Revista Mundo Contact Agosto 2015

Page 1

Número 133-2015

LA REVISTA ESPECIALIZADA EN TIC

LTE, un propulsor para el Internet de las Cosas 12

¿Conviene o no implementar un ERP? [Pag. 4] El dilema del almacenamiento ‘gratuito’ en la nube [Pag. 8] 20 años de evolución hacia el Customer Experience [Pag. 18] Movilidad, sí. Seguridad, ¡También! [Pag. 22]


Editorial Con el Internet de las Cosas y la tecnología LTE, se puede hablar de la tercera ‘revolución industrial’ Con el Internet de las cosas, también conocido como el Internet de Todo, precisamente ‘todo’ estará interconectado, gracias a que con etiquetas, frecuencias de radio, sensores y chips instalados en todo tipo de cosas, ya sean máquinas, equipos, procesos e incluso personas, podrán están interconectadas para operar y gestionar actividades de toda índole, ya sea que correspondan al hogar, el trabajo, los estudios, los autos, etc. Finalmente, todo esto redunda en la acumulación de poder para conocer y gestionar nuestro entorno con mayor eficiencia, comodidad y ahorros tanto para las personas como para las empresas y los gobiernos. La conexión 5G, conocida como tecnología LTE (Long Term Evolution) está siendo en la actualidad un gran propulsor para que el IOT sea cada vez mas una realidad cotidiana. La conexión 5G es 65,000 veces más rápida que su antecesor 4G, misma que utilizan los dispositivos móviles de alta gama, y estará disponible plenamente en el 2020. Su velocidad es de hasta 50 Gb por segundo, y con recursos de gestión de tráfico con capacidad 1,000 veces mayor y 100 veces más rápido que en la actualidad. Todo esto constituye una condicionante fundamental para transitar de manera eficiente y rápida en las redes globales. En el presente número de nuestra revista abordamos mas sobre este tema y comentamos acerca de los desafíos y retos que México afronta para acceder a estas tecnologías, que definen a la ‘tercera revolución industrial’.

El Consejo Editorial



¿Conviene o no imp

El primer paso para alcanzar una implementación exitosa es la elección del ERP adecuado; las empresas que eligen correctamente tienen una reducción de hasta 35% en pérdidas.


plementar un ERP?


El Sistema de Planeación Gerencial (o ERP, por sus siglas en inglés) ha evolucionado a través del tiempo. Inició con la intención de administrar de manera más eficiente las áreas clave de una empresa (contabilidad, facturación, ventas, compras y costos) a partir de módulos. La desventaja es que dichos módulos no estaban integrados, y por ello, las organizaciones sólo aprovechaban parcialmente las funciones del sistema. Con el paso de los años, las desarrolladoras de ERP decidieron incrementar la funcionalidad de la solución a partir de la integración de sus componentes y así facilitar la comunicación entre las áreas del negocio. Si bien es cierto que con este cambio vino el crecimiento de la funcionalidad del ERP, también lo volvió más robusto, tardado y costoso de implementar. Esto, a la vez, lo ubicó exclusivamente en la mira de los grandes corporativos. Los empresarios perciben al ERP como una solución compleja y difícil de implementar, pero también están conscientes que de su implementación depende el adecuado funcionamiento de su empresa y posiblemente su subsistencia. Esto lleva a plantear las siguientes preguntas: ¿Conviene o no implementar un ERP? ¿De qué depende su éxito? ¿Cómo devolver al ERP la confianza que los directivos y gerentes solían tenerle? De acuerdo con estudio realizado por Harvard Business Review, las empresas que adquieren un ERP tienen una reducción de pérdidas y mermas del 10%, pero quienes lo eligieron correctamente tienen una reducción hasta del 35% en promedio. En ese sentido, los tomadores de decisiones al estar conscientes de este hecho, es natural que deban optar por la implementación de un ERP pero de una manera más controlada y efectiva que permita aumentar su tasa de éxito. El primer paso para alcanzar una implementación exitosa es la elección del ERP adecuado. A continuación se presentan 5 pasos fundamentales para elegir el ERP indicado: 1. Involucre a sus colaboradores Si se llegó al acuerdo de la necesidad de implementar un ERP, la recomendación es involucrar a las personas que se verán impactadas directamente con la decisión, como: usuarios finales, personal de sistemas responsable de la administración del sistema y gerentes y directivos. 2. Defina qué se quiere lograr a través de un ERP Debemos entender nuestro modelo de negocio y cómo se espera que la implementación del ERP podría optimizar y facilitar su operación. Bajo esta premisa, se debe definir el esquema de implementación, las prioridades, impacto al negocio y beneficios probables, así como considerar qué áreas se verán impactadas con la decisión. A partir de la automatización, los procesos clave para el negocio que se beneficiarán, serán las áreas de: Ventas, Compras, Inventarios, Finanzas y Contabilidad, Nómina y Producción


