En el lugar del encuentro by Paola Ferreira

En el lugar del encuentro TRABAJO DE GRADO

PAOLA FERREIRA BORDA MAESTRA EN ARTES PLÁSTICAS Y VISUALES

A mi abuela, mi madre, mi compa単ero, mis maestros y a mi bicicleta

En el lugar del encuentro PAOLA CONSTANZA FERREIRA BORDA 323715

En el lugar del encuentro

TRABAJO DE GRADO presentado para optar por el TITULO DE

MAESTRA EN ARTES PLÁSTICAS Y VISUALES

OPCIÓN DE GRADO DE PREGRADO CON LA

MAESTRÍA EN EDUCACIÓN ARTÍSTICA

Dirigido por: Miguel Antonio Huertas Sanchez

UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA SEDE BOGOTÁ FACULTAD DE ARTES ESCUELA DE ARTES PLÁSTICAS Y VISUALES Bogotá, 2013

Ser Cráneo. Lugar, contacto, pensamiento, escultura. George Didi Huberman. Traducción Gustavo Zalamea. Edición Colección sin condición. 2008

En el lugar del encuentro es un documento que recupera algunas imágenes producidas en el ejercicio de estudiar Artes Plásticas, profundizando en la primera parte en mi propia experiencia como estudiante, como cuerpo que transita y experimenta detenerse en el medio de la instalación, como practica espacial, que en el encuentro de las relaciones de los cuerpos con el espacio, adquiere un nuevo movimiento de los cuerpos presentes, por esa razón la búsqueda de procesos de activación del contexto de la clase. En una segunda parte se presentan dos textos adaptados, elaborados en el lugar de estudiante de Educación Artística, en reflexión del cuerpo del estudiante, su relación con el espacio, el tiempo y las condiciones históricas. En el contexto de la maestría aquellas intuiciones concluidas de mi propia experiencia como creadora, se decantan en unos documentos de orden visual que en la educación de las artes, son recurso para investigaciones y para reconocer la importancia de las metodologías propias, surgidas en los procesos de la enseñanza de las artes. Este lugar lo activa quien lea este documento. PALABRAS CLAVES Arte Instalación Educación Cuerpo Espacio

In the meeting place is a document that retrieves some images produced in the exercise of studying Visual Arts, deepening into the first part of my own experience as a student, like body that moves and undergoes stop in the middle of the installation, such as spatial practice, that the meeting of the relations of bodies in space, acquires a new movement of bodies present, for that reason finding activation processes of the class context. In the second part presents two adapted texts, developed in the place of Art education student, in reflection of the student’s body, its relation with the space, time and historical conditions. In the master context those intuitions concluded from my own experience as a creative, decanted into a visual order documents in Arts education, as a resource for researches and to recognize the importance of their own methodologies, emerged in the processes of teaching Arts.

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En el lugar del encuentro In the meeting place Este lugar lo activa quien lea este documento. This place is activated by the person who reads this document.

Arte Instalaci贸n Educaci贸n Cuerpo Espacio Art Installation Education Body Space

Miguel Antonio Huertas Sanchez Director de Trabajo de Grado

Paola Constanza Ferreira Borda 1987 Autora

CONTENIDO Primera Parte 0 CEGUERA Apertura

EL EJERCICIO EN LA ESCUELA DE ARTES • •

¿De la instalación al salón de clase o del salón de clase a la instalación? La distancia

Segunda Parte Cambio de Lugar. En simulacro

1 MANUAL DEL EJERCICIO Documento final y escrito de la entrega de Taller

2 LINEA DE TIEMPO. EN PESQUISA Documento final del seminario Pedagogía y Didáctica de las Artes

3 BITÁCORA Sistema Bitácora y Blog

Bibliografía

Primera Parte

0 CEGUERA condición para reaccionar

CONDICIÓN Circunstancia, estado, situación, posición, carácter, naturaleza

“Es, en primer lugar, un lugar para perderse- un “lugar que no lleva a ninguna parte”. Es un lugar donde debemos progresar a tientas, táctilmente, porque somos incapaces de prever sus múltiples ramificaciones” Ser Cráneo. Lugar, contacto, pensamiento, escultura. George Didi Huberman. Traducción Gustavo Zalamea. Edición Colección sin condición. 2008

Condición de cegar, tapar, cerrar, obstruir, atascar, deslumbrar, encandilar, según algunos sinónimos; La ceguera es una condición que nos puede ser común. Esta ceguera no siempre es literal o física, pero cuando es así verdadera, el surgimiento de otro cuerpo aparece, inmediatamente la piel sobre todo la de las manos, inicia una activación más consciente de lo que toca y por donde está. Esa ceguera es una apertura a los otros sentidos, sobre todo al tacto, generando en la acción de tocar más confianza en el recorrido. Sin la vía de ver, el cuerpo nuevo, temeroso o confiado, recorre o está a la espera de algo, del impacto, del contacto, o del acontecimiento. En ceguera el cuerpo más sensibilizado con su entorno, requiere comprenderlo y analizarlo, para que la vitalidad de sus movimientos se vaya normalizando. La ceguera como condición progresiva va siendo transformada según el conocimiento y la exploración que alguien tenga, sobre donde está o hacia dónde quiere ir. La ceguera entonces parece ser una apertura necesaria para conocer y reconocer, donde se está y que sucede alrededor, en muchos aspectos. La ceguera no siempre es una condición consciente, en muchas ocasiones esa condición es permanente y no es relacionada solamente con la visión, pues frente a ella también cada uno de nosotros está en la interpretación del mundo de maneras diferentes.

