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ABIERTO
GOLF de
EDICIÓN 171 AÑO 2021
NICOLÁS QUINTERO E ISABELLA GÓMEZ ENTRAN EN LOS LIBROS DE HISTORIA TOKIO 2020: MUÑOZ DEBUTÓ CON DIPLOMA OLÍMPICO ALFONSO BOHÓRQUEZ, EL PIONERO DE COLOMBIA EN EL OPEN, EN ENTREVISTA
¡TIENE ESTRELLA! CUARTO ABIERTO DE COLOMBIA PARA JESÚS AMAYA
E
Editorial
n los últimos meses, la Federación Colombiana de Golf viene adelantando una transformación digital, cuyo objetivo es poder acercarse mucho más a sus afiliados y entregarles herramientas que faciliten su interacción.
Transitando el camino de la modernización, la entidad ya tiene en funcionamiento la aplicación móvil ‘Fedegolf Total’ en la cual están integradas las consultas de hándicap, las noticias de su página oficial, el portafolio del Club Federados y ‘ScoreTee’, la ‘app’ que te acompaña en tu juego, entre otros. De allí que su logo sea un infinito. Además, en cuanto a la página web, se le dio un giro de 180 grados para facilitar la experiencia de nuestros usuarios. También se implementaron módulos de torneos, de clubes y el botón de pagos con el cual las inscripciones a los torneos son mucho más sencillas. En las redes sociales, por otro lado, se ha hecho un esfuerzo notable por darle mayor vida a las comunidades que se
han creado en ellas (Instagram, Facebook y Twitter) en torno a la Federación; información, datos, trivias, nuevos formatos audiovisuales, galerías fotográficas, y mucho más, se pueden encontrar allí. Por último, y como si fuera poco, la Comunidad Privada para todos los afiliados a la Fedegolf está cada vez más cerca de ponerse en marcha y con ella los lazos que nos unen podrán estrecharse aún más. Sin embargo, hemos de ser claros en que dicha transformación digital obedece a una necesidad que nos impone el tiempo en que vivimos. Los trámites, así como las consultas que debamos hacer, deben lograrse en muy poco tiempo y con la fiabilidad que garantiza el ente rector. Incansables esfuerzos, así como cuantiosos recursos, se han dedicado en esta reinvención que involucra a todos los estamentos de la entidad, y que invita a participar a todos los golfistas del país.
FEDERACIÓN COLOMBIANA DE GOLF, AFILIADA A LA
Carrera 7 # 72-64 Interior 26 • Bogotá - Colombia • PBX: (571) 310 7664 / Fax: (571) 235 5091
Presidente Camilo Sánchez Collins - Los Lagartos Vicepresidente Fabio Villamizar Zurek - CC Cali
JUNTA DIRECTIVA Secretario Vocales Santiago Tobón - Guaymaral Hernando Baquero - Lagos de Caujaral Javier Mauricio Díaz - Pueblo Viejo Santiago Ferrer - El Rodeo Tesorero Andrés Londoño - San Andrés Mateo Gaviria - Manizales
Juan Sebastián Pinzón - La Pradera Alfonso Pedro Trujillo - CC Cartagena Juan Fernando Varona - CC Ibagué Jorge Luis Vesga M. - CC Bucaramanga
DIRECTOR EJECUTIVO Carlos Guillermo Vila
ISSN 0123-7276
Consejo Editorial Camilo Sánchez Collins Carlos Guillermo Vila Edwin Díaz Palma
Editor Jefe Edwin Díaz Palma
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Departamento de Prensa Edwin Díaz Palma Casrlos Gama Berkys Vega @fedegolf
Directora de Mercadeo Ángela Camacho dirmercadeo@federacioncolombianadegolf.com
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Prohibida la reproducción total o parcial sin autorización escrita de la Fedegolf
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CARTA DEL PRESIDENTE
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Golf activado
a cruda pandemia de Covid-19 nos ha hecho más rigurosos. Seguimos el autocuidado, y luego nos dimos cuenta de que era igual de importante el cuidado del otro. Sobrevivimos para lograr algo más grande juntos, como una comunidad golfística unida que juega MAS GOLF. Activamos el golf en beneficio de todos nosotros los aficionados a este lindo deporte.
Diríamos, la sed de gloria aplazada, como la de Ricardo Celia, que tuvo que esperar año y medio más para debutar en su primer ‘major’, el Open. Quedó muy cerca el barranquillero de pasar el corte, pero jugó muy bien en Royal St. George’s, entrando en un grupo de apenas cinco colombianos que han jugado alguna vez el Abierto Británico. Grandes resultados los de la DJCG y todas sus actividades en torno al fomento y el desarrollo del golf infantil y junior, una gran cantidad de niños jugando y participando en las actividades lúdicas, de enseñanza y de competencia en los tres ‘toures’ de la División Junior. Instructores y escuelas en los clubes consolidándose en torno al programa Learn2Play de Henry Brunton, ampliamente difundido por la Federación. Histórica resultó la actuación veraniega de María José Marín en Estados Unidos, con un sonoro triunfo en el Optimist International, con récord incluido en el Red Tiger, uno de los campos del complejo del Doral. También ganó el Florida Junior Match Play y el evento que promociona Harold Varner III en la AJGA, además que cumplió un destacado estreno en el U.S. Girls’ Junior. ¡Felicitaciones, Mariajo! Valeria Ramírez, Valery Plata, Mariana Rodríguez, Mateo Payán, Daniel Medellín, Gabriela Aya, Emilio Vélez y Vanessa Ramírez también nos hicieron vibrar en esta tem-
porada de competencias en el extranjero, con un balance bastante positivo para nuestro golf colombiano. ¡Muy bien, niños y niñas! Peleando hasta el último hoyo, Juan Sebastián Muñoz nos ilusionó con traernos una medalla olímpica de Tokio 2020. Su pundonor fue recompensado con un diploma olímpico que hizo historia para Colombia en el olimpismo, la misma que ya tiene a ‘Mariajo’ Uribe como la única golfista de este país en asistir a dos Juegos Olímpicos. Y a la par de tan destacados desempeños colombianos en el exterior, la Federación también fue portadora de grandes noticias, como la creación de la necesaria y esperada División Aficionada Senior de Colombia, dedicada a los caballeros mayores de 50 años, y que se estrenará con el Campeonato Nacional Senior en septiembre. También hemos sido testigos de un hecho igualmente histórico, como lo fue el campeonato de Jesús Amaya en el Abierto de Colombia, su cuarta corona en el certamen golfístico por excelencia en nuestro país, que volvió a jugarse tras la emergencia del coronavirus, en el paradisiaco campo del Club Lagos de Caujaral. Gran evento, grandes anfitriones y gran título para nuestro querido “Estrellita”. Así pues, ratificamos nuestro empeño en seguir adelante más fuertes, más decididos, propiciando MÁS GOLF en nuestro país. Las duras adversidades han forjado carácter y decisión en los golfistas de Colombia. Gracias a todos los clubes y golfistas del país que ven en la Federación un aliado, un amigo y un generador de servicios. Camilo Sánchez Collins Presidente de la Federación Colombiana de Golf
NOTAS DEL EDITOR
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Los Juegos Olímpicos, único camino al Olimpo
ólo el tiempo lo podrá corroborar, pero Tokio 2020 quedará como el disparador de Estados Unidos en la historia del golf olímpico. Del desdén de hace cuatro años, los norteamericanos habrán de obsesionarse con dominar la disciplina también en la cita orbital.
