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LA MONJA QUE SE DISFRAZÓ DE HOMBRE
3 Sus padres quisieron para ella la tranquila vida de un convento pero ella escogió una existencia de aventuras en el Nuevo Mundo.
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NOVICIA REBELDE atalina Erauso nació en San Sebastián en 1592. Sus padres, Miguel de Erauso y María Pérez de Gallárraga y Arce internaron en el convento de San Sebastián el Antiguo a Catalina y tres hermanas suyas a muy temprana edad. Pero así como sus otras tres hijas aceptaron con obediencia la decisión paterna, Catalina dio pronto signos de rebeldía. «Solían ingresas en el convento las mujeres que no podían encontrar un buen marido, y ese fue el caso de Catalina. Desde pequeña vieron que era una mujer muy poco agraciada y no iba a tener muchos pretendientes, así que sus padres prefirieron que dedicara su vida a Dios», En 1607, cuando Catalina era una adolescente, participó en una discusión dentro del convento con otra novicia. Además de recibir varios golpes fue recluida en una celda de castigo. La joven tuvo entonces claro que no pasaría el resto de
gó incluso a matar a su propio hermano, Miguel, quien descubrió su parentesco segundos antes de morir. Finalmente fue detenida en Perú en 1623 tras una de tantas disputas. Declarada culpable y condenada a morir, Catalina decidió entonces desenmascarase ante el obispo Agustín de Carvajal al que pidió clemencia. Fue entonces cuando tras casi 20 años de vida clandestina se destapó que aquel alférez español pendenciero era una mujer que había sido monja. Unas matronas certificaron además que era virgen. A Catalina le salió bien la jugada. Tras permanecer un tiempo en varios conventos peruanos, fue enviada de vuelta a España. GRANDES HONORES La fama de Catalina viajó más rápido que ella misma a tierras españolas. Así, el mismísimo rey Felipe IV quiso conocerla y oír de primera mano su historia. El monarca español no sólo mantuvo su graduación sino que le permitió que continuara llevando atuendo masculino. Fue Felipe IV quien la bautizó con el
su vida entre aquellos muros y escapó, la suerte le ofrecería el encontrar las llaves del convento colgadas en una habitación sin testigo alguno que le detuviera en su intensión de evasión. CONSTRUYENDO UNA IDENTIDAD MASCULINA Los años siguientes Catalina vagabundeó por distintas ciudades españolas con una identidad falsa. Vestida de labriego se hacía llamar con distintos nombres masculinos. Su aspecto físico nada femenino así como su porte varonil ayudaron al en-
gaño. En Sanlúcar de Barrameda embarcó rumbo a América. Después de desempeñar varios oficios se enroló en el ejército español que por aquel entonces participaba en diversas guerras de conquista. Su manejo de las armas y su maestría en el combate le permitió llegar a ostentar el grado de alférez. Sin embargo, Catalina no dejó nunca de participar en refriegas, conflictos y duelos que la obligaban a no permanecer demasiado tiempo en un lugar determinado por miedo a ser detenida. En un duelo lle-
nombre con el que pasó a la historia: La monja alférez. Con su espíritu aventurero, no era extraño que Catalina emprendiera de nuevo viaje, esta vez por el viejo continente. Llegó incluso hasta Roma donde el papa Urbano VIII la recibió y ratificó el permiso del rey español de que vistiera como un hombre. Catalina terminó sus días en el Nuevo
Mundo, en México, a donde viajó en 1630. Allí vivió los últimos 20 años de su vida. Una mujer como Catalina, no podía menos que plasmar ella misma su propia vida. No se sabe si de su misma mano o dictada a un tercero, lo cierto es que Catalina dejó para la historia sus propias memorias, La Historia de la monja alférez.
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DOS MISTERIOS ALIENÍGENAS Los misterios alienígenas se cuentan por miles y la historia hace registro de este fenómeno desde épocas antiguas.