3. Escalabilidad Escoger un ERP que pueda cubrir las necesidades actuales del negocio y a la vez cuente con la capacidad de evolucionar en el futuro a la par del negocio, es vital. Por eso, antes de tomar una decisión es de suma importancia considerar la escalabilidad de la solución en dos planos: • Horizontal: con módulos o funcionalidades a implementar cuando el modelo de gestión evolucione. • Vertical, que soporte el crecimiento transaccional si el negocio crece. No perdamos de vista que la elección de un ERP significa vivir con el de cinco a 10 años el día a día de la organización, por lo tanto es recomendable escoger una solución que sea actualizable y escalable. 4. Elija un aliado de negocios, no una marca Seleccionar a un proveedor de software de gestión empresarial es, probablemente, el paso más importante. La recomendación es elegir a quien comercialice un software de calidad con la escalabilidad necesaria y que cuente con ese grado de flexibilidad que requieren los cambios en el modelo de negocio conforme crece. También hay que considerar: • La cantidad y calidad de clientes e implementaciones hechas. • Si la empresa realiza actualizaciones frecuentes, entonces habla bien del proveedor ya que significa que lleva a cabo mejoras en sus productos y está al pendiente de sus clientes. • Disponibilidad de recursos capacitados tanto para la implementación como para el soporte técnico posterior. • Presencia local. 5. Planee los tiempos de implementación Finalmente, es importante tener presente que todo proyecto lleva su tiempo. A lo largo de todos estos años, he detectado que para que un ERP sea implementado de manera correcta y exitosa, se debe considerar en la planeación: • El uso de los recursos internos, su disponibilidad, experiencia y conocimiento, porque de éstos dependerá la duración y éxito del proyecto de implementación. • La adherencia a los procesos estándares de la solución, pues de ésta depende el nivel de adecuaciones y/o desarrollos que se deberán realizar. • La calidad de los datos y procesos de negocio existentes. • La cultura de la empresa respecto a la tecnología y su adopción. El tiempo de implementación puede variar de 2 meses hasta 2 años, dependiendo de los factores antes mencionados. Por Martín Cayón, Director TOTVS Norte de América Latina


El dilema del almacenamiento ‘gratuito’ en la nube Si bien el servicio de almacenamiento puede ser libre para el cliente, la infraestructura de almacenamiento y los servicios de datos seguirĂĄn siendo costosos para el proveedor.



