Estimado maestro, Esperamos que el nuevo currículo esté siendo una bendición para su ministerio y sus alumnos. En la primera parte de este nuevo período, desde la lección 1 hasta la 13, nos sumergiremos a fondo en la historia de los más famosos reyes de Israel. Usted podrá ver que cada rey hizo su elección: unos decidieron obedecer a Dios y fueron fieles, otros tuvieron algunos tropiezos en algún momento de la vida, y otros vivieron de manera terriblemente pecaminosa, sin embargo, al final de su vida se volvieron a Dios en busca de misericordia. En la segunda parte, desde la lección 14 hasta la 26, estudiaremos acerca de los profetas, hombres llamados por Dios para advertir al pueblo de sus pecados y conducirlos por el camino recto. Sus alumnos aprenderán que Dios habla a sus hijos, los corrige cuando sea necesario, pero siempre con mucho amor, indicándoles el camino de la salvación. Aproveche estos meses que estará enseñando referente a estos temas, para ser un profeta, un portavoz de la Palabra de Dios a sus alumnos. Y no olvide estar en contacto con nosotros por medio del correo electrónico info@editorialpatmos.com, será un placer oír sus sugerencias, críticas y sus elogios. Dios le bendiga, Los editores.
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¿DIOS O UN REY? Lección
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Lectura bíblica
1 Samuel 8.1-10.25
Meditación A lo largo de las lecciones le estaremos trayendo una palabra de edificación y aliento, estimado maestro, pues sabemos que el ministerio infantil exige dedicación total, imposibilitándole muchas veces escuchar la enseñanza de la Palabra de Dios. Durante mucho tiempo Israel estuvo satisfecho en tener a Dios como su gobernante, pero cuando comenzó a mirar alrededor y ver que los otros pueblos tenían reyes, el pueblo también quiso tener un rey. No se molestaron en saber si aquellos pueblos estaban contentos con sus reyes, si tener un rey era realmente bueno, simplemente querían cambiar. Incluso después de que Samuel les explicó como trataban los reyes a las demás personas, los israelitas siguieron insistiendo en que Dios les diera un rey de carne y hueso. Debemos tener mucho cuidado con nuestros deseos. En primer lugar, ¿qué motivación hay detrás de ellos? ¿Surgen sólo por lo que vemos que otra persona tiene? En segundo lugar, ¿ha pensado ya en los pro y los contra? Cuando deseamos fervientemente algo o a alguien, es difícil ver el lado negativo, los defectos, las consecuencias, etc. Por lo tanto, deténgase a pensar en aquello que desea y en las elecciones que debe hacer y, finalmente, ore buscando la voluntad de Dios, pues ella es buena, perfecta y agradable.
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Objetivo Mi objetivo hoy es...
Para planificar una buena clase debe tener en mente cuáles son sus metas. ¿Qué desea alcanzar con su clase? Tomando en cuenta esto, establezca sus propios objetivos. Aquí le daremos tan sólo una sugerencia, pues es usted quien mejor conoce a su grupo y sabe exactamente las necesidades de sus alumnos. • Explicar la importancia de hacer elecciones de acuerdo con la Palabra de Dios.
Planificación de la clase Para que tenga éxito en la realización de su clase, no deje de planificar. La planificación le permitirá organizar las actividades y evitar el desperdicio de tiempo. Sin embargo, no olvide que toda planificación debe ser flexible y podrá sufrir alteraciones de acuerdo con los interese de su grupo. • La planificación es fundamental para cualquier actividad pedagógica. Toda planificación para el estudio bíblico debe ser sometida
a oración, lectura y meditación bíblica sobre el tema principal de la lección, a fin de que la clase sea espiritualmente productiva. • Investigue sobre los personajes de la lección, la época en la que sucedieron los hechos, la historia y geografía de la región, para que así pueda fundamentar mejor su enseñanza. Muchas de las actividades programadas para esta lección deberán ocurrir semanalmente, a partir del estudio del tema de la lección. • Baúl de actividades. En él debe constar todo el material de apoyo para la producción de los trabajos, como papel, cartulina, goma de pegar, tijeras, papel periódico viejo, revistas viejas, lápices con borrador, crayones de cera, pinceles, pintura guache, granos de diverso tipo, pajillas de refresco, fósforos, material de reciclaje, y las figuras de la lección. • Cánticos. Seleccione semanalmente cánticos animados con gestos, y otros que sean más tranquilos. La música puede ser un gran aliado del maestro en el proceso de enseñanza/aprendizaje. • Elabore una caja con forma de corona o palacio para recibir las ofrendas durante las lecciones 1-13.