Estados Unidos ganó los últimos Juegos Olímpicos por la mínima diferencia de una medalla de oro frente a China. En la ya intrincada “guerra fría” deportiva que mantienen con los asiáticos, los rusos y los británicos, ¿Quién se atreve a desestimar que los oros de Xander Schauffele y Nelly Korda no fueron los determinantes para los vecinos del norte?
el otro) comentaba: “El Dream Team del 92 me llevó a los televisores de países a kilómetros de Norteamérica, y ganar por tu país tiene sabor especial”. Cifras de la R&A indican que Estados Unidos tiene 16,752 campos de golf, casi el doble que toda Europa, que cuenta con 8,940. En ese país hay 2,014 habitantes por hoyo de golf, y 76% de sus campos son públicos. ¿Que pueden dominar el golf olímpico de aquí en adelante? No solo eso, deberían.
Nota al pie:
La USGA jugó un papel preponderante, pues de alguna manera se comprometió a acudir a los Olímpicos con cuatro de los mejores seis golfistas del planeta hoy por hoy. A Schauffele se le sumaron Collin Morikawa, Justin Thomas y Bryson DeChambeau, los últimos dos con comprobado “apego” patriótico, como lo hemos visto en la Ryder Cup.
En Tokio 2020 el golf integró el programa olímpico por cuarta vez (París 1900, San Luis 1904 y Río 2016). En las dos últimas ediciones la Federación Internacional de Golf (IGF) ancló la clasificación de los golfistas al Ranking Mundial de Profesionales (OWGR), estableciendo límites de cuatro, dos y un jugadores de determinados países, con miras a llevar a representantes de muchas nacionalidades, quizás depreciando la fortaleza del ‘field’.
Las renuncias de Dustin Johnson (número dos del mundo), Brooks Koepka o Jordan Spieth, insulsas. Michael Phelps, Michael Jordan o Muhammad Alí, héroes estadounidenses bañados de oro olímpico, le deben su gloria eterna a la máxima competencia deportiva de siempre.
Golfistas que enlazaban dos y hasta tres años sin competir (fuera de la pandemia de Covid-19) hallaron su lugar intacto en los Juegos Olímpicos. ¿Tiempo de revisar el sistema de clasificación? Es menester, urgente.
“Pude ganar el doble de los mundiales de natación que tengo, pero sin el oro olímpico no sería quien soy”, contaba Phelps. En una línea similar, Jordan (el medallista olímpico, no
Edwin Díaz Palma Editor Jefe edwin.diaz@federacioncolombianadegolf.com
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Contenido 8
LA HAZAÑA DE AMAYA, CONTADA EN CRÓNICA
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PERFIL: ‘ESTRELLA’ BRILLÓ EN EL ABIERTO DE COLOMBIA
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LO QUE OPINA ROGELIO GONZÁLEZ, EL MÁXIMO CAMPEÓN
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SEBASTIÁN Y MARIAJO, COLOMBIA EN TOKIO 2020
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ENTREVISTA: EL PRIMER COLOMBIANO EN LOS ‘MAJORS’
Amaya
UN GENERAL DE CUATRO SOLES Cuarta corona de ‘Estrella’ en el Abierto de Colombia, la segunda en el trazado de Caujaral, y la victoria número 108 de su palmarés. Quedó a una del récord absoluto del certamen cumbre de nuestro golf.
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a faena dominical de 67 golpes, cinco bajo par, fue el listón para la retoma del Abierto de Colombia por parte de Jesús Amaya. 16 años después, ‘Estrella’ reescribió su nombre en la tradicional Copa Joaquín y Tomás Samper Brush. Sólo el domingo, bajo el calor inclemente en el Club Lagos de Caujaral, y dominando la brisa, Amaya hizo la mitad de su ‘score’ ganador, de -10 para el campeonato, con 278 impactos totales (72-71-68-67). Llevó las dos primeras rondas a fuerza de pares, y el viernes recién puso los “números rojos” en -1. Los zarpazos de quien a la postre sería el campeón se dieron con tres ‘birdies’ en los hoyos 1, 6 y 8, y un sólo ‘bogey’ al 9, en la primera vuelta. En el remate siguió apuntándose números rojos con ‘birdies’ en el 12, 16 y 18, y ‘bogey’ en el 14. El duro “cabeza a cabeza” de Amaya fue con David Vanegas, segundo al final en -8 para el campeonato, con 280 golpes en el total y 70 en la jornada, dos bajo par. Un largo lapso de espera para Amaya, quien volvió a probar las mieles del triunfo en el Abierto de Colombia desde 2005, la tercera de su colección, en el Club Campestre Guaymaral de Bogotá. Antes había triunfado en el Club El Rodeo de Medellín en 1993 y en Caujaral en 2004. En una enorme colección de títulos, Amaya sumó su cuarta charretera en el Abierto de Colombia, a la edad de 52 años, todo un hito histórico en el golf colombiano y latinoamericano.