En el lugar del encuentro me presenté en muchas ocasiones en ceguera; desde esta condición expresé sin verlos, a veces sin ser vista, dándome la oportunidad de experimentar como propuesta plástica la acción de recorrer utilizando la estrategia de guiarme tocando y reconociendo el espacio y la situación. .

Apertura condición para reaccionar

Nada es tan inaprensible como el presente. Es lo único que poseemos, lo más inmediatamente dado y, sin embargo, se escapa como un puñado de arena en la mano. Cuando digo presente, ni siquiera ha terminado de articular la palabra y ya es pasado; sin embargo, eventos sucedidos hace mucho tiempo siguen actuando sobre mí en la actualidad. En presente el lugar está del cargado encuentrodemehistoria; presenté en muchas ocasiones en El querámoslo o no, cada gesceguera; desde esta condición expresé sin verlos, a veces sin to, cada palabra, cada actitud están profundamente imbuidos de En el lugar del encuentro presentéo en en pasado. Las raíces serán másmecercanas másmuchas lejanas,ocasiones pero ningún ceguera; desde esta condición expresé sin verlos, a veces sin acto se da por azar, ningún gesto se sitúa en un lugar abstracto. ser vista, dándome la oportunidad de experimentar como propuesta plástica la acción de recorrer utilizando la estrategia El largo instante de la percepción. Los años setenta y el crepúsculo del arte en Colombia. Miguel Antonio de guiarme y reconociendo el Facultad espacio y Bogotá. la situación. Huertas tocando Sánchez. Universidad Nacional de Colombia. de Artes.

En el lugar del encuentro estoy en la escritura de este texto, con mi memoria y con la intensión de trazar algunos caminos, mencionar lugares ahora conocidos, y finalmente las conclusiones de lo explorado, sin dejar de mencionar que el transito personal, condición en la que me encuentro actualmente (sino siempre), ha sido un periodo extenso, por la transición experimentada desde el ejercicio que asumí dentro de la escuela de artes. Tal transición, condición temporal que anuncia algo que viene y algo que se va, que deja de ser, que pasa en el tiempo, como el tránsito de estudiante de artes a estudiante de educación artística. Cambio de lugar, de posición, de intereses, de ideas y pensamientos, de compañeros, maestros, experiencias, rutinas, responsabilidades, hábitos, ambientes; Cambio de lugar, de perspectiva, de estar en el lugar del encuentro, en mi educación, en las clases mismas, en mi cotidianidad. El lugar del encuentro muchas veces fue una clase, o la entrega de un “ejercicio, o la presentación de un tema, siempre en la legitimidad del encuentro académico. El encuentro que aquí menciono es el de una serie de personas reunidas, divergentes, que se da en oscuridad, con pocas luces, a veces solo una, la del maestro o la de quien tenía la palabra, o de quien se publica en un acto de exposición dentro del cual, cada uno de nosotros advierte su propia presencia. EN EL LUGAR DEL ENCUENTRO también advierto sordera, para escucharnos mutuamente Tal vez la primera de las condiciones para una percepción clara es el silencio. Erróneamente se ha considerado el silencio como vacío o como nada y, en consecuencia, como indeseable. Habría que decir en principio que el silencio como tal no existe. La vida es movimiento y siempre que hay vibración hay sonido. En adelante llamaremos silencio a la irrupción de otras sonoridades. Arte y Conciencia, el ámbito pedagógico. Relatoría de Miguel Huertas. Programa de Formación Permanente de Docentes en Formación Artística Integral. 1998

Desde este mi lugar, considero importante estar en atención del encuentro. Plásticamente (y en mi cotidianidad) recurro a la posibilidad de IRRUMPIR, en un principios con materias u objetos, los flujos presentes en el momento, contando con sentir el grado de silencio, de resonancia, de eco, sensibilizándome con algunas cavidades que me anunciaban que alguien más actuó ahí, y que su vestigio es presente hasta el encuentro.

EL EJERCICIO EN LA ESCUELA DE ARTES El artista no puede ser visto como alguien que manipula cosas dentro de esquemas predeterminados, sino como alguien que entra en relación con cosas y, en calidad de esa relación, construye sentido. Cada elemento formal debe ser asumido entonces como portador de un universo simbólico que es asimilado en el hacer mismo. Arte y Conciencia, el ámbito pedagógico. Relatoría de Miguel Huertas. Programa de Formación Permanente de Docentes en Formación Artística Integral. 1998

Desde mi ejercicio en la escuela de artes, quisiera manifestar algunas de las cuestiones, que atravesaron el sentido de lo que considero el hacer de una artista plástica, de un país y una situación específica; desde mi condición, en un ejercicio de preguntarme aún hoy, por algo que me afecta físicamente y que su reacción se me presenta evidente; tal vez desde el lugar de estudiante de artes, estas tensiones eran en un momento en soledad con la arquitectura, y pretendían irrumpir la extraña conversación que se naturalizaba con el pasar del tiempo, con quienes vivenciaba el momento de activar algunos focos de luz, acercarme o alejarme para decir algo, con timidez o con confianza pero siempre en reacción a lo que sentía, ya no con la arquitectura sino con las personas, con mis compañeros y maestros quienes fueron espectadores, emisores, receptores y quienes me revelaron en la novedad de la situación, que todos somos actores, así que después de que algunas de estas exposiciones privadas tuvieran malinterpretaciones y otros asuntos en el camino, decidí que no solo era una estrategia para experimentar posibilidades de la plástica, sino que era aquello que le daba sentido al publicarme en naturalidad.

