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DIEZ ASESINOS LIBRES DE PENA Y CULPA
// 6-7 Entre 3 mil y 10 mil dólares fueron pagados a la Fiscalía para que libere de pena y culpa a personas identificadas como responsables del linchamiento.
A fondo. Linchamiento
LA OCULTA VERDAD DE EPIZANA //2
//4 TESTIMONIOS //6 INVESTIGACIÓN //7 CONDENA Revelan detalles Irregularidades 30 años para 8 del crimen en el proceso linchadores
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A fondo. Linchamiento
Droga y “volteos” detrás del crimen Hay un relato del triple linchamiento de policías que no fue contado durante el juicio contra trece acusados. La Fiscalía soslayó el tema y no dijo nada sobre el oscuro manto del narcotráfico que envolvió esta tragedia DARYNKA SÁNCHEZ A. dksanchez@opinion.com.bo
l caso del horrendo asesinato de policías en Epizana, el aciago 26 de febrero de 2008, no ha sido esclarecido en su totalidad. Los misterios e hilos sueltos en torno a las causas que desencadenaron uno de los episodios más tristes de la historia criminal de Bolivia continúan igual porque la Fiscalía no quiso investigar a fondo y sólo se limitó a señalar a unos cuantos culpables de la muerte de los uniformados. Ninguna autoridad se atrevió a meter el dedo en el avispero, pese a las revelaciones hechas por este diario en una publicación del 13 de mayo de 2008.
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DROGA DETRÁS DEL CRIMEN
La investigación de este periódico señalaba que no eran tres sino cinco los policías y un ex presidiario los que, el 25 de febrero de 2008, se dirigieron a Epizana en dos vehículos con el fin de efectuar un “volteo” de droga del que les notificaron vía telefónica, horas antes. Un enfrentamiento con los ocupantes del vehículo donde iba la droga derivó en una cruel muerte para tres efectivos; pero, los otros dos uniformados y el ex recluso lograron escapar con el botín. OPINIÓN obtuvo esta información de distintas fuentes (de efectivos policiales, de una pobladora de Epizana, de un abogado y de la viuda de uno de los policías linchados), que revelaron los pormenores de lo ocurrido en Epizana y confirmaron que la tortura, la quema con agua hirviente y el asesinato de los policías fueron alentados por varias personas involucradas en actividades de narcotráfico que ya estaban cansadas de que “ésos policías les quitaran la droga cuando ni siquiera eran miembros de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN). Seis personas fueron a Epizana. El sargento Willy Álvarez, a quien le decían “el Loro”; el cabo Wálter Ávila, el policía Eloy Yupanqui (los tres asesinados), el policía Raimundo Condori y un sargento llamado Gerardo Jherar Flores. Con los 5 policías
Con una soga en el cuello, el cuerpo de Wálter Ávila fue arrastrado por sus víctimadores casi 200 metros hasta dejarlo muerto
viajó como chófer de uno de los vehículos Roberto Cossío Villarroel, alias “el Carita de Ángel”, un hombre que estuvo preso por violación en la cárcel de San Pablo de Quillacollo y que está relacionado con varias bandas de delincuentes en Cochabamba. Los seis fueron en dos vehículos: a bordo de un auto indocumentado de Wálter Ávila -que fue destrozado por los pobladores en la tranca- y en una vagoneta tipo minibús de la que no se halló rastros en Epizana porque se presume que en ella lograron escapar Gerardo Flores, Raimundo Condori y Carita de Angel con la “kurpa” (carga de droga). LOS VOLTEADORES
El grupo de policías que fue a Epizana estaba liderado por el sargento Gerardo Flores, quien trabajó antes en la Fuerza de Tarea Conjunta donde hizo contactos con personas involucradas en actividades de narcotráfico que
se convirtieron en sus fuentes. Le alertaban sobre la fecha, la hora y las señas del vehículo en el que saldrían “kurpas” y “pilchas” de droga y el camino que tomarían. Gerardo Flores le avisaba al sargento Willy Álvarez y éste convocaba a los policías que él considerara necesarios. Algunos abandonaban sus fuentes de empleo o falsificaban bajas médicas para poder ir en grupo, a diferentes retenes o caminos por donde estaba previsto el paso de la droga. Iban munidos de chalecos de Tránsito, señales de alto, armas, celulares. Con la información recibida sobre el modelo, marca, color y placa del vehículo que llevaba la droga instalaban puestos móviles y controlaban licencias. Al detectar el carro esperado, lo revisaban por dentro para hallar “la kurpa”. Detenían por unos minutos a los “narcos” y los liberaban en otro tramo del camino con la certeza de que ningún narcotraficante los
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policías y un ex recluso fueron a Epizana el 25 de febrero de 2008 para hacer un “volteo” de droga a un “narco”. Tres efectivos fueron capturados y “los narcos” azuzaron a la gente haciéndole creer que eran ladrones, para que los maten.
denunciaría por el decomiso de una sustancia ilícita. Después, el botín era entregado al mismo contacto que les proporcionó la información que se encargaba de vender la droga. DOBLES VOLTEOS
En alguna oportunidad realizaron “dobles volteos”. Cuando el contacto citaba al comprador de la droga en lugares alejados, ambos eran interceptados por policías (el mismo grupo de Gerardo Flores) que llevaban uniformes de la fuerza antidroga y les decomisaban la cocaína y el dinero del comprador.