Como parte de la gestión de la Federación Colombiana de Golf con el PGA Tour Latinoamérica, Amaya liderará un grupo de cinco colombianos que obtuvieron su entrada a la final de la Dev Series, que otorgará condiciones para el circuito regional el próximo año.
Rogelio González
EL PULSO POR LA GLORIA ABSOLUTA • Por primera vez en 37 años el profesor Rogelio González siente el acecho de su récord de victorias en el Abierto de Colombia. El antioqueño, máximo campeón del certamen con cinco trofeos en su haber, celebró en 1967, 1968, 1969, 1976 y 1984. ¿Podrá empatarlo Amaya? • Tras la cuarta corona de Amaya en el Abierto de Colombia, ahora el argentino Raúl Posse queda solitario en la tercera colocación histórica con tres victorias, en 1946, 1950 y 1951. • En todos los tiempos del Abierto de Colombia ningún otro golfista había vuelto a ganar con 16 años de diferencia, como lo hizo Amaya en Barranquilla. La segunda mayor espera la vivió Rigoberto Velásquez, pues las dos únicas victorias del antioqueño en el campeonato se dieron con diferencia de 13 años, de 1986 a 1999. • De acuerdo a los registros históricos, Amaya alcanza la cifra nada despreciable de 108 victorias en el profesionalismo. Entre otros birretes, el antioqueño es el máximo campeón del Tour Profesional Colombiano (organizado por la Federación Colombiana de Golf de 2013 a 2020) con siete triunfos, empatado en la cima con José Manuel Garrido. También posee tres coronas en el Campeonato Nacional de Profesionales, en 1993, 1999 y 2006.
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LA TERCERA DE CAUJARAL Lagos de Caujaral sirvió de sede del Abierto de Colombia por tercera vez en siete décadas. Debutó en 1975 con triunfo del inglés Peter Butler, y en 2004 fue testigo del segundo de cuatro títulos de Jesús Amaya. El antioqueño juega de local en Barranquilla. El campo par 72 de Caujaral, que jugó con 6710 yardas de extensión para el Abierto, presentó las mejores condiciones que se recuerden. Arduos trabajos de mantenimiento y sostenimiento, liderados por el ‘greenkeeper’ Frank Sterbak, con el apoyo del Comité de Golf del club, permitieron divisar un trazado más verde de lo usual. Lejos de los 64 golpes que marcaron el récord a 18 hoyos de Caujaral, en manos de Gustavo Mendoza (2003) y Darwin Suárez (2018), las dos rondas más bajas que se propiciaron en la edición 2021 del Abierto de Colombia fueron los 67 impactos de David Vanegas en la primera ronda, mismo ‘score’ con el que cerró Amaya.
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“EL ABIERTO DE COLOMBIA
NO LO GANA CUALQUIERA”
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ue Jesús Amaya entrena ocho horas diarias es una mentira supina. Eso sí, llega muy puntual sobre las 9:00 a.m. al Centro de Alto Rendimiento de Bogotá, pero eso de tener tantos admiradores atenta contra la disciplina más férrea.
Se toma varios tintos con amigos, con transeúntes, con colegas… Casi siempre lo invitan, pero a veces él costea, también hay que decirlo. Pero el tema aquí no es el café, sino que a él le gusta hablar, y a la gente le gusta oírlo. Cuando ya se ve colgado de tiempo, el hombre se da las mañas para ejercitar el ‘approach’ y la lengua al tiempo. Pero en aras de la verdad, cuando se mete en el ‘mood’ del entrenamiento, no mira sino a las 200 yardas. A eso de las 5:00 p.m. levanta la bola, pero le dan las seis en la charla.
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En la nutrida vitrina de trofeos de Jesús Amaya hubo que abrir espacio, tras ganar el Abierto de Colombia por cuarta vez. ‘Estrella’, historia viva de nuestro golf.
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Es ‘Estrella’, pero no ‘vedette’. Hace ya varios años, unos cuatro o cinco, no juega para ningún club del país, entonces es común encontrárselo en campos de práctica públicos, a las afueras de Bogotá, en potreros en Funza o en el complejo que administra la Federación Colombiana de Golf, donde inicia esta historia. Un tipo que ahora posee 108 victorias en el profesionalismo debería darse otros aires, dicen. Pero lo cierto es que le da igual viajar en avión o en su carro. El todo es ir a competir, y mirá que siempre está en contención. Siempre pasa por la ventanilla de cobro. En Latinoamérica lo recuerdan. Su fructífero paso por el extinto Tour de las Américas le forjó un nombre en el continente. Quizás por eso fue tan ampliamente reproducido su reciente triunfo en el Abierto de Colombia. En México escribieron que era “carismático”, y en Argentina se refirieron al “inagotable”. “Andá a ganar el abierto de tu país a los 52 años… Lo hace Mickelson y él”, dijo un periodista chileno. Apenas minutos después de recoger el trofeo, Jesús se trepó al podio y precisamente citó al histórico campeón del PGA Championship de 2021, el ganador más longevo en la historia de los ‘majors’ con 50 años: “Si Mickelson pudo, ¿por qué yo no?”. A su modo, el antioqueño también hizo historia como el campeón del Abierto de Colombia más veterano de todos los tiempos. Y es que Amaya parece vivir un idilio interminable con el Abierto de Colombia, que lo ganó por primera vez en 1993 en El Rodeo de Medellín, y luego tuvo que esperar once años para volver a celebrarlo, en 2004 en Caujaral, con cinco subcampeonatos en ese lapso. Un calendario más, en 2005, retuvo la corona en Guaymaral. Los sollozos de Amaya en la premiación tenían una razón. “Hacía muchos años no podía ganar por algunas razones. El abierto de un club lo gana cualquiera, pero no el Abierto de Colombia”. 16 años separaron la tercera de la cuarta victoria de ‘Estrella’ en el certamen cumbre del golf colombiano, un lapso en el que alcanzó la cima como el máximo campeón del Tour Profesional de nuestro país (con siete victorias, empatado con José Manuel Garrido), pero añoraba levantar la pesada Copa Joaquín Tomás Samper Brush.
