Hortalizas y Legumbres
Alimentos Argentinos, Una Elección Natural
S
ituada en el extremo sur del continente americano, entre los paralelos 22 y 54, la República Argentina es conocida mundialmente no sólo por el tango y el fútbol, sino también por la calidad de sus alimentos. Con casi 280 millones de hectáreas, una amplia diversidad climática que se extiende desde el subtropical al templado frío, agua abundante y un conjunto de ricos y variados ecosistemas con una singular capacidad para la producción agropecuaria, Argentina es -de acuerdo a la FAO- el quinto exportador mundial de agroalimentos.
Esta fue una de las características que atrajo, en las últimas décadas del siglo XIX y en las primeras del XX, una importante corriente inmigratoria. Con sus sueños, sus tradiciones y sus hábitos de producción y consumo, europeos, árabes y asiáticos se diseminaron por todas las regiones del país. Con el paso del tiempo, la diversidad de idiosincrasias integradas en un país tan amplio, generó una cultura diferente que hoy se abre al mundo, ofreciendo lo mejor de lo suyo: sus alimentos. Entre ellos, sus hortalizas y legumbres.
Papa, batata, maíz, tomate, zapallo, calabaza y frijoles son originarios de América. Preexistentes a la colonización del continente.
Son hortalizas y legumbres con historia. Con calidad de origen.
Hortalizas, Una Tradición Americana La dieta alimenticia de la mayoría de los pueblos originarios de América se basaba en el maíz, la papa, el zapallo, el tomate y los porotos o frijoles. Luego de la conquista esos nuevos vegetales viajaron a Europa y tiempo después, se esparcieron hacia los cinco continentes. Hoy, el consumo de estas hortalizas se registra en todo el mundo, pero fueron los colonizadores de estas tierras, los primeros en incorporarlas a sus hábitos alimentarios, enriqueciéndolos con otras producidas en latitudes lejanas (ajos y cebollas, entre otras), que hoy forman parte de la tradición culinaria de nuestros pueblos. En los inicios el siglo XX la horticultura argentina se desarrollaba en los cinturones verdes que rodeaban a las principales ciudades. Los productores, en general pequeñas quintas, se especializaban en
determinadas especies que comercializaban en el mercado interno. Pocos años después, este sistema casi artesanal, dejó lugar a un proceso de regionalización productiva que buscó aprovechar mejor las características de las diferentes regiones y sus correspondientes ecosistemas, optimizando rendimientos y calidad, y logrando, en algunas especies, extender la oferta a todo el año. En los ’80 Argentina dedicaba poco menos de 180.000 hectáreas a la producción hortícola. A fines de esa década, se inició un vigoroso proceso exportador que requirió ampliar la superficie de producción, modernizar cada eslabón de la cadena productiva, incorporar las variedades que exigían los mercados externos, modernizar los sistemas de cosecha, los tratamientos post cosecha y los sistemas de empaque aplicando los más exigentes controles de calidad.
Hoy son 300.000 hectáreas dedicadas a la horticultura, en un sistema productivo en un todo amigable con el medio ambiente. Argentina, de acuerdo a la FAO, es el segundo exportador de ajos, el octavo de cebollas y ocupa posiciones de privilegio en zapallos, tomates, calabazas y choclo o maíz dulce, aunque también crecen las exportaciones de papa semilla y pimientos.
Hortalizas de calidad. Hortalizas con tradición americana.
Ajos, con un Toque de Distinción
El ajo es el condimento natural por excelencia. Si bien su origen se registró en Asia Central, en la actualidad forma parte de los hábitos alimentarios de casi todas las culturas. Ello, agregado a sus propiedades terapéuticas -es antiséptico, antibacteriano, depurativo, diurético y previene la hipertensión- puede explicar el constante crecimiento de la demanda que logró en las dos últimas décadas. Su sabor fuerte y aroma penetrante lo posicionan como un ingrediente central en las cocinas más exigentes. Argentina se caracteriza por producir ajos de alta calidad; ajos que se producen en ambientes libres de polución, en tierras arenosas o arcillosas ricas en nutrientes, con aguas puras y abundantes.