GERMEN Intervención en el espacio arquitectónico Ejercicio académico asignatura Cuerpo Espacio Hospital Universitario. II- 2010

El ejercicio que asumí también intentaba experimentar aquello que me cuestionaba en relación a lo que producía como arte, como propuesta plástica, como obra, como tarea, como ejercicio. Siempre me pregunté por el sentido de hacer algo que terminaría en la basura o en algún lugar de mi casa acumulando polvo, (Aunque es necesario mencionar que tan solo al enfrentar y reaccionar a la experiencia de la creación con los medios de la plástica, con las materias tradicionales para la creación por ejemplo de una imagen, surge una experiencia de otro orden para el creador artista); esta preocupación también repercutía en mi economía, me detuve y pensé en el sentido de invertir dinero en un insumo que se transformará en propuesta de arte, tuve una clara sospecha de que la materialidad del mundo es desbordante y que tan solo ese insumo presente en el lugar del encuentro, también tendría una fuerza insospechada para ser transformada y para transformar el espacio y la situación.

¿De la instalación al salón de clase o del salón de clase a la instalación?

El tener como regla de mi propio juego, que el material y las materias que utilizaba o volvía útiles, fueran encontrados en el lugar donde se iba a presentar la publicación de la experiencia, también adquirió sentido. Desde un dispositivo, un plan o guion, lindero de una acción que se desarrollaba más con la pulsión, que con una dramaturgia predispuesta, cuando la obstrucción de tal naturaleza se presentaba en un salón de clase, mi estrategia era la de habitar cuando el salón estaba en soledad. En este sentido siempre movilizando cosas, materias, acciones que finalmente movilizaban las personas. (Algunas veces físicamente)

Movilización de los objetos en un salónde clase Ejercicio del Taller de la Especialización en Educación Artística Edificio Bellas Artes Univesidad Nacional de Colombia

II- 2011

“Toda obra plástica es susceptible de derivar hacia la instalación: eso sucede cuando no se limita a situarse en un lugar sino que lo problematiza, recuperando su visibilidad o alterándolo de tal manera que revela fuerzas espaciales insospechadas“

“...Creación de un espacio particular que invitaba al espectador a una mirada conjunta de los objetos y el lugar en que ellos estaban ubicados y a construir un sentido a partir de esa experiencia...”

El largo instante de la percepción. Los años setenta y el crepúsculo del arte en Colombia. Miguel Antonio

La instalación en el arte antioqueño 1975-2010. Alba Cecilia Gutiérrez, Armando Montoya, Luz Análida

Huertas Sánchez. Universidad Nacional de Colombia. Facultad de Artes. Bogotá.

Aguirre, Sol Astrid Giraldo. Editorial Universidad de Antioquia. Investigación Artes.

En algunas ocasiones experimente diálogos en lugares externos al salón de clase, como el hospital universitario, y el museo de arte de la Universidad Nacional de Colombia con el mismo experimento y diferentes tiempos en las materias, como acto de repetición no por falta de imaginación o deseo de crear novedad, sino por la oportunidad de corroborar como cada experiencia material es única, desde la gestación, el montaje, hasta la experiencia que me llevo ver, que mis señalamientos no eran para algunos otros perceptibles.

Frente a mi ejercicio de estudiante, de vital importancia revela el observar cómo nos comportamos frente al espacio construido, es decir a la arquitectura y a los objetos; y como ellos desde su fisicidad nos imponen fuerzas que cambian nuestro comportamiento. La instalación, estrategia para resolver una idea, producto de una experiencia con el espacio y la situación, recurrentemente se convirtió en la posibilidad de comunicarme plásticamente con mis compañeros y maestros, quienes algunas veces comenzaban una especie de conversación fugaz de palabras imborrables.

“Por definición instalar es poner o disponer transitoria o definitivamente, un espacio dado, una serie de objetos para cumplir un fin utilitario. Pero más allá de esta acepción, para el arte contemporáneo la acción de instalar involucra una función comunicativa que trasciende hacia la construcción de un sentido, el cual no se dona aunque sus claves de interpretación se advierten en los materiales y en la disposición, elegidos por el creador. No se trata de instalar, se trata de instaurar un sentido, abriendo un diálogo con el espectador” Diego León Arango G. Profesor Universidad de Antioquia. En el marco de la exposición Albercas en el 2005. CATALOGO GENERAL DE EXPOSICIONMES EN LA GALERIA SANTAFE Y OTROS ESPACIOS 2005