• Aprovechando el tema de las lecciones 1-13, puede hacer lo siguiente. Cada domingo un alumno deberá ser elegido al azar para ser el rey o la reina de la semana. Como rey, sus deberes serán: llegar temprano para ayudar al maestro a recibir a los alumnos, enseñar el versículo clave al grupo, etc. Pero también deberá gozar de ciertos privilegios, como por ejemplo: sentarse en una silla especial, con una capa, corona y cetro real. Recuerde sortear al final de la clase al rey o reina de la semana siguiente. El primer domingo, podrá
ser el primer alumno en llegar al salón. Recuerde que deberá ayudar en la tarea de la memorización del versículo.
Control de asistencia Para las lecciones 1-13, deberá montar una cartelera con la silueta del palacio que se encuentra en la revista del alumno, llamado “Los reyes de Israel”. El primer domingo, deberá entregar una hoja en blanco a cada alumno con su nombre en ella. Cada clase, los alumnos colorearán en su hoja la parte del palacio que contenga la imagen del rey estudiando dicho domingo. Para su mejor comprensión, de una mirada a la revista del alumno.
Control de asistencia
Arme el rompecabezas de acuerdo con la miniatura que sigue.
Introducción de la clase Todas las clases son alegres cuando estudiamos la Biblia. Haga esto una realidad recibiendo a sus alumnos con mucha alegría y buena disposición, dando especial atención a los visitantes y cumpleañeros de la semana. 1. Cada semana escoja una manera diferente para recibir a los alumnos alegremente y felicitarlos por haber decidido venir al estudio bíblico. 2. En la primera lección, anime a los alumnos a adquirir sus revistas para que puedan participar
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en la clase y aprender sobre los reyes de Israel. Muéstreles la revista e invite a uno de los alumnos a pasar al frente y leer la carta contenida en la revista del alumno. 3. Luego, invíteles a dar inicio a las actividades con un breve momento de oración. Pregunte si alguien desea hacer una petición. Alabe al Señor por una clase más y déle gracias por la presencia de cada niño, pidiéndole que la lección pueda atender a las necesidades del aprendizaje de cada uno de ellos. Pida también una bendición especial para los cumpleañeros de la semana que pasó y por los visitantes. 4. Dé oportunidad a los alumnos para que compartan algún hecho ocurrido durante la semana. 5. Haga la actividad del control de asistencia. 6. Prosiga con la alabanza y las ofrendas.
Ejercitando la memoria Versículo-clave: “Te he dado a elegir entre la vida y la muerte, entre la bendición y la maldición. Elige, pues, la vida, para que vivan tú y tus descendientes” (Deuteronomio 30:19). Esta sección fue planificada con la intención de que sus alumnos memoricen los versículos clave, los cuales siempre estarán relacionados con el tema principal de la lección. El versículo clave será una síntesis de lo que pretendemos enseñar por medio de la lección. Así, esta sección contribuirá para que el alumno guarde el mensaje principal de la clase. Puede realizar la actividad propuesta aquí antes de la sección “Intercambiando ideas”. Al final de la narración de la historia bíblica puede repetir el versículo clave, así como al final de la clase, dependiendo del tiempo disponible y la necesidad de sus alumnos. Para la clase de hoy, escriba cada palabra del versículo en una tira de papel. Luego dóblelas y coloque cada una dentro de un globo de aire. Infle los globos y amárrelos a las sillas de los alumnos. Al momento de enseñar el versículo clave, pídales que tomen los globos que están atados a sus sillas y que los revienten,
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porque dentro hay un tesoro. Tenga paciencia en este momento, maestro. A los niños les encanta reventar globos de aire, así que espere cierto alboroto. Sin embargo, una vez que todos los globos hayan sido reventados, todo volverá a la normalidad. Cuando cada niño tenga su papel, deberán todos juntos armar el versículo, citando la referencia bíblica. Lea el versículo con los alumnos. Léalo con las niñas primero, luego con los niños. Después, léalo con todo el grupo.
