EL PORVEN 'CHAHÍO iNDt'rt.HúlEHTt,
AÑO XVn
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Número corriente: 6 céntimos
O
Lo del Instituto;
ven Alcal 1«> sí que t«mbién procurador del seaor Vaso, se paga a los profesores con el retrajo ^-/iy'' M e j o r a d m i n i s t r a - { que les viene en g a n a . . . y ¡ay, • c i ^ y nSenos t o n t e - j rías.—ÍM q u e d e b e del que proteste! hacer el ülinlstro. Esto no debp, no puedo seguir El periódico «La Tierra» se así, y preferible es que mientras se aprueban otros presupuestos, cree que los cartageneros son raemos, a juzgar por las burdas dicte usted una diaposición, ordenando que el Ministro gire dihabilidsSíís que pone en prácrectiimsuCe al Instituto las q u i n tica para denorientar a la o p i ce mil pasetHs concedidas y que nión sobre el asunto Instituto. igualmtnte quede éste autorizaDijo E L PORVEKIB que el A l calde trataba con desatención do para reservar el importe de a los catedráticos, pagándoles las matrículas y con él atender al pago del personal. cuando quería; no cumpliéndoles BU palabra de abonarles De lo contrario —¡V. E. no coen una fecha determinada; y noce el vasismo! —va a seguir el sustentando la idea de que los dignÍHimu claustro expuesto a ingresos o pagos por cuenta del continuas monterilladas, y el Instituto no debían ser tenidos Instituto en peligro, y Cartagepor el Ayuntamiento en conside- na llevada y traída por culpa ración especial. de politiquillos tan funestos c o mo los que hoy padecemos. Y «La Tierra» que v e puesta Atiéndanos V. E . y este p u e al descubierto una vez más la ruinosa administración que h a - blo le guardará el más eterno y y m a l profundo do sus agradocen sus amigos, simula que se cimientos. enfada y recorre al testimonio del Director del Instituto, lo que le vale unas cartas de los se&oConfirmando lo que dejamos res Cánovas y P u i g Bayer e n
las que se nos da la razón. En efecto, «n las dos epístolas
se confirma que el Alcaide no paga cuando debe a los Sres. profesores. Y se protesta de que el Ayuntamiento no tenga en cuenta para abonar, lo que cobra por el Instituto (carta del Sr. Cánovas, párrafos .0 y 6). Y se confirma que el Alcalde dio palabra de pagar en una fecha y nO h a
hecho honor a su palabra (carta del Sr. B a y e r , párrafo segundo). Los maquiavelismos y las trapisondas están demás, Sr. G a r cía Vaso. Si nsted cree que Cartagena sigue tomando por artículo de fé cuanto etcribe o permite d e cir en su periódico, está en un error del que quizá.» ha empezado a sacarle \» realidad. Dígale, má.ndele, a su «joven alcalde»,como le llama usted dia'riamente, que p a g u e a los c a t e dráticos del Instituto, con lo que evitará quede en ridiculo una vez más el nombre de Cartagena. Que y a habrá tiempo de pagar otras,., cosas menos importantes que las «agradas obligaciones creadas por la cultura. Costa llamó a Cartagena «Is Covadongu de la enseñanza». Si ahora levantase la cabeza y vier a esto del -Instituto... ¡ya puede usted figurarse q u e no sería precisamenite la gloriosa cueva asta' riana la que le serviría de simil! Para terminar. Sr. Ministra de la Qobernación: En Cartf^ena el Aynntaaiiauto se come la subvención de 15.000 ptas. concedida al Instituto por ese Ministerio, y se ^;aarda también las 30.000 y pico que producen las matrículas e n dicho centro. L u e g o , c u a n d o le sobra d i n e ro de haber atendido los pagos ,qae tiene a bi« a efectuar el « j o -
ÚmOA^-)r\Út.H^,
HARTES 20 MARZOIIE » I 7
Pltriljaía j i i i r a
ECOS de Sociedad
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Número atrasado: 10 céntimos
Frateroidad de pueblos
Los ExploUdopes cartapneros celebran su !f; aniversario F i e s t a i a o I v l d a b l e . - L I e g a d a d e l o s E x p l o r a d o r a s d e La IJnión.I l o n o r e s a l a B a n d e r a . - U n c a m p a m e n t o e n t r e l o s pinos.-Hiisa de c a n i p a ñ a . - U n l o n e n s e s y c a r t a g e n e r o s confraternljean.ilmposlolAn d e l a s e s t r e l l a s d e a ñ o . - C i i a d r o | ( r n n d l o s o . - l . i a d e s pedlda.-iVivan les pueblos hermanos!
