ALEGRES EN LA ESPERANZA www.obispado-si.org.ar
OBISPADO DE SAN ISIDRO
Año LV
Agosto 2015
Nº 534
"Memoria de San Juan María Vianney" 4 de Agosto Día del Párroco Mensaje de Mons. Oscar Ojea Quiero dirigirme a todos mis hermanos párrocos en este día, del santo Cura de Ars, patrono de todos los párrocos y diría también, de todos los sacerdotes; y también nosotros tenemos como patrono al beato Cura Brochero, patrono de los sacerdotes nuestros también, ahora que tenemos un cura propio, un cura gaucho, conocedor hondo de los problemas de nuestra gente del interior; ¡qué hermoso es esto! Quiero dirigirme a cada uno de ustedes, recordando la Lectura del Día del Cura de Ars, que escribía tan sencillamente, y en esa Lectura a todos nos gustan estas palabras: "El hombre tiene una hermosa tarea: orar y amar; si oran y aman, habrán hallado la felicidad en este mundo"; a mí me parece que aquí se concentra la vida del párroco: orar y amar; en su corazón orante, su parroquia, su comunidad, aquella porción del Pueblo de Dios que el Señor le ha confiado para acompañar, para pastorear, para estar cerquita de los enfermos, de los pobres, de los que más lo necesitan; para poder escuchar las necesidades de su Pueblo. El párroco que es verdaderamente sensible, que es accesible, que está a la mano, que no es difícil de encontrar, que puede ser fácilmente tenido en cuenta por su pueblo y amar, ese amor que nos hace felices, ese amor de padre, ese amor que ya va encontrando su verdadera fecundidad. El padre es fecundo, y nosotros como párrocos somos fecundos espiritualmente. Cuando trabajamos con nuestros hermanos laicos, cuando preparamos distintas actividades, cuando escuchamos las propuestas, debidas a su actividad; cuando acompañamos tantas situaciones pastorales en las cuales nosotros estamos como animadores, como aquellos que bendicen, como aquellos que empujan con su aliento, con su palabra, con su compañía. ¡Qué gran necesidad de sacerdote tiene el Pueblo de Dios! ¡Qué necesidad de aquel que preside la comunidad, del que anima! ¡Qué necesidad del Padre que acompaña, que aconseja, que está al tanto más o menos, de todo lo que va pasando en la comunidad! Y la comunidad se siente verdaderamente acompañada por los párrocos. Que el Señor los bendiga especialmente en este día; que bendiga especialmente a los que pueden estar más cansados, más agotados, a aquellos que pueden estar pasando por problemas, dificultades. Los encomendamos al santo Cura de Ars, al beato Cura Brochero también, en este día 4 de agosto y queremos unirnos a todas las comunidades, a todas las parroquias y pedirles que celebren al Párroco, que quieran a su Párroco, que lo sostengan, que lo acompañen, que lo hagan presente, que lo quieran de verdad. Las comunidades se construyen ocupando cada uno su lugar. Que podamos orar y amar, y desarrollando estas tareas encontrar nuestra verdadera felicidad. Hermanos, ¡Felicísimo Día del Párroco en este 4 de agosto! + Monseñor Oscar Ojea Obispo de San Isidro
Para ver el mensaje por video: https://www.youtube.com/watch?v=ScIBzQuIkL8
BOLETIN DIOCESANO -
1