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Remontada con soplo de brisa Días antes de que empezara el Abierto de Colombia, Amaya lanzó un ataque con la lengua: “Yo sólo pido que haya brisa, porque Caujaral sin viento no es Caujaral”. En julio apenas ventea, y en las dos primeras rondas escaseó la brisa, y eso lo notó ‘Estrella’, con rondas de 72 y 71 (-1), cuando el líder David Vanegas ya iba en -7 (67-70). ¿Llegó a sentirse perdido?, le pregunté. Amaya lo reconoció: “Sí, siempre pedía que llegara la brisa. El viento es mi amigo”, dijo entre risas. Y bueno, diríamos que con el diario del lunes todos le apostábamos a Mickelson en el PGA Championship (?), pero ‘Estrella’ no mentía. La tan mentada remontada que todos los aficionados pronosticaban, se terminó dando. Llegando al club, en la taberna, en el ‘tee’ del uno, por las redes sociales… El candidato de todos era Amaya, pero en su interior, él sólo pedía más viento. “Hay muchos jugadores a los que les incomoda la brisa. Yo tengo formas diferentes de jugar con ella”. Depronto los “dioses” de este deporte atendieron su súplica. Se empiezan a mover las palmeras por allá en esa esquina temible de los hoyos 4, 5 y 6, y ‘Estrella’ se entusiasma. 68, el número mágico del sábado, en -5 parcial, a un golpe de los líderes, Vanegas e Iván Camilo Ramírez.
De repente, sólo agarraba el híbrido y los hierros grandes. No le importaba que lo “pelusiaran” en las salidas, pues pegaba dardos “al chiro” en los segundos tiros. Así le dio un cierre estelar al trámite, marcando 67 impactos e igualando la mejor ronda del campeonato. Ganó el Abierto de Colombia con doble dígito, en -10. “Me siento cómodo en este campo, siempre he hecho buenas presentaciones aquí”, se estimula el repitente en la victoria en Caujaral. El manual no cambió mucho de aquella vez en 2004 al 2021, pegando pura pelota baja, “a la barranquillera”. Se escribe fácil…
El incombustible Tres días después de la ascensión al Olimpo, Amaya era un mortal más jugando en La Sabana junto a su hijo Andrés. El campeón no para, sigue trabajando. Desde 2019 viene preparando su rumbo al PGA Tour Champions. Ese año logró condición parcial, y este año se quedó a un golpe de entrar el U.S. Senior Open: “Estoy trabajando fuerte para eso. Ya el próximo mes pienso irme (a Estados Unidos) a prepararme antes de la Escuela, depronto jugar un par de ‘mondays’”. “Quiero ganar hasta que sea posible. Trabajo para mejorar día a día, con disciplina y esfuerzo”. ¡Gloria al campeón de Colombia!
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Nicolás Quintero (CC Cali) e Isabella Gómez (Los Lagartos) dominaron las categorías principales ‘amateurs’.
CETRO Y CORONA PARA 16
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o hay mejor manera de entrar a la historia del golf nacional sino es por la vía del Abierto de Colombia; es una realidad que todos los golfistas, profesionales y aficionados, tienen clara.
Dentro del cuadro de honor del máximo torneo del país aparecen como aficionados Camilo Villegas —récord con cinco victorias—, Alberto Gamboa, Marcelo Rozo, Manuel José Merizalde, Paola Moreno, Eileen Vargas, Marisa Baena —récord con tres triunfos cada una—, entre otras estrellas nacionales. La edición 73 dejó nuevos campeones ‘amateurs’. Aficionados que escribieron sus nombres por primera vez en el certamen por excelencia en nuestro país. En la primera cate-
A NUEVOS AFICIONADOS 17
En la primera categoría, la victoria quedó en manos del caleño Nicolás Quintero (CC Cali) después de cuatro días de intensa lucha en la clasificación, repuntando en las dos últimas jornadas. Si bien Nicolás comenzó liderando el tablero el primer día con tarjeta de 69 (-1), el segundo día perdió el lugar con el mexicano Eduardo González. Sin embargo, con 70 impactos el sábado y 73 el domingo, Quintero se alzó con la victoria gracias a 289 golpes, dejando a José Mario Vega (Independiente) en el segundo lugar con 293. “Me sentí muy bien. Venía pegándole muy bien a la bola y la clave fue el trabajo desde el ‘tee’ y con el ‘putt’. Desde que empezó el torneo sabía que iba a ser duro, había varios buenos jugadores y tocaba estar muy bien para poder ganar”, comentó. El buen rendimiento del caleño lo tiene como uno de los jugadores con mayor proyección en el equipo de Barry University (Miami, Estados Unidos) en el que jugó seis torneos la pasada temporada de la NCAA logrando un Top-5 y un Top-15. Al respecto, comentó: “Venía jugando muy bien, pero me dio Covid-19 y ahí como que me frené un poquito, no estaba bien. A lo último ya empecé a sentirme
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mejor, más cómodo. Ahora vamos a preparar los ‘qualys’ con el equipo y si pasamos espero poder ganarme un torneo”. De hecho, además de este triunfo en el Abierto, Quintero fue el mejor aficionado (puesto 25) en el pasado Holcim Colombia Classic del PGA Tour Latinoamérica, que se desarrolló en el Club Campestre de Bucaramanga. “El trabajo que he hecho acá en Cali con Juan Carlos Salinas y Daniel Restrepo ha sido muy importante. Hemos practicado mucho y ya le pegamos al ‘swing’. Eso me ha ayudado bastante a jugar bien”, añadió Quintero. Por otro lado, la categoría única de damas coronó a Isabella Gómez (Los Lagartos), logrando de esa manera su primera conquista del torneo después de haber sido segunda en el 2018. “En ese año estaba muy chiquita y me ganó María Camila Serrano, que estaba jugando muy bien. Fue una muy buena experiencia para mí. Me ayudó a poder acercarme al nivel que quiero jugar y estarlo aún más esta semana fue muy gratificante”, dijo. Fueron dos rondas iniciales de 70 impactos para la bogotana con las que sacó suficiente ventaja sobre sus prin-
cipales rivales en el tablero general: la antioqueña Estefanía Hurtado (El Rodeo) y la bogotana Karen Zambrano (Serrezuela). La clasificación dejó a Gómez en el primer lugar con 287 impactos, mientras que Hurtado y Zambrano la escoltaron con 304 totales. “Los últimos dos días peleé un poco con mi ‘putt’, pero al final quedé muy contenta y ante todo súper agradecida con mi familia por el apoyo, así como con mis amigos y mis entrenadores, Álex Sequeda y Yefrey Vergara. Fue clave mantener la calma, tener confianza siempre me ha ayudado, así como no meterme presión por los resultados”, manifestó la bogotana. Isabella, quien transitó su primer año en Harvard University sin poder jugar por cuenta de la pandemia, que motivó la cancelación de la temporada en su división, ahora entra en descanso hasta su regreso a los Estados Unidos enfocada en debutar en el golf universitario. “Vamos a comenzar a jugar torneos casi que la primera semana de clases. Para este año voy con toda y estoy muy emocionada de poder compartir esto con mi equipo”, sentenció Gómez.
