Feis & Ceno Magazine

feis & ceno · magazine · Abril 2016 nº

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feisandceno.com

La ilustración editoral: ¿Cómo publicar tus ilustraciones?

tu revista de ilustración 1

feis & ceno · magazine ·

Agradecimientos a:

tu revista de ilustración LALALIMOLA lalalimola.com

LUIS DEMANO luisdemano.com

Dirección de Arte

Isabel Andreu Maquetación

Noelia Pareja Redacción e investigación ENRIC JARDÍ enricjardi.com

Celia Blanquer Isabel Andreu Félix el gato Noelia Pareja Correctora

Maribel Domenech MEDIAVACA mediavaca.com

DIÁLOGO EDITORIAL dialogo.dialogo-tilde.es/

Esta revista se ha editado en la

Universidad Politécnica de Valencia para la asignatura de Metodologías de Proyectos.

índice 7 11 17 21 27 29 33 38 39

Así empezó todo,

La ilustración

Entrevista con:

Lalalimola

Entrevista con:

Luis Demano

Entrevista con:

Enric Jardí

Ilustración editorial.

Impresión de ideas.

Entrevista con:

editorial Diálogo Entrevista con:

editorial MediaVaca

La ilustración es... ¿Cómo publicar?

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Así empezó todo,

la ilustración por Noelia Pareja

La ilustración es la elaboración de una imagen crítica, con opinión, que se apoye en el análisis de la propia historia. No se trata tan sólo de una cuestión estética, la ilustración implica un descubrimiento de lo oculto. La profesión del ilustrador se basa precisamente en eso, en encontrar una imagen que se relacione y conviva con el texto, una simbiosis que debe ser a la vez simple y compleja.

Para

Interior de ‘‘Orbis Sensualium Pictus’’. 1658.

En el siglo XVII aparecieron los primeros libros ilustrados para el público infantil, aunque eran excesivamente educativos y la estética no tenía la menor importancia.

El primer prototipo de libro ilustrado para niños se tituló “Kunst und Lehrbüchlein” –“El arte y la enseñanza” (1580)-, y era un libro de instrucciones para jóvenes lleno de encantadores grabados en madera elaborados por el artista Jost Amman.

Casi 100 años más tarde en 1658 aparece el “Orbis Sensualium Pictus” escrito e ilustrado por el pedagogo Amos Choelius, se considera una guía de lectura infantil que estuvo vigente alrededor de unos 200 años. Los libros creados en este siglo tenian una función principalmente cognitiva, no tenían un aspecto estético suficientemente atractivo pues el libro no se concebía como un elemento recreativo.

Más adelante, ya en el siglo XVIII, se desarrollan libros más adecuados para el público infantil, gracias un estudio más profundo de las imágenes en el que se considera que éstas llegan a ser más convincentes y expresivas que los textos, y el principal medio para hacer llegar un mensaje de una manera amena a los pequeños. Siguiendo estos cánones, el doctor Heinric Hoffmann, psiquiatra, presenta el libro “Pedro Melenas” (1809-94), que aunque tiene un claro mensaje moralizante, ya que alerta al lector mediante el humor -a veces negro y con situaciones grotescas- sobre las consecuencias de ciertos comportamientos, reafirma este mensaje acompañandolo en cada página con ilustraciones.

Más tarde en el siglo XIX se produce el auge de la fantasía. En este siglo aparecen los primeros libros de juegos con ilustraciones para niños, que no insisten tan sólo en el propósito de aleccionar al lector sino que se centran en su la psicología y también tratan de entretener. Así la lectura se convierte en algo recreativo.

Un buen ejemplo de esto es, Crane, un ilustrador británico que lo único que pretendía era divertir,

Portada de ‘‘Pedro Melenas’’. 1809.

que junto con el diseñador William Morris, fue uno de los máximos exponentes del movimiento Art&Crafts. Su obra maestra fue “La reina de las Hadas” (1894) de Edmund Spenser.

Caldecott, otro ilustrador británico, se dedicaba a divertir a los niños empleando situaciones absurdas con un fantástico don para hacer ilustraciones tremendamente expresivas. Dio vida así a platos, cubiertos y animales, convirtiendose en un precedente para los posteriores libros de niños, e incluso en películas animadas, como por ejemplo, “La bella y la bestia” (Disney, 1991).

Es en esta época cuando George Cruickshank realizó las ilustraciones para los cuentos de hadas de los hermanos Grimm. Este ilustrador fue el primero en dotar de una enorme vitalidad a los 7

personajes inspirándose en el público al que se dirigía, y estas recreaciones son las precursoras de la ilustración infantil tal y como la conocemos hoy en día.

Otra ilustradora británica de la época victoriana cuya estética plasmó con gran soltura en sus ilustraciones fue Kate Greenway. Aunque su trabajo carece de sentido del humor, puesto que las imágenes que creaba eran puramente estéticas, con un interesante sentido de la composición e innovadores puntos como el uso de siluetas o de espacios en blanco.

