RECICLA MANUALIDADES

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Mariquita Catarina Aunque mayoritariamente siempre se hable de reciclar papel, cartón o plástico, todos los materiales o casi todos pueden ser reciclados o reutilizados. En este caso utilizaremos la cáscara de una nuez para conseguir una simpática mariquita o catarina, aunque con un poco de imaginación se pueden realizar otros insectos o animales. La catarina es un insecto muy simpático. No es necesario pintarla de su color original; puedes utilizar otros colores para que sea más llamativa.

La mariquita es un insecto muy simpático. No es necesario pintarla de su color original; puedes utilizar otros colores para que sea más llamativa.

Herramientas y Materiales 1 1 2 3 4 5 6 7 8 9

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Pegamento Nueces Cartulina de color blanco Pintura acrílica negra Rotulador o marcador permanente negro grueso Pincel fino Tijeras Cordón grueso Pintura acrílica roja

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1 Abre la nuez con cuidado de no romper la cáscara. Si utilizas unas tijeras, clavándolas un poco por la parte posterior de la nuez, ésta se abrirá por el centro dejando dos mitades perfectamente abiertas. Toma con cuidado las tijeras e introdúcelas un poco por la parte posterior de la nuez.

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Toma una de las mitades y píntala totalmente de color rojo. Emplea para ello pintura acrílica diluida con un poco de agua. Si no diluyes la pintura con agua, ésta se quebrará una vez seca. Utiliza un pincel de pelo suave para poder penetrar cómodamente en todas las arrugas de la superficie de la nuez.

Para abrir la nuez será mejor que pidas ayuda a un adulto. Se trata de una operación sencilla pero si no lo has hecho nunca, será mejor que recurras a la ayuda de un adulto. Una vez abierta la nuez, aprovecha y cómetela.

2 Una vez hayas introducido las tijeras, gíralas con cuidado y verás que la nuez se abre perfectamente. Acaba de abrir la nuez con tus propias manos procurando no romper las dos mitades.

4 Una vez la pintura acrílica roja esté seca, pinta una línea en el extremo frontal de la nuez, tal como muestra la imagen. La pintura acrílica tiene la ventaja de que se seca con bastante rapidez. Ello te permitirá pintar de negro la línea al cabo de una hora de haber pintado de rojo toda la nuez. En este caso utiliza pintura acrílica negra.

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5 Acaba de pintar toda la punta de la mariquita o catarina con pintura acrílica de color negro. De esta manera formarás la cabeza del simpático insecto donde más tarde se pegarán los ojos.

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Cuando trabajes con pintura acrílica, coloca un papel de periódico que cubra la zona de trabajo. La pintura acrílica es resistente al agua, por lo que si manchas algo con ella, será bastante difícil de limpiar.

Con la misma pintura acrílica de color negro, pinta pequeños círculos característicos de la mariquita o catarina. Utiliza sólo la punta del pincel y aplica unas pinceladas muy verticales dejando así pequeñas gotas de color negro por encima del caparazón rojo.

Mientras dejas secar la pintura...

Con un lápiz dibuja en una cartulina blanca dos circunferencias pequeñas, aproximadamente de 8 mm de diámetro cada una.

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Recorta con las tijeras los dos círculos. Debes trabajar despacio, ya que, al tratarse de unas circunferencias tan pequeñas, puedes pasarte en el corte.

Con el rotulador o marcador grueso de color negro pinta un punto en el centro de los dos círculos. De esta manera obtendrás los ojos de la catarina.


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Pon una gota de pegamento en la parte posterior de los ojos que acabas de obtener y pégalos en la parte superior de la zona que has pintado de negro en la catarina. Fíjate en la imagen para comprobar el pegado de los ojos.

Una vez tengas pegados los ojos y la pintura acrílica negra esté totalmente seca, tendrás una simpática mariquita o catarina para lo que tu prefieras. Si quieres, puedes poner un poco de pegamento en la parte inferior y pegarla en la pared o al lado de la pantalla de tu ordenador.


Serpiente articulada Los tubos de cartón que normalmente se pueden encontrar en los rollos de papel higiénico o papel de cocina son muy útiles para crear formas de animales, ya que se pueden utilizar para hacer el cuerpo, las patas o incluso la cabeza del animal, sin que se tenga que doblar el cartón para que adopte una forma cilíndrica muy difícil de conseguir. En este ejercicio combinaremos la estructura de los tubos de cartón con un sistema de enganche con encuadernadores o broches metálicos que nos permitirá dar articulación a la serpiente. O sea, que se podrá mover reproduciendo así el movimiento de este animal.