Hay personas que creen que un día todo el almacenamiento será libre. Varias compañías líderes en Internet ya están ofreciendo servicios de almacenamiento en nube para sus fotos y documentos sin costo o con un valor reducido por el servicio. Se cree que en un futuro estos costos serán nulos para el usuario, mientras los proveedores compitan por la preferencia del cliente en la denominada ‘Carrera a Cero’ (Race to Zero). Y es aquí donde cabe reflexionar si realmente se puede llegar a un modelo totalmente gratuito. Si bien el servicio de almacenamiento puede ser libre para el cliente, la infraestructura de almacenamiento y los servicios de datos seguirán siendo costosos para el proveedor. La construcción de centros de datos a hiper-escala cuesta miles de millones de dólares, y los proveedores de nube tendrán que encontrar otros servicios para costearlos o sacar provecho de los datos que se contienen en ese almacenamiento ‘libre’. Debemos considerar que cuando se toma una foto desde un teléfono celular y se guarda la imagen en un servicio de nube pública, se guarda información sobre dónde y cuándo se tomó una foto. Además, las imágenes en las fotos se pueden analizar, lo cual puede revelar información sobre las preferencias de los usuarios. De esta manera, se ofrece almacenamiento gratuito para obtener cierto tipo de control sobre sus datos personales, lo que puede compensar el costo para estos proveedores de nube. Se trata de almacenamiento gratuito por publicidad dirigida, lo que puede ser un comercio aceptable para almacenar sus fotos familiares. De hecho es posible apreciar la notificación cuando su estilo de zapatos favoritos está a la venta en una tienda o sitio web local. Sin embargo, ciertamente no es aceptable para los usuarios de almacenamiento empresarial. Greg Knierierman, quien trabaja para HDS y tiene un podcast exitoso (SpeakingTech) en The Register, ha estado blogueando sobre la necesidad de las empresas de controlar sus datos. Cita una encuesta reciente de The Economist, donde 87% de los encuestados informó que su alta dirección está muy preocupada por la seguridad y privacidad de los datos corporativos. Estoy seguro de que los usuarios empresariales no utilizarán almacenamiento gratuito a menos que el proveedor pueda garantizar la seguridad y privacidad de los datos. Cabe tener en cuenta que ofrecer almacenamiento gratuito es una manera de mantener por más tiempo a los clientes, ya que es difícil mover grandes cantidades de datos de una nube a otra a través de Internet. Se vuelve aún más difícil si el proveedor de la nube utiliza una aplicación propietaria. No es descabellado pensar que los proveedores de nube pública pueden incluso ir más allá de cero, y ofrecen rebajas u otros incentivos para atraer a los usuarios para almacenar datos en su nube como una forma de encerrarlos en otros servicios que sí causan honorarios. Una forma de evitar la trampa de almacenamiento gratuito es utilizar una plataforma de contenidos que proporcione todos los controles para almacenar, acceder y proteger los datos sin importar el servicio de nube que utiliza. Existen soluciones que permiten gestionar todos los datos de contenido desde el firewall, almacenar datos en cualquier lugar, incluyendo la nube pública, y acceder a ella en cualquier lugar con la debida autorización y autenticación. El cliente controla el cifrado de los datos donde quiera que resida y se puede usar Crypto sin miedo de dejar cualquier dato atrás. Almacenamiento en la nube de forma gratuita es sólo otra herramienta que los individuos y las empresas pueden utilizar para gestionar sus necesidades, siempre y cuando ellos entiendan los requerimientos de sus datos y las compensaciones. Nada es gratis. No se puede medir en dinero, pero siempre requerirá alguna compensación. Puede significar que el cliente renuncie a algún tipo de control. Esta semana estoy de viaje en la India, y voy a ser capaz de comunicarme con mi familia y hablar con mis nietos, de forma gratuita, utilizando FaceTime. Si bien el servicio es gratis, ahora toda mi familia tiene un dispositivo de Apple: esa es la ganancia de la empresa.


Para finalizar, considero que el mayor riesgo en el ‘Race to Zero’ es la sostenibilidad de este modelo de negocio. Se requiere innovación constante para mantenerse por delante del juego. Mientras Occidente se centra en los proveedores de nubes públicas como Amazon y Google, hay otras empresas en la nube en otras geografías como AliBaba Group, de China, que podría ser mucho más agresivo e innovador en esta carrera. Por Hu Yoshida, CTO de Hitachi Data Systems


LTE, un propulsor para el Internet de las Cosas El impulso que la tecnología LTE dará al Internet de las Cosas será determinante, en el nuevo mundo de la conectividad y en la visión de mundo de las nuevas generaciones.