En 1860, el ilustrador John Tenniel empieza a trabajar con literatura infantil. El auge de su carrera se debió a las imágenes que creó para los dos libros de “Alicia en el País de las Maravillas” (1872) de Lewis Caroll.

Durante el siglo XX, la ilustración de libros infantiles emergió como un componente más de la industria editorial. En estos libros se tiene en cuenta la psicología del niño, sus intereses y vivencias de forma determinante.

En 1906 se publicó un libro que contaba las aventuras de “Peter Pan”, un personaje ficticio creado para una aparición en una obra de teatro en 1904, y que fue ilustrado por Arthur Rackham. También trabajó con otras obras infantiles como “Alicia en el país de las Maravillas” y cuentos de los hermanos Grimm, entre otros.

El autor Antoine de Saint-Exupery escribió “El principito” en 1943, y lo acompañó de sus propias ilustraciones. Considerado un libro infantil por

Ilustración de John Tenniel para ‘‘Alicia en el Pais de las Maravillas’’. 1865.

su historia simple ésta, en realidad, esconde una metáfora que hace reflexionar acerca de temas tan serios como la vida, la amistad o el amor. Ha sido valorado como una de las obras más reconocidas de la literatura universal.

Lo es también el libro infantil creado e ilustrado por Maurice Sendak en 1963, “Donde viven los monstruos”, que se trata de un clásico vigente hasta nuestros días. Fue un libro políticamente incorrecto pues en él aparecía un niño haciendo travesuras, portándose mal, mostrando inseguridades y superándolas por sí mismo. Cabe indicar que el texto, acertado y pedagógico, no calaría tan bien en los lectores sin estar acompañado de las ilustraciones.

El ilustrador británico Quentin Blake, cuyo trabajo desenfadado y espontáneo ha influido en la manera de entender la ilustración en la segunda mitad del veinte, ha ilustrado numerosos relatos de otros escritores entre los que destacan los de Roald Dahl antes de realizar los suyos propios. De ellos, el más completo “Clown” (1995), es un relato sobre juguetes que cobran vida.

Durante este siglo, los procesos tecnológicos han permitido que los ilustradores trabajen cada vez con resultados más satisfactorios y mayor facilidad. Los métodos tradicionales, pluma, acuarela, lápiz de color…, siguen siendo populares aunque, cada vez más, se acompañan o quedan remplazados por la ilustración digital.

Ilustración de Saint-Exupery ‘‘El principito’’. 1943.

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Sandra Navarro

Lalalimola

por Isabel Andreu

Sandra Navarro comenzo su carrera en el mundo de la publicidad y el diseño gráfico hasta que decidió enfocar su trabajo hacia su verdadera pasión: la Ilustración.

Desde entonces, trabaja principalmente en ilustraciones infantiles y colabora con editoriales internacionales y agencias de publicidad. Le gusta trabajar en una gran variedad de medios y estar en constante aprendizaje.

Además ha trabajado como profesora en la Universidad Politecnica de Valencia en el Departamento de Dibujo.

¿Cómo dirías que tu formación académica ha ayudado al desarrollo de tu carrera?

Me licencié en Publicidad y Relaciones Públicas y en Bellas Artes. Creo que la formación académica no es imprescindible pero sí muy aconsejable. En mi caso, una carrera me llevo a la otra. Empecé como diseñadora gráfica y finalmente acabé como ilustradora, fue una evolución. Las dos carreras que cursé se complementan muy bien y gracias a estos estudios dispongo de una base de conocimientos amplios con respecto a diversas especialidades tales como marketing, economía, historia del arte, fotografía, animación, diseño gráfico, entre otras. Estos conocimientos me permiten enfrentarme con mayor seguridad y profesionalidad ante los proyectos.

¿La ilustración ha estado siempre presente en tu vida o es algo que descubriste a partir de

tu estudios artísticos?

Nunca me he planteado cual sería mi profesión. Me he dejado llevar por lo que iba sintiendo en cada momento y una cosa me ha llevado a otra y así hasta ahora. En mi familia no hay antecedentes artísticos y la ilustración se cruzó en mi camino cuando trabajaba como diseñadora gráfica. Tras finalizar la carrera de Publicidad, decidí matricularme en Bellas Artes porque sentía la necesidad de expresarme gráficamente pero no tenía los conocimientos. De ahí en adelante encontré la ilustración como medio de expresión.

Por otro lado, considero muy importante y enriquecedor que tras los estudios académicos cualquier ilustrador se mantenga en constante aprendizaje y actualizado. Para ello es muy recomendable asistir a congresos especializados y talleres de otros compañeros.

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¿Cuál fue tu primer encargo y cómo fue la experiencia?

