La Emergencia Sanitaria

La Emergencia Sanitaria en Latinoamérica; la respuesta de FLACMA

Sergio Arredondo Olvera, Secretario General de la Federación Latinoamericana de Municipios

La crisis es lluvia sobre mojado en LATAM

2020 es un año que inicia con sobresaltos y con escenarios muy complejos para la región latinoamericana, después de las complejas situaciones que todos observamos en su vida política, institucional y social. Muchos países vivieron en 2019 importantes o graves sucesos que impactaron en su conjunto a la región; por un lado, procesos electorales que transformaron el perfil de los gobiernos en la zona, como los casos de Brasil, Argentina y México; y por otro lado numerosas movilizaciones tras demandas sensibles de amplios sectores de la población, como en los casos de Ecuador, Chile, Nicaragua o Venezuela, entre otros países.

Es sabido que los 33 países que formamos nuestro subcontinente compartimos una misma historia y somos una gran unidad cultural; y en las últimas décadas esa cohesión se ha trasladado al fenómeno urbano. Somos la zona del mundo donde el más alto porcentaje de nuestra población vive en ciudades (ya rondamos el 70%) y nuestras ciudades están igual de hermanadas en los desafíos que viven en cada uno de sus ámbitos urbanos, sea en la gobernabilidad, la pobreza, la movilidad, o en la calidad de los servicios públicos.

Nuestras ciudades y comunidades locales tienen fortalezas pero también debilidades comunes; padecen carencias ancestrales y no han encontrado aún soluciones permanentes a las demandas de su población.

Una Región que no estaba preparada

Por ello es que cuando la emergencia aparece y crece rápidamente durante los primeros meses de este año, es claro que nuestras ciudades –sean las grandes, medias o pequeñas comunidades– muestran abiertamente las carencias de sus capacidades institucionales. Por un lado las estructurales, tales como infraestructura suficiente, políticas públicas cohesionadas o descoordinación entre instancias gubernamentales; y, por otro lado la falta de recursos y las limitaciones presupuestales, ausencia de personal sanitario capacitado o insuficientes insumos básicos para el funcionamiento de las instalaciones hospitalarias.

Durante el encuentro anual de líderes municipalistas de todo el mundo que se celebró a finales de febrero pasado en Tánger, Marruecos, el copresidente de FLACMA y Alcalde de San José, Costa Rica, Johnny Araya, dijo en forma premonitoria que las ciudades del mundo deberíamos prepararnos para una emergencia sanitaria global. Así ha sido, y seguramente así deberemos vivir los próximos años en todas las 16,400 ciudades de nuestra región latinoamericana.

Respuesta inmediata

La emergencia llegó a nuestros países sin previo aviso, y nos exigió a todos dar una respuesta rápida, inmediata, ante la gravedad de las situaciones. Los gobiernos locales debieron asumir la coyuntura en varios frentes: la carencia de una política pública clara sobre la forma de enfrentar la pandemia, la falta de liderazgo de los gobiernos nacionales, la demanda de los insumos más básicos por parte de la población, la necesidad de adoptar medidas de protección de la población civil, la insuficiencia de los elementos más indispensables como espacios en panteones, y la comunicación a la comunidad de las reglas de prevención sanitarias.

Por otro lado, los gobiernos locales han emprendido una tarea aún más compleja: la de promover la coordinación con las autoridades nacionales competentes ante la pandemia. Lograr la sensibilización de los gobiernos nacionales y subnacionales sobre la necesidad de proveer a las comunidades locales de los medios y los recursos para atender a la población en cada rincón de nuestros países. El dilema de nuestros sistemas de competencias: los gobiernos nacionales tienen las responsabilidades por mandato de ley y en consecuencia tienen los presupuestos, y los gobiernos locales tienen la demanda directa de la gente para ofrecer apoyos; y esas dos esferas muy frecuentemente no están comunicadas armónicamente.

La coordinación nacional e internacional

Los gobiernos locales han debido trabajar para alcanzar dos propósitos esenciales: por un lado, relacionarse con las instancias técnicamente responsables de orientar los procesos preventivos, tales como los ministerios de salud nacionales o incluso a nivel internacional con la Organización Panamericana de la Salud (OPS); y por otra, la coordinación operativa con los

gobiernos nacionales o subnacionales en la búsqueda de acciones concertadas para el funcionamiento de los servicios más ingentes, como los hospitalarios, funerarios o de seguridad.

También ha sido relevante el papel de asesoría y acompañamiento del proceso de aprendizaje que han pasado los equipos de los gobiernos municipales, para reconocer las estrategias apegadas a criterios científicos y de las normativas internacionales; así, el diálogo con la OPS y con todos los organismos de la red ONU ha sido crucial y relevante.

FLACMA mantiene una antigua colaboración con OPS y con más de 150 organismos especializados internacionales en diferentes líneas de actuación, y ha sido esa una parte importante de su función como acompañamiento de procesos de desarrollo local y municipal en la región. Por ello mantiene una sistemática relación con organismos tales como ONU-Hábitat, FAO, CEPAL, ONU-Medio Ambiente, etc., atendiendo siempre su rectoría en cada uno de sus ámbitos de actuación.