Luego se repartían el dinero en función de la participación de cada uno en los “operativos”. Según las mismas fuentes, de estos volteos estaba enterado el ex Subcomandante de la Policía Ismael Medina desde el tiempo en que era director de Recursos Humanos y ayudaba al grupo de Flores y de Álvarez a obtener puestos estratégicos en unidades o lugares donde se “podía sacar dinero”. DESCONTROL
El 25 de febrero de 2008 el grupo iba a realizar un volteo importante en Epizana. Las fuentes consultadas por este diario, explicaron que el vehículo al que esperaban pertenecía a Zenón Soria Orellana, hermano del Corregidor Juan Soria. Cuando los policías se empeñaron en revisar su vehículo los ocupantes reaccionaron con violencia. Hubo insultos y golpes. En su condición de hermano del Corregidor, Zenón Soria armó un es-
ARCHIVO
cándalo. Sin embargo, Gerardo Flores, Raimundo Condori y Roberto Cossío huyeron en uno de los vehículo con la “kurpa”. Los hermanos Soria convocaron a otros dirigentes de la zona y entre todos decidieron deshacerse de los policías porque no era la primera vez que Flores y Álvarez les robaban las “pilchas”. Instigaron al delito a los demás comunarios diciéndoles que eran falsos policías y ladrones . Ellos pidieron perdón de rodillas pero su sentencia de muerte estaba fijada. Exigieron, en vano, la presencia del Comandante de la Policía y un fiscal. La ausencia de socorro y el decomiso de una sierra eléctrica a los campesinos –que hizo una primera patrulla cuando salía en busca de refuerzos- desbordaron el odio y el afán de venganza contra el uniforme verde olivo. A las diez y cuarto del martes 26 de febrero de 2008 los tres policías ya estaban muertos.
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A fondo. Linchamiento JEFES POLICIALES
PROCESADOS
¿Quiénes eran en vida los tres policías linchados?
1º
CARLOS WÁLTER ÁVILA FERNÁNDEZ
CORONEL JOSÉ COPA MORMERY El 26 de febrero de 2008, tres policías murieron linchados en Epizana porque los jefes policiales no los rescataron a tiempo, pese a que tuvieron 10 horas para hacerlo. El policía de la tranca Eduardo Mamani envió por radio, nueve horas antes de la ejecución, un desesperado pedido de auxilio con código 401 que significa “policías en peligro de muerte”. El 2 de abril de 2009, un Tribunal Disciplinario halló negligencia en el accionar de José Copa y lo sancionó con 2 años de pérdida de antigüedad y el pase a disponibilidad de la letra B, lo que evitó su ascenso a general de la Policía.
CORONEL ISMAEL MEDINA En febrero de 2008 era el subcomandante de la Policía de Cochabamba. Al enterarse del peligro que corrían sus camaradas envió un contingente de 18 policías a rescatarlos, pero éstos fueron cercados por los comunarios. A las seis de la madrugada pidieron refuerzos por teléfono, advirtiendo que había plazo hasta las 8 de la mañana para que no los linchen. Negligentemente, Medina se demoró hasta el mediodía y sólo llegó a recoger los cadáveres. Una viuda dijo que él era quien mandaba a los policías a extorsionar y “voltear” droga. También fue procesado y sancionado.
nacido en Cochabamba, tenía 29 años el día que fue asesinado. Hijo de Margarita de Ávila, se enamoró de Mirna Gareca y se fue a vivir con ella. Juntos tuvieron una niña: Carla Ávila Gareca (hoy de casi tres años). Los tres vivían juntos y la pareja debía casarse el 1 de marzo de 2008. El cabo fue asesinado tres días antes de su boda. La mujer que amaba lo recuerda como un hombre seguro, gracioso y lleno de detalles. “Me decía: ‘estás con el policía más guapo de Tránsito’ y se reía, él soñaba con llevar a su hija al colegio para que sus amiguitas piensen que él era su novio”. El 25 de febrero Wálter Ávila salió de su casa diciendo que iba a trabajar y besó a su hija y a su pareja por última vez. Ingresó a la Policía el 5 de diciembre de 1995 y nunca tuvo una denuncia ni fue procesado. Estuvo destinado en el Distrito Policial 1 GES, El Abra, Fuerza de Tarea Conjunta, Orden y Seguridad, Tránsito. Con un memorándum del 16 de marzo de 2007 fue destinado a la Dirección Cantonal de Chilijchi, a unos kilómetros de Epizana. No asistía a su fuente de trabajo desde el 10 de febrero de 2008, según los comunarios.