Mi primer encargo fue para una empresa valenciana de mobiliario de baño, Sonia SA. La empresa contacto conmigo a través de la página web de la Asociación Profesional de Ilustradores Valencianos (APIC), en la cual yo estaba asociada.

Fue un placer colaborar en este proyecto porque el cliente confió en mi trabajo y trabajamos en equipo. Además de que el proyecto fue muy divertido.

Creo que es interesante destacar que este fue mi primer proyecto profesional. Es decir que cuando me contactó el cliente, mi portfolio estaba compuesto por trabajos personales y algunas ilustraciones realizadas para la carrera de Bellas Artes. Ya que en este momento yo estaba cursando el último año de la misma.

¿Has recibido ofertas que hayas tenido que rechazar por algún motivo?

Sí, y es buena señal (toquemos madera). En un principio trataba de coger todos los proyectos, porque ya sabes que en esta profesión nunca sabes cuando te puede faltar trabajo… pero finalmente y tras meses muy duros de excesivo trabajo, aprendí a organizarme mejor y saber decir no. Desde entonces, cada vez que recibo un encargo para un nuevo proyecto sopeso el tiempo, el presupuesto y la relevancia del proyecto con respecto a la evolución de mi portfolio. Es importante no querer abarcar más de lo que se puede, ya que además esto afecta a la calidad de nuestro trabajo y, lo que es más importante, a nuestra calidad de vida.

Dise単o para la Sonia S.A. (empresa de mobiliario de ba単o)

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¿Cuál es la mejor y la peor parte de trabajar por encargo con editoriales?

Suelo trabajar por encargo habitualmente y frente a los proyectos propios la principal ventaja es que tienes una mayor continuidad en el trabajo y que sabes que ese proyecto lo vas a cobrar. Del otro modo, tu realizas un proyecto personal y no tienes la seguridad de que ese proyecto vaya a ser publicado, por lo tanto remunerado.

Los proyectos personales tienen la ventaja de que te permiten una mayor flexibilidad, tanto en cuanto a tiempo como a nivel creativo. No obstante, en los encargos el hecho de trabajar en equipo es muy enriquecedor según el tipo de editor.

Desde mi punto de vista, lo ideal es trabajar por encargo y poder dedicar algo de tiempo ha realizar algún proyecto personal que de ese modo también te sirva como vía de escape.

¿Qué consejo le darías a una persona que quiere empezar a desarrollar su trabajo en este campo?

Ilustraciones para ‘‘Nurse Rhymes’’. 2015.

Creo que el primer escalón es el portfolio y es lo que te abrirá las puertas para empezar en este circo. Como es natural, cuando somos estudiantes o acabamos de terminar los estudios no tenemos un portfolio profesional por lo que debemos crearnos uno a base de proyectos personales y algún proyecto interesante desarrollado en los estudios.

Es importante que el portfolio sea breve y conciso. Desde mi punto de vista, las dos mejores opciones para preparar el portfolio son mediante un sencillo documento de pdf y un portfolio web, es decir, una página web con tu

dominio preferentemente donde subas una selección de trabajos.

En mi caso, habitualmente empleo la segunda opción ya que es más cómoda, siempre podrán volver a consultarlo, permite actualizaciones, evitas documentos que pesan. Además, hoy en día la mayoría de editores dudo mucho que coleccionen portfolios impresos ni descarguen pdfs, seguramente dadas las nuevas tecnologías es más sencillo crear una carpeta de marcadores en el navegador donde almacenar los portfolios web que les interesan.

Además del portfolio, es imprescindible empezar a conocer los entresijos de la profesión y para ello puedes acudir a las asociaciones de ilustración. El tema burocrático y administrativo es muy importante y tendrás que estar bien informado para cuando lleguen los primeros proyectos y con ellos los presupuestos y facturas.

pero interesante portfolio, información burocrática y administrativa relativa a la profesión, y las redes sociales como escaparate al mundo y a su vez como fuente de información y actualización.

Y por supuesto, ser constante y paciente. La oportunidad llegará y debes estar preparado cuando llegue el momento. Como me decía

mi padre, no quieras comerte el huevo sin romper primero el cascarón.

Una vez tenemos claro el portfolio necesitamos darnos a conocer y movernos para llegar al público que nos interesa. Para ello es importante definir un trayecto y pensar hacia donde nos queremos dirigir, por ejemplo, si quiero realizar ilustración aplicada a diseño textil deberé hacer una búsqueda de empresas interesantes de este sector en las que puedan necesitar este servicio.

Un papel importante aquí lo tienen las redes sociales que nos permiten estar en contacto con empresas de todo el mundo y exhibir nuestro trabajo a posibles interesados.

Podría recomendar un sin fin de cosas pero para resumir nos quedamos con un reducido

Ilustraciones para ‘‘En Patufet’’. 2015.

