o Melilla, o incluso nacidas en una de estas ciudades españolas"(29/XI). Esto se suma a una situación ya deteriorada: "La comunidad musulmana (...) arrastra problemas históricos que deben aclararse, y que actualmente se concentran en determinadas discriminaciones de tipo laboral y sanitario (...), no disponen de los mínimos derechos como ciudadanos establecidos por la Constitución Española"(28/XI). b) Dinámica de manifestaciones y contramanifestaciones: "Más de 6.000 musulmanes de Melilla se verán afectados por la Ley de Extranjería"(23/X). "El Delegado del Gobierno en Melilla amenaza a quienes asistan a la asamblea musulmana"(9/XI). "Los musulmanes de Melilla piden que dimita el Delegado del Gobierno"(10/XI). "Incidentes en Melilla ante la manifestación musulmana contra la Ley de Extranjería"(21/XI). "Miles de musulmanes se manifiestan en Melilla contra la Ley de Extranjería"(24/XI). "Los partidos políticos de Melilla convocan una manifestación a favor de la Ley de Extranjería"(27/XI). "10.000 Banderas españolas para la marcha de la Ley de Extranjería"(30/XI). "Los defensores de la Ley de Extranjería tachados de racistas"(1/XII). "Banderas españolas engalanan Melilla ante la manifestación en favor de la Ley de Extranjería. Los musulmanes califican de 'fascistada' el acto convocado por todos los partidos"(6/XII). "Manifestación de 40.000 personas en Melilla a favor de la Ley de Extranjería. La manifestación en favor de la Ley de Extranjería. La manifestación en favor de la Ley de Extranjería se convirtió en un acto de reafirmación de la españolidad de Melilla"(7/XII). "Cierre de comercios del colectivo musulmán de Melilla"(8/XII). De la serie de titulares que hemos extractado resulta patente la dinámica de tensión creciente, a pesar de que el Delegado del Gobierno intenta "restarle importancia"(29/XI). El conflicto tiene una doble dimensión: por un lado la tensión entre el Delegado del Gobierno y el Colectivo musulmán; por otro, la existente entre este colectivo musulmán y el resto de la población de Melilla (con algunas excepciones); hay que resaltar que esta última tensión terminará absorbiendo a la primera.
241 c) Tensión entre el Delegado del Gobierno y el Colectivo Musulmán: "El Delegado del Gobierno en Melilla (...) ha desmentido rotundamente la llegada de fuerzas especiales antidisturbios de la Policía Nacional para intentar impedir la asamblea del pueblo m u s u l m á n (...). La asamblea ha sido convocada por un comité elegido entre miembros de la asociación musulmana Terra O m n i u m y los representantes de distintos barrios. La reunión ha sido considerada ilegal por la primera autoridad civil (...), t o d o ello en un clima de inquietud y crispación, ya que no son pocos quienes ven en ese enfrentamiento Delegado del G o b i e r n o - C o l e c t i v o Musulmán el c o m i e n z o de una serie de incidentes de imprevisibles consecuencias"(9/XI). "El Colectivo musulmán (...) pidió por boca de su representante A o m a r Mohamedi D u d ú (...) la dimisión del Delegado del G o b i e r n o (...) a quien no consideran 'interlocutor válido en el problema musulmán'. (...) Aomar hizo hincapié en que (...) se había presentado una denuncia contra el Delegado del G o b i e r n o por coacción"(10/XI). "En relación con la manifestación que ha c o n v o c a d o (...) el colectivo musulmán (...) f u n d a mentalmente para protestar contra la Ley de Extranjería pero también para solicitar que se legalice la presencia de todos los musulmanes nacidos en Melilla, (...) el Delegado