¿Son los smartphones plegables el futuro?

Por Martín Cruz

Ésta es una pregunta que me hice el 11 de agosto del 2021, al terminar el Galaxy Unpacked. En éste evento, Samsung presentó sus últimos dispositivos: Los Buds 2 y el Samsung Galaxy Watch 4; pero los que realmente se robaron las miradas fueron los nuevos Galaxy Z Fold 3 y Galaxy Z Flip 3. Ambos son celulares plegables que se distinguen por su formato. El primero, el Z Fold 3, destaca por su inmensa pantalla abierta de 7.6 pulgadas con una resolución de 2208 x 1786 y una frecuencia de refresco de 120Hz. Una pantalla impresionante en especificaciones y por los videos mostrados, tanto por Samsung como de la prensa que tuvo acceso al dispositivo, se ve deslumbrante. En mi opinión, es un imán de miradas. No nos engañemos, igual de impresionante fue su predecesor, puesto que comparten especificaciones en cuanto a pantalla y diseño. El verdadero cambio en ésta nueva generación fue en cosas más sutiles, imperceptibles, como el cambio de material de la bisagra o que la cámara frontal es “invisible”, esto con sus desventajas.

El verdadero cambio fue en su precio, que en lugar de aumentar, disminuyó. El descuento fue de 200 dólares. En éste caso la estrategia de Samsung es atraer a más público: sumando a la reducción de precio se lanzó una campaña de intercambio de dispositivos por descuento para adquirir alguno de los dos nuevos Galaxy Z, si se llega a obtener el máximo descuento, el precio final para la versión básica del Galaxy Z Fold 3 es de 999.99 dólares. Un precio similar al de otros dispositivos no plegables de otras marcas, o en el caso de la propia Samsung, hasta por debajo del precio si lo comparamos con uno de sus modelos icónicos, como lo es el Galaxy Note 20 Ultra, el cual tiene un precio base de 1049.99 dólares.

Por otro lado, habiendo mencionado a la serie Note, desde hace ya varios meses se planteaba su inevitable muerte debido a que ya no tiene razón de existir y el pasado 11 agosto la marca puso otro clavo a su tumba. La serie Note se distinguió desde sus inicios por dos cosas principales: La primera fue su enorme pantalla, hoy algunas personas podrían considerar al primer Note como un celular pequeño con sus 5.3 pulgadas de pantalla. La segunda fue el S pen, un lápiz óptico que servía para tomar notas y dibujar, que en generaciones posteriores Samsung fue actualizando con más funciones, como los puntos de presión y hasta la conectividad Bluetooth para usarlo como botón a distancia. Éstas dos características ya no son propias del Note, ya que el S21 Ultra es compatible con el S pen y ahora, el Z Fold 3, es quien tiene la corona de la pantalla más grande dentro de la marca y también es compatible con el S pen.

Así que, ¿cuál sería la razón de comprarse un Note en estos días? Ninguna, esa es la respuesta en mi opinión. Como antiguo usuario de un Note 3, que fue mi celular favorito, y que actualmente todo lo que escribo a mano es con el Apple Pencil, puedo decir que no me compraría un Note nuevo, en cambio escogería el Z Fold 3, que es más grande, llamativo y su Stylus, al ser más largo, es más cómodo para escribir; lo sé por experiencia. Retomando la pregunta que da título a este artículo: “¿Son los smartphones plegables el futuro?” Mi respuesta es que efectivamente, el futuro va encaminado hacia una transición a los celulares plegables. Debido a sus ventajas intrínsecas como que son más grandes en tamaño de pantalla; puedes hacer multitasking más fácilmente por la división de pantalla; puedes usar la mitad de la pantalla como teclado. Es claro que también para Samsung el futuro de los celulares está en los celulares plegables y así lo dejó ver en el pasado Galaxy Unpacked.