2º
WILLY ALBERTO ÁLVAREZ CUEVAS
era potosino, tenía 33 años. Su concubina era Nancy Herrera y dejó 7 hijos en la orfandad, uno en el vientre de su madre y los otros de entre 1 y 10 años de edad. El bebé que no conoció a su padre ya tiene un año y medio. La madre abandonó a los 7 menores hace poco y los niños ahora viven con su abuelo, el minero Willy Álvarez. El sargento fue destinado con memorándum del 15 de enero de 2008 al penal de El Abra. El año 2007 tuvo una baja médica de 8 meses por un accidente. El 9 de febrero de 2008 debía presentarse a El Abra pero compró una baja médica falsa para estar libre hasta el 28 de febrero. Entró a la Policía el 10 de abril de 1995 y estuvo destinado en Orden y Seguridad, la Patrulla Caminera, GES, Diprove, El Abra, Comando, cárcel de San Sebastián, Quillacollo, Fuerza de Tarea Conjunta y CAI. Willy Álvarez fue denunciado y procesado 5 veces (agresiones a su pareja y a un superior, ebriedad). El 7 de julio de 2006, fue denunciado junto al cabo conocido como “volteador” Gerardo Flores, por “familiaridad con antisociales”.
3º
ELOY VIDAL YUPANQUI FLORES
nació en La Paz y tenía 28 años cuando fue linchado. Hijo único de Maruja Flores, una viuda y dirigente de un sector de los comerciantes de La Paz, se mantenía soltero aunque sí tenía novia. Su madre asegura que era el hijo más bueno del mundo. “Me atendía, se preocupaba por mi siempre; me llamaba y me decía que algunos jefes policiales en Cochabamba le ordenaban hacer cobros indebidos y que estaba rogando por ser destinado a La Paz para estar cerca mío”. Con memorándum del 15 de enero de 2008, fue destinado a Tránsito. Usó una baja médica falsa de la CNS, para estar libre entre el 20 y el 26 de febrero de 2008. Ingresó a la Policía el 27 de septiembre de 2001. Estuvo destinado en Orden y Seguridad, Fuerza de Tarea Conjunta, 911, Policía Turística, El Abra. En su trayectoria tuvo dos procesos: el primero por “faltas al reglamento” y el segundo, por faltas en el servicio (ebriedad y deserción) cometidas junto a Gerardo Flores, un conocido policía volteador que ahora está preso.
LOS NÚMEROS DE EPIZANA
A 127
340
kilómetros de la ciudad de Cochabamba está
Habitantes tiene Epizana Alto
situada la población de Epizana, dentro del municipio de Totora. Epizana es la primera sección de la provincia Carrasco. Su ubicación geográfica es estratégica porque los pasajeros pueden seguir viaje hacia distintos destinos como Sucre, Santa Cruz (por el camino antiguo) o hacia el Cono Sur cochabambino.
de acuerdo a los datos publicados por el Censo de 2001 del Instituto Nacional de Estadísticas (INE). La sección de Epizana Alto está dividida en las comunidades de Rancho, Pajcha Pata y Tambo Khasa (Subcentral Rodeo Chico). Los comunarios se reúnen gracias a la convocatoria de radio emisoras del sector.
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de febrero de 2008 es la fecha en la que tres policías fueron torturados durante nueve horas, quemados con agua hirviente y finalmente ejecutados. Los cabos Wálter Ávila y Eloy Yupanqui fueron estrangulados con una soga mientras eran arrastrados por el piso. El sargento Willy Álvarez fue colgado de un punto fijo (un árbol o un poste de energía eléctrica), según la forense Miriam Rocabado.
Quemaduras de segundo grado, desprendimiento de piel y gigantes ampollas les fueron provocadas a los policías Wálter Ávila y Eloy Yupanqui cuando ellos estaban con vida. Los testigos y los sentenciados coincidieron en acusar a Vilma Prado de Vásquez y a su hijo Milton Vásquez como los autores de tal sufrimiento. Ambos fueron liberados de culpa ilegalmente por el fiscal Irving Avendaño y el ex fiscal de Distrito César Cartagena.
Meses se demoraron las autoridades del país
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Personas fueron
Epizana: zona estratégica del paso de droga y autos robados TENIENTE CORONEL RICARDO PACHECO Comandó el equipo de 18 policías que fue hasta Epizana para rescatar a sus camaradas, pero no pudo hacerlo porque más de 200 comunarios los amenazaron con matarlos a ellos también. Muchos opinan que pudo gasificar la zona y rescatar a los policías, pero Pacheco dijo que era imposible escapar por el cerco de camiones que le tendieron y las amenazas de muerte. Fue sancionado con la pérdida de un año de antigüedad y se convirtió en un testigo clave en el juicio contra 8 linchadores a los que reconoció plenamente como instigadores del crimen.
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Epizana está ubicada en un punto geográfico crucial para el tránsito de droga y de vehículos robados, actividades ilícitas que supuestamente cuentan con la venia de autoridades del poblado, las cuales consideran la presencia policial un “estorbo” para sus intereses. Esta presunción se basa en la experiencia de las patrullas móviles de control antidrogas que se percataron que cuando van al lugar a fiscalizar, suenan las campanas de alerta y los disparos de pertardos, como
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“En los municipios de Tiraque y Totora de la provincia Carrasco existen 850 hectáreas de cultivos de coca” Monitoreo de cultivos de coca de la Oficina Contra las Drogas y el Delito Naciones Unidas. PRESENTADO EN JUNIO DE 2006
señales de alerta para quienes intentan atravesar la zona con mercadería ilegal. Los comandantes aseguran que no se puede considerar a Epizana una zona roja de producción de narcotráfico, sino un sitio estratégico, para el tránsito de droga, porque este camino permite llevar droga desde Cochabamba hasta Chuquisaca y Santa Cruz. Tampoco está ausente la producción de cocaína en comunidades de Epizana con el método colombiano.