del Gobierno ha ordenado paralelamente la difusión de una nota oficial en la que se aconseja a los musulmanes no asistir al acto a pesar de que ha sido autorizado"(21/XI). "Varios miles de musulmanes residentes en Melilla (...) se manifestaron (...) para protestar contra la Ley de Extranjería, en favor de los derechos h u m a nos y contra la discriminación que dicen sufrir por parte de las autoridades y de algunos sectores melillenses (...). La manifestación representó la afirmación c o m o líder indiscutible del colectivo musulmán de A o m a r M. D u d ú . (...) Las críticas más duras se centraron en el Delegado del Gobierno. La manifestación (...) estuvo precedida de un clima de gran t e n sión"(24/XI). "El Delegado del G o b i e r n o (...) admite que la situación es 'tensa', aunque trata de restarle importancia. (...) Para el colectivo m u s u l m á n , por el contrario, sigue creciendo"(29/Xi). Puede decirse que esta tensión que hemos reseñado queda absorbida por la que se da entre las dos c o m u n i d a d e s y que tiene su centro en la contramanifestación convocada en favor de la Ley y a p o y o del G o b i e r n o : "La totalidad de los partidos políticos de Melilla ha a c o r d a d o (...) solicitar a la Delegación del g o b i e r n o autorización para manifestarse por las principales calles de la c i u d a d el día de la C o n s t i t u c i ó n en defensa de la Ley de Extranjería"(27/XI). La bandera
242 española será la única que emplearán quienes participen (...) en la manifestación que, bajo el lema 'por la unidad de Melilla', ha sido convocada por todos los partidos políticos de la plaza en favor de la Ley de Extranjería y en apoyo del Delegado del Gobierno"(30/XI). "Representantes de las Comunidades Musulmanas de Ceuta y Melilla han enviado un telegrama al Rey, Presidente del Gobierno, Defensor del Pueblo y Ministro del Interior en el que califican de 'réplica racista' la manifestación convocada (...) en Melilla por todos los partidos políticos, en defensa de la aplicación en esta ciudad de la Ley de Extranjería (...) y en apoyo del Delegado del Gobierno. 'Consideramos que la manifestación puede significar la ruptura y enfrentamiento entre las dos comunidades de Melilla', dice el mensaje"(1/XII). El ambiente que acompañó a esta convocatoria se expresa así: "Estos días se han producido roturas de cristales en establecimientos de propiedad de conocidos conservadores de la ciudad, numerosos insultos a dirigentes del Colectivo Musulmán o defensores del mismo, acusaciones de racismo por parte de los musulmanes e incluso boicoteos a negocios de cristianos"(1/XII). Veamos cómo vivencian los diferentes actores el hecho mismo de la manifestación: "La manifestación (...), que ha sido denominada acto de 'concordia y convivencia' por el senador socialista (de Melilla), es interpretada por el colectivo musulmán como 'una contramanifestación racista' (...). El hecho de que la manifestación haya coincidido con el día de la Constitución y que en el acto se empleen banderas españolas fue valorado por Mohamedi Dudú: 'la bandera es para todos y no sólo para uno de los dos colectivos. La festividad del día de la Constitución ha sido manchada no para reinvidicar unos derechos, sino para reprimir los del colectivo musulmán"'(6/XII). "Alrededor de 40.000 personas participaron en una manifestación celebrada en Melilla a favor de la Ley de Extranjería (...) y en apoyo al Delegado del Gobierno. Para los convocantes, la marcha (...) fue un signo de convivencia, y para los