Herramientas y Materiales 1 Perforadora de papel 2 Pegamento de barra 3 Rotuladores gruesos: amarillo, negro y rojo 4 Regla 5 Cartulinas: amarilla, verde claro y verde oscuro 6 Rotulador-marcador grueso 7 Lápiz 8 Tope inferior de encuadernador o broche metálico 9 Tijeras 10 Almohadilla de corte 11 Encuadernadores o broches metálicos 12 Cinta adhesiva 13 Tubos de cartón de papel de cocina 14 Cúter 15 Tapa para huevos

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2 Marca en cada cartulina dos señales, una en cada lado, a 16 cm del borde.

1 Se toman tres tubos de cartón de papel de cocina y se cortan por la mitad. Se podrían utilizar para este ejercicio cartones de papel higiénico, aunque es mejor el de cocina, ya que es un cartón más blando. Para realizar el corte se utiliza el cúter, por lo que será necesario solicitar ayuda a un adulto.

Los cortes de los tubos de cartón deben hacerse por el centro de éstos, aunque no es indispensable. Si lo prefieres, puedes optar por hacer unos tramos más largos y más cortos, aunque, si optas por hacer piezas diferentes, deberás cambiar la medida de los cuadrados de cartulina.

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Une ambas señales con una línea longitudinal que cruce totalmente la cartulina tal y como muestra la imagen.

Sobre esta señal marca, empezando desde uno de los extremos, señales a 16 cm.

Repite la operación en el borde inferior de la cartulina y une las marcas de la línea longitudinal y del borde inferior para formar así tres cuadrados de 16 x 16 cm.

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Repite la misma operación en todas las cartulinas, es decir, en la amarilla, la de color verde oscuro y la de color verde claro.

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Con las tijeras corta por la línea longitudinal trazada en principio en cada una de las cartulinas dejando así cortada la zona donde están dibujados los cuadrados. Corta igualmente las líneas verticales de manera que te queden tres cuadrados de cada color.

Cuando tengas todas las piezas de cartulina recortadas, cubre de pegamento cada una de las seis secciones de tubo de cartón que has cortado al principio.

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Cuando tengas cada tubo con pegamento, ponlo sobre uno de los cartones de color amarillo, verde claro o verde oscuro y enrolla el tubo con la cartulina, de manera que ésta se pegue y cubra totalmente el cartón, tal como muestra la imagen.

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10 Cuando acabes de enrollar las cartulinas a cada cartón, la cartulina tiene que cubrirlos totalmente. En caso necesario, puedes utilizar un poco de cinta adhesiva para conseguir que el extremo de la cartulina quede bien pegado.


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Corta el sobrante de cartulina de los tubos para que éstos adquieran una forma afilada o de cuña. Para ello corta dos triángulos en cada extremo de los tubos de cartulina, uno en cada lado, tal como muestra la imagen.

Tienes que repetir esta operación en todos los tubos de cartón. Alterna los colores para obtener así dos piezas de tipo tubo de cada uno de los colores.

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Cuando cortes la cartulina, es conveniente que no llegues a recortar el armazón de cartón interior. Fíjate en la fotografía. En ella podrás observar que el tubo de cartón no se llega a cortar sino que se corta justo hasta su borde.

En cada saliente deberás realizar un agujero. Toma el taladrador de papel y agujerea en el centro de cada uno de los extremos salientes situados a cada lado del tubo.

Una vez tengas todos los tramos de tubo agujereados, aplana con la mano todos los tramos para lograr el aspecto típico del cuerpo de una serpiente. Estos animales no tienen un cuerpo redondo sino que están ligeramente aplanados de manera que su cuerpo se apoya sobre su panza.

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Une los tramos de tubo tapando los salientes de cartulina de los tubos, tal como se muestra en la imagen. Debes hacer coincidir los agujeros de los salientes e introducir por el orificio un encuadernador o broche metálico.

El encuadernador o broche debe traspasar totalmente los tubos y salir por el orificio inferior, donde también se habrán hecho coincidir los agujeros del extremo de la cartulina.

Los salientes no deben tener una medida determinada ni ser perfectamente simétricos, ya que el propio movimiento de la serpiente ocultará los posibles defectos en estas zonas.

19 Abre el encuadernador o broche con cuidado de no aplastar demasiado el cartón ni la cartulina para que el tope del encuadernador quede apretado contra dicha cartulina.

18 Tapa los trozos de cartulina procurando que el que quede encima sea siempre el mismo para dar continuidad a la forma de la serpiente.

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Introduce con cuidado el tope inferior del encuadernador o broche por la parte exterior del tubo en su lado inferior, tal como muestra la fotografía.


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Cuando hayas conseguido el cono de cartulina amarilla, pon en el extremo de la cartulina un poco de pegamento en barra para que se pegue correctamente.

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Para la cola de la serpiente toma el cuadrado de color amarillo que ha sobrado y haz con él un cono o cucurucho.