Precisamente mediar mi presencia con la de otros es oportunidad, experimento plástico, búsqueda misma, que se realiza en un salón de clase. En ese espacio es precisamente desde donde inicio el dialogo; habitando, de maneras tan naturales como dentro del lugar de mi casa, poniendo y disponiendo los objetos y materias en lugares y condiciones diferentes, barriendo, limpiando, movilizando. (El montaje. Instalación, palabra confusa, ciegamente utilizada por aquel que no reconoce lo que le rodea y lo que objetivamente encuentra en un espacio arquitectónico. Un estudiante (¿de artes?) en el ejercicio del montaje de su propuesta obra bidimensional, tridimensional o espacial, requiere de un tiempo de análisis y una mayor extensión de tiempo, en la movilización de los encuentros presentes, no es solo poner, dejar ahí, porque la acción del artista no llega hasta terminar esta o aquella materialidad, sin embargo lo que está presente en el lugar de la instalación es lo que tendrá relación física, que indudablemente propondrá unas condiciones para quien llegue a estar ahí). Entonces el dialogo que se me presentaba mientras estudiaba artes, era el que probablemente se podía movilizar en ese simulado y legitimado contexto, del salón de clase) El verdadero reto es lo inmediato, lo vulgar, lo que la costumbre ha corroído hasta el punto de hacerle perder su sentido, es volver a ver lo que hemos olvidado ver para aproximarnos a la continuidad de la conciencia. El largo instante de la percepción. Los años setenta y el crepúsculo del arte en Colombia. Miguel Antonio Huertas Sánchez. Universidad Nacional de Colombia. Facultad de Artes. Bogotá.

La distancia Para reconocer algunas distancias necesité ubicarme y realizar un recorrido, abstracto, subjetivo y físico. Esas distancias extensiones de espacio, me han permitido situarme en el lugar del encuentro, donde he experimentado una especie de rito de habitar, donde primero he levantado la basura que muchas veces se confunde con nuestras experiencias plásticas dentro de un salón de clase. Estos salones ya eran distancias suficientes para sentir como mi pequeño cuerpo estaba dentro de ese espacio, vacío, a veces atiborrado de cosas. Otra complejidad para el ejercicio de movilizar las fisicidades, es revelar algo nuevo para nosotros. Tal vez los salones de la escuela eran tan grandes que siempre esperé verlos blancos y vacíos para con más facilidad apropiarme de ellos, sin que estos irrumpieran en la lectura de nuestros intentos de obra. Los suelos de madera cálidos, irregulares, viejos, con orificios que revelaban el espacio vacío que hay bajo la superficie que pisábamos todos los días, las paredes con la textura de las muchas capas de pintura que soportan, las ventanas luminosas, algunas tapadas simulando un lugar oscuro, las puertas nunca blancas, los caballetes viejos y nuevos con los residuos de acciones de cientos de pintores y dibujantes, paneles blancos soportes también con vestigios de acciones y posiciones, mesas, bancas, y algunos otros objetos externos que con tiempo de permanencia en el edificio de artes, se sumaban al inventario que tenía a mi disposición como estudiante. Entonces cuando notaba cada particularidad por ejemplo de las paredes de un salón, intentaba descifrar las acciones alrededor de lo sucedido, teniendo en mi mente las experiencias plásticas de los estudiantes que culminan la carrera con la presentación de un trabajo de grado que indudablemente depende del salón de clase donde decide exponerlo, entonces estos salones soportes de experiencias tenían las cicatrices suficientes para evidenciar el paso de cientos de estudiantes por esta arquitectura, que pocas veces tenía el mérito; ésta sin más está ahí para nosotros como el salón de clase.

Intervención en el espacio arquitectónico Ejercicio académico asignatura Taller de profundización Espacio Tiempo I- 2012

Acercarme. Ser estudiante La estrategia era acercarme a ver estos huecos en la pared, alejarme y pensar porque ellos llamaban tanto mi atención, porque estos lugares cavados por puntillas o hundidos por el peso de muchos cuerpos, eran en realidad aquello que me era poderoso, pues no solo me tenía en su presente sino que me llevaba a pensar en acciones de otros cuerpos que habían pasado exactamente por ahí, y que con el tiempo uno tras otro había ido acumulando, monumentalizando esos inconscientes gestos. Esas pequeñas huellas de imperfección sobre pintura o madera, eran lugares más que para intervenir, para detenerme a pensar en que, lo que me fascinaba, era como los cuerpos ahí ausentes, para mi cotidianidad tenían una fortísima presencia. Otras presencias admito también son muy fuertes para mí., la presencia de quienes son los espectadores de mi propia imagen, entre quienes tenía temporalmente un poder, una autoridad. Podría llenar ese espacio y tiempo con comentarios, cosas o llenarlo de acciones, entonces, radicalmente comprendí que la plástica más transformadora para mi ser creador, era el acercarme a una pared o a otra persona, para tener contacto. Ahora procuro siempre tener en mente, “No puedes tocar, sin ser tocado” Luego de reconocer que la adrenalina, la creatividad y la sensibilidad se agudizaban cuando me presentaba yo, como materia, como imagen, arriesgue el experimento al estar en el vacío, a que ya nada mediara mi presencia con la de otros; la voz, los sonidos que podría producir mi cuerpo, mi movilidad, mi energía, mi propio personaje, persona, era materia compleja para plásticamente desarrollar algo. Algo que me pasara en ese momento y que quisiera decir, comunicar; siempre me remití a dialogar con el espacio, pues él y yo en soledad, lográbamos adentrar a revelarnos fuerzas, que yo señalaba no solo con la materia sino con mi acción, con mi cuerpo que es la materia más sincera y natural para transformar plásticamente mi cotidianidad; por muchos días esa cotidianidad fue el asistir a los edificios, donde permanecía en la condición de estudiante.