condenadas a 30 años de reclusión sin derecho a indulto en la cárcel de El Abra, por el asesinato de los tres policías. El 25 de junio de 2010 fueron sentenciados: Zenón Soria Orellana, Juan Israel Rodríguez, Trifón Huayllani Pizarro, Félix Zapata Torrico, Santiago Jiménez, Crescencio Jiménez Balderrama, Ángel Rosendo Cossío y Nicolás Rojas Calvi. Apelarán.
en llevar a una parte de los acusados del asesinato de los tres policías a los estrados judiciales. Cambios de investigadores, sobreseimientos irregulares, incumplimiento de plazos fiscales, jueces que llevaban el caso y renunciaron para convertirse en una diputada del MAS (Cecilia Ayllón) y un viceministro de Gobierno (Hugo Montero) retrasaron la justicia.
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Personas absueltas de culpa por el Tribunal 1.
FALTA
Procesar a 8 acusados declarados en rebeldía que están prófugos y capturar a 10 personas sobreseídas irregularmente por el fiscal de materia Irving Avendaño y el ex fiscal de Distrito César Cartagena. Ambos funcionarios son sometidos a proceso.
En el juicio instaurado contra 13 acusados del linchamiento de policías, los jueces resolvieron que no había prueba suficiente para castigar a los sindicados: Guillermo Zapata, Roberto Villegas Rodríguez, Roberto Carlos Villegas López, Ángel Vallejos Olmos y Osvaldo Miranda. Este último aparece en el video golpeando a un policía.
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ESPECIAL DE DOMINGO
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Testigos narran el suplicio y la muerte de los tres policías Los testimonios de un médico, una enfermera y una pobladora de Epizana fueron vitales en el juicio contra trece acusados. Con valentía, el galeno Wilfredo Bilbao contó a los jueces el horror vivido. Señaló con el dedo a cada uno de los instigadores, autores, y habló de un pacto de silencio para despistar a los investigadores con otras versiones. A Bilbao le advirtieron, al salir delTribunal, que si vuelve a trabajar a Epizana lo matarán “igual que a los policías”. DARYNKA SÁNCHEZ A. dksanchez@opinion.com.bo
LOS POLICÍAS PIDIERON PERDÓN Y PIEDAD
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testigos dijeron que los efectivos suplicaron perdón: Ávila, iba a casarse el sábado y tenía una bebita. Álvarez dijo que tenía una hija enferma y Yupanqui rogó piedad.
Droga
En una reunión después del asesinato a Zenón Soria le aconsejaron que se presente ante la Fiscalía.“¿Cuánto te van a dar por narcotráfico? Máximo será 6 años”, contó el médico.
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Odio al uniforme
Wálter Ávila con su hija Carla; Eloy Yupanqui en la Policía de Quillacollo y, la familia de Willy Álvarez
ARCHIVO/FAMILIARES
“Sienten odio por los policías, no les gusta el control. Israel Rodríguez es el cacique y pudo salvarlos”. (Bilbao)
l médico Wilfredo Bilbao vio con vida a los policías Eloy Yupanqui, Willy Álvarez y Wálter Ávila, la madrugada del 26 de febrero de 2008, cuando se encontraban amarrados y encerrados en la habitación que ocupaba el galeno en el segundo piso de la Sede Comunal. Habló con ellos. Se sintió tan conmovido con su situación de rehenes y de condenados a muerte que, aún a riesgo de su vida, decidió cortar las gomas que ataban las muñecas de los prisioneros. Luego trajo una silla para que subieran por el tragaluz del entretecho y pudieran escapar. Les aconsejó que salten por la parte de atrás de la Sede y que huyan hacia el río. Todo fue en vano. Los policías hicieron ruido al caminar sobre las calaminas del techo y, al ser descubiertos, sus verdugos los obligaron a bajar para que enfrentaran su sentencia de muerte. El testimonio del médico y el de Guadalupe Rodríguez, una epizaneña que tuvo que ser aprehendida para que declarara en el juicio, coinciden al relatar que la noche del 25 de fe-
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brero, Zenón Soria Orellana y René Claros capturaron a los policías y los acusaron de ser ladrones. Destrozaron el Retén de Llachujmayu donde se habían refugiado los uniformados, mientras Guillermo Zapata y su esposa tocaban la campana de la iglesia para convocar al pueblo. Los capturados fueron conducidos a la Posta de Salud de la Sede Comunal. Allí, por varias horas una treintena de personas, entre dirigentes y comunarios, los golpearon y acusaron del robo de enseres y por extorsión. RESCATE FRUSTRADO
El contingente policial, co-
¿Justicia?