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¿ESTÁ HABITADA LA LUNA? Qué enigmas guarda nuestro satélite? ¿Es posible que sea una base de extraterrestres desde donde nos observan? Prestigiados astrónomos de todo el mundo observaron inclusive carreteras y un gigantesco objeto que se desplazaba sobre la superficie. Testimonios que datan de hace 200 años a la fecha, tan actuales como los que se ven hoy día a través de sofisticados telescopios, han servido para corroborar los
cambios que ha sufrido la luna en distintas fechas. En 1915, el científico norteamericano Bernard Thomas, vio desde el observatorio de Tasmania, un punto luminoso en el mar de la Crisis. Al mismo tiempo, desde el Observatorio Nacional de París informaban que habían visto la misma luz; algo parecido a un muro en el circo de Aristeo. El astrónomo F. Burnett descubrió (siete años más tarde) tres elevaciones perfectamente regulares que tenían forma de
pirámides elevadas... Pero el descubrimiento más asombroso lo iba a realizar un aficionado a la astronomía, que al mismo tiempo era redactor científico del periódico The New Herald Tribune. Su nombre John O’Neill, quien descubrió al borde del mar de las Crisis una construcción que tenía toda la forma de un puente. Por esos días se unió Patrick Moore a ellos para apoyarlos en su descubrimiento. Pronto una multitud de astrónomos se encontraba escudriñando centímetro a centímetro la superficie lunar. ¿Qué buscaban? Puentes, pirámides, carreteras..., cualquier cosa que pudiera mostrar que “algo extraño” sucedía en la Luna. Debido a este interés, surgido en forma inusitada, el 29 de Octubre de 1963, astrónomos del Observatorio Lowell encontraron unos puntos luminosos que se movían rápidamente en el circo de Aristarco (se llama circo a la huella dejada por los aerolitos impactados en la Luna, que tienen forma circular). ¿Huellas de alguna Civilización Antigua?
Los estudiosos del fenómeno OVNI aseguran que los astronautas que “hablaron demasiado”, sobre lo que descubrieron en la Luna pronto fueron dados de baja y tuvieron que abandonar el servicio activo, como en el caso de Gordon Cooper, que después de haber integrado el equipo del Proyecto Mercury y tripulado éste en 1963, y el Géminis 5 en 1968, no fue enviado con destino a la Luna en el Apolo 11; poco después se declaró abierto partidario de la existencia de objetos voladores no identificados. Gordon Cooper realizó una expedición hacia América del Sur
en busca de vestigios de antiguas civilizaciones y se dedicó a la exploración de pirámides... ¿sería para cotejar la similitud con aquellas que se han visto en la Luna? Una imagen vale más que mil palabras... y en ellas se descubre aquello que a los ojos de astrónomos y ufólogos no es propio de un cuerpo desolado como se ha querido mostrar desde hace decenas de años a nuestra misteriosa Luna. ¿Significa de la Luna ha sido visitada por gente de otros planetas? O ¿Es posible que sea una base de extraterrestres desde donde nos observan?
CONTACTO EN BRITANIA Una noche del mes de noviembre del 2002, Joyce Bowles y su vecino Ted Pratt iban en un coche por el pueblo británico de Chilcomb para recoger al hijo de Bowles. Por el camino, el coche comenzó a experimentar sacudidas violentas y patinó hacia la cuneta. De manera inexplicable, el motor dejó de funcionar y los faros se apagaron. Luego, Bowles y Pratt vieron un aparato reluciente, anaranjado con forma de cigarro puro, suspendido cerca de ellos, por encima de la carretera. A través de una ventanilla en un lado del vehículo, Bowles y Pratt vieron tres cabezas alineadas como si se tratase de los pasajeros de un autobús. Uno de los misteriosos ocupantes de la nave salió y se acercó a ellos. La criatura llevaba un mono plateado y tenía unos intensos ojos rosados, sin pupilas o iris. -Miró a través de la ventanilla el tablero de instrumentos del coche -declaró Bowles-. Cuando lo hizo, el motor se puso de repente en marcha y los faros se encendieron. Luego, él y el cigarro, simplemente se desvanecieron. Algunos expertos creen que el punto de encuentro era especialmente atractivo para los extraterrestres. Se encuentra en el cruce de una serie de líneas trazadas en los terrenos locales de antiguos enterramientos.
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EL ENIGMA DE LOS MONOLITOS DE STONEHENGE Aunque hoy día se sepa que los celtas no son los constructores, éstos tuvieron en todos los tiempos un gran respeto por Stonehenge.
