nos dejó el socio más grande de los últimos tiempos, jaime pozo merino

la partida del socio más grande de los últimos tiempos, jaime pozo merino

El Club Talca siempre tuvo un máximo de socios, quinientos dicen sus estatutos, hoy apenas tenemos 100, que da cuenta de la realidad que estamos viviendo, pero no cabe duda que no todos los socios cumplen el mismo rol, no todos le ponen la misma pasión, no todos transforman el Club en su primer hogar, pocos ponen al club antes que nada, inclusive que sus obligaciones en su casa, no todos, como dice nuestro actual presidente, se convierten inconscientemente en el alma del Club, como ciertamente lo fue don Jaime Pozo Merino, que nos acaba de dejar el 1 Febrero de 2020, en forma repentina, producto de un problema de salud, que por su magnitud, no nos dio tiempo para reflexionar sobre su partida, ni menos prepararnos ni despedirnos.

Don Jaime, se incorporó al Club el año 1951, con tan solo 16 años de edad, es decir, fue socio por 69 años, de los cuales 21 se desempeñó como presidente y perdimos la cuenta sobre cuantos años fue Director del Club, lo que da cuenta que estamos frente a un socio de aquellos que marcan la diferencia, el más grande de los grandes.

Casado con Doña Matilde Alvarez Valderrama, la primera Gobernadora mujer de Talca, con quien tuvo tres hijos, Jaime actual Director del Club, María Matilde y María José y 10 nietos de los cuales Rafael Salgado Pozo, es socio del Club.

El deseo de nuestro ex presidente, era que fuere velado en las dependencias del Club Talca y que los socios jugaran dómino estando él ahí presente, deseo que se le cumplió, desde luego con la venia de su familia. El día de su fallecimiento, a última hora, fue trasladado a las dependencias del Club, donde se juntaron aproximadamente 30 socios, que le permitieron cumplir su deseo.

Quizás la labor más encomiable que realizó silenciosamente don Jaime, fue la reconstrucción del Club, después del terremoto del

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2010, donde se plasmó todo su cariño y dedicación para su querido Club Talca. A puro ñeque y sin muchos recursos, logró levantar el Club, lo que para muchos pasó desapercibido, constituyéndose en una injusticia, pues de esa forma no se le reconocía el gran aporte que realizó.

Pero el Directorio hizo justicia y en forma inédita, con fecha 09 de Julio de 2019, aprobó la moción presentada por el Presidente Fernando Leiva Salinas, en cuanto a designar el bar del Club, como “Bar Jaime Pozo Merino”, lo que se llevó a cabo con una sencilla y emotiva ceremonia, a la cual desde luego y como era su costumbre, fue acompañado por toda su familia.

Don Jaime era el dueño del alma del Club, el concesionario, el encargado de las mantenciones, el socio preocupado del aseo, el encargado de la cobranza de las cuotas sociales y de darles facilidades y perdonazos a los socios morosos, el preocupado de la caja y de arrendar el segundo piso, el organizador de los campeonatos de dominó, el socio interesado en el día a día del Club y en las proyecciones del mismo. Era todo para el Club Talca y por ello ciertamente su partida en más de un momento se notará.

Bar Jaime Pozo Merino

Don Jaime desarrollo labores en diferentes actividades desde el año 1953, primero como agricultor, corredor de ganado vacuno, en donde logró manejar importantes negocios hasta la zona de Puerto Varas, Gerente de la división ganadera de la entonces empresa talquina caltyl, que era gerenciada en ese entonces, por don Juan Mackay y que compartió funciones con su compadre y amigo, don Angel Caballero Alonso, también gran socio de nuestro querido Club Talca. Fue empresario del comercio, en donde se puede destacar venta y distribución de neumáticos desde el año 1970, General Insa y después Codear, con locales en Talca, Constitución, Cauquenes y Parral, Concesionario Copec entre los años 1987 y 2000, ideo y construyó el primer Bowling para nuestra ciudad y finalmente con una empresa agrícola familiar, que lo acompañó sus últimos años.

Cabe mencionar que también fue director por muchos años del Talca Country Club y del club de deportes Rangers de Talca, a fines de la década de los años 70 y principio de los años 80, siendo presidente de la comisión de futbol.

Terminamos estas palabras, diciendo que no cabe duda de que la partida de Don Jaime no pasará desapercibida, que lo echaremos de menos por mucho tiempo y que se nos fue, el grande de los grandes, el alma del Club Talca.

Directorio

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Como muchos, debo mi entrada al Club a don Jaime Pozo Merino. Me decía, “ métase al Club lo pasamos muy re bien”. Y era cierto, durante años compartimos la mesa de domino de los días lunes, hemos debido lamentar la partida de un partner, de un amigo, de un grande. Echaremos especialmente de menos, su presencia diaria en el Club y el amor que profesaba por su extrañable Club Talca.

Eugenio Parot Soto Secretario Directorio

De todos nuestros socios sin duda Don Jaime fue el que registra sin duda mayor número de años como socio de la Institución: en días pasados en reunión del Club El Presidente mencionó la fecha de incorporación de don Jaime como socio del CLUB TALCA, el año 1951. SESENTA Y NUEVE AÑOS COMO SOCIO. Ello nos demuestra o mejor dicho nos explica su inconmensurable amor por su Club Talca. Hoy le recordamos con mucho cariño y nostalgia, sin duda los salones del Club no serán lo mismo sin él. Reciba pues, don JAIME, un sincero homenje y cariñoso recuerdo de todos quienes lo extrañaremos en el salones del CLUB.-

Ricardo Baltierra O”Kuinghttons Director

Hablar de la despedida de mi amigo Jaime, no se me hace fácil, dado que fue un compañero con el que estuve más de 15 años, compartiendo el aperitivo y la escoba diaria a las 12 del día y hoy estoy quedando solo. Un presidente con una dedicación encomendable, siempre disponible para su querido Club Talca, aunque con ello postergara sus labores personales. En dicha tarea tuve la grata misión de acompañarlo, en lo que pude, como director por más de 11 años y actualmente como Vicepresidente. Nos dejó el mejor de los mejores.

Dionisio Leppe Corvalán Director Mucho se dice de la desigualdad en estos tiempos, lo que llevó inclusive a una gran crisis social, el año recién pasado, pero en mi modesta opinión, la solución al tema de la desigualdad apunta a que todos debemos ser medidos con la misma vara, debemos ser tratados de igual forma, debemos tener las mismas oportunidades, impidiendo los abusos y todo indicio de corrupción, fortaleciendo la salud y la educación.

Pero luego debemos reconocer, que afortunadamente o gracias a Dios, somos todos diferentes y digo esto, para concluir diciendo que Don Jaime era por cierto un ser muy diferente, un socio distinto y que sus diferencias lo pusieron en un lugar de privilegio dentro del Club Talca, de lo que espero la historia se haga cargo, no olvidando el rol que tuvo en el quehacer del club, principalmente los últimos 30 años.

Don Jaime era único, auténtico, sin dobles caras, de comidas tradicionales, amigo de sus amigos, sentimental y llorón como él solo y amante de cualquier cosa que significara apuesta o juego, hasta llegar a apostar el color o el número de la patente del próximo auto, en un viaje.

Amante y querendón de su familia.

Debo reconocer que su partida me afectó más de lo que creí nunca, el Club no es lo mismo sin él, lo echamos de menos, porque deja un vacío difícil de llenar.

Fernando Arturo Leiva Salinas Presidente

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