NICOLÁS QUINTERO Edad: 20 años Ciudad: Cali Club: Campestre de Cali Universidad: Barry University (Estados Unidos) Victorias como aficionado: 1 Fortaleza en el juego: ‘Driver’ y ‘putt’
LAS CATEGORÍAS INTERMEDIAS TAMBIÉN FUERON PREMIADAS Además de los ya mencionados Nicolás e Isabella, el Abierto de Colombia 2021 también entregó galardones a los mejores aficionados en la segunda y tercera categoría de caballeros, así como en el grupo de seniors. Durante la primera semana de competencia en Lagos de Caujaral, Gregorio Jaramillo (CC Cali) fue el vencedor de la segunda categoría con 234 golpes totales sobre Adrián Cabello (Country Barranquilla). Por su parte, Orlando Sánchez (CC Cartagena) se llevó la victoria en la tercera categoría con 267 impactos, mientras que Esteban Miranda (Lagos de Caujaral) fue segundo con 272. En cuanto a los seniors del Abierto de Colombia, finalmente, Óscar Abuchaibe (CC Bucaramanga) ganó la categoría con 235, un golpe menos que Pedro Posse (Lagos de Caujaral).
ISABELLA GÓMEZ Edad: 19 años Ciudad: Bogotá Club: Los Lagartos Universidad: Harvard University (Estados Unidos) Victorias como aficionada: 3 Fortaleza en el juego: Consistencia mental
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COLUMNISTA INVITADO
* Profesional de golf colombiano, máximo campeón del Abierto de Colombia, en cinco oportunidades, como parte de un palmarés que incluye otras 122 victorias.
POR: ROGELIO GONZÁLEZ*
Una ‘Estrella’ al nivel de Palmer, De Vicenzo y Villegas
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ablar de golf en Colombia requiere remitirse a los dos grandes torneos del país: el Abierto de Colombia y la Copa Donovan, uno de los más antiguos de la historia nacional. Estar en ellos para uno es un honor; si revisamos el listado de jugadores que han participado y que los han ganado, es demasiado honroso.
El Abierto de Colombia, así como el Abierto de Estados Unidos, el de Argentina o el Británico, es el torneo clásico del país, de modo que haber ganado cinco ediciones, tres seguidas, para mí fue un orgullo enorme como deportistas y profesional. Son demasiados recuerdos los que me trae el Abierto, he competido con jugadores demasiado buenos y para mí es un honor que Jesús ‘Estrellita’ Amaya lo ganara por cuarta vez en la reciente edición que se disputó en el Club Lagos de Caujara (Barranquilla, Atlántico). Me siento muy honrado de su triunfo, porque ya es un ‘Senior’. No es lo mismo ganar de 20 años a hacerlo con 52 años, eso para mí es muy valioso. Le ganó a todos los nuevos golfistas de Colombia. Me quito el sombrero ante su participación, y le deseo mucha suerte; es una gran persona y un excelente jugador. ‘Estrella’, en mi criterio, es de lo mejor que ha tenido el Abierto de Colombia a la par de Camilo Villegas, Roberto De Vicenzo, Arnold Palmer, entre otros ilustres golfistas que han pasado por el país. Me siento muy orgulloso de liderar el listado de campeones del Abierto y de haber tenido el honor de ver a ‘Estrellita’ Amaya debutando en el Carmel Club en el año 1971. Lo felicito sinceramente, soy un admirador de él. Es un gran compañero y sería un honor que iguale mi marca. Por otro lado, felicito a la Federación por todo lo que difundieron del Abierto. Es nuestro torneo insignia y es muy importante que sigan impulsando el deporte en cabeza de su junta directiva, que se está luciendo haciendo cosas que antes no se hicieron. Los felicito a ellos y al doctor Camilo Sánchez, presidente. No quisiera terminar el privilegio de tener esta columna en esta edición de la revista Abierto de Golf sin mencionar a Sebastián Muñoz, quien para mí es un gran jugador, un gran señor y que viene de una familia muy especial. Es la nueva sangre del golf colombiano. Quiero aprovechar para felicitarlo por la bella persona que es y ser el jugador más representativo que tiene Colombia en este momento.