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Luis Demano

‘‘El caos es parte de mi trabajo’’ por Noelia Pareja

Es un ilustrador autodidacta, natural de Alicante aunque ahora reside en la cuidad de Valencia, donde es uno de los referentes en el mundo de la autoedición. Trabaja (o ha trabajado) para El Mundo, El Viejo Topo, ABC Cultural, Media Vaca, La Marea o Tàndem Edicions, entre otros.

Además en este momento ejerce como profesor en un Master privado de Diseño e Ilustración en La COCO SCHOOL.

¿En qué momento cuando realizabas tus estudios de BBAA te planteas que tu obra tendrás que venderla y por ende comenzar a dar una serie de pasos mas allá de tu entorno universitario?

En mi caso nunca he pisado la universidad.

Soy autodidacta. Así que me dí cuenta de que tenía que empezar a espabilar y empezar a vivir de la ilustración mientras servía mesas en un restaurante mexicano.

Hay un instante que tu obra evoluciona del sentido puramente académico, a poseer un valor económico. ¿Cuando lo viviste y como lo resolviste?

mos expuestos actualmente.

Mi obra nunca ha tenido un valor académico Por otra parte, no es “todo es cuestión de tiemporque, volviendo a la pregunta anterior, nun- po”, sino la capacidad de ser constantes duranca he formado parte de ese círculo. Respecto a te ese periodo de tiempo lo que, tal vez, nos su “valor económico”, toda creación en nuestra ayude a ganarnos la vida con la ilustración. economía capitalista posee un precio potencial Evidentemente, también existen otros factures en la ecuación, pero en mi caso fue la consdesde su origen. tancia lo que me ayudó. Una constancia que se Cuando das el paso para vender tus extendió durante 10 años hasta que di el salto profesional. Otras personas te contarán otra trabajos, sentiste el miedo al rechaexperiencia diferente. No existe una sola fórzo o por el contrario la convicción de mula en este proceso.

tu creatividad te posiciona en ese lugar de que “todo es cuestión de tiempo” y lo conseguiré.

Incluso en este momento de mi actividad profesional sigo sintiendo ese “miedo al rechazo” que comentas. Esa sensación es una continua espada de Damocles de la que soy consciente que siempre estará presente, dado el vertiginoso cambio de tendencias visuales al que esta-

La ilustración ha estado siempre presente en tu vida o es algo que descubriste a partir de tu estudios artísticos.

Incluso hoy día no sé con exactitud lo que es la “ilustración”, ya que en mi opinión es una mezcla de diferentes disciplinas que van cam17

biando según tus necesidades para la resolución del proyecto en que estés trabajando en cada momento. En mi caso, en este momento estoy trabajando en el terreno del diseño, la fotografía, el marketing, la animación o la caligrafía, por poner sólo algunos ejemplos.

Todas esas prácticas combinadas me ayudan a resolver problemas en mi terreno profesional, que dicen que es la “ilustración” y que sólo es una forma híbrida de comunicación visual.

¿Cuál fue tu primer encargo para una editorial y como fue la experiencia ?

Mi primera experiencia editorial fue para la editorial MEDIA VACA, concretamente para el libro colectivo “Mis primeras 80.000 palabras”. Fue una experiencia maravillosa porque conocí a sus editores Begoña Lobo y Vicente Ferrer de los que todavía hoy sigo aprendiendo esa manera especial suya de entender nuestra profesión y el amor por la edición de libros en papel.

¿Has recibido ofertas que hayas tenido que rechazar por algún motivo?

He rechazado ofertas de trabajo por dos razones: porque estuvieran mal pagadas o porque mi carga de trabajo me impedia dedicar el tiempo de calidad que todo cliente se merece cuando confía en ti para un encargo.

¿Cuál es la mejor y la peor parte de trabajar por encargo con editoriales?

Hay muchos factores que entran en juego, tanto los que se refieren al período de tiempo en que tienes que desarrollar el encargo como a las tarifas a cobrar. Como intuiréis, el mejor encargo es aquel que está bien pagado y del que puedes disponer del tiempo suficiente como para poder reflexionar.

¿Qué se siente al ver por primera vez un trabajo tuyo publicado?

Lo mismo que con el último trabajo publicado.

Una satisfacción infinita por el hecho de poder dedicarme a una de las cosas que más me apasionan en este mundo: pensar con imágenes.

¿Qué consejo le darías a una persona que quiere empezar a desarrollar su trabajo en este campo?

Que aprenda inglés. Con el tiempo descubrirá el porqué de este consejo.

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Enric Jardí

pensar con imágenes por Félix Torres

Enric Jardí nace en Barcelona en 1964. Cursa estudios de diseño gráfico en la escuela Elisava y a partir de 1988 ejerce de profesor en la misma escuela.

¿Hay un instante que tu obra evoluciona del sentido puramente académico, a poseer un valor económico? ¿Cuando lo viviste y como lo resolviste?