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l primer texto que menciona el sitio con exactitud se encuentra en la Historia Regnun Britanniae de Geoffroy de Monmouth (1136), uno de los autores del ciclo arturiano. Stonehenge es, según él, una creación del druida Merlín, que por obra de magia habría traído las piedras desde Irlanda. Luego habría utilizado las “fuerzas vitales” del lugar para hacer aparecer el dragón, y es ahí también donde todos los nobles de Inglaterra habrían prestado juramento al rey Arturo. Los autores británicos John Aubrey y William Stukeley, a fines del siglo XVII y a principios del XVIII, contribuyeron fuertemente a mantener la imagen de Stonehenge como un templo druídico y sitio importante de la cultura celta. Pero, aunque fue sin duda el sitio utilizado por los druidas para sus ceremonias, los pesados megalitos estaban ahí mucho antes de la llegada de los celtas a tierras británicas, y los misterios de Stonehenge no tienen ninguna necesidad de este aporte para seguir siendo apasionantes.
CONSTRUCTORES FANTÁSTICOS El monumento fue construido en cuatro fases, a partir del 2800 antes de Cristo, con piedras de diferentes orígenes. Algunas provienen de Avenbury, a una veintena de kilómetros al noroeste, otras de los montes Prescelly en el País de Gales, a más de 200 kilómetros de Stonehenge, y de Mildford Haven, ¡a 250 kilómetros! Las “piedras azules” (riolitos) incorporadas a la construcción a principios de la Edad del Bronce (segundo milenio a.C.), vendrían de Irlanda. Cada monolito pesa más de 50 toneladas y el conjunto, varios miles de toneladas: ¿Cómo pueblos de fines del Neolítico,
de apenas algunos centenares de individuos, pudieron traer tales cargamentos con medios primitivos? ¿Y por qué haber ido tan lejos en busca de bloques de diferentes rocas? El emplazamiento de Stonehenge fue elaborado según un plan extremadamente preciso. Una zanja circular de 4 m. de ancho por 1,50 m. de profundidad forma un primer anillo de un centenar de metros. Al interior, sobre el talud, un segundo anillo está dibujado por 56 agujeros, conocidos por el nombre de “agujeros de Aubrey”, derivado del nombre de uno de los primeros exploradores del emplazamiento (1650). Siempre concéntricos, otros dos anillos revelan cada uno 30 y 29 agujeros: éstos contienen osamentas humanas quemadas. Luego viene la parte monumental de la obra: dos círculos de piedras erguidas cubiertas de dinteles encerrando otras dos filas dispuestas en forma de herradura. Otras cinco piedras se levantan aisladas: dos, en la zona del anillo de los agujeros de Aubrey (“piedras de estación” destinadas a ser cambiadas de posición), una exterior, en la galería que conduce al monumento (“piedra de talón”, llamada así por su forma), una piedra de sacrificio a la entrada y un altar al centro.
LA TEORÍA DEL OBSERVATORIO Los numerosos restos humanos encontrados en el lugar indican que el sitio sirvió a menudo, a lo largo de los siglos, como lugar de sepultura. Sin embargo, todo muestra que esa no fue su primera finalidad. En efecto, después de 1961, el plano del monumento fue estudiado por el científico Gerald Hawkins, profesor de astronomía de Cambridge, y Fred Hoyle, especialista en astrofísica del Californian Institute of Technology. Su tesis es que, para un observatorio ubicado en el centro de la construcción, los megalitos se observan en líneas de mira para realzar fenómenos
astronómicos. Los círculos de agujeros corresponderían al sistema simple de una máquina calculadora gigantesca y primitiva pero de una precisión sorprendente. El anillo de los agujeros de Aubrey se relaciona con el ciclo de los eclipses lunares: Hawkins muestra incluso que corriendo cada año seis piedras de un agujero se pueden prever todos los eventos lunares para períodos muy largos. Finalmente, distintos ángulos entre las piedras solitarias definirían los solsticios y los equinoccios, las salidas y las puestas del Sol y de la Luna. Los razonamientos de Hawkins y Hoyle, incontestables en el plano astronómico,
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FANTASMAS EN LA CASONA DEL MORAL En Arequipa se encuentra una casona colonial ubicada en la Calle del Moral 318 que está encantada.