musulmanes, la ruptura entre las dos comunidades asentadas en la localidad. (...) La marcha se abrió con una gran bandera española (...). Tras la primera fila de manifestantes, una gran pancarta con el texto 'por la Constitución y por los derechos humanos, sí a la Ley de Extranjería' daba paso a la masa de manifestantes, y a continuación, divididos en grupos, marchaban las diferentes organizaciones participantes detrás de pancartas con frases como 'aquí estamos patria querida', 'Delegado del Gobierno; el pueblo está contigo' o 'Melilla, para los españoles sin discriminación'. Al término de los manifestantes figuraba otra pancarta con el texto 'esta sí es una manifestación de españoles"'(7/XII). Por el lado musulmán, Aomar "calificó la manifestación de 'fascista y racista', y
243 precisó que la misma significaba ya 'la ruptura entre las dos comunidades', por lo que, en su opinión, los musulmanes entienden que ellos no están representados por los políticos melillenses, 'porque son sólo representantes de uno de los colectivos"'(7/XII). La respuesta práctica de la comunidad musulmana no se hace esperar. Al día siguiente "centenares de comercios melillenses de propiedad o regentados por musulmanes cerraron sus puertas como respuesta a la manifestación (...) en favor de la Ley de Extranjería, rechazada por el colectivo musulmán. El Delegado del Gobierno dijo que el 90% de los puestos de venta de alimentos en los seis mercados existentes en Melilla es regentado por musulmanes, y todos ellos permanecieron cerrados por lo que el abastecimiento alimenticio de la ciudad sufrió una incidencia 'importante, fuerte'. El alcaide de la ciudad declaró que se estaba registrando 'un vacío casi absoluto en los mercados'. (...) Por parte musulmana se calificó el cierre como 'una respuesta masiva a la contramanifestación fascista'. El Delegado del Gobierno también se refirió al cierre, como respuesta a la manifestación (...): 'Ahí está la reacción. Es una reacción de presión que no dice nada a favor de quienes la protagonizan y sin embargo hablan de democracia alegremente y reaccionan así cuando otro grupo ha hecho uso de su derecho democrático'. (...) El Presidente de la Cámara de Comercio (...) comentó que el cierre de los locales en los mercados era muy elevado. 'Bajo amenazas, indudablemente, han logrado un cierre total. Los demócratas musulmanes son así', afirmó rotundamente"(8/XII). Al interior de esta dinámica de tensión que refleja El País, hay algunos individuos y organizaciones que se ven afectados especialmente. Concretamente el dirigente musulmán Aomar Mohamedi Dudú, a quien se expulsa del PSOE y de su trabajo en el Ayuntamiento (2/XI, 29/XI, 30/XI, 1/XII, 15/XII); también se ve afectado el Sindicato Comisiones Obreras de Melilla, por su apoyo a las tesis del colectivo musulmán, con divisiones internas, amenazas, incremento de las afiliaciones, etc. (24/XI, 29/XI, 1/XII). Uno de los últimos bloques de la información de El País se centra en las posiciones del gobierno ante esta situación y las gestiones de los líderes musulmanes y del Defensor del Pueblo. Comencemos reseñando los titulares; — "El Gobierno tiene un plan reservado para conceder la nacionalidad española a un mayor número de musulmanes"(1/XII); — "Los musulmanes de Melilla rechazan las propuestas presentadas por lnterior"(15/XII); — Musulmanes de Ceuta y Melilla estudian en Madrid soluciones a sus problemas"(17/XII);
244 — Los musulmanes de Ceuta y Melilla piden una demora en la aplicación de la M
Leyd3Extranjería (19/XII).