Ajos con fragancias pronunciadas y sabores picantes. Ajos con un Toque de Distinción natural. Ajos Argentinos.
VARIEDADES Blanco - Rosado - Morado REGIONES PRODUCTIVAS
Cebollas, Aromas del Sur Dicen los historiadores que la cebolla es cultivada por el hombre hace más de 5.000 años, tanto para alimentarse como para utilizar sus cualidades terapéuticas -bactericida, diurética, combate el colesterol y previene los riesgos cardiovasculares-. Natural de Asia Central, su consumo se extendió a todo el planeta. Su producción ocupa el cuarto lugar mundial entre las hortalizas y registra un permanente aumento en su demanda. Su sabor suave y persistente la han transformado en un elemento central en las diferentes cocinas del mundo.
En Argentina, las cebollas son producidas en diversas regiones respetando siempre el medio ambiente. Tanto las de día corto como las de día largo, tienen bulbos que se destacan por su firmeza, siendo uniformes en su color, forma y tamaño, con muchas catáfilas de protección y una conservación prolongada.
Cebollas con texturas suaves y aromas del nuevo mundo. Cebollas Argentinas.
variedades: Valencianita - Valenciana - Utopia - Riviera Candy regiones productivas
Choclos y Tomates, Delicias Americanas Choclos El único maíz que permite comer su grano fresco es el maíz dulce o choclo (sugary). En esta variedad, el gen “su” retarda la conversión de los azúcares en almidón, lo que permite que antes de lograr su completa maduración pueda ser consumido -hervido o en cientos de platos diferentes- manteniendo su característico sabor dulce y su textura suave al paladar. Sus granos pueden ser blancos o amarillos, pero el color no tiene incidencia en el sabor ni en la terneza. Argentina cuenta con una vasta experiencia en la producción de maíz -es el segundo exportador del mundo- pero también con una fuerte tradición en la producción y consumo de choclos. En los dos casos, como cereal u hortaliza, es un sistema de producción natural.
Choclos sabrosos. Con el sabor de origen. Choclos Argentinos Tomates A fines del siglo XX, el tomate se ubicó en primer lugar en el comercio internacional de hortalizas, mostrando que es la especie hortícola más difundida del mundo. Hoy mantiene su liderazgo y su demanda presenta un crecimiento constante. El tomate no requiere de suelos fecundos pero se siente más cómodo en suelos sueltos, en texturas silíceo-arcillosas y ricas en materia orgánica. Requiere un clima templado, valores medios de luminosidad y una humedad que oscile entre 60 y 80%. En Argentina, tanto la producción de tomate a cielo abierto como el sistema bajo cubierta, respeta estas
VARIEDADES TOMATES Redondo - Larga Vida - Cherry REGIONES PRODUCTIVAS
características. Los resultados son, una mayor calidad y un calendario de oferta que se extiende durante todo el año.
Tomates carnosos y sabrosos.Tomates Argentinos. VARIEDADES CHOCLOS Blanco - Amarillo - Dulce - Superdulce REGIONES PRODUCTIVAS
Calabazas, Zapallos y Zapallitos, Sabrosos y Naturales El término “zapallo” es un derivado del quechua, lengua de los Incas, quienes nombraron a esta hortaliza. De la familia de las curcubitáceas, fue y es un ingrediente importante de la dieta de nuestros pueblos. Natural de la América de climas templados o cálidos, su consistencia cremosa y sabor dulzón fueron los puentes que lo hicieron llegar a todos los continentes. Igual camino recorrió la calabaza. De color ocre y pulpa anaranjada, con fragancias dulzonas y textura cremosa, fue de América hacia el mundo. Y en ese viaje, al igual que los zapallos, no sólo llevó su sabor original sino que también un dejo de la música americana, porque eran parte importante de los instrumentos musicales de los pueblos originarios y luego de los colonizadores de estas tierras.