Zenón Soria dijo: “hay que quemarlos! eso es Justicia Comunitaria” El médico le reclamó: “¿Qué más quieres si ya los han matado? ¿Por qué no te los comes ?”
cías. El representante de la OTB Israel Rodríguez y sus amigos Trifón Huayllani y Zenón Soria los amenazaron de muerte; los cercaron y les dieron plazo hasta las ocho de la mañana para llevar a un fiscal. De lo contrario, también los lincharían. Los 18 policías pidieron refuerzos a través de la radio de Cono Sur y fueron en busca de un teléfono hasta Tiraque. ENGAÑO Y TORTURA
mandado por Ricardo Pacheco, llegó a las cinco de la madrugada. No pudo ver a los rehenes para verificar su condición de poli-
Horas más tarde, a las nueve, los tres uniformados fueron exhibidos en el balcón de la Sede Comunal ante una multitud que les arrojó piedras, mientras Zenón Soria azuzaba gri-
Diez horas de tortura y agonía La agonía y muerte de los policías fue terrible. Fueron diez horas de suplicio, según relatos de la enfermera Sara Alcócer y Guadalupe Rodríguez. El corregidor Juan Soria Orellana y Crescencio Jiménez golpearon a Eloy Yupanqui. Jiménez tenía en la mano el cinturón de seguridad de un vehículo y con la hebilla golpeó la cabeza de Yupanqui. “Incluso afilaba la hebilla
antes de pegarle; en una de esas le dio tan fuerte que le reventó la cabeza”, relató la testigo Rodríguez. El corregidor Juan Soria pateó y golpeó con un palo a los tres policías. Mientras, el dirigente Israel Rodríguez incitaba a todos: “Mátenlos, mátenlos! “. Zenón Soria también empujaba a la violencia. Vilma Prado y su hijo Milton Vásquez sacaron ollas con agua hirviente y
las vaciaron sobre Eloy Yupanqui y Wálter Ávila, causándoles graves quemaduras. El primero en morir fue Ávila, le pusieron una soga al cuello y lo arrastraron una cuadra. Juan Soria dijo “ahora les toca a los otros”. Entonces colgaron a Willy Álvarez y después estrangularon a Eloy Yupanqui arrastrándolo por la carretera.
tando: “Mátenme pues. Ustedes van a morir ahora ca...! Ladrones hijos de pu...!”. Pese a la amenaza, hubo un resquicio de esperanza cuando dijeron a los policías que los llevarían a otra comunidad para confirmar su identidad policial. Santiago Jiménez ubicó su camión debajo del balcón para que los efectivos saltaran a la carrocería. Nicolás Rojas Calvi subió al balcón y, junto a otras personas, los sacó a golpes por una ventana que rompieron con un palo. Willy Álvarez se lanzó a la carrocería del camión, pero el carro se movió a propósito y el uniformado cayó al piso. Los otros dos policías bajaron por un tubo. El último en descender fue Wálter Ávila, que estaba vestido de civil. En ese momento llegaron periodistas de la Red Bolivisión y filmaron unos minutos del linchamiento, antes de ser atacados y obligados a huir para salvar sus propias vidas. Los rehenes fueron cercados por personas enardecidas que los torturaron brutalmente, les echaron con agua hirviente y luego los estrangularon de diferente manera.
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LOS PROCESOS DE EPIZANA
Crimen de Epizana generó 5 procesos y mucha ilegalidad
Policía sancionó a jefes negligentes
Denuncias de corrupción, venta fiscal de sobreseimientos y tráfico de influencias en las investigaciones
El 2 de abril de 2009 los coroneles José Copa (foto) e Ismael Medina fueron sancionados por el Tribunal Disciplinario de Cochabamba con la pérdida de dos años de antigüedad y el pase a la letra B por no garantizar el rescate de sus camaradas linchados.
Proceso disciplinario a fiscales, estancado Un Tribunal de la Fiscalía de Sucre debe juzgar a los fiscales Irving Avendaño y César Cartagena por liberar de culpa a 10 sospechosos del crimen. La máxima sanción es la destitución, pero hasta ayer el juicio no tenía fecha debido a múltiples incidentes dilatorios presentados por los fiscales.
Querellas penales tampoco avanzan Los familiares de los policias presentaron una denuncia por prevaricato, consorcio de abogados, asociación delictuosa y otros delitos contra César Cartagena, Irving Avendaño (foto), Alicia Jaldín y otros. El avance es ínfimo.
3 Policías investigaron el triple linchamiento Varios efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen fueron cambiados en el proceso de investigaciones, pero, quienes lograron culminar con el trabajo fueron el teniente Grevy Montaño Zambrana, el sargento Ariel Acuña Lata y el cabo Edson Blanco Tapia.