Los exploradores cartügeneroa celebraron anteayer el 4 " aniversario de BU primera excursión, teniendo, como en aOos anteriores, la simpática idea de levantar el campamento en el mismo sitio que aquella tuviese liigar. La jornada, tan brillante como todas las que realizan nuestros bravos muchiichos, lai realzada por al concurso de los exploradores de La Unión, que, aceptando la invitación desús colegas de Cartagena, llvgaron en el primer tren acoDipallados de loi Sres. de su Comité y de una Incida representación do sus socios protectores. Era tal el número de expedicionarios que el convoy ordinario habla sido aumentado coo tres coches. En la estación esperaban al Comajo de los ExploradOteé cartageneros y el 4.° grupo de esta tropa, dándose dicho, recibimos la siguiento entusiastas vivas a La Unión, responcarta del prestigioso catedrático didos coa otros a Cartagena. Con los exploradores de La Uuión por oposición, y director intarivenían los prestigiosos seDores de no de este Instituto Sr. Puig Ba- aquel Comité don Hanunl Rodríguez, yer. presidente; don Fidel Pardo, vioepre Después de sus terminantes Bidente; los vocales don Francisco afirmaciones, el público juzgará, Hartlutrz Augosto, don Fé ix López como nosotros lo hacemos en Caparros, don Antonio Guirao y don otro lugar, de la seriedad y^ la Sibilino Perona; el insustituible Jefa de tropa don Alfonso Hontc^o; y los caballerosidad de cuatro pobres entusiastas don José Ortiz Conesa y de espíritu que pretender mono- don Francisco Carrillo, Inatroctoree; polizar, sin conocerlas siquiera, y don Felipe Pardo y don José Alonlas prerrogativas debidas a la so, Bubinstructores, Loa socios protec torea eran numerosos, corrección. Ordenada la columna se dirigió por Sr. D. Manuel Dorda Mesa la muralla al domicilio social de este Director de EL PORVENIR. Concejo, donde esperaban los otros Esta. cuatro grupos. La formación alcanzaba desde la Muy Sr. mío: He sufrido una decepción al leer ^La Tierra* calle de Ojuna a la balustrada de la Muralla, figurando en aquella 90 exde hoy. Ni en mi carta se des ploradores unioueuses con su sección miente lo que en el articulo de ciclista y cornetas y tambores, y 3S0 EL POR VENIR se decía, ni creo carttganeros con las seccioaes ciclis. que deba corresponderse a mis ta, sanitaria, colomliófila y de zapaexplicaciones con los comenta- dores, bandas de tambores y ccrnetos y dos carros cargados de material. rios que dicho periódico hace. A las acordes de las b ndas y dánSoy de usted amigo afectísimo dola escolta de honor una sección de y ss.q.s.m.b. alumnos de la Eacuela de SubinstrncJ. AI. P n l s B a y e r tores (pafiuelo b'.anco), fué sacada e incorporada a la tropa la soberbia bandera que por iniciativa dal Scera ^^^J^.;!^;;:;;:^;^;;:!^——s tarlo |de este Consejo, don Vicente » w Chiralt han bordado y regalado a la — Han marchado: A loa Bailas de Fortuna, el capitán nobi laíma iustituciÓH las ssfioras y de lutaDteria don C&r!03 Moneada seQoritas de Cartügana. Aparicio. Rompiendo marcha la tropa de La NotHs varias: — Naeetro amigo el capitin del re- Uoién, cruzaron 'IdS exploradores por gimiento de EspaSa don Eduardo Mo- las calles iiayar, Puertas da Murcia reno de !a Santa, ha sido destinada a y el Oarmsn, carretera de M».zarróa la Csji de rpclutamiento deCieza. y vereda de Oalifa, al pintoresco