La ilustración formaba parte de mi trabajo, era un recurso más. Empiezo a cobrar exclusivamente por una ilustración cuando empiezo a publicar en prensa.

¿En que momento cuando realizabas tus estudios de BBAA te planteas que tu obra tendrás que venderla y por ende comenzar a dar una serie de pasos mas allá de tu entorno universitario?

No estudié Bellas Artes sino diseño gráfico cuando todavía no eran estudios de grado. Y de hecho no estudié ilustración ni empecé a dedicarme a ello hasta mucho más tarde, casi como un accidente.

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¿Cuando das el paso para vender tus trabajos, sentiste el miedo al rechazo o por el contrario la convicción de tu creatividad te posiciona en ese lugar de que “todo es cuestión de tiempo” y lo conseguiré?

¿Has recibido ofertas que hayas tenido que rechazar por algún motivo?

Sí, cuando no hay presupuesto o cuando el cliente no está seguro y quiere ver de entrada diferentes opciones.

Me costó encontrar un estilo. En el aspecto pu¿Cual es la mejor y la peor parte de traramente gráfico no creo que lo tenga todavía, bajar por encargo con editoriales? pero sí una manera de resolverlo.

¿La ilustración ha estado siempre presente en tu vida o es algo que descubriste a partir de tu estudios artísticos?

Lo descubrí más tarde. Ilustrador o dibujante era otro oficio. En aquel momento era considerado como algo muy distinto del diseño gráfico.

¿Cómo dirías que tu formación académica ha ayudado al desarrollo de tu carrera?

Lo mejor es tener la oportunidad de participar en la creación de algo y hacerlo en equipo.

Conoces personas y mundos distintos. Lo peor es cuando hay distintas personas con distintos intereses y puntos de vista opinando sobre una misma cosa. Al final siempre sale algo que no satisface a nadie. Es decir, lo bueno es también el problema.

¿Qué se siente al ver por primera vez un trabajo tuyo publicado?

Personalmente no me gusta. Lo escondo y no me gusta mirarlo.

Me ha ayudado mucho. Podría hacer una recopilación de percepciones, miradas, trucos, ¿Qué consejo le darías a una persona consideraciones sobre la imagen y la manera que quiere empezar a desarrollar su de producirla que salen de la escuela y que sigo trabajo en este campo? utilizando hoy.

Lo mismo que la alimentación: hay que comer de todo. Que mire mucho, que intente copiar para él mismo lo que los demás hacen, que se fije en los detalles y que busque la inspiración Fueron portadas de libro. Para según que tipo también en campos muy distintos a la ilustrade narrativa y para algunos títulos en concreto, ción. una ilustración es inmejorable.

¿Cual fue tu primer encargo para una editorial y como fue la experiencia?

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Ilustraci贸n editorial, impresi贸n de ideas

por F茅lix Torres

¿Cuál fue esa primera editorial y qué legado nos ha dejado?

La primera editorial surgió en la China del siglo VI. Allí surgió la impresión sobre plancha de madera. La impresión en su forma más primitiva, se hacía con bloques de madera, en los que se tallaban a mano tanto los textos como las ilustracionesLos bloques de madera se tallaban a mano, en relieve e invertidos, se les “entintaba” con pintura de agua, y se colocaba el papel encima del bloque. Un fuerte frotamiento trasladaba la tinta al papel o pergamino.

El primer libro que se imprimió fue el Sutra de Diamante, estampado por Wang Chieh el 11 de mayo del año 868, en China.

Pi Sheng en el 1040 ya fabricaba imprentas de tipos móbiles y cuatrocientos años más tarde, los coreanos mejoraron el invento a los tipos móbiles de metal.

Los primeros tipos móviles o manuales los hizo en China, Phi Sheng, entre los años 1041 y 1049. Aunque los tipos móviles fueron, pues, inventados por chinos, su idioma no era adecuado para utilizarlos. Cuatrocientos años más tarde, los coreanos mejoraron el invento a los tipos móbiles de metal.

dilla, y los primeros libros “de bolsillo”. (…) la mejor prueba del éxito de esta editorial son las numerosas ediciones “piratas” con la marca Aldina. Por lo tanto, el bibliófilo interesado en adquirir “un aldino” hará bien en asegurarse de lo que compra.

Una de las ambiciones de Manuzio era evitar que las obras de la literatura griega cayesen en el olvido o la pérdida física, por lo que las convirtió en sus principales proyectos de edición. Brindó al mundo las ediciones de Hero y Leandro de Museo, el Galeomyomachia, y el Salterio griego. Estos primeros libros no están fechados, pero sin duda son las ediciones más antiguas sacadas por la imprenta Aldina y son considerados como “los precursores de la biblioteca griega”.