DARYNKA SÁNCHEZ A. dksanchez@opinion.com.bo
Desde el principio, la investigación del asesinato de policías en Epizana estuvo envuelta en una nebulosa de misterio, temor, desconfianza, pactos de silencio, tráfico de influencias e impunidad. El repudio al uniforme verde olivo demostrado por algunos pobladores de Epizana, el 26 de febrero de 2008, convirtió la investigación del hecho de sangre en una misión muy difícil. Cuando dos vehículos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, uno blanco y otro azul, eran divisados por los habitantes, éstos activaban alarmas para que nadie saliera de sus casas ni hable con los policías. Maruja de Yupanqui muestra la denuncia hecha por este diario respecto a sobreseídos EX MINISTRA
Policías de Inteligencia lograron mimetizarse en la zona y en un informe presentado a la División de Homicidios, el 7 de julio de 2008, señalan que un campesino que participó de reuniones cerca del Concejo Municipal de Totora les informó que “a la semana de la captura de Félix Zapata Torrico, la señora Celima Torrico, (ex) ministra de Justicia, convocó a una reunión de dirigentes campesinos de las comunidades aledañas a la provincia Carrasco, donde se habló exclusivamente sobre el caso Epizana y ella dio instrucciones precisas a los dirigentes de aplicar la ley del silencio... Don Melquiades tampoco quiso darle ningún dato al informante porque recibió una orden expresa de la señora Celima Torrico, de no dar ningún tipo de información a nadie, mucho menos a funcionarios de Narcóticos”. Celima Torrico negó estas versiones. “Soy de la zona, siempre voy a mi pueblo, pero nunca he dado órdenes de pacto de silencio, ni sé lo que es eso. Pido que se investigue todo esto, yo he dicho que el caso Epizana debe ser esclarecido y los culpables castigados; estoy cansada de calumnias, tienen que investigar y no sentenciar periodísticamente”, protestó.
FERNANDO BALDERRAMA
Sin embargo, su nombre también fue mencionado en el juicio por el testigo Wilfredo Bilbao cuando relató que la esposa del dirigente y sentenciado a 30 años de cárcel, Israel Rodríguez, le dijo que: “la ministra sabía todo porque ellos le habían informado desde el principio”. Similar aseveración hizo el jefe policial Ricardo Pacheco, que intentó rescatar a sus camaradas a las cinco de la madrugada. Contó que los dirigentes le impidieron ver a los policías rehenes y le advirtieron que acababan de hablar con la
ministra porque ella estaba al tanto de todo. Le dieron plazo hasta las ocho de la mañana para llevar a un fiscal, de lo contrario iban a linchar a los detenidos. Los familiares de las víctimas anunciaron que presentarán una denuncia contra Celima Torrico “por el delito de complicidad”. VERDAD OCULTA
A pesar de todas las evidencias expuestas por este diario en relación a que “narcos” instigaron el linchamiento de los policías en Epizana, la Fiscalía hizo
muy poco por llegar al fondo del asunto. Días después de la tragedia, el policía que logró huir de la muerte, Raimundo Condori, le llevó a la viuda de Willy Álvarez quintales de arroz, fideo, azúcar y otros víveres, porque se sentía culpable. La beneficiaria lo corroboró públicamente. Este diario también denunció que el cabecilla del grupo de policías volteadores, Gerardo Flores, retiró 50.000 dólares de la Cooperativa Inca Huasi de Quillacollo. Parte de ese dinero estaba manchado con la sangre de sus cama-
Las denuncias de corrupción El 2 de febrero de 2009, OPINIÓN denunció la irregular liberación de culpa de 11 sospechosos del crimen. Reveló que los abogados Raúl Chávez Plata y Omar Daza (defensores de los sobreseídos) tenían nexos laborales con Alicia Jaldín, abogada y esposa del entonces fiscal de Distrito César Cartagena. A través de ella se garantizó las liberaciones de culpa, a cambio de un monto económico. Incumpliendo plazos procesales, el ex fiscal de Distrito confirmó 10 de los 11 sobreseimientos.
Ex fiscal César Cartagena Ante las denuncias hechas por OPINIÓN, la Inspectoría General del Ministerio Público inició una investigación del tratamiento fiscal en el caso Epizana. El 9 de junio de 2009, antes de que se conozca la re-
solución final, el acusado Trifón Huayllani denunció ante la Inspectoría que el abogado Omar Daza lo visitó en la cárcel y le dio su tarjeta para que lo llamara si quería salir libre a cambio de 3.000 dólares. Le dijo: “la justicia funciona así, tenemos muñeca con Alicia Jaldín, el fiscal Avendaño y César Cartagena”. El 14 de agosto de 2009 la Inspectoría constató que hubo irregularidades en los sobreseimientos . Pidió un proceso para los dos fiscales y como sanción, la destitución del cargo y el retiro de la carrera fiscal.
radas, según la viuda de Álvarez. La Fiscalía abrió un proceso contra Flores porque en su casa hallaron paquetes de supuesta droga, que luego dieron un resultado negativo en la prueba de cocaína. Los fiscales pidieron a la cooperativa Inca Huasi que certifique si Flores retiró semejante suma de dinero, pero la financiera respondió que precisaba de una orden de la ex Superintendencia de Bancos para dar ese dato. El Ministerio Público no tramitó la orden y abandonó la investigación. Sin embargo, a principios de este año, Gerardo Flores y Raimundo Condori fueron aprehendidos por otros “volteos” de coca, extorsiones y robos. Asimismo, la Fiscalía Anticorrupción abrió un proceso para investigar si el coronel Ismael Medina estuvo involucrado en el envío de los policías a Epizana. La investigación constató que las bajas médicas de Eloy Yupanqui y Willy Álvarez, para salir de sus unidades el 25 de febrero, eran falsas e identificó al falsificador: Rodrigo Saavedra, policía que hoy está prófugo. Un testigo de la ex empresa Cono Sur declaró que el día de la captura de los policías en la tranca de Epizana había un minibús plomo que era conducido por un policía (al margen del auto de Ávila), pero el fiscal no tomó en cuenta ese dato. VENTA DE LIBERTAD
La investigación del asesinato identificó a 58 personas como sospechosas de haber participado en la instigación y ejecución de los policías. De ellas, un total de 31 fueron aprehendidas en un operativo gigante. Diez meses después del crimen, el fiscal de materia asignado al caso, Irving Avendaño, torció la justicia al liberar de culpa a 11 sospechosos identificados por varios testigos. Fuentes de la Fiscalía advirtieron que estas personas pagaron por su libertad, entre 3.000 y 10.000 dólares, con la venia del ex fiscal de Distrito César Cartagena.