pi —Han sido destinados al regimien- nar del Coto Alquerías, donde ya una to de Eap^Da, el capit&u don Buena- sección del 5." grupo, que se habla venturaJSánchez Palma, j el segundo teniente don Salvador- Mees, y al de adelantado, tenia levantadas las tienSevilla, el primer teniente don Jaco- das de csmpaCa y un artístico sitar ba Quintas. hecho bajo la dirección del vocal don — ije encnentra enferma aunque no Luis Aparicio y el jefa de tropa intede gravedad la bellísima Srta. Pilar rino don Emilio Barba, qoa fueron Fiígetf sobrina de.nuestro amigo don muy f alicitados por su «xqnisitogasto, 'José Hernández. Deseamos a la enformita un pronto Formaba dosel una anorme banderestablecimiento. ra espafiola cuyos extremos se enla—Han llegado: zaban a los pinos frondosos y perfuDe Qerona, el segundo teniente de infantería don Juan Hernández Ro- mados. T de estos miamos, da sus ramas mas altas, partían guirnaldas da mera. llares que ibin basta el altar, formanPor exceso de original, deja- do un delicado tapiz sobra el que remos para mañana él primer ar- saltaba la virgen espaDolisima por ticulo sobre el crimen electoral, excelencia, la virgen de los patriotas, cometido por el caciquismo en el la de los héroes, la de los bravos: la distrito 9.' Virgen d»l Pilar. ?i ! ;c ^
TJn.a. Carteu
peseta ai mes
Con los exploradores llegaron a ton deüoiOBO sitio centenares de limllias, que llevabm sus viandas pa ra pasar el dia con los muchachos. Las sillas transportadas de la Casa de Misericordia, pura las senaras, re Buitnron insuficientes,como igualmente todas las que ee pudieron obtener de los caseríos próximos. La misa de campana, pura la qne concedió especial permiso el venerab'e Prelado de la Diócesis, tin cariDoio siempre con lo; exploradores cartageneros, fui^ oficiada por el vir tuoBO capellán vocal de esta Consejo don Engsnio Para, ai que ayudaron dos exploradores. El momento de alzar fué grandioso. Las bandas entonaron la Marcha Real. La Hostia ascendía solemne, como el sol dsl amanecer deseado, del alborear triunfal que para su patria anhelan los exploradores. Los pechas ee inclinaban a tierra en una reverencia a Dios y a la Naturaleza. Entre el ramaje de los árboles añosos rez;>.b tu los pujiros i>u rosario de arpogios Eu la ladera misma del altar, un giin-ido de ov.ij'is paitaba apacib»; y su hatBro--leúu oad.ico, Mannik, anoi.mo b ijido a I.-» llanura para consolar BU eeplrit», quIzAs con la postrera lalaa—clavado do rodillas, rezsb t con l<-« unción que d-^bie rou h'cero los pastores bíblicos...
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KüH, 4.896
obrpr este roilígro: Q i" al pato de BUS mucbschOB ia Pri'innvpra aviva eu Sftvii; Varzo, aterido y íxh -uato, c:a apr.)pia Ixn gilaa d« Abril, íoStito y pxpléndido; y un» divina floración — floración de tn»j<reí boii'Jaifns./s, de miijiros beil.-iB-oca boy costultición dü oiiC:>!ita9 rcbre estos eampoj sedientos en que hün clavada su? tiendas ios exploradores. Dedica lu>'go extensos periodos a enumerar los triunfos cone''giiido9 por los exploradores cartrgíneros durante los cuatro aQos que existen, hacienda resaltar aquella victoria eenaladisima obtsnida en ol campamento nacional de Riofrio, donde contendiendo con las más cultas juventudes de casi todos los Consejos de E^paCa alcanzaron la mayoría de los primeroa premios.