Quizá el legado más importante de la primera editorial de la historia sea su logotipo: un ancla y un delfín. Hoy en día, el ancla y el delfín se emplean en los símbolos y nombres de diversas editoriales y librerías modernas como Anchor Books, o la librería Áncora y Delfín, en Barcelona.

Gutemberg no imprimió su primer libro (la biblia de 42 líneas) hasta 1455. Pero descubrió la imprenta de tipos móbiles de metal por sus propios medios.

La primera editorial de éxito fue La Aldina de Venecia, fundada por Aldo Manuzio: famosa por su gran edición de obras clásicas, la invención de la tipografía itálica o bastar27

Diรกlogo Infantil Libros muy ilustrados por Celia Blanquer

¿Qué os motivó a comenzar a trabajar con libros ilustrados? ¿Con qué géneros os sentís más cómodos? (infantil, adulto, didáctico…)

¿Confiáis siempre en los mismos ilustradores o buscáis diferentes perfiles según las necesidades de los proyectos?

El placer de hacer un tipo de libros diferentes a los que hacíamos (relacionados con la filosofía y libro de texto). El gozar del arte de la ilustración y sorprendernos con tantísimos trabajos de enorme calidad.

Nos sentimos cómodos con el único género relacionado con la ilustración que hemos hecho: el álbum ilustrado.

Buscamos ilustradores que se ajusten al texto que queremos ilustrar. Según el carácter del texto del que partimos, pensamos en un estilo de ilustraciones. Para ello echamos mano de la “cartera” de ilustradores que han trabajado con nosotros o de otros nuevos cuyos trabajos nos han llegado a la editorial. También hemos aceptado trabajos que nos han llegado acabados y cuya calidad era indiscutible.

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¿Cuál es el proceso de selección para que un ilustrador colabore o publique con vosotros?

Que nos guste su trabajo. Es decir, que su estilo sea personal y original, innovador si es posible, que se note su profesionalidad en la técnica de su obra, que se ajuste a las necesidades de la obra que hay que ilustrar... Huimos de estilos comunes, faltos de calidad estética, ajenos al género de nuestra colección, etc. Nos llegan muchas veces proyectos o muestras de trabajo que no tienen nada que ver con lo que nosotros publicamos.

¿Cómo convenís la remuneración con los artistas?

Al ser una colección de álbum ilustrado, en la que el trabajo del ilustrador es tan importante o más que el del autor del texto, ambos autores perciben un 10% de las ventas, a repartir entre los dos, como derechos de autor. El porcentaje lo suelen pactar ellos. Si no llegaran a un acuerdo, proponemos 6% el para ilustrador y 4% para el autor del texto. Además, adelantamos un porcentaje de los derechos de autor sobre las ventas de la primera edición que suele variar entre el 30 y el 50%, según la tirada entre otros factores.

¿Hay mucha demanda de estos productos o dirías que las nuevas tecnologías están desplazando a este mercado?

Afortunadamente sigue habiendo demanda y, teniendo en cuenta las edades a las que van

dirigidos nuestros libros, no pensamos que las nuevas tecnologías sean todavía una competencia. Y menos todavía si la pregunta se refiere a los nuevos formatos electrónico del libro en general y del libro ilustrado en particular, por el momento.

¿Cuál sería tu consejo para un ilustrador que esta empezando y quiere publicar con vosotros?

Que trabaje en encontrar su propio estilo, que realmente sea un creador y no se limite a copiar modas vulgares. Y, a la vez, y no es en absoluto contradictorio con lo anterior, que sea versátil y que sepa adaptarse a distintos tipos de libros y géneros (infantiles, adultos, cómic...).

Ilustración de Toño Benavides para Vic Pupo

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Una pareja que hace media

MEDIA VACA por Celia Blanquer

Vicente Ferrer y Bego単a Lobo

¿Cuál es el origen de Media Vaca y quiénes son sus antepasados?

¿Tenéis una fabulosa lista de escritores e ilustradores. ¿Cómo llegan a vosotros? ¿Tratáis de buscar vuesLos tres primeros títulos de la colección Litros propios autores, o se presentan bros para niños aparecieron en las navidades candidatos? ¿Cómo funcionáis en de 1998: No tinc paraules, Narices, buhitos, este sentido? volcanes y Pelo de Zanahoria. Entonces tuve la sensación de que había estado preparándome durante muchos años para poder hacer esos libros, y sin embargo no sabía nada del oficio de editor. Desde los quince años me he dedicado a inventar publicaciones en las que dibujaba, escribía o seleccionaba textos de otros. A partir de 1991 edité unos cuadernillos –literalmente un folio plegado dos veces y grapado en el centro– en los que ya figuraba el nombre de «1/2 vaca». Sólo que se trataba de la parte trasera de la vaca, la que reúne por cierto las partes más atractivas: las ubres y el rabo espantamoscas. De esos cuadernillos hicimos más de trescientos números a lo largo de diez años, treinta y tres por año, en tiradas de doscientos ejemplares que se distribuían entre colaboradores, suscriptores y amigos. La participación estaba abierta a todo el mundo. El colaborador más joven tenía un año de edad (sus padres transcribieron los ruidos que hacía mientras se bañaba con su patito o cuando escuchaba «Anchoas y aceitunas» de Rossini); el más mayor debió de ser mi propio abuelo, que publicó sus poemas utilizando hasta seis seudónimos distintos (no quería que le consideraran un acaparador). En estos cuadernillos cabía cualquier cosa que pudiera darse en ocho páginas: poemas y cuentos, dibujos, páginas de diario, pequeñas piezas teatrales, historietas, apuntes de viaje, listas de cosas, etc.