L son sin embargo criticados por los arqueólogos. La multiplicidad de épocas de construcción parece contradecir la teoría de un observatorio construido con conocimiento de causa. ¿Pero por qué el mismo objetivo no habría podido ser perseguido durante varios siglos, con un perfeccionamiento progresivo del sistema? Además, la simbología del círculo (el Sol) y la de la herradura (el menguante de la Luna) aboga en favor de los astrónomos. Parece que hoy día no existirían contradicciones entre las constataciones de los arqueólogos y los astrónomos y, en todo caso, muchos concuerdan en reconocer que la precisión en los emplazamientos de los megalitos es demasiado grande para ser solo fruto del azar. ¿OBRA DE LOS HIPERBÓREOS? Las piedras de Stonehenge son tan grandes que se diría que fueron levantadas por una raza de gigantes desaparecidos después de los primeros tiempos. Una tradición relaciona estos gigantes míticos a otro pueblo igualmente legendario: los hiperbóreos. En la mitología griega, los hiperbóreos, que adoraban al dios Apolo, habitaban en el extremo norte de Europa. El historiador Diodoro de Sicilia (siglo I a.C.) evoca incluso un sitio que podría ser Stonehenge: “Hay en la isla un recinto de Apolo y un templo ilustre, (...) los encargados son llamados boreades (...). El dios visita la isla
cada 19 años, período durante el cual las estrellas vuelven a estar en el mismo lugar en el cielo”. UNA CONFIGURACIÓN ÚNICA Los emplazamientos megalíticos son numerosos a través de Europa (la península Ibérica, Westfalia, Hesse, la cuenca parisina, Provenza, Bretaña...), pero la mayoría son identificados como sepulturas. En Antequerra (Andalucía, España) como en New Grande (Irlanda) o en Castelet (Provenza), túmulos y dólmenes encierran siempre una o varias cámaras funerarias. Sin embargo, al igual que Carnac, Stonehenge escapa a la regla. Ni pasillos ni cámaras funerarias: el monumento tiene ciertamente otro fin. Fuera de la hipótesis
del observatorio astronómico, las explicaciones más diversas han sido propuestas. Stonehenge sería un gigantesco generador de energía, un “nemetón” (lugar sagrado), no dudan en afirmar los seguidores de la tradición druídica. Estos forman una cadena humana alrededor del monumento cada solsticio para captar esta energía y cargarse de ella, siguiendo un ritual creado en el siglo XIX. ¿Un puerto espacial para Ovnis? Esta es la tesis desarrollada por los espíritus más osados. La posición de las piedras correspondería entonces a un balizaje a ser ubicado desde el espacio. ¿Por qué no? ¡Si es que se pueden imaginar platillos voladores tallados en piedra y forrados con pieles de animales!
a Casa del Moral data originariamente del siglo XVII y presenta un claro estilo barroco gracias a los múltiples adornos en la fachada y en el interior. En la fachada se puede ver diferentes elementos como el escudo, además de puertas y ventanas finamente decoradas con diferentes elementos. Alberga también la cocina, despensa, además de las clásicas caballerizas que se utilizaban en la época colonial, además de un carruaje en el patio de entrada. Actualmente es un museo de época. HISTORIAS DE FANTASMAS (Pablo Nicoli). En la investigación que realicé para mi libro: Arequipa Casas Encantadas, tuve la oportunidad de intercambiar información con un joven vigilante, al que sólo denominaremos como José, que aseguraba haber trabajado cuidando, la casa en cuestión, en horario nocturno. Me dijo que se trataba de un lugar bastante pesado, no obstante en el día la actividad fantasmal no se insinuaba sino cuando llegaba la noche y la casa museo era cerrada al público y empezaban las manifestaciones. Cuenta José que las primeras veces que cuidó la casa se paseaba de noche por los patios y pasadizos con su linterna pero que de pronto sentía que le jalaban de los cabellos y al voltear no
había nadie, se abrían y cerraban algunas puertas y ventanas aunque no hubiera viento, se escuchaban ruidos extraños y también voces del pasado que le erizaban los pelos hasta al vigilante más valiente. Fue justamente por este tipo de manifestaciones que los vigilantes ya no querían hacer su trabajo de noche, ni tampoco en el primer piso. A alguien se le ocurrió que podían realizar la misma labor desde los techos de bóveda de la casa en donde no se presentaba mayor actividad paranormal y de esta forma lograron sortear el temor que vivían en la primera planta. Sobre el porqué la casa quedó encantada nada se sabe, salvo que allí vivió una familia apellidada Williams y
que como cualquier casa de varios siglos puede haberse cargado de energías negativas que atrapan manifestaciones espectrales. Otra posibilidad es que haya un cuerpo o más enterrado en el subsuelo –sin cristiana sepultura- lo cual generaría espíritus en pena que aún infestan el lugar. Especulamos que justamente el lugar se convirtió en museo por el hecho de no lograrse habitar por la actividad que se fue sumando a través de los años, este es el mismo caso de otra casona republicana en la calle Álvarez Thomas y de la que nos ocuparemos en otra ocasión.