Por Laura Sarmiento



El proceso de comunicación se resume como: emisor+mensaje+medio+receptor, sin embargo, en la era del Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) no solo las personas podrán hablar entre sí y ser parte de este proceso, también lo harán las organizaciones, industrias y los objetos que forman parte de nuestra vida cotidiana. IoT no es más que un concepto que se refiere a la interconexión digital de objetos cotidianos con internet, vía etiquetas, frecuencias de radio, sensores y chips, a través de las cuales serán identificados y gestionados, ya no por personas sino por otros equipos. En la era del Internet de las Cosas los objetos se comunican entre sí y empiezan a tomar ‘pequeñas’ decisiones, lo que cambiará nuestra percepción del mundo y la forma en la que hacemos todo, ya que se interconectarán cosas físicas y virtuales. De aquí al 2025 habrá unos 100 mil millones de dispositivos de todo tipo que estarán conectados a la red de redes, por lo que Internet de las Cosas protagonizará la llamada ‘tercera revolución industrial’ con impacto en la economía mundial. En este proceso, la tecnología inalámbrica en telecomunicaciones y el espectro serán elementos esenciales. 5G, la quinta generación de la telefonía móvil y sucesora de la 4G, se encuentra en proceso de estandarización y desarrollo de los protocolos correspondientes para estar plenamente disponible en el 2020. La conexión 5G o Long Term Evolution (LTE) es hasta 65,000 veces más rápida que la 4G, que actualmente utilizan los dispositivos móviles de alta gama, con una velocidad real de hasta 50 Gigabits por segundo, es decir, velocidades y recursos de gestión del tráfico de datos inimaginables (con una capacidad 1,000 veces mayor y más de 100 veces más rápido que en la actualidad). Cabe señalar que el número de conexiones LTE llegó a 634.9 millones a marzo de 2015 en todo el mundo, un crecimiento de 151%, pero representan apenas el 9% del total. A nivel mundial se trabaja para limpiar y liberar espectro a fin de contar con la infraestructura necesaria para enfrentar la demanda que se generará para transitar de manera eficiente y rápida en la red de redes. La empresa Huawei prevé que para 2025 las aplicaciones de Internet de las cosas tendrán una participación del 22% de las conexiones relacionadas con el estilo de vida inteligente, 18% en el hogar inteligente, 15% en la industria, 12% en las ciudades inteligentes, 10% en las herramientas inteligentes, 5% en los autos conectados y 18% en los negocios. Se espera que el Internet de las Cosas represente el 50% del volumen de todos los datos de la red y para la administración de esta cantidad de información se deberá contar con la infraestructura necesaria.


El tránsito hacia un mundo interconectado La Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) estableció un grupo de estudio para abordar los requisitos para la estandarización de la tecnología de Internet de las Cosas (IoT), con un enfoque particular en las aplicaciones para ciudades inteligentes, incluido el segmento máquina a máquina y los sensores ubicuos de redes. Se espera que el despliegue de tecnologías de Internet de las Cosas conecte 50 mil millones de dispositivos a la red para el año 2020. José Otero, director de 4G Américas, destacó que uno de los problemas más complejos de resolver para la popularización del Internet de las Cosas es la falta de plataformas estándares de interconectividad de unos aparatos con otros, dado que varían dependiendo de los fabricantes y eso impide la comunicación de unos con otros. En breve, cualquier objeto estará conectado a internet mediante todo tipo de sensores ‘que serán muy comunes en todas partes’, en refrigeradores, microondas, termostatos o lavadoras. En cualquier hogar podrían encontrarse por decenas para ser utilizados al mismo tiempo: sensores de temperatura, humedad, volumen de la música, control de persianas. Lo recomendable sería poderlos controlar todos ellos con un sólo mando, probablemente el móvil y se necesitan plataformas de comunicación ‘a gran escala’, que permitan a las máquinas entenderse y ese reto no se ha logrado. Durante el Network Congress 2015, Huawei lanzó la red ágil 3.0 en la cual todo es programable y con gestión integrada, apertura total de Internet y SDN (Software Defined Network), a través de la cual será posible digitalizar áreas y procesos industriales completos, y LiteOS, el sistema operativo de 10 KB que propone interconectar y potenciar a todos los equipos que conforman el Internet de las Cosas, que busca conectar dispositivos, autos y electrodomésticos, entre otros objetos. Este sistema combina tres bandas de frecuencias (800, 1800 y 2600 MHz) y permitirá alcanzar velocidades de hasta 375 Mbps de bajada y 50 Mbps de subida.

Desafíos y retos para México En México, la mayoría de los usuarios se encuentra en 2/3G con servicios GSM/Edge, iDEN, CDMA y UMTS, lo que equivale al 92.7% de los usuarios. Una menor proporción (7.3%), se encuentra en tecnologías más avanzadas como HSPA+ y LTE. La idea de una enorme variedad de dispositivos interconectados sugiere tres retos específicos, según The Competitive Intelligence Unit:


• Conectividad, ya que tecnologías como Bluetooth, WiFi, Banda Ancha Móvil, entre otras, serían los habilitadores de las múltiples conexiones entre objetos y dispositivos. • Redes de última generación que garanticen una veloz y confiable transmisión de datos y voz, características que idealmente cumplen las redes a partir de 4G. Para hacerlo, se requiere del despliegue de infraestructura, ya que los objetos por conectar deben incluir procesadores, módems, capacidades de reconocimiento de gestos, etc. • Interoperabilidad, porque es necesario que los objetos se conecten entre sí, sin importar plataformas o tecnologías, para lo cual se necesitan acuerdos entre los diferentes actores de la industria, a saber, operadores, manufactureros de dispositivos, fabricantes de procesadores, desarrolladores de software, entre otros.