Tiene un cariDoso recuerdo para el iniciador de este Consejo Sr. Trucharte; sentimental evocación do ios compañeros arrebatados a la vida o alejados de Cartagena por ineludibles cumpliraientoa del deber; un cálido elogio para loa Sres. Instructoras Bayo, Barba, Isbnrt, Lstang y Eg;<a, y felicitaciones fogosas para los exploradores, de los que, dice, se encuentra muy orgulloso el Conseja que preside. Ensalza las grandezas patrias, cuyo reinado hay que resucitar. Cartagana—exclama—organizó hace cuatro afios, BU juventud scultista, para que sa aprestase a cruzada t.in imperiosa. Y fué aquí, en esta mismo sitio, teniendo nuestra Covaáonga nn los breHaies que nos rodean, donde deapipguraoj por primara vez la bandera, a cuyo n.Kií)i»ro laobiin los exploradores por el adv»nim!í)i to .se generacio-ses eu'tus y fuertes ci-.pnees da llevar a E<>pana u un inino;ii;ito raaur giin^ento y a una defloitiva t-r» da grandc-zas. La mayor psrte del discurao la d-idlcó el Sr. Oorda Mnsa a ensalzar el T<rn)inailn U coromonla ee izó la pueblo de La Unión y a sus PXp!or<i. Bandera, dándose orden de acampar. dores, para loa cuales, coito para su Cada uno de los grupos cartageneros so encargó de 20 eiploradoron unió- dignísimo Consejo tsn aceitad&ronnte neoses,7 cuando a lat IS 30 avisaron dirigido por don Manuel Rodifguez, a co^ar, lea oh^íquiarou «on lo mpjor tuvo los muyotas eicgioa. Cuundo en una de nuestras excurdaWdi nÉdrra¡eB,.>bit'sblec'iéndo.'e un mutuo ¡>fiu de agasajarse, qne hacia siones de propugaiida ¡lrg,iinos a .á'ícorait)iivédUa9íar;da áUg'la y al al- vuestra ciudad —dice—padimoa a eus ma so&ur en la próxioHa era de una más caracterizados e,'em<>nta3 qua fraternidad tan leal coixio la que pre- fundasen allí una tropa de exp'oradores. El ru'go fué atf^ndido, y el dicase e!íDivin,o Maestro, pueblo nnionunao puede mostrarse El Consejo dé Cartagena objfiquió orgulloso del Con?ejo tan entusiasta al do La Uí)ióo y sus lostructores con un banquete udmirablemenCe'servido que ha conseguido form&r, y del grapor el Restaurant Cartagena, Fué de do de instrucción, de lo* arrestos, de 30 cubiertos y ee sirvió ka una mesa la marcialidad de sea bijrjs exploradores, digiioi de figurar hsy entra las colocada entre el pinar. tropaa mejor organizadas. Desde ahoA media tarda la ftuencla de genra nuestra admiración oü argüirá tan te era enorme. Por todas las sendas llegaban f^tmiiias entusiastas de los flelmoute coiro nnsstro cariño. Loa úliioaoB párrafoí aoD iin canto exploradores, y los cerruüj'is eran tantos que su fiía se perdía en la re- a la fraternidad entre unionensea y cartageneros, a! leal scuerdo entra vuelta de las colina?. las dos eiudadsE, para que trabajen Formada la tropa, se hizo el cun urides por su p-osperiJfd y erg-:andro alrededor do la biiidera, pasandeeiruiento. do a su centro ambos Consejas, los Los sxplovadorrs Cíirt..gcinero3— Instructores, el Juez de Instrucción da La Uuión don Enrique Fernández, proBlgu >—1)0 olviciitrán ¡íunei todos loa i¡g.%Bsjo5, todoü los derrocbna de el Secretario de la Audiencia provin hospitajdad y á» friítürn&l ¡,f?eto, cial don Luis B^roardo, el R gistraque para ellos tuvisteis sn L" Uui^n, dor de ¡a propiedad, en Murcia, don i-n cuyoa hogarea tío so'o oneootraron José Laudeta, el capitán don Luis hogar sino verdaderas madres: qua Prada y numeroasts personalidades de las dos poblaciones, cuya relación no otra cosa fueron para ellos las mujeres unionanees. seria intermiuab'e. Cuando deepuéa de tantísima atenLuego da imponnree el paBuelo a los exploradores Ingresados última- ción, regresábamo] a Cartagena con mente y de repKrtirss las estrellas de el corazón rendido dd gratitud, al volafio (cada afio en la institución, da ver la vists hacia tierra tan hospiti derecho a una estrella de plata, qne laria, cuando aun en nuestros oídos I ; prende ju.ito a la insignia) el Pre- sonaba el nc^íito do Jas mii-úc.-i? y el sidente del Consejo de Osrtag mn, don clsmor de =on vltur;», IHH ehiui'jiiaaa de vuestras fábüms y ü* vuestras Manuel Dorda Mesa, pronunció un minas se dt¡stscr.ban como brazoa gidiscurso. gantescos que 1108 aigüiísr.u sniuJanSus primr-ras palabras constituye do en de&p ^didJ, .;g;tiudo, fl vajeando ron un galante saludo a las damas y BsDoritas que honraban la jornads. eobreelci.'O ios p:iiluu oa iamenaoa azules como el co or da U :isperanza, Que es tai el poder de nuestra insti tuoióa—dijo—qne solo a aila cabe de BQ8 humaredas.
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