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GÁRGOLAS MONSTRUOS MÁGICOS La Edad Media nunca perdió contacto con el mundo antiguo. Fue una sociedad que jamás renunció a lo fantástico.
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uchas personas creen que las gárgolas fueron desarrolladas por arquitectos y escultores medievales, con el fin de mostrar al hombre la existencia de un mundo imperfecto y no solo para servir de elementos decorativos en Catedrales y palacios. Es en la Edad Media gótica, donde se da un renacer de los ciclos del infierno, de criaturas deformes, de seres fabulosos que se multiplican en los bestiarios, los márgenes de los manuscritos, o en la decoración esculpida. Es en este periodo, en donde se vive toda una resucitación de un mundo artificial en el interior de un mundo vivo, en el cual se resucitan las fuentes que siempre alimentaron las fantasías en Oriente y la antigüedad Clásica de Occidente. Esto se debe en gran parte, a que la Edad Media nunca perdió contacto con el mundo antiguo. Fue una sociedad que jamás renunció a lo fantástico o a todas aquellas alegorías, que por mucho tiempo habían alimentado su imaginación. Todo esto se puede ver, en la forma como el arte gótico, evoca en general el descubrimiento de la naturaleza y la vida, reflejándose en la consolidación de un mundo de seres fantásticos, que van a triunfar ante el agota-
miento de la iconografía románica. Las primeras gárgolas recibieron el nombre de Grifos, nombre que hacía alusión a un animal mitológico, que tiene la cabeza de águila y el cuerpo de león. En la mitología griega éste animal figuraba como guardián del dios Apolo, al cual estaba consagrado, sin embargo, en el campo de la arquitectura, los griegos emplearon a los grifos como figuras ornamentales, las cuales eran colocadas en las acróteras de los templos, ya que estos eran los pedestales que remataban los frontispicios de las construcciones En la Edad Media, el tema de las gárgolas, dejó de ser únicamente los grifos y pasó a convertirse en la creación de figuras quiméricas y de animales, razón por la cual en muchas de las Catedrales góticas, podemos encontrar figuras talladas con las formas de dragones, hombres, gatos, ranas, serpientes e innumerables formas de animales reales y fantásticos. La palabra gárgola se deriva de la palabra francesa gargoille, que significa garganta y eran empleadas originalmente, como desagües para expulsar el agua de la lluvia lejos de los edificios (Catedrales), ya que se pensaba, que si estos seres grotescos podían expulsar el agua llegada del cielo –bendita-, también podrían asustar y ahuyentar a los malos espíritus.