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Sólo ocho linchadores tienen condena de 30 años de cárcel Las autoridades ordenaron 58 aprehensiones en 2008, pero al juicio apenas llegaron 13
LISTAS SENTENCIADOS 1.- Zenón Soria Orellana 2.- Juan Israel Rodríguez 3.- Trifón Huayllani Pizarro 4.- Crescencio Jiménez B. 5.- Santiago Jiménez 6.- Félix Zapata Torrico 7.- Nicolás Rojas Calvi 8.- Ángel Cossío Alvarez
LOS ABSUELTOS DARYNKA SANCHEZ A. dksanchez@opinion.com.bo
1.- Roberto Villegas R. 2.- Roberto Carlos Villegas L 3.- Osvaldo Miranda 4.- Angel Vallejos Olmos 5.- Guillermo Zapata
El testimonio de los testigos oculares y el video filmado por el camarógrafo Edson Jiménez de la red Bolivisión fueron pruebas fundamentales para la condena a 30 años de cárcel a ocho personas por asesinato de los tres policías, como se deduce de la lectura del fallo dictado por el Tribunal 1 de la Corte de Justicia de Cochabamba el pasado día 25. Extractos de los testimonios del médico Wilfredo Bilbao, de la enfermera Sara Alcócer (aunque ésta no se presentó en el juicio por miedo) y del relato hecho por la pobladora Guadalupe Rodríguez ante la Fiscalía, forman parte de tenor que justifica el fallo.
* Osvaldo Miranda aparece en el video de Bolivisión golpeando a un policía y con un cintillo de Tránsito en su mano izquierda.
LOS REBELDES 1.- Juan Soria Orellana 2.- Pastora Triveño 3.- Guido Coca Montaño 4.- Zenobio Rodríguez 5.- Pedro Villarroel Zeballos 6.- Demetrio Arandia 7.- David Soria López 8.- Florencio Ovando Velarde
SOBRESEIDOS
VIDEO REVELADOR
El video (de cuatro minutos) filmado por Bolivisión fue determinante. Un perito se encargó de congelar la imagen y de extraer fotografías para identificar a los responsables del crimen. Algunos comunarios y policías, que trabajaron en Epizana, colaboraron y reconocieron a varios de los acusados que aparecían en el video golpeando a los uniformados. ONCE DÍAS DE JUICIO
El 11 de junio de 2010 fue instalada la primera audiencia de juicio oral contra trece acusados de linchar a los policías. Los abogados de la defensa lograron dilatar el proceso presentando un arsenal de recursos e incidentes legales, hecho que exasperó a los jueces, abogados de la acusación, fiscales y familiares de las víctimas. Por sus afanes dilatorios, los abogados “maliciosos” fueron sancionados con una multa de 740 Bolivianos. Fueron diez días, de maratónicas y dramáticas sesiones, que duró el juicio. Primero, los fiscales Patricia Guevara, Marcelo Rollano y Moisés Chiri presentaron las pruebas de cargo documental, testimonial y audiovisual en contra de los trece acusados. Algunos argumentos fueron objetados por la de-
Los ocho sentenciados anunciaron que apelarán la decisión judicial.
FERNANDO BALDERRAMA/RUBEN RODRIGUEZ
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fensa porque no fueron obtenidos conforme al procedimiento de ley.
cada uno de los responsables de las muertes de los policías y develó que en esa localidad los dirigentes odian el uniforme policial y les disgusta el control. Señaló que en una reunión de dirigentes, fijada para coordinar la versión “uniforme” que le iban a dar a los investigadores, uno de los participantes le recomendó a Zenón Soria Orellana (el hombre que estaba en el vehículo interceptado por los tres policías), que “sería mejor que te presentes voluntariamente porque tú eres el del auto. Total, ¿cuánto te podrían dar por narcotráfico?, máximo será 4 a 6 años”. Aunque el relato fue ofrecido en una audiencia pública, ni los abogados de la defensa, ni los de la acusación y, mucho menos, los
fiscales y jueces intentaron profundizar semejante declaración. La enfermera Sara Alcócer no se presentó en el juicio debido a las amenazas de muerte que recibió de algunos familiares de los acusados. Sin embargo, su testimonio ante la Fiscalía fue vital porque identificó a las personas que participaron del crimen y a los azuzadores. Una vecina de Epizana, Guadalupe Rodríguez, relató a la Fiscalía que uno de los policías en sus últimos minutos de vida “vio la puerta abierta de la casa de doña Margarita y quiso refugiarse ahí, pero ella la cerró rápidamente. El uniformado fue rodeado por los que le perseguían y ellos lo hicieron caer para golpearlo; una chola gorda y alta de Quewiña Pampa
Personas fueron sentenciadas a 30 años de presidio y sin derecho a indulto por el asesinato de los policías: Eloy Yupanqui, Wálter Ávila y Willy Álvarez, ocurrido el 26 de febrero de 2008. El fallo fue dictado 28 meses después del crimen.