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E Caribe.
ste legendario resort ubicado en La Romana, República Dominicana, es el hogar de la obra maestra diseñada por el recordado Pete Dye: ‘Teeth of the Dog’, el campo de golf emblema no sólo de Casa de Campo sino también del
Desde su apertura en 1971, el trazado que bordea el Océano Atlántico ha sido el destino elegido por aquellos golfistas que buscan jugar en uno de los 50 mejores campos del mundo. Los famosos siete hoyos que tienen de marco
el océano, denominados ‘The Heaven 7’, son asombrosos y tienen una belleza sin igual. Por eso, Dye dejó marcada su frase en la historia cuando dijo: “Yo diseñe 11 hoyos, y Dios creó siete”. Este trazado ha sido sede de torneos mundiales e internacionales como el World Amateur Team Championships (WATC), los campeonatos World Shell of Golf, los campeonatos del Caribe, República Dominicana Open (PGA Tour Latinoamérica) y en dos ocasiones del Latin America Amateur Championship (LAAC), entre otros.
EL ‘PLANETA GOL HABLA DE
Casa de Campo Resort & Villas es el destino preferido por celebridades y personalidades de todo el mundo, ya que brinda una experiencia de lujo y ofrece una gama de actividades y experiencias para los visitantes más exigentes.
“La familia Messi, de vacaciones en Casa de Campo en el verano de 2021”
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Gracias a ello, celebridades mundiales como Annika Sörenstam, la mejor jugadora de golf de todos los tiempos con de 11 ‘majors’ y 72 victorias en el LPGA Tour; José Juan Barea, jugador de baloncesto con 14 temporadas en la NBA; Paco Alemán, reconocido periodista y comentarista de Golf Channel Latin America; John Sutcliffe, el reportero de cancha más famoso de la región; Carolina Romero, influencer conocida como ‘Fit Golfer Girl’, entre otros, han elegido a Casa de Campo como uno de sus destinos preferidos. - Annika Sörenstam: “Me encantó el campo de golf, fue una experiencia hermosa y es un lugar increíble. Me fascinó el paisaje, especialmente en los primeros 9 hoyos, en los que están el 5, el 6 y 7 bordeando el Mar Caribe, es algo realmente bello y el marco es realmente espectacular”. - Paco Alemán: “Es un lugar increíble por la comida, la playa, la atención, el golf. Es difícil de encontrar algo parecido de este nivel en otra parte del mundo, hay que ir a Casa de Campo para entender lo que es el lugar. Lo que viví fue excepcional. Además, la amabilidad de la gente de República Dominicana no deja de sorprenderme”.
F’ E CASA DE CAMPO - Carolina Romero: “Es uno de mis campos favoritos y no hay nada más lindo que jugar junto al mar. No se puede superar esa vibra caribeña y ‘Teeth of the Dog’ es una obra maestre de Pete Dye. Casa de Campo es uno de mis destinos de golf favoritos en el mundo”.
- Susana Benavides: “’Teeth of the Dog’ es uno de los campos más lindos y difíciles que he jugado. Tiene muchos hoyos al lado del mar entonces la vista es hermosa. pero también tiene viento y eso lo hace mejor ya que se vuelve más desafiante. Nunca jugué en un campo con tantas vistas al mar antes, es una cancha de golf muy impactante. Sin dudas es uno de mis campos preferidos. Disfruté mucho de las canchas y de la amabilidad de la gente, el servicio es excepcional”.
para visitar Altos de Chavón y cenar en la Marina, además de recorrer en yate otras zonas de La Romana. Una parada de mucha tranquilidad y comodidad para el ahora jugador del Paris Saint-Germain en Francia antes de pasar unos días más en Miami (Estados Unidos) y luego volver a Europa.
Otro que no pudo escapar a los encantos de Casa de Campo fue el argentino Lionel Messi, quien después de ganar la Copa América 2021 se hospedó junto a su familia en el resort dominicano. La familia Messi se alojó en una de las impactantes villas privadas de Casa de Campo a orillas del Mar Caribe y, en su estadía que se prolongó durante siete días, aprovechó
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Colombia, entre hechos históricos en Tokio 2020
Juan Sebastián Muñoz y ‘Mariajo’ Uribe lograron hitos para el olimpismo de nuestro país, en una disciplina relativamente ‘joven’ en las justas orbitales.
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n apenas la cuarta edición en la que el golf integra las competencias de los Juegos Olímpicos, la segunda tras una ausencia de 112 años, Colombia ya aparece con vistosos ribetes en la historia del máximo evento deportivo.
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La dupla colombiana, integrada por Juan Sebastián Muñoz y María José Uribe, profundizaron los cimientos nacionales en el movimiento olímpico, desplegado lo mejor de su juego en el East Course del Kasumigaseki Country Club, del 29 de julio al 7 de agosto.
MUÑOZ, primer diploma olímpico del golf nacional
Sin muchas expectativas de lo que pudiera pasar en Japón, Juan Sebastián Muñoz hizo presencia en sus primeros Juegos Olímpicos y se convirtió en el primer hombre colombiano en jugar el torneo, tomando la posta que había ådisputar las justas. Fueron cuatro días bajo par para el bogotano durante la semana, con tarjetas de 67-69-66-67 golpes, que lo pusieron a soñar con colgarse una medalla. Tal fue el rendimiento de Muñoz que en el último día protagonizó un ‘playoff’ histórico con seis competidores más en busca de la presea de bronce. Al final, fue el taiwanés C.T. Pan el que la consiguió, dejando al colombiano en el cuarto lugar. “Un balance muy positivo. La verdad llegamos jugando bien, estaba jugando buen golf y la expectativa era jugar bien, pero no tanto estar arriba peleando (…) Tenía muchas ganas de una medalla, no quedo triste pero sí un poquito herido después de todo el esfuerzo, pero aún así muy orgulloso”, comentó Sebastián en rueda de prensa con la Federación Colombiana de Golf. Para el colombiano, actualmente en el PGA Tour, la experiencia en Japón fue única y está abierto a vivirla una vez más en París 2024 en caso de poder clasificar: “Vine con mente abierta a ver cómo me iba a sentir y luego cuando reconocí el mundo de atletas que se maneja, las personas, es que es increíble estar en la villa y sentirse parte de eso. Le despierta a uno otro ánimo. Eso despertó una llama interior”.