No todas las gárgolas servían para expulsar el agua de las catedrales, razón por la cual a las que tenían una función decorativa, se les ha llamado grotescos o figuras grotescas. El significado simbólico de las gárgolas, lo podemos ver en un dualismo entre el bien y el mal, casi permanente durante toda la edad media, ya que de una u otra forma, muchas de éstas imágenes visuales, fueron empleadas por la Iglesia Cristiana para imponerse. Es así, como las gárgolas y las figuras grotescas, van a tomar diferentes significados, podían ser vistas como la maldad que se encontraba fuera de las catedrales e iglesias, mientras que por dentro de éstas, era un sitio de encuentro y paz interior, que se encontraba bellamente adornado por vitrales y murales. También podían estar, con el fin de actuar como guardianes de su iglesia, para mantener alejado al mal. Sin embargo, es claro que
eran puestas, para recordarle al pueblo, que se encontraban en un mundo imperfecto, en donde se sabía, que aunque Dios estaba presente, el mal nunca estaba lejos. LAS GÁRGOLAS SEGÚN LA MITOLOGÍA Según los mitos las gárgolas son monstruos mágicos muy feroces y de aspecto siniestro. Estas criaturas tienen alas de murciélago, los ojos incandescentes, unos pequeños cuernos y la piel dura. Originariamente, las gárgolas eran desagües esculpidos con formas de animales, a los que un mago dio vida. No necesitan ni comer ni beber, así que cuando atacan lo hacen por el simple hecho de hacer daño. Habitan en cualquier zona subterránea, donde acumulan los tesoros de sus víctimas. Es típico encontrarlas entre ruinas o
cavernas. Pueden atacar por sorpresa; permanecen inmóviles como estatuas hasta que su víctima está lo suficientemente cerca. Realizan entonces un ataque inesperado para desconcertar al enemigo. Otra manera de atacar es en picado, esta forma la usan cuando se encuentran en movimiento y es tarde para el ataque sorpresa. Existen dos subespecies de gárgolas: -Kapoacinth: En una gárgola que habita en cuevas submarinas. Sus principales enemigos son los elfos marinos y sirenas. -Márgola: Son gárgolas verdaderamente feas y de garras poderosas, con la piel muy parecida a la piedra, de hecho, es bastante difícil distinguirlas de las demás rocas.
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EL PRISIONERO DE LA MÁSCARA En aquellos días, y según la ley, era considerado mayor el segundo de los hijos que nacía en un parto gemelar.
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Cae el 14 de Julio de 1789 en París y con él la fortaleza conocida como la Bastilla. Los rebeldes entran por los pasillos de la prisión. Corren ansiosos, gritando exaltados, eufóricos. Liberan a su paso a los pocos prisioneros que, en esos momentos, allí se encuentran. Pero en una de las lúgubres mazmorras encuentran un esqueleto encadenado. Cubre su calavera una grotesca máscara de hierro. Durante un eterno segundo, la euforia de sus caras se convierte en horror y el silencio invade la estancia…” Este trágico final del cautivo desconocido es producto de la rumorología popular. Sus restos corrieron una suerte distinta según consta en los pocos documentos encontrados. Pero vayamos por partes y comencemos con su historia: Corría el año 1698. Bènigne D’Auvergne de Saint Mars, nuevo alcaide destinado a la Bastilla, llega, sobre las tres de la tarde del 18 de septiembre, a la parisina prisión, trayendo a un prisionero que cubre su cara con una máscara de terciopelo negro, (según parece, no era de hierro). Al pasar por el registro de entrada, misteriosamente no se toma nota de su nombre. Este hombre enmascarado, que
había estado ya en otras cárceles de alta seguridad, había pasado encarcelado los últimos 29 años de su vida, y siempre bajo la estricta vigilancia de Saint Mars. Nunca nadie vio el rostro oculto bajo la máscara. Al preso no se le permitió tomar contacto con otros prisioneros. Vivía
bajo amenaza de muerte si osaba hablar de algo que no fuera sus necesidades físicas. No tenía, por supuesto, ningún tipo de contacto con el mundo exterior. Cinco años después, el hombre sin rostro y sin nombre cayó enfermo. El 19 de noviembre de 1703, a las 10 de la noche, por fin su alma se liberó de las mortales cadenas. Entonces se quiso borrar toda huella de su paso por la Bastilla y se quemó todo aquello que utilizó durante tan solitarios años. Fue enterrado en el cementerio de San Pablo. En registro parroquial se le puso por nombre M. de Marchiel. Se le suponían unos 45 años… Varias son las teorías sobre quién era el misterioso caballero a quien se ocultó de manera tan cruel. Dicen que entre los pocos que conocían quien era realmente estaba el propio Rey Luis XIV, el Rey Sol, que poseía el poder de arrestar y encarcelar a voluntad y así lo había puesto en práctica. Una de las teorías afirma que bajo la máscara de terciopelo negro podría estar un hermano bastardo de este rey absolutista, fruto de los amoríos de su madre, Ana de Austria, con el poderoso cardenal Mazarino. Otra habla de que, en