Alejarme. Ser monitora “El maestro se diferenciaba de un monitor solamente en el conocimiento del método” Revista Educación y Pedagogía. Facultad de Educación. Volumen XIII. No. 29-30 Enero-Septiembre 2001. ticulo Entre Lancaster y Pestallozzi: los manuales para la formación de maestros en Colombia 1822-1868.

Asumir, jugar, representar a ese personaje figura en la educación, monitor, niños quienes en el sistema educativo del siglo pasado, eran quienes transmitían el conocimiento del maestro (encargado de más de mil niños bajo su instrucción) a los otros niños. Esta figura en nuestra educación actual no es necesaria, ya que en las clases de artes, por ejemplo, un maestro no tiene la perspectiva de instruir, sino de conversar de manera personalizada alrededor de un proceso específico que lleve el estudiante para luego en otra fase socializarlo, con la posibilidad de escuchar lo que todos tengan que decir frente a ese proceso. En simulacro de esa figura, tuve la gran oportunidad de alejarme de mi propio lugar como estudiante, y nuevamente acercarme a los procesos que se dan en algunas clases, desde otra perspectiva y en otro ejercicio; con una cámara fotográfica en mis manos, tenía la legitimidad de estar ahí presente en el lugar se sus encuentros. En esa condición a pesar de estar dentro del salón, me encontraba afuera del acuerdo legítimo de los estudiantes y su profesor. En nuevo lugar estaba lejos y a la vez estaba bastante cerca; la oportunidad de adentrarme en los rituales ocultos de los estudiantes artistas y la (el) maestra (maestro) artista, quienes habitaban y ritualizaban de manera poco consiente los espacios de clase. Los procesos de pensamiento que poco a poco se materializaban y dejaban huellas. Procesos de instalación e intentos de apropiación del espacio, tenían para mí una señal, para reflexionar en torno a la creación de la materialidad obra. “La propuesta plástica requiere estar dispuesta en el espacio de exposición, en la conciencia del tiempo y la sensibilidad del encuentro con el nuevo espacio presente para el montaje ”

Registros del momento de montaje, asignaturas del Área de Espacio I 2013

Desde el marco de una cámara fotográfica quise ver también como se disponían los cuerpos que creaban frente a ese específico espacio del salón. El interés de registrar como se disponen los cuerpos de los estudiantes y como estos cuerpos disponen los espacios, presentaba indicios de mis sospechas. Repitiendo el curso de esos encuentros, encontraba fascinante la naturalidad con la que evolucionaban los procesos de pensamiento, también las discusiones o los temas abordados desde la subjetividad de cada estudiante, en un proceso en el tiempo que también revelaba ante mis ojos la fuerza y la magia del proceso creador. Desde fuera también intuir la estructura de los procesos que en cada curso se daba de maneras diferentes, dependiendo de tanto los factores físicos y emocionales, me resulta fascinante reconocer como una estructura en la metodología de los ejercicios siempre eran dislocados en las propuestas presentadas por los estudiantes, generando plásticamente definiciones nuevas, múltiples y singulares sobre conceptos como Cuerpo o Espacio. La figura de monitora me enfrentaba también a un ejercicio de autoridad, pues mi presencia era reconocida por la maestra quien me permitía adentrarme en una práctica diferente de la de ser estudiante, ya en ese lugar mi voz estaba en apertura, en libertad de ese ejercicio, entonces mis comentarios tenían aún más la responsabilidad en las palabras, por tanto merecían una elaboración en las ideas y también la posibilidad de comentar mi primera pulsión; el ejercicio de hablar estaba más dirigido a potenciar, como lo hace una maestra, el panorama de creación de quien se aventura en un proceso creativo. Mi propia presencia como lo sospeche al final de la carrera, era la materia mediadora que potenciaba todo, lo que estudiando artes había aprendido; a ser.

Segunda Parte

Cambio de lugar

En simulacro En el presente ejercicio en la maestría, estoy en el comienzo, por ahora logro dimensionar la extensión del camino y eso me advierte paciencia, en mis acciones, mis palabras y mi escucha. También el principio de este camino (El de la educación artística) me advierte pasión, encendida en el conocimiento de los mundos de las artes, que van más allá de un circuito, o de un salón de clase. El simulacro de estudiar la carrera de artes, me lleva en principio a situarme en el lugar de una artista plástica, que ha experimentado y conoce las potencias de la materialidad del mundo, movilizada por quien dice ser artista, y por todos en realidad, de una manera inconsciente en los dos ámbitos.

Cambie de lugar para alejarme y acercarme, o simplemente porque el panorama de estudiar artes me posibilito cambiar de posición, de intereses, de ideas y pensamientos, de compañeros, maestros, experiencias, rutinas, responsabilidades, hábitos, ambientes; Cambiar de lugar, de perspectiva, de estar en el lugar del encuentro, en mi educación, en las clases mismas, en mi cotidianidad.

