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“Estamos frente a una nueva Minería”
Fernanda Fraga, Gerente de Relaciones Comunitarias de Pastos Grandes S.A., aborda el trabajo que se realiza en materia comunitaria. Además, plantea objetivos como VP de la Cámara de la Minería de Salta.
Qué podrías informar sobre el desarrollo de Pastos Grandes?
La empresa Proyecto Pastos Grandes S.A. fue adquirida en Enero de este año por Lithium Americas; esta nueva etapa nos representa muchos desafíos, sobre todo para mi área en particular. Venimos de una era exitosa con Millennial Lithium en cuanto a las relaciones comunitarias: logramos llevar un proyecto que, en la exploración, tuvo una aceptación tan grande que fue el primer proyecto en Salta en poder sortear exito - samente lo que es el paso de la Consulta Libre, Previa e Informada, que tiene que ver con el convenio n°169 de la OIT (Organización Internacional del Trabajo).
Eso para nosotros fue un hito que se dio como resultado de las buenas relaciones, y muy cercanas, que tuvimos con los habitantes del pueblo Santa Rosa de los Pastos Grandes. Nosotros vivíamos allí, y eso nos dio la posibilidad de sentir lo que siente el poblador; y eso nos llevó a trabajar con la cacique de la comunidad, la Sra. Dionisia Rodríguez, para fortalecer esas áreas principalmente en dos aspectos. Por una parte una obra hídrica, que fue el primer pozo de agua potable que tuvo la comunidad en sus 1500 años de historia. Esta obra fue un trabajo que realizamos en forma conjunta con Hidrotec al principio, y luego se fueron sumando otros actores como Bórax Argentina, proveedores locales y la Intendencia de San Antonio de los Cobres. Esto es destacable porque también tiene que ver con el gran potencial que tiene la minería, ya que este sector industrial está donde nadie está. Para el Estado es realmente muy difícil llegar a satisfacer las necesidades de estas comunidades tan alejadas y dispersas, pero nosotros estamos allí.
La segunda obra fue la creación del Centro de Integración y Negocios de Santa Rosa de los Pastos Grandes, que se inauguró en Agosto de 2021, que, implicó una inversión de casi US$1 millón, y cuenta con tres áreas:
Oficinas y depósito de la empresa.
Actividades deportivas para la población con una cancha multimodal, convirtiéndose luego también en un lugar de encuentro donde se llevan a cabo sus fiestas y reuniones.
La tercer área tuvo la idea de ser un mercado artesanal donde la gente pudiera comercializar sus productos pero también tiene la posibilidad de generar nuevas oportunidades para la comunidad. Recientemente generamos allí una sala de informática, construida en conjunto con varias empresas como Bórax, Hanaq, SIC Comunicaciones y Arcade Informática. El objetivo es ofrecer a la comunidad la posibilidad de que puedan terminar sus estudios secundarios, universitarios y terciarios a distancia.
Esto es de un valor tan importante que, cuando nos compró Lithium Américas Corp., ellos mismos decidieron que todo esto se debe mantener, así como las buenas relaciones con la comunidad y, tomando esto como base, partir hacia nuevos desafíos. Para los próximos 18 meses la empresa tiene como objetivo profundizar todo el estudio sobre el proyecto Santa Rosa de los Pastos Grandes para pasar de un estudio de base ambiental y pensar en un uso territorial, en qué áreas podemos trabajar y en cuales no, trabajando siempre con la comunidad porque ellos son quienes usan el territorio. Eso nos da ventajas y nos permite tener un proyecto sustentable para los próximos cuarenta años.
¿Qué esperan lograr de aquí a cuarenta años?
En este momento buscamos producir carbonato de litio, pero también se van a analizar otras alternativas de producto, porque la empresa tiene diferentes proyectos. Somos 100% Lithium Américas Corp., un proyecto completamente salteño y de la empresa, pero también poseen un porcentaje y son operadores del proyecto Minera Exar en Jujuy. Y también cuentan con un porcentaje de la empresa Arena Minerals, la cual opera también en Pastos Grandes y en la provincia de Catamarca.