TESTIMONIOS
Los testigos de cargo desfilaron ante los jueces para contar lo que sabían. El testimonio del médico de la Posta de Salud de Epizana, Wilfredo Bilbao, fue esencial. De pie señaló a
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Precedente.
“Si hubiera habido sentencia en este caso quizás no habrían linchado a los 4 policías en Uncía”. Luis Camacho ABOGADO
Sospechosos fueron sobreseídos (liberados de culpa), irregularmente, por el fiscal Irving Avendaño y el ex fiscal de Distrito César Cartagena. OPINIÓN lo denunció y la Inspectoría General del Ministerio Público lo verificó. Pidió la destitución de ambos.
Acusados están prófugos y fueron declarados en rebeldía, entre ellos el corregidor Juan Soria. Los testigos del crimen identificaron a 20 personas como partícipes del crimen, pero la Fiscalía no los acusó formalmente.
fue la que le dio con palo en la cabeza hasta matarlo”. Guadalupe Rodríguez tuvo que ir al juicio aprehendida. Temblando de miedo dijo a los jueces que la amenazaron con cuchillos si ella hablaba. Sin embargo, la mujer se ratificó en las declaraciones que dio antes al Ministerio Público y en las que identificó a una treintena de personas. Los acusados tuvieron a Isabel Cruz (esposa de Trifón Huayllani) como única testigo de la inocencia que pregonaban. Ella se contradijo. El 25 de abril de 2010, veintiocho meses después del linchamiento de los policías en Epizana, tres jurados ciudadanos y los jueces técnicos Lineth Tapia y Juan Luis Ledezma del Tribunal de Sentencia 1 votaron unánimemente porque ocho acusados sean condenados a 30 años de presidio y sin derecho a indulto, en la cárcel de El Abra. También resolvieron absolver de culpa a cinco acusados por “insuficiencia de pruebas”. Familiares de las víctimas están disconformes con el fallo porque uno de los liberados (Osvaldo Miranda) aparece en el video.
1.- Vilma Prado de Vásquez 2.- Milton Vásquez Prado 3.- Zenón Acosta Méndez 4.- René Claros Rodríguez 5.- Benigno Flores Rodríguez 6.- Santos Acosta Villarroel 7.- Celestino F. Rodríguez 8.- Ricardo Rodríguez Soliz 9.- Gabriel Mejía Triveño 10.- Silvestre Rojas B.
IDENTIFICADOS Y SIN ACUSACIÓN . 1.- Zenón Claros 2.- Eufronio Cairo el Yungueño 3.- Aniceto Quinteros 4.- Anacleto López Arispe 5.- Benito Rojas Orellana 6.- Pascual Huayllani Pizarro 7.- Wilson Mejía Triveño 8- Patricio (de Kellu Mayu) 9.- Ramiro Cossío 10. Alvaro Espada Churive 11.- Félix Ledezma 12.- Francisco Triveño 13.- Salomé Canchari 14.- Lucía Margarita Alvarez 15.- Silvia Torrico 16.- Feliciana López 17.- María Calicho 18.- Eustaquio Olmos 19.- Victor Chávez 20.- Lucio Triveño
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INFORME
COCHABAMBA, DOMINGO 4 DE JULIO DE 2010
ESPECIAL DE DOMINGO
Reportaje gráfico. Linchamiento
1 ARCHIVO/ OPINIÓN
En imágenes. 1. Hallazgo La televisión mostró el recojo de los cadáveres de policías
Las imágenes del horror que trajeron justicia
2. Ismael Medina El subcomandante halla el cadáver de Wálter Ávila
3. En la carretera Fue encontrado Willy Álvarez
Cuatro minutos dura el video filmado por el camarógrafo Edson Jiménez, de la Red Bolivisión, que permitió el reconocimiento e identificación de los principales instigadores y autores del crimen. Cuatro minutos que fueron difundidos una y otra vez por los medios de comunicación hasta que los testigos rompieron el silencio. El video es la prueba de que Osvaldo Miranda, un hombre que fue absuelto y dejado en libertad por los jueces, participó del linchamiento. Son imágenes que muestran la saña, el odio y la indolencia de los verdugos; pero también el pánico y la indefensión de las víctimas. Veintiocho meses después de ser filmadas, sirvieron para identificar a una gran parte de los asesinos. La grabación de este video casi le costó la vida a Edson Jiménez. Una testigo identificó a los atacantes del camarógrafo: Rosendo Cossío y Eufronio Cairo, “El Yungueño”, que hasta hoy no fueron sancionados por el delito. más información www.opinion.com.bo
4. Primero rehenes El momento en que obligaban a bajar a los policías, por un tubo, de la Sede Comunal
5. Asesino identificado Zenón Soria, golpeando
6. Libre injustamente Osvaldo Miranda, agrediendo
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7. A la morgue Llegan los tres cadáveres
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