Si realizas los agujeros de enganche de la cola a diferente profundidad el uno del otro, la cola podrá adoptar una forma elevada. Puedes conseguir el mismo efecto doblando un poco la zona de enganche hacia arriba.

24 Corta un trozo de tapa para huevos correspondiente al receptáculo que normalmente ocupa un huevo. Monta este elemento sobre un trozo pequeño de tubo de cartón, tal como muestra la imagen.

22 Una vez el pegamento esté seco, con la perforadora de papel haz dos agujeros en la parte superior e inferior de la cola de serpiente.

23 Monta la cola con encuadernadores o broches haciendo coincidir los agujeros que acabas de hacer con los del último tramo de tubo de cartón con cartulina.

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25 Con el trozo de cartón de huevera y el trozo de tubo de cartón debes realizar un armazón que será muy útil para montar la forma de la cabeza de la serpiente. Fíjate en la imagen y observa cómo encaja el cartón de la huevera dentro del tubo.

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Cubre la zona de tubo de cartón con abundante pegamento de barra para poder pegar sobre éste un cuadrado de cartulina de color verde claro de la misma manera como has pegado los anteriores: En este caso quedará un mayor trozo de cartulina sin cartón interior.

Recorta la parte posterior del tubo de cartulina que acabas de pegar dejando dos formas afiladas en cuña en la parte que deberás encajar con el cuerpo de la serpiente. Fíjate que aquí hay una mayor parte de cartulina sin tubo en su interior. Con ello se consigue que la cabeza sea más articulada que el cuerpo, o sea que podrá girar mejor.

Si es necesario, puedes asegurar las zonas de pegado con un poco de cinta adhesiva. Con ello conseguirás que la cartulina quede mejor fijada sin que se note el truco, ya que éste quedará en la parte inferior de la serpiente.

28 En los extremos de las puntas que deberán encajar con el cuerpo de la serpiente realiza dos orificios iguales que los que has realizado anteriormente, uno en la parte de arriba y otro en la parte de abajo.

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Haz un corte en cada lado de la parte delantera de la cabeza de la serpiente. Este corte debe hacerse en el centro de los lados.


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A partir del corte que acabas de hacer, corta un triángulo a la inversa, es decir, con la parte ancha tocando la estructura interior de cartón. Fíjate en la fotografía y verás que la cartulina, al cortarse, adquiere una forma de campana.

Pon pegamento en la parte interior de la cartulina. Es conveniente que pongas mucho pegamento sobre todo en la parte inferior, es decir, la que no tiene forma de campana.

32 Dobla la parte inferior de la cartulina hacía adentro y cúbrela con la parte superior, tal como muestra la imagen.

33 Una vez terminada la cabeza, encaja la parte posterior al cuerpo de la serpiente utilizando un encuadernador o broche que deberás montar en los orificios de ambas partes del animal.

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Las serpientes suelen estar cubiertas con rombos y rayas que podrás reproducir fácilmente con rotuladores o marcadores permanentes gruesos.

34 Cuando tengas montada la serpiente, puedes ya empezar a decorarla. Gracias a la utilización de cartulinas de colores, te ahorrarás pintar todo el animal. Así que, utilizando rotuladores o marcadores permanentes, puedes hacer las características rayas y formas geométricas que tienen las serpientes.

35 Con un rotulador o marcador negro dibuja los ojos y agujeros de la nariz en la cabeza de la serpiente.

36 La piel de las serpientes suele presentar formas geométricas como rombos, que se extienden por toda su piel. Dibuja un rombo en el centro de cada uno de los trozos de tubo. Para los trozos de cartulina más oscura utiliza el rotulador o marcador amarillo y para los más claros, el negro.

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37 Pinta el interior de los rombos y dibuja unas líneas alrededor de éstos para completar la decoración de la piel de la serpiente.

38 Una vez terminada la serpiente, ya puedes empezar a jugar con ella dándole la forma que prefieras.

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Libelula ´ Las pinzas para tender la ropa son un elemento muy valioso para hacer manualidades en casa. No sólo sirven para sujetar las cosas cuando queremos que se peguen o queden juntas, sino que también las podemos desmontar y pintar y utilizarlas para construir, por ejemplo, un insecto, como esta colorista libélula.

Herramientas y Materiales 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

Pegamento líquido Cartulina de color blanca Tijeras Témpera de color lila Cartulina de color lila Pinzas de madera para tender la ropa Lápiz Pincel Rotulador o marcador permanente negro Témpera de color rojo

1 Desmonta dos pinzas de madera como las que se utilizan para tender la ropa. Para desmontarlas sólo tienes que girar las dos piezas de madera en sentido inverso, tal como muestra la fotografía.

