Málaga hoy LUNES 16-4-2007
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Cultura
E S P EC TÁC U LO S
Axarquía. La asociación La Carpa de Pizarra llevó ayer el circo hasta Riogordo en un ‘show’ de casi dos horas de duración con acrobacias y malabares realizados por artistas procedentes de Argentina, Chile, Italia y España
La pasión del circo en Riogordo
REPORTAJE GRÁFICO: SERGIO CAMACHO
El chileno Pancho prepara las telas sobre las que más tarde realizaría acrobacias. EL REPORTAJE
Nacho Sánchez Recién llegados, Lolo y Javier aparcan a primera hora de la tarde su furgoneta en el polideportivo de Riogordo. Van con prisas, como el que sabe que tiene una tarde importante por delante. El escenario donde dejan el vehículo es extraño. En pleno Monte Calvario y rodeado de las escenas donde se representa cada año la Pasión de Cristo, la pista polideportiva ha acogido esta semana a un visitante muy especial: una carpa de Circo. Javier y Lolo son dos de los artistas de la asociación La Carpa de Pizarra que ayer tarde llevaron esta actividad artística hasta la localidad axárquica. “Aún queda mucho por hacer”, explican mientras comen con prisa un bocadillo. A medias entre la planificación y la improvisación, todos los artistas se preparan dos horas antes del inicio de la actuación, que sirve para clausurar el IX Festival Sacro Ritual de Música y Teatro de Riogordo. Lolo pronto se erige casi en el padre de todos ellos. Gorra en la cabeza, libreta en mano y corriendo para todos lados trata de organizarlo todo. Pero poner orden antes de una actuación así parece imposible: los técnicos de iluminación van por un lado, los músicos prueban sus instrumentos
■ RIOGORDO.
por otro, los artistas hacen sus últimos ensayos en cualquier rincón y el público se agolpa en la puerta con impaciencia. “A ver. Dentro de media hora todo el mundo preparado”. Es la voz de Rafael Díaz, malagueño e integrante de La Carpa de Pizarra. Aunque habla fuerte –a petición de Lolo– y por un micrófono, su acento malagueño se pierde entre el argentino, el chileno, el italiano o el cordobés del resto de plantel. Y, a pesar de la llamada al orden, pocos parecen hacerle caso. Aunque en el desorden generalizado y sin saber cómo ni por qué, todas las piezas encajan. En ese momento, la actividad pasa al exterior de la carpa, donde entre caravanas y furgonetas todos ensayan y se transforman. “Siempre preparo lo que voy a decir, pero me sirve de poco y me invento la mitad”, afirma Antonio Ramírez, presentador del espectáculo, que luce un blanco impecable en su traje. Mientras habla, la italiana Valentina le pinta también de blanco la cara, tras hacer lo mismo con su compatriota Gianni. “Somos de Cerdeña y vinimos hace dos años y medio a Málaga. Es increíble poder actuar así”, dice. Cerca de allí, en una caravana, la argentina Laura Bolón se transforma en una femme fatale de cabaret sobre el trapecio, Charly se convierte en un alumno con so-
bresaliente en los equilibrios, el chileno Pancho en un ángel que vuela sobre telas, Javier en un barrendero malabarista o Lolo en un mimo eléctrico. Nada de mitos, aquí no hay leones ni elefantes. Pero sí un té verde para Gianni antes de salir a la pista o la última calada a un cigarro para eliminar los nervios.
La actuación sirvió para clausurar el IX Festival Sacro Ritual de Música y Teatro de la Laura y Valentina maquillan a Antonio Ramírez.
Lolo prepara el espectáculo con una ‘chuleta’ con el orden de las actuaciones.
localidad de la Axarquía Monociclos, colchonetas, bolas de malabares... Todo listo –“¿seguro?”, pregunta Lolo– para la actuación, que comienza con las gradas llenas y un circense olor a palomitas. A partir de ahí, luces, risas, admiraciones de sorpresa y aplausos llenan el recinto donde no para de sonar la música de la Free Circus Band. En un abrir y cerrar de ojos, pero dos horas más tarde, todo acaba. El público desaparece, llega la calma. Y Javier y Mimo descansan del ajetreo. Ahora sólo queda desmontar la carpa circense. La otra pasión de este año para Riogordo.