Como vemos, México se encuentra aún restringido no sólo por las limitaciones de conectividad, su falta de infraestructura y su todavía reducida industria TIC, sino también por el tipo de tecnología móvil a la que los usuarios tienen acceso actualmente. Por ello, hay que invertir en fibra óptica y se necesita más espectro radioeléctrico asignado eficiente y equitativo para promover el desarrollo de estas tecnologías, aunque cada tecnología móvil tiene ciertos requisitos de espectro. La idea central u objetivo es que el móvil pase a ser una herramienta de desarrollo que brinde oportunidades para el teletrabajo y la gente deje de verlo como un simple medio de comunicación o entretenimiento. Finalmente, no se debe dejar de lado nuestra herencia digital tanto de ésta como de las próximas generaciones, por la previsible dificultad de acceso a documentos actuales en internet (fotos, videos, tuits, blogs, textos) con tecnologías del futuro, así como la preservación del legado virtual de estas generaciones que participan en esta gran revolución tecnológica. Sin duda alguna el impulso que la tecnología LTE habrá de dar al Internet de las Cosas será determinante, en el nuevo mundo de la conectividad y en la visión de mundo de las nuevas generaciones.



20 a帽os de evoluci贸n hacia el Customer Experience

Las nuevas generaciones demandan mayor autonom铆a, eficiencia y personalizaci贸n para interactuar con sus proveedores de productos y servicios.



El tema de moda hoy en día es acerca de los cambios entre generaciones y cómo convivimos estas generaciones con nuestras diferencias y semejanzas, tratando de adaptarnos y aceptarnos unos a otros. Un ejemplo de estas diferencias es el uso que se le ha dado al teléfono celular. En sus inicios, hace más de 20 años, el móvil era utilizado únicamente para hablar; hoy en día es usado como un dispositivo de comunicación multimedia. Dependiendo de la preferencia de cada persona, se utiliza para hablar, enviar mensajes, realizar pagos a través de una aplicación móvil, y mucho más. Según estudios realizados por Aspect Software, los Millennilals -jóvenes nacidos entre 1977 y 1995- y los Baby Boomers -nacidos entre 1946 y 1964-, tienen fuertes diferencias y semejanzas en cuanto a la preferencia de cómo contactar el servicio a clientes dentro del contact center o centro de atención a clientes, y a su vez el uso del teléfono celular varía de una generación a otra. Los estudios para el futuro contact center se basan en estos dos generaciones con mayor población. Estas diferencias extremas tienen que ser consideradas por los directivos empresariales para proveer más servicios y atender las necesidades de todos los usuarios, independientemente de su elección tecnológica para realizar transacciones. La forma de contactar a las empresas es más diversa y variada que antes, y las dos generaciones con mayor volumen de personas utilizan desde mensajes SMS hasta una aplicación móvil para poder realizar una transacción, tales como pagos de facturas y servicios, que antes eran realizados únicamente de dos formas: ir directo a la sucursal o tienda, o llamar por teléfono y ser atendido por un agente o por un sistema de autoservicio. En la encuesta realizada, se encontró que el 40% de los Millennilals entrevistados prefieren una interacción online antes que hablar con un agente; a su vez, un 80% de los entrevistados indican que cuando hablan con un agente esperan que este sea un experto, ya que las interacciones básicas las realizaron o esperan realizarlas en forma de autoservicio y que únicamente hablarán con un agente cuando no puedan realizar esas tareas por sí solos. Los directivos empresariales deben considerar que el cliente de hoy en día ha cambiado y el contact center debe cambiar para atender las necesidades de comunicación de los clientes. Ofrecer un sistema de autoservicio y la continuidad de la atención es lo que busca hoy en día el cliente. En pocas palabras, es cambiar la conversación con los clientes al 100%. Hoy en día los empresarios tienen que pensar como Millennilals y como Baby Boomers, haciendo que el servicio cumpla con las siguientes necesidades: • Conocer al cliente • Favorecer el autoservicio


