El pequeño cangrejo listo
Escrito por Kerrie Shanahan Ilustrado por Susy Boyer
Contenido Capítulo 1 Un hogar junto al mar
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Capítulo 2 La brillante idea de la estrella de mar 6 Capítulo 3 ¿Basura o tesoro?
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Capítulo 4 Una emocionante charca nueva
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Capítulo 5 Problemas en la charca de marea
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Capítulo 6 El pequeño cangrejo habla sin miedo
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Capítulo 1
Un hogar junto al mar En la orilla rocosa, junto al mar, había una charca de marea. En la charca
Era un buen lugar para vivir, porque la charca de marea estaba limpia y era segura. Todos los animales vivían felices en su charca. O, por lo menos, hasta que la estrella de mar se aburrió.
vivían muchas plantas y animales.
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Capítulo 2
Los animales miraron a su alrededor
La brillante idea de la estrella de mar
y comenzaron a asentir con la cabeza.
—Estoy aburrida en nuestra charca
—Tengo una idea —dijo la estrella—. Arreglemos nuestra charca. Hagamos que se vea brillante y nueva.
de marea —dijo la estrella de mar—.
—¡Sí! —exclamaron todos los animales—.
Siempre es igual. La marea sube.
Arreglemos este aburrido y viejo lugar.
La marea baja. Día tras día. ¡Nuestra charca es aburrida y yo también estoy aburrida!
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Pero nadie lo escuchaba. Todos los animales habían ido a buscar cosas nuevas para poner en la charca de marea.
—Pero esperen —intervino el pequeño cangrejo—. Nuestra charca no es aburrida. Así es como debe ser una charca de marea. Tenemos todo lo que necesitamos. Podemos escondernos en las algas marinas. Recibimos agua limpia del mar. El agua del mar trae ]un montón de pequeños animales que podemos comer. ¡No la cambien! 8
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Capítulo 3
¿Basura o tesoro? Cuando los animales volvieron, traían cosas nuevas para la charca de marea. —Mira, tengo una lata nueva y brillante —dijo la estrella de mar, mientras ponía la lata sobre algunas algas—. Ahora tenemos un lugar para sentarnos.
—Pero la lata está aplastando las algas —señaló el pequeño cangrejo—. Necesitamos las algas para alimentarnos y escondernos. ¿Dónde nos esconderemos y qué comeremos cuando las algas se mueran? Pero nadie lo escuchaba. 10
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La familia de caracoles de mar llegó
El pequeño cangrejo solo observaba
con una bolsa de plástico vacía.
y negaba con la cabeza.
—¡Vaya! —exclamaron todos los
—Esa bolsa de plástico es
animales—. Podemos construir un
peligrosa —explicó—. Nuestros bebés
techo con eso.
podrían ahogarse con ella.
Así que los animales pusieron la bolsa
Pero nadie lo escuchaba.
de plástico sobre la charca de marea.
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—El agua limpia nos trae un montón de pequeños animales para comer —explicó el pequeño cangrejo—. ¿Qué vamos a comer entonces? Pero nadie lo escuchaba.
Entonces el pulpo metió una caja grande en la charca de marea. —Miren —dijo—. Esto será muy divertido para jugar. El pequeño cangrejo estaba sorprendido. —Eso evitará que el agua limpia del mar entre a nuestra charca —replicó. 14
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Capítulo 4
Trabajaron duro para asegurarse de
Una emocionante charca nueva
que su charca de marea ya no
Los animales siguieron juntando toda clase de objetos para colocar en su charca. Arrastraron y levantaron y empujaron
fuera aburrida. —Miren nuestra charca ahora —dijo la estrella de mar—. Tenemos muchas cosas nuevas e interesantes para jugar. —Sí —respondieron los otros animales—. Se ve maravillosa.
y jalaron todas las cosas nuevas.
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Pero el pequeño cangrejo no pensaba
—Nuestra charca es muy diferente
que su nuevo hogar era genial.
de lo que solía ser —dijo el pequeño
Miró todos los rincones de la charca. Se preguntó cómo podía haberle sucedido esto a su hermoso
cangrejo—. Me preocupa que ya no será un lugar seguro. Pero nadie lo escuchaba.
y saludable hogar.
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Capítulo 5
Problemas en la charca de marea Durante un tiempo, los demás animales fueron felices en su nuevo hogar, pero luego la charca empezó a cambiar.
El agua estaba sucia y las algas dejaron de crecer porque no llegaba agua limpia a la charca. Finalmente, los otros animales se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo. —Nuestra charca se está muriendo —exclamaron todos—. ¿Qué haremos? ¿Cómo podemos salvar nuestro hogar? 20
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Capítulo 6
El pequeño cangrejo habla sin miedo —¡ESCÚCHENME! —dijo el pequeño cangrejo, con su voz más grave y fuerte—. Yo sé qué hacer. Debemos limpiar nuestra charca. Tenemos que deshacernos de las cosas que no deben estar aquí.
Por fin, los animales escucharon al pequeño cangrejo. Comenzaron a limpiar su charca. Era un trabajo duro, pero los animales estaban decididos a volver a tener una charca hermosa y saludable. Arrastraron y levantaron y empujaron y jalaron hasta deshacerse de toda la basura.
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Tomó tiempo, pero finalmente la charca de marea estaba limpia de nuevo. Y a partir de entonces, cada vez que los animales tenían una nueva idea, siempre consultaban primero al pequeño cangrejo.
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