23 ABRIL 2014 DÍA DEL LIBRO HOMENAJE A LOS COLORES … Y OTROS
POR 1º ESO POEMAS DE
AURELIO GONZÁLEZ OVIES
ROJO Buscaba el rojo que se difuminara
con el rojo que tiñe tu belleza, con el rojo que almuerzan los tomates, con rojo sarampión, rojo frambuesa. Y ya ves, a uno nunca sucede nada seguro, yo buscaba y buscaba y tú... rojo, mi rojo sobre la roja carne de una simple cereza
AMARILLO La luz de nuestras casas es de noche amarilla, las estrellas nos guiñan su pena en amarillo, la infancia es amarilla cuando usa flotadores, y amarilla es la cofia de algunos tulipanes, un campo de mostaza, las esponjas, la cintura del plátano, la espiga, la fama del aceite y los abrigos. Todo puede ser nada, todo o amarillo.
AZUL Llévame hasta la mar, madre,
llévame hasta la mar; dicen que es muy azul tan azul como tus gestos cuando me miras, como el tic-tac de los relojes, como tus sueños cuando me duermes, como un príncipe encantado, como la magia.
VERDE No gastemos el verde.
¿Quién nos haría entonces aceitunas cómo podrían criarse las orugas, de qué iban a vivir los campesinos, y los grillos, volverían en mayo a dar conciertos? Verde claro. Verde oscuro. Verde verde verdadero.
NARANJA Naranja son los últimos deseos del otoño,
naranja las caretas de noviembre y los árboles, naranja son los pétalos de alguna margarita y naranja el uniforme de muchos gusanos. No imagino una ardilla sin naranja, ¿y ustedes? piensen sin el naranja en una mandarina, en una sopa de ajo, en un planeta.
Nunca tengas tengas prisa ni para una risa. Nunca te aceleres por ser lo que no eres. Nunca te apresures si bajas o subes. Nunca le hagas daño al poco tamaño. Guarda siempre un sueño aunque sea pequeño. Todo lo consigues si sigues y sigues. Todo lo serás con sólo esperar. Llegarás muy alto con pequeños saltos. Y el tamaño es nada: está en tu mirada. Y un sueño es muy guay: da lo que no hay. Nunca tengas prisa. Las cosas hermosas son muy despaciosas.
Hazme magia otra vez -me pide Lidia. Y con cerrar los ojos como hace el sueño, con coserles dos alas a los deseos, nos despierta en las manos toda la vida: Una veces con uvas de nuestro huerto, llenamos garrafones de fantasía; otras veces con hilos que quedan sueltos repasamos palabras descosidas. Y alguna tarde que otra cuando hace viento vamos hasta lo alto de una sonrisa y lanzamos cometas con pensamientos de los mismos colores que la alegría. Sigue haciendo magia, -repite Lidia.