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María José Uribe
Segundos Juegos Olímpicos para ‘Mariajo’ Otro capítulo histórico se escribió este verano en Japón con el regreso de la santandereana Uribe al torneo olímpico femenino después de su debut en Brasil cinco años atrás, oportunidad en la que finalizó en la casilla 19, siendo la mejor latinoamericana del ‘field’. En otro contexto profesional y personal, transitando el año de licencia de maternidad en el LPGA Tour, ‘Mariajo’ tuvo un comienzo complicado en el campo del Kasumigaseki con rondas de 73 y 77 que la alejaron rápidamente de la disputa por las medallas. Sin embargo, en las dos rondas finales se apuntó un golpe bajo par en cada una y se ubicó dentro del Top-50 del ‘field’ olímpico. “Me hizo falta más competencia los últimos meses, eso me pasó la cuenta de cobro. Mi cuerpo sigue lento después del parto, así que toca seguir trabajando duro”, manifestó Uribe.
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Nelly Korda
Así como Sebastián, María José tiene como objetivo estar en París 2024 y con ello ampliar su leyenda en el golf olímpico de Colombia. Después del oro en los Panamericanos Toronto 2015 y la plata en los Sudamericanos Santiago 2014, el sueño de un metal en suelo francés no se lo quita nadie. “No es el resultado que esperaba, pero si me hubieran dicho que en el mismo año año iba a tener un bebé y a jugar Olímpicos, no lo hubiera creído. Fue un bono estar allá y con miras a París desde ya”, finalizó.
Estados Unidos arrasó con los oros Los podios olímpicos en el golf fueron liderados por Estados Unidos, que además llegó a cinco oros en golf en la historia de las justas, con Charles Sands y Margaret Abbott (París 1900) y el equipo masculino de la Western Golf Association (San Luis 1904), fueron los antecesores de Xander Schauffele y Nelly Korda. En el torneo masculino, Schauffele fue líder desde el segundo día y defendió la posición de gran manera con
Xander Schauffele
tarjetas de 68-63-68-67 impactos para -18 en el campeonato, sobre el eslovaco Rory Sabbatini, quien finalizó en -17 con la medalla de plata. Por su parte, en un emocionante ‘playoff’ por el bronce el vencedor fue el taiwanés C.T. Pan en la cuarta salida dejando en el camino al estadounidense Collin Morikawa, el chileno Guillermo Pereira, el colombiano Juan Sebastián Muñoz, el irlandés Rory McIlroy (norirlandés de nacimiento), el japonés Hideki Matsuyama y el británico Paul Casey. En cuanto a las mujeres, Korda asaltó la primera casilla desde el segundo día y no la soltó más a pesar de la buena disputa que tuvo con la india Aditi Ashok, quien se descolgó el último día y se fue sin medalla. Nelly, número uno del mundo, revalidó su condición en el ranking mundial llegando a -17 para campeonato y dejando atrás a la japonesa Mone Inami y la neozelandesa Lydia Ko, ambas en -16, pero que definieron la plata y el bronce en un hoyo de ‘playoff’.
La ronda más baja de los Olímpicos significó una medalla de plata Solo Rory Sabbatini, sudafricano de nacimiento, pero eslovaco por adopción, consiguió firmar tarjeta con 61 golpes (-10) en las dos semanas de competencia que tuvo el golf en los Juegos Olímpicos Tokio 2020. Nelly Korda, oro femenino, fue la única que se le acercó con 62 (-9). A sus 45 años, con su esposa eslovaca Martina Stofanikova en la talega y el sueño de un metal olímpico, el ahora europeo saltó al Kasumigaseki Country Club el domingo con el objetivo de incomodar a Xander Schauffele por el oro. Las cosas se fueron dando en su favor poco a poco, con ‘birdies’ en las banderas del 1, 2 y 5, luego ‘eagle’ al 6, ‘birdie’ al 8 y un ‘bogey’ al 9. Por la otra vuelta fueron ‘birdies’ al 10, 11, 13 y 14, un ‘bogey’ más en el 16, para luego cerrar con ‘birdies’ en el 17 y 18, este último que le aseguró la plata desmarcándose de los otros siete competidores que terminaron en -16 y jugaron el ‘playoff’ por el bronce.
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Alfonso I
El precursor colombiano en el Open
P
ara muchos, el Open Championship es el máximo certamen golfístico del planeta, por su antigüedad (cumplirá 150 ediciones en 2022); por jugarse en Gran Bretaña, cuna de nuestro deporte; por la inmensa historia que abarca, o porque el campeón pasa a denominarse “Champion Golfer of the Year”. Hay quienes sitúan al Abierto Británico en la cúspide competitiva del golf. Colombianos, solo cinco han clasificado, el último de ellos el barranquillero Ricardo Celia en este 2021, en su calidad de campeón del Open de Argentina de 2019. La pandemia de Covid-19 lo obligó a esperarse año y medio más de lo previsto para debutar en un ‘major’. Con enorme mérito, Camilo Villegas ha sido el colombiano que más veces ha integrado su ‘field’, en 2008, 2009, 2010, 2011 y 2013. Una década atrás Eduardo
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Herrera también se hizo a las invitaciones en 1994, 1995 y 1999, y más recientemente, Juan Sebastián Muñoz obtuvo entrada en 2017 y 2021. Sin embargo, es menester hacer un merecido -y tardíohomenaje a un maestro de nuestro golf, el profesor Alfonso Bohórquez, el primero de los cinco colombianos que alguna vez jugó el Open. Corría el año 1960, y en su momento de mayor esplendor, Bohórquez viajó a Irlanda a la disputa de la Copa Mundo junto a Miguel Sala. Lograron un notorio puesto 13, que a la postre, le significó al bogotano la invitación al Open de ese año por haber logrado el mejor ‘score’ individual en la tercera jornada. Fue la edición del centenario. “Esa fue una alegría grande para el país, y aunque no pasé el corte, mucha gente se dio cuenta que si podía-
Hace seis décadas Alfonso Bohórquez hizo historia al ser el primer golfista de nuestro país en jugar un ‘major’, el Abierto Británico de 1960. 61 años después, sólo otros cuatro nacionales han logrado clasificar.