Adentrémonos en los contenidos de estos'titulares para ver cómo se han llevado las relaciones directas entre Gobierno y comunidad musulmana, así como las modificaciones en las posiciones de ambos sectores: "El Ministro del Interior y el Delegado del Gobierno en Melilla anunciaron (...) conjuntamente (...) el propósito gubernamental de promover la integración plena en la sociedad española de la comunidad musulmana residente en nuestro país, concentrada fundamentalmente en Ceuta y Melilla. Ambos manifestaron la intención de situar a los musulmanes en igualdad de derechos y libertades con el resto de los españoles, y anunciaron la concesión de estatuto de residente a quienes ahora sólo disponen de tarjeta estadística o se hallan indocumentados. (...) El Ministro del Interior anunció, por su parte, que propondrá al Consejo de Ministros la aprobación de inversiones tendentes a favorecer la situación socio-económica en las localidades habitadas principalmente por musulmanes. Dichas inversiones se dedicarán, en concreto, (...) a mejorar viviendas, condiciones higiénicas, pavimentación, alumbrado, sanidad y educación. (...) En primer lugar, será abordada la generalización de la situación de residente y en segundo lugar, la concesión de la nacionalidad española a los musulmanes que acrediten reunir las condiciones requeridas"(30/XI). A esto se da respuesta, por el lado musulmán, del siguiente modo: "El dirigente musulmán melillense Aomar Mohamedi Dudú califica de 'ingenuos' a quienes crean que el citado plan del Gobierno puede convertirse en realidad (...). En este sentido, el dirigente musulmán repite que su colectivo se opone radicalmente a la aplicación de la Ley de Extranjería y, por el contrario, pide al Gobierno que otorgue inmediatamente la nacionalidad española a todo el que le corresponda, que en su opinión, como en la de los líderes musulmanes de Ceuta (...), debe ser aplicada a todos los nacidos en ambas ciudades de soberanía española"(1/XII). Por su parte, "el Subsecretario del Ministerio del Interior visitará (...) Ceuta y Melilla con el fin de estudiar sobre el terreno la situación de esta comunidad para tomar las decisiones oportunas. Fuentes del Ministerio del Interior consideran que este desplazamiento pone de manifiesto la importancia que otorga el Gobierno a (a resolución del problema"(7/XII). Sin embargo, una vez en Melilla, "el Subsecretario del Interior (...) ratificó (...) que el colectivo musulmán ha de acatar la Ley de Extranjería, por cuanto está en un país que no es el suyo, haciendo hincapié en que habrá algunas expulsiones (...) aunque sean mínimas en relación con la totalidad del colectivo"(15/XII).
245 Ante esto, "representantes de los musulmanes de Melilla (...) decidieron rechazar las propuestas presentadas por el subsecretario del Interior y mantenerse en su postura de no rellenar los impresos oficiales de la Ley de Extranjería"(15/XII). Por ú l t i m o , los representantes de los musulmanes de Ceuta y Melilla deciden desplazarse a Madrid para mantener " c o n t a c t o s con personalidades de Interior y Justicia y de la oficina del Defensor del Pueblo"(15/XII); se trata de "contactos técnicos encaminados a estudiar soluciones a los problemas que tienen ambos colectivos" (17/XII). A través de tales contactos los "representantes de los musulmanes de Ceuta y Melilla han solicitado al G o b i e r n o (...) una moratoria en la aplicación de la Ley de Extranjería (...). 'El subsecretario del Interior (...) ha a d m i t i d o en principio la posibilidad de a p l i car una mayor moratoria sobre la puesta en marcha de la Ley de Extranjería', afirmó Mohamedi Dudú (...) En caso de no prosperar sus propuestas, los musulmanes, que se mostraron altamente optimistas, señalaron que organizarán la anunciada marcha a Madrid"(19/XII). En esta compleja situación, El País resalta la intervención del Defensor del pueblo: " D o s asesores (del Defensor del Pueblo) se desplazaron (...) a Melilla para redactar un informe sobre la situación de los 27.000 residentes en esta población"(28/XI), "Las principales conclusiones de la visita de los dos asesores del Defensor del Pueblo (...) han sido la indocumentación y la marginación económica, 'provocada por el hecho de que desde hace 50 años n i n g ú n gobierno ha tratado seriamente de regularizar la situación'. (...) Así mismo se pretende diferenciar los problemas de las dos ciudades ya que (...) 'Ceuta está volcada hacia España, mientras Melilla lo está hacia Marruecos'"(17/XII). "El Ministro del Interior c o m u n i c ó al Defensor del Pueblo su intención de aceptar las sugerencias de esta Institución para que la Ley de Extranjería no sea aplicada en Ceuta y Melilla sin estudiar los supuestos especiales que se dan. (...) En medios jurídicos se ha interpretado la colaboración entre el Defensor del Pueblo y el Ministerio del Interior c o m o una prueba de voluntad para resolver el problema"(19/XII). Para terminar conviene señalar que si bien El País antepone la p r e o c u p a c i ó n por el respeto a los derechos constitucionales a c o n s i deraciones de orden geopolítico, esta perspectiva del problema no es dejada de lado (14/VIII, 24/XI, 1/XII, 7/XII).