realidad, era su hermano gemelo. Esto parece confirmarlo el famosos cardenal Richelieu en una de sus obras, en la que habla de que Ana de Austria tuvo dos hijos el mismo día pero con muchas horas de diferencia, siendo el primero alabado como futuro rey y el segundo escondido en el más oscuro de los secretos. En aquellos días, y según la ley, era considerado mayor el segundo de los hijos que nacía en un parto gemelar. Como el alumbramiento se demoró demasiado, cuando el segundo nació ya el primero había sido nombrado rey. Para evitar posibles problemas, a la reina se le dijo que su segundo varón había muerto, y éste fue desterrado a una vida humilde. Pero ocurrió lo inevitable: al crecer su parecido con el Rey de Francia fue cada vez mayor. Decidieron entonces enviar a Eustache Dauger, que así se llamaba, a Inglaterra donde Enriqueta María, esposa de Carlos I y tía de su padre, le ofreció esta vez una esmerada educación. Al conocer su procedencia, Eustache quiso reclamar el trono y se puso manos a la obra. Con ya 31 años y con la ayuda de un francés llamado Roux de Marsily, que trabajaba secretamente contra Francia, se propuso ocupar el lugar que por ley le correspondía. Pero la suerte no estaba de su parte. Roux de Marsily fue detenido y torturado hasta la muerte, y antes de expirar confesó la verdad sobre su acompañante. Fue entonces cuando fue apresado y comen-
zó su peregrinación, siempre con su máscara de negro terciopelo, por distintas cárceles hasta terminar en la Bastilla. Aunque tampoco esta versión puede demostrarse con documentos históricos, es una de las que más aceptadas sobre quién era el misterioso hombre de la máscara de quién años después se escribieran novelas y se llevara al cine la vida de un misterio más de los que pueblan este mundo.
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SUEÑOS PROFÉTICOS EN LA HISTORIA A Napoleón en la víspera de la batalla de Waterloo se le apareció en sueños, por dos veces, un gato negro, símbolo de traición según muchos autores.
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asos como los siguientes nos invitan a la reflexión, pues son sólo la pequeña muestra de una larga lista de sueños que han podido ser reconocidos como auténticos. Por tanto, podemos concluir que el fenómeno es real. Existe una suerte de sueños que trascienden nuestros conceptos de espacio y tiempo –captando recuerdos del pasado y del futuro o información de acontecimientos simultáneos al propio sueño- y a los que la ciencia no ha sabido encontrar una explicación. Prueba de ello son todas las experiencias de precognición que a través del tiempo los hombres han ido recogiendo fielmente hasta nuestros días. -José (penúltimo hijo de Jacob y Raquel) interpretó un sueño del Faraón de Egipto que permitiría a este último abastecer sus graneros salvando a su gente de una muerte segura. El Faraón soñó con siete vacas gordas seguidas inmediatamente de siete vacas flacas que las devoraron. Luego se le aparecieron siete espigas llenas de granos, pero también se le aparecieron siete espigas resecas y vacías que se comieron a las primeras. La interpretación resultó de la siguiente manera: “Vendrán siete años de abundancia seguidos por siete de carestía”.
-Nabucodonosor, rey de Babilonia, se encontraba en Jerusalén cuando vio en sueños una estatua que tenía la cabeza de oro, el pecho y los brazos de plata, los muslos de cobre, las piernas de hierro, y los pies, en parte de hierro y en parte de barro. Una piedra que cayó y dio contra la estatua hizo que ésta se fragmentara por la escasa solidez de su base de sustentación. Evidentemente, la estatua representaba el conjunto de las naciones, y su desmenuzamiento,
el anuncio de su posterior destrucción. -Hécuba, consorte de Príamo, soñó dar a luz una antorcha encendida que abrasaba la ciudad de Troya. -Calpurnia (año de Roma 709) esposa de Julio César, vio en sueños a su marido acribillado de heridas y expirando en sus brazos.