• • • •

Abrirle posibilidades para que opere autónomamente Permitir el contacto por medios sociales Permitirle interactuar por el medio que el cliente escoja Y lo más importante: no tener que repetir la información cuando se pasa de un medio a otro

En el pasado, cuando el servicio a clientes tenía niveles mediocres, los contact centers incrementaban el número de agentes. Hoy en día esto no sería la solución para elevar el nivel de servicio, pues los clientes quieren autoatenderse, quieren descubrir y desean preguntar por medios sociales a otras personas que como ellos, tienen las mismas inquietudes y necesidades. Entonces ¿por qué no prepararnos para atender estos clientes y ofrecer interacciones a través de mensajes de texto tipo SMS, Twitter, facebook, aplicaciones móviles, y voz? ¿Por qué no dejar que nuestros clientes escojan la forma como desean comunicarse con el contact center y acceder de un medio a otro sin necesidad de repetir lo que se ha dicho? Esta es la nueva forma de hacer negocios y atender a los clientes en un contact center, considerando que efectivamente el teléfono celular sigue siendo el principal aliado, aunque el uso de la voz haya disminuido enormemente. Por Montserrat Morales, Sr. Manager Solution Consulting LATAM & Caribbean de Aspect


Movilidad, sí. Seguridad, ¡También!

A finales de 2015, 1 de cada 3 trabajadores tendrá un dispositivo como herramienta de trabajo. ¿Y la seguridad?



Hoy día nos encontramos en un entorno en el que trabajar es algo que se hace, y no un lugar al que se va. Todos los días estamos conectados a nuestras empresas, interactuando en nuestra vida personal desde cualquier dispositivo y en cualquier lugar, y borrando las líneas entre lo personal y lo profesional. Esto se ha convertido mucho más en la norma que en una excepción, y es fuertemente reflejado en las estadísticas que muestran los analistas. Las empresas de América Latina abrazaron definitivamente la movilidad: según datos de la consultora IDC, 110 millones de personas trabajarán con dispositivos móviles este año en la región, donde, a su vez, 3 de cada 10 organizaciones ya poseen más de la mitad de su fuerza laboral en ‘modo móvil’. Destacan países como Colombia, que posee la mayor penetración en movilidad empresarial (57%), seguido por Venezuela (47%) y Perú (42%). La consultora estima que, para fines de este año, 1 de cada 3 trabajadores tendrá un teléfono inteligente que utilizará como herramienta de negocio. En definitiva, hoy la movilidad lo es (casi) todo. En un mundo en el cual la conectividad es la norma y la gente busca interactuar todo el tiempo, en cualquier momento y desde cualquier dispositivo, las empresas necesitan, por un lado, nutrir la creatividad, mientras que al mismo tiempo les resulta indispensable minimizar el riesgo de pérdida de datos e información. Se trata de una tensión constante, que además requiere trabajar en el muy estrecho callejón que queda entre el espacio de trabajo y la vida social, una frontera cada vez más difusa para la nueva generación de trabajadores. Por un lado quedan, entonces, todas las ventajas de las tecnologías móviles (las tendencias como BYOD, la colaboración en línea, los equipos de trabajo distribuidos, los documentos en cualquier tipo de formato y en todo tiempo y lugar, etc). Por el otro, el riesgo que conllevan todas esas ventajas: la pérdida de información, el robo de dispositivos (que los trabajadores demoran cada vez más en denunciar) y los incidentes de seguridad (que un 82% cree que aumentarán este año). Adicionalmente, nos encontramos con el tema de la seguridad de la información empresarial, donde las tendencias como BYOD abren las puertas a generar organizaciones ‘sombras’ de IT manejadas por los mismos usuarios. Según un estudio de Frost & Sullivan hecho para McAfee, el 80% de los empleados admite utilizar aplicaciones en sus trabajos sin la autorización del departamento de IT de sus empresas. El 15% de los encuestados aceptó haber sufrido algún incidente relacionado con la seguridad o acceso al usar aplicaciones como un servicio. De un buen y acertado balance entre los beneficios y los riesgos depende hoy la