Intercambiando ideas Esta sección deberá ser realizada antes de la historia bíblica, pues tiene como finalidad introducirla y ampliar la participación de los alumnos en la clase. Es importante que escuche la opinión de los niños sin censurarlos. Durante la realización de las actividades propuestas aquí, lo verdadero o lo falso no existen por cuanto después de esta actividad usted examinará el asunto en la Biblia al iniciar la historia del día. Comente que Israel tenía que hacer elecciones y tomar decisiones importantes. Discuta con los alumnos las siguientes preguntas: ¿Qué es una elección o decisión? ¿Qué tipo de elecciones acostumbran a hacer? ¿Qué debemos hacer para tomar buenas elecciones? ¿Qué debemos hacer cuando tenemos que tomar una decisión importante?
Vocabulario Esta sección tiene por objetivo ampliar el vocabulario de sus alumnos. Por ello, en cada lección mencionaremos algunos términos que probablemente no sean del dominio de todos. Preséntelos a medida que vayan apareciendo en la historia. Anote la explicación en el pizarrón, para que los niños puedan escribirla en la revista. Acrescentar: agregar una cosa a otra, para hacerla de mayor tamaño, número o fuerza. Añadir.
Decisión: Tomar una actitud, dar una solución u orden. Orientación: Dirección; regla; indicación de un camino.
Creciendo en el conocimiento Llegamos al momento principal de nuestra clase. Es hora de introducir la historia bíblica. ¿Quién recuerda lo que estudiamos en las lecciones pasadas? ¿Cómo se llamaba el último juez de Israel? (Escuche las respuestas y de inicio a la historia). Samuel gobernó a Israel por mucho tiempo. Cuando envejeció, puso a sus hijos como gobernadores en lugar suyo. Pero ellos no siguieron el ejemplo de su padre (figura 1.1). Entonces, los líderes de Israel se reunieron y fueron a conversar con Samuel en Ramá. Ellos querían un rey que los gobernara, como lo tenían todos los demás pueblos. A Samuel no le gustó para nada la petición de ellos, pero fue a orar a Dios (figura 1.2). El Señor le respondió: (leamos todos en 1 Samuel 8:7-9). Después de escuchar las instrucciones divinas, Samuel fue a los líderes para explicarles lo que el Señor le había dicho. (Abra nuevamente la Biblia en 1 Samuel 8:11-18 y haga la lectura con los niños. Permita que cada uno lea un versículo). (Figura 1.3). Sin embargo, no se impresionaron con las advertencias divinas y dijeron a Samuel: -No importa. Queremos un rey. Queremos ser como las otras naciones, tener un rey que nos gobierne, nos dirija en la guerra y luche en nuestras batallas. (Figura 1.2). Después de escucharlos, Samuel fue a contar a Dios la decisión del pueblo. Sin embargo, el Señor le dijo: “Haz como desean. Dales un rey”. Pasado algún tiempo, Dios dijo a Samuel que al día siguiente, a la misma hora, Él enviaría a un hombre de la tribu de Benjamín para ser ungido rey. Por medio de él, Dios liberaría al pueblo del dominio de los filisteos. Mientras tanto, en otro lugar, un hombre rico e importante llamado Quis, había perdido algunas de sus burras y mandado a su