La mayor parte de los escritores han llegado a nosotros, muchas veces, como autores de libros que hemos encontrado en librerías de viejo y bibliotecas. Los ilustradores, siempre por caminos más extraños: a través de su obra publicada en libros, pero también en revistas de historietas, en prensa, en carteles y programas de mano, en blogs, en galerías virtuales, etc., etc. Muchas personas nos hacen llegar muestras de sus trabajos: algunos llaman por teléfono para preguntar y otros se presentan directamente en nuestra casa (que es también nuestra oficina). Otros envían imágenes por Internet. Algunos autores llegan de la mano de escritores o dibujantes a los que ya conocemos.

Otros, que demuestran conocer bien nuestros libros, proponen proyectos muy razonables que a veces sentimos mucho tener que descartar. El perfil de los ilustradores es muy distinto y son variados los caminos.

¿Quién encarga el proceso ilustrativo a un narrador gráfico? ¿En qué se basa esta decisión? ¿Algún proyecto editorial que se os ha presentado estaba ya ilustrado?

Del encargo de ilustraciones y del seguimiento de este trabajo me ocupo yo (Vicente Ferrer), que realizo en la editorial las funciones de director de arte. La elección del ilustrador o la ilustradora viene determinada por sus trabajos previos. No sólo importa el currículum 33

otro libro: un libro que se encuentra en mi biblioteca y que es un viejo conocido. Decido emprender la edición de un libro no sin darle antes muchas vueltas y sólo cuando tengo en la cabeza el nombre del ilustrador o ilustradora que puede ponerle las imágenes. Y es esa persona y no otra. Yo mismo soy ilustrador y trabajo sobre todo con ilustradores amigos cuya trayectoria conozco bien y con quienes comparto entusiasmos e inquietudes profesionales. del ilustrador, sino su interés personal por el proyecto. Cada libro se inicia siempre sin una fecha de entrega cerrada y se va definiendo a través de conversaciones. En ocasiones algunos ilustradores han rechazado el trabajo que se les había propuesto porque no encontraron la forma de implicarse en él, por no conseguir llevarlo a su terreno o por falta de tiempo o por otras razones. Es fundamental poder conversar con los ilustradores para dar con el tono del libro. Algunos de los libros que hemos publicado llegaron ya a nuestras manos como libros ilustrados. Es el caso, por ejemplo, de No tinc paraules, Una temporada en Calcuta o El paseo de Buster Keaton.

¿Qué criterios aplicáis a la hora de escoger, bien un autor contemporáneo, bien un clásico, y emparejarlo con un ilustrador determinado? ¿Pensáis antes en el texto o en el ilustrador?

Aunque en los libros de Media Vaca es muy importante el peso de la ilustración, y ese es tal vez el rasgo que más los caracteriza, en realidad muchos de ellos parten de un texto preexistente. En el origen de cada libro hay

¿Cuál es vuestro proceso de trabajo con el ilustrador? ¿Podríais explicar todas las etapas en que se divide vuestra colaboración y lo más fascinante de su evolución?

La relación con los ilustradores es fundamental para llevar a buen término el trabajo y suele ser estrecha sobre todo en la primera parte del proceso. Previamente he realizado una labor de documentación alrededor del texto buscando, si las hay, otras ediciones contemporáneas o antiguas, y versiones de diferentes países en otros idiomas. También reúno todo el material gráfico que considero que guarda alguna relación con el tema, haciendo caso de mi intuición y del recuerdo de pasadas lecturas. Paisajes de Cezanne y Van Gogh para los escenarios de Pelo de Zanahoria, dibujos y caligrafías de Fernand Léger para Panamá o las aventuras de mis siete tíos, aucas y grabados populares para El mundo al revés, etc. En este punto soy exhaustivo; si es posible, me interesa conocer todas las ediciones previas del libro que voy a editar (a veces resulta difícil al tratarse de ediciones agotadas que hay que rastrear en bibliotecas y librerías de viejo). Con todo este material en la mano nos sentamos el

ilustrador y yo a conversar y vamos confrontando nuestros puntos de vista. Cuando el ilustrador realiza los primeros bocetos tratamos de llegar a un primer dibujo definitivo que será el que marque el tono del conjunto.