246 13.6.3.
El Periódico: comprensión para los
Ya hemos indicado que de 125.000 ejemplares de durante 1985 el 10% de las tercera parte de lo dedicado
musulmanes.
este importante diario catalán (con más tirada) sólo dedica a Ceuta y Melilla informaciones relativas a extranjeros (la por ABC y El País).
La posición de El Periódico puede resumirse en el siguiente texto editorial: "Durante las últimas semanas, la comunidad musulmana de Melilla vive en permanente crispación por los temores que ha despertado la aplicación de la Ley de Extranjería. La aparatosidad de algunas autoridades en el trato con los afectados, la impericia de otros (...) y la escasa sensibilidad de casi todos los responsables de hacer que la Ley se cumpla han llevado la angustia a los miembros de una comunidad que no entienden cómo ahora se puede poner en duda su españolidad, después de considerarse a sí mismos como ciudadanos de nuestro país durante mucho tiempo. Las características especialísimas de la plaza de Melilla (...) aconsejan más que nunca aplicar a la comunidad musulmana los beneficios de la comprensión, antes que las frías disposiciones de la Ley escrita. A nadie se le escapa que no es de la misma naturaleza el problema que presentan los ciudadanos extranjeros indocumentados que viven en España que el de los musulmanes que habitan en Melilla, en muchos casos desde hace generaciones"(15/XII). Dentro del planteamiento anterior, este diario desarrolla la información de los hechos que se suceden del siguiente modo: — A n t e la m a n i f e s t a c i ó n m u s u l m a n a e n r e c h a z o a la Ley d e Extranjería "el D e l e g a d o del G o b i e r n o e n M e l i l l a , restó i m p o r t a n c i a a la m a n i f e s t a c i ó n (...) r e c o r d ó q u e la Ley d e E x t r a n j e r í a h a b í a sido a p r o b a d a por el P a r l a m e n t o E s p a ñ o l y p o r t a n t o se a p l i c a r á e n t o d a E s p a ñ a . A d e m á s , la L e y p e r m i t i r á (...) a c a b a r c o n la s i t u a c i ó n 'atípica, c u a n d o no ilegal' e n q u e viven la m a y o ría d e los m u s u l m a n e s " ( 2 5 / X I ) . — F r e n t e a esta m a n i f e s t a c i ó n , "La m a y o r í a d e los partidos políticos melillenses h a n a c o r d a d o (...) c o n v o c a r u n a m a n i f e s t a c i ó n (...) e n a p o y o d e la Ley d e Extranjería y del D e l e g a d o del G o b i e r n o " ( 2 7 / X I ) . — Por su p a r t e , "el G o b i e r n o a p r o b ó u n plan 'para m e j o r a r las c o n d i c i o n e s básicas d e C e u t a y M e l i l l a d e c a r a a i m p u l s a r u n a m e j o r a e n las c o n d i c i o n e s d e vida d e la c o m u n i d a d m u s u l m a n a en estas c i u d a d e s (...). El plan consiste e n u n a s u m a d e inversiones e n o b r a s y servicios p a r a t r a n s p o r t e s a é r e o s y m a r í t i m o s c o n la p e n í n s u l a , m e j o r a e n las i n s t a l a c i o n e s p o r t u a r i a s , f o m e n t o del t u r i s m o , m e j o r a d e la e s t r u c t u r a h o s p i t a l a r i a , d e vivienda, a b a s t e c i m i e n t o de agua, etc."(6/XII). — F i n a l m e n t e , "el c o l e c t i v o m u s u l m á n d e M e l i l l a ha d e c i d i d o en a s a m b l e a r e c h a z a r las p r o p u e s t a s del G o b i e r n o p r e s e n t a d a s por el S u b s e c r e t a r i o del Interior (...) ( q u i e n ) les o f r e c i ó f o r m a r p a r t e d e la c o m i s i ó n d e a p l i c a c i ó n del
247 Plan de Dotaciones Básicas para Melilla. Los musulmanes se mostraron contrarios a que los nacidos en Melilla reciban calificación de extranjeros"(16/XII).