hijo Saúl, un joven muy alto y buen mozo, a buscarlas. Saúl y los empleados de su padre buscaron por todas partes, pero no encontraron nada. Entonces, uno de sus empleados hizo el siguiente comentario. (Lea con los alumnos 1 Samuel 9:6). Decididos a encontrar las burras, se informaron mejor y se dirigieron al lugar en donde se encontraba el hombre que podía ayudarlos. ¿Quién sabe como se llamaba ese hombre? Así es, Samuel. Cuando Samuel vio a Saúl, el Señor le confirmó: “Este es el hombre del que te hablé. Él gobernará a mi pueblo”. Entonces, Samuel dijo a Saúl que no se preocupara por las burras, porque ya las habían encontrado, y le invitó a quedarse con él aquel día. (Figura 1.4). Al día siguiente se levantaron de madrugada y Samuel derramó aceite en la cabeza de Saúl, lo bendijo y le dijo: -Dios, el Señor, te ha ungido como jefe de su pueblo, el pueblo de Israel. Luego, Samuel convocó al pueblo para una reunión de adoración a Dios y les pidió que se dividieran por tribus y familias. Según indicaba la ley, Samuel inició el sorteo. Primero salió electa la tribu de Benjamín, después la familia de Matri, y al final, Saúl. Sin embargo, Saúl estaba escondido, por miedo a la responsabilidad de liderar al pueblo. (Figura 1.5). Cuando lo encontraron, lo llevaron ante Samuel, quien dijo: -¡Aquí está el hombre que Dios ha escogido! Y todo el pueblo gritó: -¡Viva el rey!
Actividades 1. Sopa de letras: Saúl, Ramá, Israel, rey, Samuel, familia, Benjamín, tribu, Dios. 2. a) Porque un rey haría que sus hijos fueran soldados; les exigiría que trabajaran para él; se quedaría con las mejores cosas que tuvieran, la mejor parte de sus campos, de su ganado y sus cosechas; el pueblo lloraría de tristeza por causa del rey que tuvieran, etc. b) Respuesta personal. 3. Respuesta libre.
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Compartiendo las Buenas Nuevas
Esta sección ha sido incluida en la revista por la necesidad de sembrar en el corazón de los niños el amor por las misiones y el evangelismo, pues ellos serán los futuros líderes de nuestra iglesia. Cada domingo buscaremos presentar una actividad que cumpla con este propósito. Necesitamos incentivar a nuestros alumnos a hablar de Jesús. Muchos sienten vergüenza de dar testimonio de su fe, principalmente en la escuela. Afirme a los alumnos que el deseo de Dios es que cada uno de ellos sea un ganador de almas. Aproveche este semestre para realizar un gran trabajo de investigación sobre los países que aun poseen régimen monárquico y que necesitan ser evangelizado. A continuación nombramos algunos: Andorra, Arabia Saudita, Bélgica, Bután, Canadá, Dinamarca, España, Japón, Mónaco, Marruecos, Noruega, Nueva Zelanda, Reino Unido, Suecia, Vaticano. Escoja uno de estos, reúna información y elabore una cartelera que trate sobre éste con la ayuda de los alumnos y oren para que los habitantes de estos países puedan ser salvos.
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Despedida Como el propio título lo indica, en esta sección encontrará algunas orientaciones para la clausura de la clase. Obviamente, usted no estará obligado a seguirlas con rigor, pues son tan sólo sugerencias que deberá adaptar a su realidad. Sin embargo, lo importante es saber que toda la planificación aquí presentada ha sido cuidadosamente estudiada y pensada para que usted pueda alcanzar a todos los alumnos y cumplir los principales objetivos de la Escuela Bíblica: Formar el carácter cristiano y preparar discípulos para el servicio del Maestro. Al terminar la clase, reúna a los niños y pregúnteles que cosa interesante aprendieron en la lección estudiada. Después de escucharles, refuerce las opiniones según el objetivo de la lección. Repita el versículo clave y haga el sorteo del rey/reina de la semana. Anímelos a regresar a la próxima clase para estudiar algunos hechos curiosos en la vida del rey Saúl y despídalos cariñosamente, deseándoles una semana llena de bendiciones.