Los zapallitos son calabacitas redondas, de 8 a 10 cms de diámetro, de fragancias y sabores suaves, similar a los zucchinis italianos que reconocen en estos zapallitos su “gen” de origen.
Calabazas, Zapallos y Zapallitos. Con la Calidad y los Sonidos del Sur
VARIEDADES Anday - Anco - Anquito - Calabaza Rayada Criollo Crespo - Criollo Plomo - Golden Hubbard - Pink Banana - Zapallito de Tronco - Zucchini
ZONAS DE PRODUCCIÓN
Legumbres en el Nuevo Mundo Por sus valores nutritivos, por ser no perecederas y por sus variadas aplicaciones culinarias, las legumbres conformaron junto a los cereales, la base de la dieta alimenticia de todos los pueblos antiguos. La colonización de nuestro continente integró a esta dieta los porotos americanos -alubia, blanco, colorado, manteca y negro, entre otros- y trajo a estas tierras las arvejas, garbanzos y lentejas, originarias de Medio Oriente y tradicional componente de la dieta mediterránea. La producción de legumbres en Argentina se desarrolla sobre poco más de 127.000 hectáreas, en tres zonas diferentes: en la Región Noroeste, en los valles que preceden a la Cordillera de los Andes, se producen porotos y garbanzos. Las arvejas y lentejas, en cambio, se localizan en la pampa húmeda, en el norte de la región Centro, y en el caso de las arvejas se extiende hacia la región
Noreste, surcada por caudalosos ríos, riachos y arroyos. En las últimas décadas y pese a los cambios registrados en los mercados externos, o tal vez como resultado de los mismos, mejoró la producción mediante la incorporación de nuevas tecnologías que van desde la genética de las semillas hasta los tratamientos post-cosecha, logrando los más altos estándares de calidad. Argentina es un actor con prestigio en el mercado internacional de las legumbres. Es el tercer exportador mundial de porotos -y el primero de porotos alubia- de reconocida calidad, como también lo son las arvejas, garbanzos y lentejas.
Legumbres con Historia. Con Calidad Natural.
Porotos, Una Historia Americana Los porotos fueron un ingrediente fundamental en la dieta alimenticia de los pueblos americanos. Esto indica que tienen una larga historia en el continente. Los porotos argentinos, de sabores suaves y agradables al paladar, son homogéneos en forma, aspecto, color y calibre, tienen una humedad máxima de 16%. Se producen en ecosistemas libres de polución donde las lluvias favorecen el cultivo pero desaparecen durante la cosecha, optimizando el proceso.
Porotos con Historia y Calidad. Porotos Argentinos.
VARIEDADES Alubia - Blanco - Carioca - Colorado - Coral Cranberry - Navy Bean - Oval - Adzuki
ZONAS DE PRODUCCIÓN
Arvejas, Lentejas y Garbanzos de Calidad Originarias del Oriente Medio, las arvejas, garbanzos y lentejas son una importante fuente de proteínas y por su versatilidad, componentes destacados de la dieta mediterránea. En el caso de las arvejas, su producción y consumo se desarrolla en todas las regiones del mundo, aunque son los países de América, Europa y Oceanía los que predominan en el comercio internacional, donde Argentina -de acuerdo a la FAOocupa el décimo puesto.
Las arvejas y lentejas argentinas se destacan por ser producidas en uno de los ecosistemas más ricos del mundo: la Pampa Húmeda, donde se logran excelentes rendimientos y productos homogéneos en color (verde o amarillo las arvejas, verde grisáceo las lentejas), forma y calibre con una humedad máxima del 16% en las arvejas y 15% en las lentejas. Los garbanzos, producidos en el norte, en los valles precordilleranos, tienen colores claros, piel suave y sabores profundos, que parecen imitar a su entorno de altas montañas.
Arvejas, Lentejas y Garbanzos sabrosos. Legumbres Argentinas.
Calendario de Oferta Ajos Cebolla Choclos Tomates Calabazas Zapallos Zapallitos Porotos Arvejas Lentejas Garbanzos
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