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2 Cuando tengas las piezas desmontadas, dispondrás de cuatro medias pinzas de madera. Retira los muelles de metal ya que no se necesitarán.

Con témpera de color rojo pinta las cuatro piezas de pinzas de madera con un pincel de pelo fino que te permita llegar a todos los rincones de la pinza.

4 Pinta también una pinza de madera sin desmontar. No pintes las partes de la pinza que se tocan entre sí.

Pinta sobre un trozo de papel de periódico para no manchar con la pintura la superficie de trabajo.

3 Pinta las pinzas por todos los lados sin dejar ningún trozo de madera sin pintar.

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Pon un poco de pegamento líquido sobre la pinza sin desmontar a unos 5 cm del su extremo. Fíjate en la imagen.

Sobre el punto que acabas de preparar pega con pegamento dos de las mitades de pinzas pintadas de rojo. Pégalas por su parte posterior.

Mientras dejas secar la pintura...

D. Recorta los ojos con unas tijeras y con cuidado de no cortarte, ya que se trata de un trozo de cartulina bastante pequeño. A. Dibuja a lápiz la forma de unos ojos sobre un trozo de cartulina blanca.

B. Con un rotulador o marcador negro grueso repasa la forma de ojos que acabas de dibujar sobre la cartulina blanca.

C. Bajo los ojos dibuja un rectángulo tal como muestra la fotografía. Con ello te será más fácil pegar los ojos en su sitio.

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E. Dobla hacía atrás la pequeña pestaña de cartulina que has dejado junto a los ojos. Procura que la parte de cartulina con los ojos dibujados no se doble.


7 Durante un minuto sujeta las dos mitades de las pinzas hasta que el pegamento empiece a secarse y se mantengan fijas en su sitio por sí mismas.

8 Pon un poco de pegamento en la punta de atrás de las otras dos mitades de pinza pintadas de rojo.

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Pega estas dos mitades junto a las anteriores dándoles un poco de inclinación hacía atrás como puedes ver en la fotografía. Debes aguantar las piezas de madera hasta que estén pegadas o poner debajo de ellas una pinza de madera para que se mantengan en su sitio hasta estar bien sujetas.

Toma la cartulina lila y corta con las tijeras una tira muy fina y larga.

Mide en la tira que has cortado varios trozos de 15 cm y córtalos con las mismas tijeras.

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Corta una de las puntas de cada una de las tiras dándole un aspecto más puntiagudo.

Haz en total seis tiras muy finas de 15 cm de largo como las que puedes ver en la fotografía.

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Toma una pinza de madera sin pintar y marca su anchura en la cartulina de color lila.

Con las tijeras corta la tira de cartulina lila que acabas de dibujar, con cuidado de no cortarte.

15 Dibuja una tira larga, de al menos 20 cm, que en un extremo tenga la misma anchura que la pinza de madera y en el otro extremo sea puntiaguda.

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Una vez recortada la tira de cartulina lila que servirá para la cola de la libélula, dale una forma elevada como muestra la imagen.


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Pon una gota de pegamento líquido en la punta más ancha de la tira de cartulina lila que has cortado para la cola.

Pega la cola a la parte posterior de la libélula, es decir, en la pinza de color rojo que no has desmontado, tras las piezas de madera que has pegado inclinadas hacía atrás.

20 Deja secar el pegamento que acabas de aplicar sobre tu libélula antes de proseguir con el trabajo.

19 Pega también en la pinza de color rojo sin desmontar los ojos de color blanco que has recortado antes. Pégalos en el extremo contrario donde has pegado la cola del insecto.

Cada vez que pegues una parte de la libélula con un poco de pegamento, presiona con cuidado la parte pegada con la punta de uno de tus dedos.

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Ahora, da la vuelta al insecto de madera y pon un poco de pegamento líquido en su parte inferior, justo por debajo de donde has pegado las pinzas de madera de color rojo.

Pon muy poco pegamento y expándelo un poco antes de empezar a pegar lo que serán las patas de la libélula.

Pega el primer par de patas siguiendo la misma dirección de las primeras pinzas que has pegado.

24 Presiona un poco con los dedos hasta que las primeras dos patas de la libélula se hayan pegado correctamente.

25 Pega el segundo par de patas junto a las primeras pero inclinando éstas un poco hacía atrás.

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Si quieres puedes colgar tu libélula del techo de tu habitación con un fino hilo de pescar como si fuera un móvil o fijarla en una pared con pegamento.

26 Por último, pega el tercer par de patas más inclinado hacía atrás junto a las otras dos patas que has pegado antes. Fíjate en la fotografía para comprobar que has procedido correctamente.

27 Ahora ya tienes una libélula de madera para colgar en tu habitación o dar un susto a tus amigos. Puedes utilizar otras combinaciones de colores como el amarillo y el negro o el azul y el verde.

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