-A Napoleón en la víspera de la batalla de Waterloo se le apareció en sueños, por dos veces, un gato negro (símbolo de traición según muchos autores) que corría de un ejército a otro. -María Antonieta, la reina de Francia, mientras se encontraba encarcelada, vio en sueños un sol rojo elevarse por encima de una columna que no tardó en desplomarse. Casi todos estos ejemplos constituyen casos de sueños proféticos encubiertos por simbolismos, la precognición onírica no tiene por qué ser tan intrigante y a veces se expresa de manera mucho más textual. Como si de una película se tratara: -Célebre es la precognición de Monseñor Joseph de Lany, obispo de los Bal-
canes. La noche del 27 de junio de 1914 soñó que leía su correspondencia y entre las cartas hallaba una que llevaba los sellos imperiales. La carta describía en primera persona el asesinato en Sarajevo del archiduque Francisco Fernando de Habsburgo. El archiduque sería asesinado al día siguiente. -Otro sueño muy conocido es el del Presidente de los Estados Unidos Abraham Lincoln (1809-1865), quién soñó con su propia muerte. El presidente soñó que entraba en el cuarto oriental de la Casa Blanca y veía un cadáver amortajado y custodiado por varios soldados. El mandatario le preguntó a un soldado quién había muerto, a lo cual el soldado respondió que el presidente había sido
asesinado. Lincoln moría el 14 de abril de 1865 de un disparo en la nuca. -El escritor Mark Twain vio a su hermano Henry dentro de un ataúd metálico. Sobre su pecho había un ramo de flores blancas con una rosa roja en el centro. El barco de vapor en el que navegaba Henry por el Mississippi se incendió y sufrió quemaduras que le provocaron la muerte días después. El ataúd y el ramo de rosas que vio Twain eran idénticos a los del sueño. Y para finalizar estos ejemplos de entre los innumerables que existen, no quiero omitir un sueño citado en multitud de ocasiones en artículos y escritos que hacen referencia al tema que tratamos, tanto por su especial significación como por su posterior repercusión en medios de comunicación. Se trata del sueño de una niña galesa de nueve años llamada Eryl Maijones. -Eryl soñó la noche del 19 de octubre de 1966 que salía de su casa hacia la escuela y al llegar a ella descubría que el edificio había desaparecido bajo “una cosa negra” que lo había enterrado. La madre no concedió importancia al relato de su hija y Eryl, como de costumbre, marchó a la escuela. Más tarde una gran avalancha de carbón cayó sobre el pueblo minero de Aberfán sepultando a casi 150 personas, entre ellas se encontraba la niña. Al parecer, según comprobaron estudios posteriores, alrededor de 60 personas habrían tenido la misma precognición onírica sobre la tragedia.
¿ESTUVO JESÚS EN AMÉRICA?
Al volver la luz, fue cuando vino este hombre blanco de alto talle, cuyo porte y persona despertaron gran respeto y veneración.
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edro Cieza de León fue conquistador, pero sobre todo, cronista e historiador del Perú. En su obra “Los Incas”, narra una leyenda recogida de los aborígenes, donde cuenta como el Dios Blanco que un día les visitó apareció entre ellos. Este Dios tenia diferentes nombres, como Viracocha, Con-Tiki oIlla-Tiki. Tiki significa al mismo tiempo creador y la luz. Este dios apareció después de un hecho muy particular, luego de un tiempo de obscuridad en todo el país durante el cual el pueblo había orado para que saliera nuevamente el Sol, mientras estaban las tinieblas.
Pedro Cieza de León narra: “Padecieron mucho, y elevaron muchas oraciones y votos a los que tenían por dioses, implorándoles la luz que se había apagado. Al volver la luz, fue cuando vino este hombre blanco de alto talle, cuyo porte y persona despertaron gran respeto y veneración. Y cuando vieron su poder, lo llamaron el Hacedor de Todas las Cosas, su Originador, El Padre del Sol”. Es también sorprendente la similitud que tiene esta leyenda con los relatos del Libro de Mormón; los días de obscuridad al tiempo de la crucifixión de Cristo y su posterior visita al pueblo
para organizar Su Iglesia y ministrar con amor a las personas. Pero no solo los incas hablaron de un hombre blanco que vivió entre ellos como una especie de dios, también la leyenda maya y tolteca de Quetzalcoatl o Kukulcan hablan de un caso parecido incluso fray Servando Teresa de Mier diría en 1795 que ese personaje era el apóstol Santiago quien había venido a América para evangelizarla y alejarla de los sacrificios humanos y al partir prometió regresar, por eso los aztecas recibieron a Cortés y sus hombre como verdaderos dioses. Bastante curioso ¿no es verdad?