Tendencias de

Las tendencias de sustentabilidad 2021

José Hugo Carmona

johugocar@gmail.com Maestro en ingeniería, con experiencia en mercados de energía, modelación de escenarios y prospectivas del sistema energético mexicano, evaluación de cadenas de valor del sector hidrocarburos y su transformación.

En los últimos años se ha concentrado la atención de los gobiernos a nivel mundial en las tendencias de sustentabilidad y sostenibilidad, pero realmente ¿qué conllevan estos conceptos? Por un lado, la sustentabilidad aplica a la argumentación, es decir, a la explicación de razones o a la defensa de un tema o idea. Por otra parte, la sostenibilidad aplica a lo que se puede llegar a mantener durante un periodo de tiempo prolongado sin agotar los recursos, tiene un soporte en lo ecológico, junto con un enfoque en la viabilidad económica y equitativa en el ámbito social. Sin embargo, con el paso del tiempo ambos conceptos se han utilizado como sinónimos, con el fin de definir el proceso que da como resultado una acción acordada por las naciones para impulsar un desarrollo económico mundial que sea compatible con la conservación y preservación del medio ambiente, integrando la equidad social. Siendo así, el desarrollo sustentable o sostenible trata de un proyecto de acción mundial que es impulsado por la Organización de Naciones Unidas (ONU), el cual integra algunos focos principales como el ámbito y progreso de sociedades equitativas, junto con la economía, educación y el aprovechamiento adecuado de los recursos naturales disponibles. La definición más conocida, de acuerdo con ONU México, sobre este tipo de desarrollo explica que: “satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades”, es ahí donde radica su importancia, ya que implica construir y reformar un modelo que logre mantenerse constante en el tiempo y que sea una herramienta para combatir las desigualdades de cualquier tipo (económica, social, educativa, etc.), impulsando la protección al medio ambiente y promoviendo oportunidades en el ámbito económico. El 2020 fue un año de retos, experiencias y aprendizaje a causa de la contingencia generada por el COVID-19, en el presente año tenemos la posibilidad de seguir transformando en oportunidades todos los cambios que han afectado a la sociedad en los últimos meses, implementando estrategias que conlleven a la reducción de riesgos ambientales y sociales. Las tendencias sustentables o sostenibles para el 2021 que se encuentran en el centro de la transformación de organizaciones, empresas y sociedades priorizan el cuidado del medio ambiente y la utilización racional de los recursos naturales disponibles. En primer lugar, el enfoque a la lucha universal

Ya que implica construir y reformar un modelo “ que logre mantenerse constante en el tiempo y que sea una herramienta para combatir las desigualdades de cualquier tipo”

contra el cambio climático se inició con el Acuerdo de París, en el que 195 países acordaron implementar acciones para limitar que el calentamiento global alcance menos de 1,5°C. México (incluido en este acuerdo) adquirió el compromiso de reducir 22% de la emisión de gases de efecto invernadero y 51% de carbono negro, además de generar el 35% de energía por medio de fuentes limpias para el 2024 y 43% para el 2030. Por otra parte, el aumento de la conciencia de los consumidores es una tendencia que ha cobrado interés, las empresas deberán conocer sus cadenas de suministro para generar transparencia en los procesos y trazabilidades de sus organizaciones. Se apuesta por la economía circular: un sistema de producción que pretende imitar a la naturaleza y lograr cerrar el ciclo de la materia, evitando la generación de residuos y el agotamiento de los recursos.

Otra tendencia con gran potencial se trata del movimiento de inversión con criterios Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG), integrando la gestión y la transparencia a dicho movimiento, además la evolución de marcos y estándares de reporte ASG de entorno puede afectar a la estabilidad financiera de la compañía, integrando iniciativas y generando un interés creciente desde el mundo financiero.

Finalmente, algunas tendencias tienen un enfoque a la integración de acciones para el cuidado del medio ambiente, como la reducción de carbono en las cadenas de suministro, adoptando energías renovables para sus procesos de producción. Por otra parte, las innovaciones de la tecnología se convertirán en una herramienta aliada para las energías renovables, permitiendo en mayor proporción al acceso de información de manera segura y rápida, con el fin de predecir errores antes de que lleguen a producirse, reduciendo tiempo, dinero y recursos. Lo anterior permitirá que se generen y fortalezcan planes de eliminación de residuos electrónicos para evitar una contaminación masiva por algunos materiales empleados en la fabricación de estos productos. La implementación de estas tendencias puede considerarse como una herramienta que permita integrar un desarrollo sostenible que requiere de esfuerzos en conjunto y del seguimiento de los avances generados, obteniendo la posibilidad de garantizar condiciones óptimas en el ámbito social, económico y ambiental de las futuras generaciones.