Yo, Fernando, te amo a tí, Danniella, y te tomo por esposa. Y me comprometo a hacer crecer nuestro amor día a día, a esforzarme siempre y trabajar juntos por el futuro que esperamos, para que nuestras vidas lleguen a ser estímulo de alegría y esperanza para todos y nuestro matrimonio sea señal de la presencia de Dios entre los hombres. Por eso yo, Fernando, te acepto a tí, Danniella, como mi esposa, y prometo serte fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, y amarte y respetarte todos los días de mi vida.
Yo, Danniella, te amo a tí, Fernando, y te tomo por esposo. Y me comprometo a hacer crecer nuestro amor día a día, a esforzarme siempre y trabajar juntos por el futuro que esperamos, para que nuestras vidas lleguen a ser estímulo de alegría y esperanza para todos y nuestro matrimonio sea señal de la presencia de Dios entre los hombres. Por eso yo, Danniella, te acepto a tí, Fernando, como mi esposo, y prometo serte fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, y amarte y respetarte todos los días de mi vida.
Fer y Dany
SEPTIEMBRE / 18 / 2014