T U R IS MO
Por: César Mauricio Olaya Corzo
L
Comunicador Social – Periodista
a alarma del reloj marca las 4:30 de la madrugada. A la distancia comienzan a escucharse algunos ruidos inconfundibles que emanan de entre la naturaleza circundante y que a medida que pasan los minutos, se van acrecentando hasta convertirse en una verdadera sinfonía donde graznidos, piares, silbidos y trinos, enmarcan el comienzo de una actividad que sintoniza a todos los que de alguna manera tienen como principio seductor el universo de la pajarería, una actividad que cada día se posesiona con más fuerza alrededor del mundo y que tiene a Colombia en sitial de honor al reconocerle el título de ¨País de las Aves¨.
Stilpnia cyanicollis (Tangara Real)
De acuerdo con las cifras oficiales, para Colombia se tiene un registro de 1 942 especies de aves; entre nativas, residentes o migrantes. Esta cifra, para resaltar lo significativo de la cifra, traduce en qué en nuestros valles, bosques, selvas, montañas y costas, habitan permanente o temporalmente, la cuarta parte de las aves del planeta entero. ¿Pero en qué consiste esta actividad genéricamente llamada pajareo? - En plata blanca se trata de disfrutar de la presencia de nuestros ¨tesoritos alados¨ tanto para dejar consignada en la memoria su presencia o ya de una manera un poco más sistemática, chulear su avistamiento en la lista de chequeo, o inmortalizar el instante de su presencia a través de una fotografía. Una labor que sobre el papel parece sencilla, pero que implica todo un compendio de capítulos alineados todos tras el mismo objetivo: sumar el ¨Lifer¨ (primer avistamiento) al placer casi ególatra de ir conformando el álbum de los instantes pajareros.
45
E n c u e n t ro s
Entre trinos y colores. Bienvenidos al yoga de la naturaleza