El simulacro también parece, es realidad. No podría negar el incorporar momentos en los que mi cuerpo se hace más presente en la mente; espero el cambio en el ejercicio de estar en simulacro de estudiar la educación artística y la formación de maestros sin experimentar una práctica docente, sistemática, procesual y cambiante. En el lugar del encuentro en condición de profesora hasta hace pocos días de escribir este documento, ha comenzado. Como profesora, de manera sincera y con humildad, poder ver de frente mi propio ejercicio reitera la intensión de este documento, como lo mencione al principio, trace algunos caminos, mencione lugares ahora conocidos, y finalmente presento las conclusiones de lo explorado, estas conclusiones se abren a un ejercicio metodológico, inscrito en el contexto de la maestría.

1 MANUAL DEL EJERCICIO

Documento final DISEÑO DE EJERCICIO Taller de Artes y Pedagogía I Maestría en Educación Artística 2013

Dimensionamiento del espacio del aula desde el cuerpo del estudiante

Escultura del británico Antony Gormley

Registro de la practica del ejercicio

Propósito Movilizar el mobiliario para la transformación física del espacio del aula. “Del espacio no se puede hablar en abstracto. Es eso que está ahí, me rodea y me delimita. Llamó espacio a lo que no es mi cuerpo y sin embargo lo define, puesto que le fija un borde y una forma. Invadir el espacio no es solamente hacer un discurso plástico, es en primer lugar proyectarse al ámbito arquitectónico y en segundo, remitirse al valor simbólico del límite, del umbral, que en ultimas tiene que ver con lo sagrado”

Experimentar la percepción del cuerpo propio. Reconocer el espacio arquitectónico percibido en un recorrido táctil en condición de ceguera. Acercarse desde el dibujo a la representación geométrica de la arquitectura y al dimensionamiento desde un patrón de medida del cuerpo y realizar este cálculo desde la memoria corporal.

El largo instante de la percepción. Los años setenta y el crepúsculo del arte en Colombia. Miguel Antonio Huertas Sánchez. Universidad Nacional de Colombia. Facultad de Artes. Bogotá.

Comprobar el dimensionamiento en el espacio inicial.

Instrucciones 1.

Acondicionamiento del espacio.

Es necesario disponer el espacio para la actividad. Debido a la seguida circunstancia de anular la visión, el mobiliario debe estar dispuesto para generar el recorrido por el perímetro del lugar arquitectónico, es decir retirado de las paredes. La movilización del mobiliario transforma la apariencia del espacio y su función. La ceguera será transversal a la segunda parte del ejercicio 2.

Percepción del cuerpo propio. (Materiales: reproductor auto parlante. Tablet, celular)

Esta apertura al ejercicio de una manera más pasiva y consiente. El audio de la primera lección del método Feldrenkrais, apoya esta parte del ejercicio. El audio producido especialmente para a través de su escucha “mejore la calidad de nuestras posturas y acciones y explorar la posibilidad de desarrollo de nuestro sistema nervioso”; posibilita una predisposición del cuerpo para la siguiente parte del ejercicio. 3.

Recorrido táctil (venda para los ojos)

Ubicado en una de las esquinas del espacio arquitectónico, se da inicio al recorrido por las paredes que lo contienen y que son guía, la velocidad de realización es lo más lenta posible.

Cambio de espacio arquitectónico para la cuarta parte del ejercicio. Esta representación se realiza de memoria. 4.

Representación geométrica. (lápiz y papel)

El dibujo del perímetro del espacio arquitectónico desde una vista de proyección imaginaria del plano aéreo, la vista “a vuelo de pájaro” o en arquitectura vista de planta. 5. Elección de una parte del cuerpo para con su extensión, aproximarse numéricamente a la longitud de dos de los laterales del espacio. La elección de una parte del cuerpo, para convertirse en la unidad de medida para realizar una aproximación numérica en relación con el espacio arquitectónico. Regreso al espacio arquitectónico inicial para la sexta parte del ejercicio. 6.

Comprobación del dibujo contorno y extensión. (lápiz y papel)

En el espacio inicial, se corrobora el dimensionamiento realizado en el dibujo y en la aproximación numérica. 7.

Revisión de los referentes ( libro o imágenes digitales Tablet, celular)

Para concluir este ejercicio de comparación, se revisa que sucedió con las dimensiones representadas en los dos dibujos y posteriormente se revisan espacios arquitectónicos donde se da paso a la comparación entre el espacio recorrido en el ejercicio y un cálculo en relación a estos espacios que se encuentran a distancia.