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mos escalar alto en este deporte”, relata el profesor Bohórquez, dotado de una asombrosa lucidez, a sus 88 años de edad. Y el destino “premió” a Bohórquez con jugar su único ‘major’ en St. Andrews, uno de sus mejores recuerdos: “Es la cuna del golf, un campo muy complicado pero extraordinario, a la orilla del mar… Yo creo que es el campo de golf que más me ha descrestado en la vida”, y eso que gracias a este deporte conoció los cinco continentes, y países como Japón, Singapur, Australia, Estados Unidos y Argentina. MUNDIALISTA RÉCORD Ningún otro colombiano representó más veces al país que Alfonso Bohórquez, participante en 12 ediciones de la Copa Mundo de Golf (1960, 1961, 1963, 1965, 1966, 1967, 1968, 1969, 1972, 1973, 1974 y 1976), haciendo pareja en al menos una decena de ocasiones con Miguel Sala, segundo en el listado histórico. Precisamente la dupla Bohórquez-Sala logró un recordado sexto lugar en el Mundial de 1965, en Madrid (España), que fue por 15 años el mejor resultado colombiano en la cita orbital, superado por el cuarto puesto obtenido por Alberto Rivadeneira y Juan Pinzón en 1980, en Bogotá. “En los Mundiales tuve la oportunidad de conocer y jugar contra varios de los mejores del mundo. En esa ocasión en Madrid estuvo Gary Player, Jack Nicklaus, Peter Thompson y Bob Charles. Luego coincidí con (Bernhard) Langer y también con (Roberto) De Vincenzo, que también venía mucho a jugar a Colombia”, rememora. Exponente de un estilo de juego que denomina como “disciplinado”, el profesor Bohórquez “saca pecho” y dice: “Los argentinos eran los amos y señores del golf en Colombia para esa época de los cincuentas. Yo fui el primero en ganarles, fue en el Abierto del Club Campestre de Bucaramanga de 1957. Ese trofeo aún lo conservo”. Aunque los registros históricos de la época son vagos, fueron alrededor de 55 abiertos nacionales los que pudo llegar a ganar Bohórquez, en una dilatada trayectoria que también lo llevó a ganar el Abierto de Colombia de 1973 en el Carmel Club de Bogotá. En el exterior, asegura, fue varias veces segundo en Ecuador y en Brasil. Cuestionado sobre el porqué nunca se dio la chance de intentar clasificar al PGA Tour, se sinceró: “Esa era cuestión de los argentinos y de algunos ingleses. Para nosotros los colombianos era muy costoso, había que tener el patrocinio de alguna firma que le ayudara a uno a costear los viajes, los hospedajes y todos los gastos que eso hubiera generado”.
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Entre sus múltiples logros, el profesor Bohórquez cuenta con claridad: “En mi carrera hizo ocho hoyos en uno, y en los años sesentas tuve el récord del campo del Club El Rodeo, con 59 golpes. Años después lo igualó Diego Correa, uno de los mejores jugadores con los que compartí”. CÓMODO “EN LA ARENA” “Yo creo que fui el mejor sacador de ‘bunkers’ en Colombia”, dice el profesor Bohórquez, engrosando la voz. “Llegué a ser famoso por eso, cuando iba a torneos internacionales decían ‘el colombiano Bohórquez, gran sacador de búnkers’… Y así gané varios campeonatos, embocando desde la arena”. Quizás eso venga de sus orígenes. Nacido en Bogotá en 1932, conoció el golf a la edad de 8 años mientras cuidaba “un par de vacas” que tenía su padre en unos terrenos aledaños a la antigua sede del Country Club de Bogotá en la Calle 85. “Desde donde yo estaba veía el ‘tee’ del hoyo 18 y el ‘green’ del 1, y veía jugando a los presidentes Alfonso López Michelsen y Alberto Lleras Camargo”. Curiosamente nunca se vinculó al Country Club de Bogotá. Se hizo profesional de golf en 1954, cuando trabajaba en la Escuela Superior de Guerra, bajo el mando del general Gustavo Rojas Pinilla. Salvo un par de años en el Carmel y Los Lagartos, y seis meses en Caujaral, el profesor Bohórquez fue a dar a El Rodeo de Medellín, donde echó raíces desde 1956. Con todo y eso, conserva el acento de su natal Bogotá: “De vez en cuando se me sale el ‘pues’… (risas), me considero antioqueño por adopción, por tantos años de vivir aquí y por todo lo que me ha dado esta tierra, pero la verdad es que soy cachaco”. Hace 65 años que vive en Medellín junto a su esposa, doña Benny Vergara de Bohórquez, y sus cinco hijas son paisas: Yolanda, Angela María, Claudia, Sandra y Diana. Con orgullo cuenta: “Sandra fue la mejor nadadora de Antioquia entre 1975 y 1985”. En 1995 fue nombrado socio honorario del El Rodeo, donde aún dicta clases, y solía jugar golf al menos una vez a la semana: “La famosa pandemia me tiene sin jugar hace 15 meses, y ya por razón de la edad debo cuidarme más… Pero sí me gusta tirar bolitas en el campo de práctica”. “Empecé jugado con unos palos Spalding que me prestaban en el club, y ahora juego con unos Callaway último modelo, pero el sentimiento es el mismo, el de ser un golfista disciplinado. Me gusta seguirme preparando, leyendo la Golf Digest y viendo videos de golf”, concluyó el profesor Bohórquez, exaltado en 2000 por la Federación Colombiana de Golf como ‘golfista del milenio’.
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