13.6.4.
Balance: Melilla como "analizador" de los valores subyacentes en la prensa nacional.
Tiene razón A B C c u a n d o afirma que la p r o m u l g a c i ó n de la Ley de Extranjería "ha removido f o n d o s t ú r b i d o s (...) c o n especial virulencia en Ceuta y Melilla". Además, el tratamiento de esta cuestión por los medios escritos se presenta c o m o un importante y significativo analizador de los propios medios a los q u e nos referimos. Es sobre t o d o a propósito de esta cuestión c u a n d o aparecen c o n nitidez ciertos " f o n d o s " de cada uno de los tres diarios y de la c o n t r a p o s i c i ó n d i f e renciadora entre ellos. El tratamiento en cuestión, por ejemplo, evidencia las diferencias entre un diario c o m o El Periódico, de carácter más regional, y d i a rios de c i r c u l a c i ó n nacional c o m o A B C y El País (diferente densidad informativa entre cada uno de los tres diarios). Parece que la i n m e diata significación para Cataluña no es muy grande (a pesar de que en Cataluña haya unos 20.000 musulmanes) por lo que el s e g u i miento detallado no se hace necesario. A B C y El País, por su parte, sí realizan un seguimiento detallado de la problemática que se desata en ambas ciudades c o m o resultado de la aplicación de la ley. Y en este seguimiento emerge una clara c o n t r a p o s i c i ó n entre los dos diarios, c o n t r a p o s i c i ó n en la que se definen las diferencias ideológicas entre uno y otro. Para El País son prioritarios los valores constitucionales; para A B C la prioridad se centra en la integridad de España (esto no quiere decir que lo p r i o r i tario de u n o no tenga interés para el o t r o ; lo tiene pero no es p r i o r i tario). Para El País, es preciso dar s o l u c i ó n positiva a la situación de los musulmanes nacidos en cada una de las dos ciudades; para A B C los musulmanes nacidos en Ceuta y Melilla son un escollo a la Ley. El País d e n u n c i a fuertemente al G o b i e r n o por su falta de moral política, por su ambigüedad y por su oportunismo; A B C , en c a m b i o , c r i tica al G o b i e r n o por su condescendencia y su poca capacidad represiva. En definitiva, diferentes valoraciones de las manifestaciones, de los actores implicados y de la intervención del Defensor del Pueblo. T o d o esto, y otros aspectos más secundarios que podrían añadirse, son elementos indicadores de las distintas perspectivas puestas en juego. Puede resultar de interés prestar atención a algunos detalles respecto de las manifestaciones. Por ejemplo, mientras para A B C la
248 primera manifestación musulmana contra la Ley de Extranjería resulta un fracaso, El País la considera un éxito de los musulmanes y da cuenta de los intentos del Delegado del Gobierno para impedir a los musulmanes la asistencia a la misma; y mientras El País da cuenta de la gran cantidad de asistentes a la segunda manifestación musulmana contra la Ley, ABC deja entrever que la mayoría de los manifestantes son unos ilegales llegados para la ocasión. Hay una curiosa coincidencia entre los dos medios al caracterizar la manifestación convocada en favor de la Ley por los partidos políticos melillenses como "acto de reafirmación de la españolidad de Melilla" (El País) y "acto de afirmación española" (ABC).