Contexto del cual emerge el diseño (Motivaciones y antecedentes)

Desde mi experticia en asuntos de arte, la instalación, práctica que más he experimentado a conciencia, considero al dimensionamiento un primer acercamiento a esta práctica espacial. Esta generalmente se da lugar en un espacio arquitectónico. En un contexto académico, sucede en el mismo lugar del aula de clase. Este dimensionamiento se experimenta desde el cuerpo, e inicia en el reconocimiento de esta permanente relación entre el cuerpo del espectador y la propuesta que se realice en el espacio. En este ejercicio desde el espacio y desde el cuerpo, cualquier persona proyectando una instalación, requiere de una movilización del punto de vista que permanentemente tiene del espacio arquitectónico a intervenir e imagina y representa el espacio en el lenguaje de la arquitectura, en vista de planta. La posibilidad de identificar movimientos, volúmenes, flujos, son fenómenos que serán más fácilmente representables y comprensibles si el punto de vista permite una generalidad, para así comprender la envolvencia de tal espacio arquitectónico en relación con nuestros cuerpos. Los antecedentes y motivaciones para el ejercicio planteado son producto de mi propia experimentación, reflexionada con la intención de comprender cuál era la metodología en la que yo misma me introducía cuando realizaba practicas espaciales: señalamientos, irrupciones, activaciones y en algunos momentos de más elaboración, instalaciones.

Reflexiones Íntimo vs publico El grado de intimidad del ejercicio, es importante para la concentración y la atmósfera, permitiendo a la persona o personas, experimentar la posibilidad del recorrido táctil en silencio y en conciencia. El ejercicio requiere además de unas voces guías. En principio reconozco no manejo un tono para inducir a otros a la actividad del cuerpo, reproduzco la voz de otro, preguntándome aun hoy la pertinencia de esa otra voz apropiada, con el argumento de haber experimentado el efecto de esa voz en mi propio cuerpo. Además, las transiciones entre el audio, el recorrido, el momento del dibujar, del volver entrar, a dibujar, a comparar, fueron momentos de absoluta observación por mi parte; un grado de intimidad se daba para mi aunque por parte de mi estudiante pienso yo, la mirada no solo de mi cuerpo sino de una cámara fotográfica, dirigían la atención a ella y sobre su proceso. La inexperiencia hizo presente en este proceso íntimo y delicado, propuesto a mi estudiante, un choque de distracción, pues en ese momento toda su confianza estaba puesta en mí, y al momento de exponerla, a salir del salón, a compartir con otro el espacio, a dibujar mientras era observada, fotografiada, tal vez fue un contraste con mi intención, desde ahí intento descifrar mi decepción seguida al momento en que mi estudiante publica aquello que aconteció entre nosotras.

Referencias Antony Gormley y la relación Cuerpo - Arquitectura

Al tomar su propio cuerpo como punto de partida, el escultor brotnaico Antony Gormley explora los modos en los que nos orientamos espacialmente, como reaccionamos cuando nos desorientamos, como nos relacionamos con la arquitectura y con el entorno construido. Sus instalaciones sencillas y envolventes, exploran la manera en que nos orientamos los seres humanos y nuestras reacciones frente al espacio construido (Arquitectura) A través de la contemplación, la obra de Gormley se desarrolla una proyección espacial y existencial. El cuerpo pierde la materialidad y se fragmenta, como el mismo artista propone: “La realidad no puede liberarse de la geometría en la que se encuentra, no se permite la adopción de gestos y actitudes, por no hablar de las expresiones faciales, como el aspecto visible de un ser interior invisible. La experiencia de cómo se siente estar en el mundo, dentro de los límites del cuerpo. No hay mundo interior como un alma, por lo tanto, sino como un interior en el sentido literal: Un espacio cerrado por la piel.” Esculturas del británico Antony Gormley

Antony Gormley entiende el uso innovador del cuerpo, como un recipiente campo para la memoria y la transformación. La relación entre el yo y el otro, su investigación sobre la condición humana, se transforma en instalaciones a pequeña o a gran escala.

El método Feldenkrais. Experimentando el frió de permanecer en reposo, y en cercanía con el suelo.; en el lugar donde tantas veces he estado, ese mismo lugar oscuro y tenebroso que se anexó algunas vez al edificio, a la intemperie de las corrientes del aire y del polvo. Estuve ahí, sintiendo mi propio cuerpo, porque E R nos regalo en su clase, la voz de una argentina quien con sencillas instrucciones (”Sientate ¿Notaste como estas apoyando el lado derecho de tu espalda?”) y con el espacio en silencio entre las frases, podíamos sentir transformada la percepción del cuerpo de cada uno, al terminar sus palabras. También nos quemo la voz en un CD.

Escultura del británico Antony Gormley

movimiento, reposo, conciencia, tiempo, voz, revelación, visión perisferica, experiencia, azar, objeto

Para información más precisa del método: www.metodofeldrenkair.com

Ensayo final del Seminario Pedagogía y Didáctica de las Artes .Entre Lancaster y Pestallozzi: los manuales para la formación de maestros en Colombia, 1822-1868 EN LA REVISTA EDUCACIÓN Y PEDAGOGÍA. Facultad de Educación. Vol XIII. No. 29-30 (enero-septiembre)2001

EN PESQUISA DEL TEXTO:

2 LINEA DE TIEMPO Ejercicio de pesquisa

INTRODUCCIÓN El presente ejercicio de pesquisa inicia reparando en los terrenos navegados sobre el texto inicial y en las decisiones al mapearlos

ESTE DOCUMENTO ES CONSTRUIDO POR:

PAOLA CONSTANZA FERREIRA BORDA (0)

EN PESQUISA DEL TEXTO:

Entre Lancaster y Pestallozzi: los manuales para la formación de maestros en Colombia, 1822-1868