Encontrar el tono adecuado es sin duda el paso más importante, el que permite empezar a caminar. El montaje del libro representa casi siempre la última fase de un largo proceso de trabajo, aunque en ocasiones existe un esquema trazado de antemano: dibujo fuera del texto en dobles páginas, un dibujo por página, cambio de la segunda tinta según los pliegos, etc. Generalmente se va armando todo como un puzzle que al final encaja sin que falten o sobren piezas.

¿Qué consejos daríais a quien quiere entrar profesionalmente en el mundo editorial?

A los ilustradores les diría que no basta con adquirir un estilo propio o formarse en unas técnicas determinadas. Hay mucha información importante que hay que buscar en distintos lugares: en las librerías, en las bibliotecas, en las galerías de arte y en los museos. En encuentros y ferias especializadas. En Internet, claro (pero no tan claro), y, naturalmente, también en la calle (es decir, fuera del estudio).

Esa labor de investigación hay que considerarla como parte del trabajo y hay que dedicarle tiempo. Luego (y a la vez), hay que encontrar un espacio donde poder trabajar a gusto. Luego, hay que vencer nuestra natural timidez (o refrenar nuestra natural intrepidez) para dar a conocer nuestro trabajo a aquellas personas que creamos que mejor van a poder valorarlo.

Luego, si no hay respuesta inmediata, no debemos desanimarnos: hay que insistir, insistir, insistir.

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Y,¿cómo publicar? ¿qué hago con mis dibujos? por Isabel Andreu

Esto resulta tan paradójico como cualquier otra meta a la que nos enfrentemos en el mercado.

Queremos trabajar nuestro arte, y vivir con el y de él, y ahí está el empeño y parte de nuestro esfuerzo. Después de leer los consejos de ilustradores como los que hemos entrevistado, ver sus trabajos, y, sobre todo, comprender esa linea que han perseguido hasta llegar al lugar que ocupan, parece que nuestras ideas van enriqueciéndose. Al menos, tenemos ese apriorístico mensaje, quizás un tanto filosófco, pero siempre útil, de como enfocar nuestro esfuerzo y nuestra creatividad. Ese punto de partida es como el aliento extra que nos da fuerzas para comenzar una nueva etapa, el mercado, el reconocimiento del valor de nuestro trabajo y el comienzo de nuestra evolución como artistas.

Hemos visto que hay ciertas cuestiones que no solamente se repiten en este campo, sino que prácticamente son comunes a todas las empresas que desean nacer y convertirse en adultas.

forma mas rápida y efectiva de hacernos visibles al mundo esta en la red. Allí quizás sea el primer lugar donde nos posicionemos para enfrentarnos a diferentes dilemas que nos van a surgir de inmediato.

Esto requiere que previamente hayamos ordenado, no solamente nuestras ideas respecto a los objetivos, sino también nuestra obra. Hacer nuestra WEB va a ser nuestra primera exposición, y debe mostrar como queremos presentarnos al mundo y que refeje de manera fel nuestro proyecto. Identifquemos los objetivos empresariales que puedan estar interesados en trabajar con nosotros, no vale simplemente con mostrarse, hay que requerir su atención , y eso se logra , principalmente, “llegando hasta su puerta”. Mostraremos de forma clara nuestro proyecto, porque el comprador habitualmente si sabe lo que quiere, y nosotros hemos ofrecer a sabiendas de que entramos en una casa que nos quieren recibir.

Así pues, las redes sociales son ya un bagaje con ¿ Que hacemos con nuestras ideas ? carga genética en nuestra generación, pero esta Pues bien, tenemos que decir que cada artista ha opción no excluye otras, vamos a compaginardesarrollado por si mismo su propio pragmatislo con estrategias de marketing más personales: mo, si bien, y eso es lo que nos interesa en este “visitar las editoriales que enfoquen sus proyectos trabajo, existen unas herramientas comunes, como dentro de nuestro campo, medios de comunilos APP de la informática, que nos ayudaran en cación como revistas, empresas encaminadas al el comienzo y también en el desarrollo de nuestra diseño gráfco, etc”. Aún hoy en día, un dibujo en obra. nuestra carpeta puede impactar tanto como un Hemos leído como nuestros artistas entrevistados porfolio bien desarrollado y diseñado. Evidentehacían hincapié en algo fundamental para toda mente la exposición digital en las redes sociales va creación. Nuestra posición ante nuestra obra, es a ser nuestra peana, pero no dejemos de aprovedecir, nuestro estilo, el enfoque hacia donde la char cada impulso que nos arrastre a compartir de dirigimos, nuestro mercado. Tenemos claro que la cualquier otra forma nuestro trabajo y creatividad.

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