Málaga hoy SÁBADO 17-3-2007
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Cultura
Documental. Olaia Sendón y Jacobo Sucari fueron los últimos en mostrar sus obras en la Sección Oficial de la muestra malagueña
La polémica persigue a ‘Lola’ tras su estreno malagueño La familia de Manolo Caracol muestra su “profundo malestar” por el tratamiento del personaje EFE
GARCÍA VIVAS
Olaia Lendón, ayer, momentos antes de la proyección del documental.
Elcuentodelprogresoyelladrillo ‘A casa de Lola Andrés’ y ‘La lucha por el espacio urbano’ denuncian la especulación urbanística en la Costa da Morte y Barcelona NACHO SÁNCHEZ
Es algo así como el cuento de Pedro y el lobo. Pero por mucho que avisen de que llega el progreso, al final lo hace. Y en forma de ladrillo. Con él, la especulación. Y el dinero fácil. Y el olvido de las raíces. Es lo que han querido contar Olaia Sendón en A casa de Lola Andrés y Jacobo Sucari en La lucha por el espacio urbano, los dos últimos documentales de la sección a concurso que se proyectaron ayer en el festival de cine malagueño. La actualidad está desbordada
■ MÁLAGA.
de corrupción urbanística o de un sector constructor imparable, “pero los medios no llegan a lo hondo y tienen un discurso derrotista de que ya no se puede hacer nada”, dice Sucari. Y ambas películas tratan de denunciar aspectos negativos de ese progreso que es en último lugar el desarrollo urbanístico . Si estos dos documentales estuviesen filmados en el mismo sitio podrían considerarse como el primer y segundo capítulo de una única historia. Pero falla la localización. A casa de Lola Andrés se centra en la Costa da Morte, “un
lugar agreste, apartado y que siempre ha ido por detrás en todo”, afirma Sendón. “Yo quise investigar sobre la llegada allí de la luz o el cine porque todavía hay gente que lo vivió y lo recuerda. Pero el boom inmobiliario me encontró en el camino y cómo ha transformado de un plumazo todo el entorno sin que haya nadie que protestara por ello”, añade la directora. Es decir, especulación urbanística sin protesta ciudadana. Es justo el paso previo y contrario a lo que retrata Sucari en La lucha por el espacio urbano. Porque en Barcelona sí hay conciencia de la necesidad de luchar contra la especulación. El documental retrata a asociaciones y organizaciones que luchan contra el desarrollo urbanístico en la zona de Poble Nou. “El fenómeno inmobiliario es
una imposición del capital, no tiene participación ciudadana y los políticos hacen oídos sordos. Pero allí hay una larga tradición asociacionista que lucha contra esa transformación, contra esa pérdida de patrimonio cultural o huellas de la historia que es todo y que lo inmobiliario lo convierte en beneficio de unas pocas mafias”, dice el documentalista. Ambos llegan a Málaga para tratar de despertar conciencias “y demostrar que hay maneras de resistencia, que son necesarias y que se pueden llevar a cabo”, afirma Sucari. “Y yo lo que pretendo es que la gente se organice y tome conciencia”, añade Sendón. Lo consigan o no, la especulación urbanística, probablemente, continuará. Y si no, pregunten en Marbella.
■ MADRID. La polémica persigue a Lola, la película de Miguel Hermoso que abrió el Festival de Málaga fuera de concurso y que ayer tuvo su estreno en las salas comerciales. Si la familia de La Faraona ya había manifestado su desacuerdo, ayer fue la familia de Manuel Ortega Juárez, conocido como Manolo Caracol, quien mostró su “profundo malestar” por el trato que se le da en la película, en la que el artista, al que da vida José Luis García Pérez, no sale muy bien parado. En una carta firmada por su hija Lola Ortega Gómez, en representación de toda la familia y ante lo que consideran un “atentado a la integridad y el honor de Manolo Caracol”, se asegura que “nadie de la productora se ha puesto en contacto con ningún miembro de la familia, al objeto de documentarse sobre su vida, y tampoco de contrastar la información en relación con dicho personaje, que hayan podido obtener por otros cauces”. En Lola, Jose Luis García interpreta a un Manolo Caracol “machista, bebedor, cocainómano, mujeriego y maltratador”, según un portavoz de la familia, por lo que ésta considera que “se produce un grave atentado al honor” del artista, “por el que se verán notablemente afectados sus hijas, nietos y biznietos a título personal”.