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Yukio Mishima, espiritualidad y muerte
from Yukio Mishima - Nigromante Enero 2017
by Nigromante. Revista de la DCSyH, Facultad de Ingeniería, UNAM.
Por Jesús Pérez Esquivel
Considerado uno de los mejores escritores en la historia de Japón, Kimitake Hiraoka, mejor conocido como Yukio Mishima, logró llevar su narrativa y espiritualidad a tal punto donde la belleza literaria se conjugó con los problemas internos de su personalidad, conflictos provenientes de la derrota de Japón en la Segunda Guerra Mundial.
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Yukio Mishima fue un novelista, dramaturgo, poeta y cineasta japonés. Nació un 14 de enero de 1925 en una localidad cercana a Tokyo. Desde muy joven Mishima tuvo una educación muy estricta, su abuela Natsu, con la que vivió gran parte de sus primeros años le inculcó ideas relacionadas a sus antepasados samuráis. Mishima en una edad más madura intenta recuperar la esencia ideológica y espiritual del samurái japonés.
El acercamiento de Mishima con la lectura se logró en primera instancia por su abuela Natsu. Mishima fue un ávido lector de obras clásicas japonesas como de escritores como Rainer María Rilke y Oscar Wilde. Sus primeros poemas le valieron la admiración de sus profesores que lo impulsaron a seguir escribiendo y ocultar su nombre oficial por el de Yukio Mishima para evitar burlas de sus compañeros.
Durante el inicio de la Segunda Guerra Mundial, Mishima fingió estar enfermo de tuberculosis para evitar el servicio militar y ser enviado al campo de batalla. Poco tiempo después ingresó a la Universidad de Tokyo para estudiar derecho. Sin embargo sabía que su real vocación estaba en la literatura.
La primera novela de Mishima la tituló Ladrones y la publicó en 1948, con esta obra sería colocado en la segunda generación de escritores de posguerra. Posteriormente, Mishima publicó Confesiones de una máscara, obra con la que ganó la fama y el reconocimiento en Japón, Europa y América. Mishima con 24 años de edad era ya una celebridad en el ámbito de la literatura.
La obra de Mishima abarca principalmente a la novela: Sed de amor (1950), Los años verdes (1950), El rumor del oleaje (1956), La escuela de la carne (1963), Música (1965) y su tetralogía El mar de la fertilidad (1964 -1970).
En la tetralogía, Mishima deja entrever su postura de ultra derecha al predicar sentimientos militaristas además de tener una postura en contra de los Estados Unidos. Su vida durante la década de los sesenta estaría marcada por un exacerbado nacionalismo y su constante llamado a los jóvenes para unirse a las fuerzas armadas como a los militares al promover un levantamiento de armas y derrocar al gobierno. Sin embargo, Mishima sería recordado principalmente por su muerte ritual al tomar como rehén a un mando superior de las Fuerzas de Autodefensa de Japón.
La muerte de Mishima llamaría la atención de todo el mundo por su carácter simbólico y espiritual, su interés por su herencia samurái le llevó a trabajar su cuerpo en rigurosas rutinas de ejercicio en los últimos quince años de su vida como a comprender aspectos de la vida y de su contexto que lo condujeron a formar una filosofía muy personal.
Mishima, tras un discurso fallido ante las Fuerzas de Autodefensa, terminaría con su vida al realizar el ritual conocido como seppuku; una forma de suicidio instaurado por los antiguos samuráis con el fin de tener una muerte digna en lugar de una muerte provocada por la tortura de los enemigos. En el caso de Mishima, su seppuku fue infligido por uno de sus más cercanos seguidores y amigos.
La muerte del escritor nipón derivaría en un reclamo al gobierno, al ejército y al pueblo japonés; Mishima percibía una pérdida de los valores y antiguas tradiciones que formaban el núcleo de la identidad individual y como pueblo.
Yukio Mishima logró plasmar tanto en su literatura como en su vida y muerte, la belleza, la pasión y su fascinación por la muerte, características que lo hacían diferente de los demás escritores de su época. Mishima alcanzaría una profundidad intelectual que para muchos críticos de todo el mundo será difícil igualar.