Cada uno de estos engranajes son piezas de un rompecabezas que forman el valor que tiene y que va a seguir generando una empresa como la nuestra, en la que trabajamos para un futuro duradero pensando en las próximas generaciones. El objetivo para Salta, de aquí a cuarenta años, es poder tener una masa laboral distinta, una comunidad y una provincia distinta. Creo firmemente en eso, en que estamos cambiando la historia y la realidad de Salta desde las comunidades hacia la capital. Estamos viviendo un momento histórico donde la minería pasó de ser la potencialidad de la que se hablaba siempre a ser una realidad: hoy Lindero en encuentra en producción, siendo uno de los principales exportadores de la provincia, y vamos por más inclusión, puestos de trabajo y mano de obra calificada. Estamos trabajando para cambiar la provincia.
Desde la gestión de la Secretaría de Minería, tenemos un plan estratégico de desarrollo minero en el que se incluyen cuáles van a ser los puestos de trabajo en canas no eran escuchadas, por lo tanto desde el sector hubo importantes replanteos. Hoy en día tenemos dos ejes que son cada vez más centrales: el cuidado del medio ambiente y las relaciones comunitarias. los próximos años y los requerimientos académicos. Salta tiene una gran ventaja, y es que piensa a la minería de forma estratégica; esta industria no nos llegó, sino que se planificó.
Incluso otra resolución importante de la Secretaría de Minería es la de los Monitoreos Sociales Participativos y Obligatorios que se realizan anualmente y que implican que se capacite y se enseñe a la comunidad cómo monitorear, cuáles son los parámetros importantes y porqué hacerlo. Luego se hace el monitoreo junto con veedores de la comunidad y se les presenta los resultados obtenidos. Por ende, cada comunidad sabe cómo están los parámetros de su tierra, sus suelos, el agua y el aire, y pueden chequear anualmente si hubo cambios o no. Eso nos muestra que las comunidades ya no son más un “afuera” de la empresa, ellos son los primeros guardianes del medio ambiente y de las relaciones con las empresas mineras.
Estamos en una época en donde la comunicación nos atravesó a todos, y eso nos incluye también a la minería. Redes sociales, servicios de mensajería, ya no hay nada secreto. Somos una industria de inclusión.
En este momento ejerces como VP de la Cámara de la Minería de Salta, ¿qué reflexión te merece este nombramiento?
¿Cuánta importancia se le da a las voces que ahora encuentran espacios donde pueden desarrollarse y darse a conocer?
Una de las exigencias que tenemos las empresas en Salta es participar de las Mesas de Trabajo Social, que están instauradas por resolución de la Secretaría de Minería provincial, donde se establece la obligatoriedad de formar parte de esa mesa de trabajo, donde nos encontramos todas las empresas que tenemos influencia en determinada área y las comunidades, sean aborígenes o criollas. Nos ponemos a la par y decidimos trabajar juntos para mejorar la calidad de vida de la gente. Las mesas corresponden a San Antonio de los Cobres, Olacapato, Tolar Grande, Salar de Pocitos y Santa Rosa de los Pastos Grandes.
Estamos frente a una nueva minería. Antes, las comunidades y localidades cer-
Para mí fue una sorpresa y un honor la elección, de momento que hay un legado de gente como Facundo Huidobro o Rodrigo Frías que estoy recibiendo. ¿Qué creo que tengo para aportar en este rol? La posibilidad de comunicar, de no perder la mirada sobre lo importante: el potencial que tiene la actividad minera para la gente en el día a día. Comunidades que antes no tenían posibilidades de crecimiento hoy la tienen, donde llevamos cobertura social, de salud. Estamos generando otro futuro, y tener la posibilidad de contarlo para mí es una bendición. Yo creo que por allí va mi lugar en la Cámara, poder hablar de la actividad, pero también ser la voz de la gente sencilla de las comunidades. Y ser también la voz de las mujeres, que cada vez venimos en mayor crecimiento dentro de una actividad históricamente masculinizada, favorecer más a la inclusión en una actividad que quiero sea representativa para la sociedad. Poder hablar de otras realidades nos enriquece como sociedad, y la Cámara de la Minería de Salta posee un rol importante en eso, porque tiene historias que contar y un legado que está construyendo para dejar una Salta diferente y más inclusiva.