productividad de las empresas, los trabajadores y la seguridad de sus datos. De cuánto riesgo están dispuestas a correr, en definitiva. No hay que tenerle miedo al riesgo, sino conocerlo, tratar de minimizarlo y analizar si éste compensa los beneficios potenciales o reales que obtenemos. Inconscientemente (o no tanto) evaluamos ese riesgo todo el tiempo en nuestra vida cotidiana, y luego tratamos de ver cómo reducirlo. Creo que esta nueva y creciente generación móvil, que naturaliza los valores de compartir y colaborar, trae algo muy positivo, también para los negocios. La generación móvil (lo que denominamos GenMobile) aporta una presencia flexible, transparente y de colaboración en la fuerza de trabajo. Pero esta nueva generación de empleados representa un factor disruptivo en los modelos de relacionamiento con la información laboral. Un estudio de Aruba Networks, realizado entre más de 11,500 empleados en 23 países, reveló aspectos inquietantes pero necesarios: • GenMobile es una fuerza laboral con una indiferencia general de los procedimientos de seguridad: 6 de cada 10 están ‘felices’ de dejar que otros utilicen regularmente sus equipos móviles de trabajo o personales. • GenMobile es laxa cuando se trata de consideraciones de seguridad: casi un 33% de los trabajadores admite haber perdido datos por mal uso de su dispositivo móvil. • Los empleados de esta GenMobile de buena gana rompen las reglas de seguridad si consideran que eso responde a un propósito mayor: más del 50% de ellos desobedecería a su jefe con el fin de hacer su trabajo. • El 20% de los trabajadores móviles no tiene contraseñas en sus equipos (‘para facilitar su uso por otras personas’, reconoce el 22%). • Créase o no, el 39% de los encuestados en el sector de las finanzas admite haber perdido datos laborales. Esto representa un nivel mucho más alto que el promedio de los sectores. Las empresas de tecnología no escapan de esta misma tendencia. A manera de resumen, la predisposición natural de la generación móvil (GenMobile) de compartir y colaborar, se extiende a los dispositivos corporativos y con la misma indiferencia respecto a la importancia de los procedimientos de seguridad. En los últimos 50 años, las oportunidades de crecimiento de las empresas se han incrementado de manera exponencial gracias la tecnología, pero al mismo tiempo los peligros de seguridad de los datos han crecido en la misma proporción. A medida que la GenMobile se convierte en una parte más central de todos los trabajadores, las empresas necesitan entender cómo manejar la productividad y la creatividad, sin poner en peligro la seguridad de la empresa.


Se trata de un nuevo desafío que trae aparejada una oportunidad: si se maneja bien, se aprovecha bien. Para la creatividad y el crecimiento de los negocios, el surgimiento de la GenMobile es una buena noticia. Para ello es necesario que cada empresa conozca su ‘nivel de riesgo’: una evaluación necesaria para luego adoptar medidas para mitigar esa ‘cultura de riesgo’. Con la herramienta de evaluación en línea ‘Running the Risk’, de Aruba, las empresas pueden obtener su propio barómetro del riesgo y compararse con otras organizaciones en su país y la industria. La industria debe ofrecer orientación y medidas para garantizar que las organizaciones de TI se preparen con éxito para el impacto de los empleados de la GenMobile, mientras abraza su actitud de colaboración e innovación a la par que se protege la seguridad de datos y activos de la empresa. Es el momento de ‘correr el riesgo’ asociado a la movilidad, pero al mismo tiempo, las empresas y sus departamentos de TI necesitan ser más inteligentes acerca de la gestión de este comportamiento proclive a ‘compartir y colaborar’ sin sacrificar la seguridad de los datos corporativos y de información. La vida es riesgo. Cruzar un calle es un riesgo, viajar en lancha, subir una escalera, escalar un montaña... lo que nos ocurra, incluso quedarnos en casa sentados. El asunto pasa por determinar qué nivel de riesgo estamos dispuestos a correr por el logro que querríamos obtener (ya sea disfrutar de una actividad, llegar más rápido, etc.), y cómo reducirlo. Como nunca antes, la movilidad enfrenta a las empresas también a esta disyuntiva. ¿Está dispuesto a correr el riesgo? Lo más importante que hay que considerar, es que como todo, los riesgos calculados y con desenlaces predecibles son mucho más fáciles de asumir. Su empresa debe tener una estrategia de movilidad que incorpore seguridad, y una de seguridad que incorpore movilidad. No se debe tener una sin la otra. Movilidad, sí. Seguridad, ¡También! Por Roberto Ricossa, VP & Director General de Aruba Networks Latinoamérica


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.