EN LA REVISTA EDUCACIÓN Y PEDAGOGÍA. Facultad de Educación. Vol XIII. No. 29-30 (enero-septiembre)2001

BOGOTÁ, JUNIO DE 2013

La pesquisa ha sido un proceso de clasificación de fechas, nombres, documentos, constituyendo categorías para la búsqueda especifica de cada uno de estos, para así comprender el complejo entramado surgido en la relación de estos aspectos. La relación temporal con la cual presento el articulo de la REVISTA EDUCACIÓN Y PEDAGOGÍA. Entre Lancaster y Pestallozzi: los manuales para la formación de maestros en Colombia, 1822-1868; Es intencionalmente recompuesta, planteando una metodología para poner en relación temporal diferentes acontecimientos constituyentes del devenir de los manuales para la formación de maestros en Colombia. Personajes y documentos permiten comparar y sobreponer, para comprender desde el contexto colombiano, en comparación con el contexto Europeo, los puntos en común y en comparación, de intenciones personales, ideológicas e institucionales de quienes son nombrados por las palabras de OLGA LUCÍA ZULUAGA GARCES, en el texto inicial del ejercicio de pesquisa. Los manuales para la formación de maestros en Colombia son documentos desde los que parte la autora a nombrar a quienes han construido las reformas de la Educación en Colombia en revisión de la institución formadora de maestros, la Escuela Normal.

SUGERENCIAS PARA LA LECTURA

En la lectura de la linea de tiempo tener presente PALABRAS CLAVES

• lLínea de Tiempo en cuenta regresiva, 2013-1700 • Colombia (Sur América)- Francia (Europa) • PERSONAJES-DOCUMENTOS • Escuela Normal - Escuela Primaria • REVISTA EDUCACIÓN Y PEDAGOGÍA. • Entre Lancaster y Pestallozzi: • Manuales para la formación de maestros en Colombia, 1822-1868 • SABER PEDAGÓGICO DEL MAESTRO • MONITORA

3 BITﾃ，ORA Sistema Bitﾃ｡cora - Blog

Sistema de Bitﾃ｡cora Taller de Artes y Pedagogﾃｭa I

Sistema Bitácora - Blog La bitácora es mi instrumento de registro y reflexión de los procesos del taller de Artes y Pedagogía, abordada en un proceso de organizacion de los insumos recogidos en una libreta general, que posteriormente señala a traves de unos papeles de colores la informacion fragmentada. En otras 7 lbretas nombradas y referenciadas por un color especifico, indice dentro de l.a libreta general, se re elaboran los fragmentos paginas de la libreta general, para profundizar en aspectos concretos que surgieron de las primeras sesiones de la maestria. Categorizando la informacion segun conceptos y panoramas propios de disciplinas y personalidades de las artes. Cada uno de los 7 lugares o libretas, me permiten adentrarme a diseñar ejercicios desde la experticia por ejemplo, pero con la apertura a reflexionar cual era el lugar de la percepción, la conciencia sonora, mi propia mirada, el tacto el contacto y mi delideza dentro de unas redes, dibujos, mapas que se gestan en un habitar ahi, en el lugar de la reflexion escrita y manuscrita. Tambien la fotografia digital, que registra de otra naturaleza, necesito la apertura de otro lugar donde por tercera vez se filtrara la informacion, este lugar por sus propiedades se configuró en un blog en internet, plataforma actualizable que me permitia acceder a otro espacio de reflexion, esta vex de naturalez pública, que posibilita el compartir y el transformar la informacion en algo mas propio, y abierto a una posibilidad de creación plástica desde la fotografia, el texto y el video. Libreta general: 1 libreta de 26 x 18 cm 7 libretas de 14 x 10.5 cm tallerdepaolaferreira.jimdo.com

Registro del sistema en la libreta general

Registro del sistema en el blog

BIBLIOGRAFIA Libros El largo instante de la percepción. Los años setenta y el crepúsculo del arte en Colombia. Miguel Antonio Huertas Sánchez. Universidad Nacional de Colombia. Facultad de Artes. Bogotá. Ser Cráneo. Lugar, contacto, pensamiento, escultura. George Didi Huberman. Traducción Gustavo Zalamea. Edición Colección sin condición. 2008 La instalación en el arte antioqueño 1975-2010. Alba Cecilia Gutiérrez, Armando Montoya, Luz Análida Aguirre, Sol Astrid Giraldo. Editorial Universidad de Antioquia. Investigación Artes.

Catálogos Diego León Arango G. Profesor Universidad de Antioquia. En el marco de la exposición Albercas en el 2005. CATALOGO GENERAL DE EXPOSICION MES EN LA GALERIA SANTAFE Y OTROS ESPACIOS 2005

Revistas Arte y Conciencia, el ámbito pedagógico. Relatoría de Miguel Huertas. Programa de Formación Permanente de Docentes en Formación Artística Integral. 1998 Revista Educación y Pedagogía. Facultad de Educación. Volumen XIII. No. 29-30 Enero-Septiembre 2001. Articulo Entre Lancaster y Pestallozzi: los manuales para la formación de maestros en Colombia 1822-1868.

PAOLA FERREIRA BORDA paolaferreiraborda@gmail.com paolaespacio.blogspot.com

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