Una vez necesité a una madre para que me enseñara dos cosas muy sencillas: el estímulo y la paciencia. Porque sólo ellas tienen estos elementos perfectos y los utilizan para enseñar… Anónimo
Una vez necesité a una madre para que me enseñara dos cosas muy sencillas: el estímulo y la paciencia. Porque sólo ellas tienen estos elementos perfectos y los utilizan para enseñar… Anónimo