Foros Latinoamericanos de Aprendizaje sobre la Pandemia

En los últimos 4 meses y con motivo de la emergencia, FLACMA ha convocado un amplio proceso de intercambio y colaboración con la OPS, trabajando juntos en la identificación de prácticas replicables municipales, en la asesoría a todos los municipios de la región latinoamericana (a través de las 45 asociaciones nacionales de municipios que agrupa FLACMA), en la organización de foros para aprendizaje entre especialistas y ciudades, y en la generación de conocimiento para contribuir a mejorar la gestión de los gobiernos municipales frente a la pandemia.

Así se han realizado ya cinco foros y se ha planeado la realización de otros cinco, con enfoques temáticos específicos, como los desafíos en la prestación de servicios, las problemáticas de género, el mejoramiento de las infraestructuras sanitarias, el empleo o las políticas sociales. En ellos han confluido los especialistas de OPS, académicos, alcaldes, urbanistas, agencias y las asociaciones de municipios, entre otros. Todos juntos trabajando en equipo para neutralizar los daños del Covid-19. Importancia de las Alianzas

El papel de los Alcaldes El sueño municipalista de ciudades que sean ámbitos amables de en ciudades. Ellas, las ciudades, deben ser en consecuencia la meta de

Sin lugar a duda han sido los alcaldes los protagonistas públicos que han asumido la mayor responsabilidad y liderazgo ante la emergencia, al desplegar toda su capacidad operativa, de gestión y apoyo a la población, especialmente a la que padece de mayor vulnerabilidad económica y social. El eslabón más débil de gobierno y el que mayores riesgos asume cuando las dificultades crecen, son los gobiernos municipales.

Los países, las instituciones y las sociedades no podemos perder de vista la importancia en el futuro de impulsar cambios institucionales que garanticen a los ciudadanos mejores condiciones de vida; ello lleva implícito el fortalecimiento de las instituciones locales y la urgencia de la descentralización de competencias, mejorar el reparto de los recursos públicos y lograr el empoderamiento de la sociedad organizada en sus comunidades. gran red de organizaciones que representan a los alcaldes y a los municipios en cada uno de nuestros países latinoamericanos. Esas 45 asociaciones desarrollan a su vez un amplio trabajo de aglutinamiento de los liderazgos de las ciudades, de vinculación con la sociedad y de construcción de las soluciones colectivas, buscando la más armónica convivencia en las comunidades locales y buscando dotarlas de los medios de desenvolvimiento en sus espacios urbanos.

convivencia de las personas se alcanzará cuando todos los protagonistas de nuestros países tengan conciencia del imperativo de establecer urgentemente una sociedad diferente y mejor. Ello se logrará cuando los líderes de los países, los legisladores, los dirigentes de partidos y los ciudadanos empoderados, todos juntos, decidamos establecer nuevas reglas del juego y dotar a las ciudades de las fortalezas competenciales, hacendarias, políticas e institucionales que pongan en el centro al ciudadano común; y sabemos que ese ciudadano vive, obviamente, aprenden mucho en medio a las emergencias. Y por ello

cualquier reforma y de cualquier proceso de transformación.

FLACMA, por ello, busca el eslabonamiento de sus iniciativas junto con legisladores, gobernadores, académicos, empresarios, líderes de opinión, dirigentes políticos, redes, organismos, especialistas. Todos esos sectores tienen un aporte que hacer, un papel que cumplir en la tarea de realizar las eformas de estado y la reforma de las instituciones locales; sin ello, cualquier emergencia actual o futura será devastadora, ya que encontrará condiciones fértiles para el desorden, la confusión, e incluso la muerte de muchos.

La coadyuvancia de FLACMA y las Asociaciones Nacionales de Municipios

Esa es justamente la misión más importante de FLACMA: impulsar las transformaciones en las estructuras institucionales de nuestros países para dotar de instrumentos efectivos a las ciudades; es ahí donde la gente vive, donde se genera la riqueza y donde deben instalarse las condiciones de mejoramiento económico y social. Es decir, debe ser en las localidades donde se establezcan verdaderas y perdurables condiciones de bienestar para las personas y para las familias. Ese trabajo de FLACMA se realiza en conjunción con una

Nuevo modelo de ciudades post-pandemia

La pandemia nos esta dejando y nos dejará sin duda muchas lecciones positivas. Para FLACMA, la mayor será el convencimiento sobre la urgencia de profundizar nuestro compromiso por un Nuevo Modelo de Ciudades. El actual es obsoleto y esta agotado; nunca fue exitoso, pero hoy es claramente una entelequia sin futuro. Cuando vemos gente morir en las calles o a las puertas de los centros médicos, la conclusión está a la vista: necesitamos urgentemente ciudades diferentes, que sean espacios donde los ciudadanos tengan futuro. de las soluciones colectivas, buscando la más armónica convivencia en las comunidades locales y buscando dotarlas de los medios de desenvolvimiento en sus espacios urbanos.

Contacto: Sergio Arredondo Olvera Secretario General FLACMA www.flacma.lat +52 55 5705.0525 sergio.arredondo@flacma.lat