Poesía inconclusa / Jorge Matamala Cid

Page 1

~1~


~2~


Jorge Matamala Cid

Poesía

Inconclusa

Opalina Factoría ~3~


Poesía inconclusa Jorge Matamala Cid Opalina Factoría 2016 Diagramación a cargo de Juan Canales Diseño por Francisco Escobar Impreso en Valparaíso, Chile por Opalina Factoría Primera edición

“Colección Ecolección” Contacto autor: profesorjamcid@gmail.com Este libro se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercialSinDerivadas- 3.0 Unported Se permite la reproducción parcial o total de la obra sin fines de lucro y con autorización previa del autor ~4~


PoesĂ­a

Inconclusa

~5~


~6~


No sé nada Qué sé yo de los vivos Qué sé yo de los muertos Qué se yo de los políticos Qué sé yo de las AFP Qué sé yo de los milagros Qué sé yo de credos Qué sé yo de amor Qué sé yo de odio Qué sé yo de los gobiernos Qué sé yo de Chile Qué sé yo de los Yankis Qué sé yo de mapuche Qué sé yo de la sangre Qué sé yo de ti Qué sé yo de mí Yo no sé nada Nada de los vivos Nada de los muertos Nada de los políticos Nada de las AFP Nada de los milagros Nada de credos Nada de amor Nada de odios Nada de los gobiernos Qué han vendido a mi país Al poder de los yankis Qué se han cagado a los mapuche, ~7~


Gente de la tierra, de nuestra tierra. No sé nada de la sangre vertida en las calles, en los campos, en los ríos, en el desierto y en el mar. No sé nada de ti No sé nada de mí No sé nada y lo sé todo, pero me hago el ignorante y me callo Como los estudiantes se callan en las salas de clases fomentando la ignorancia y luego alzan la voz en las calles y olvidan que la educación no sabe nada de educación y que ellos no saben nada porque han sido engañados Por un sistema que privilegia a un pueblo zascandil y callado. No sé nada, les juro que no sé nada.

~8~


Anoche como a las doce Te vi pasear por la avenida anoche cuando la niebla absorbió completamente esta ciudad casi desierta, si no fuera por los semáforos que guían a este transeúnte, nauseabundo pretérito inconexo. Risa me diste al verte casi descubierta Al casi desnudarte si no fuera por lo oscura que estaba la calle, anoche como a las doce cuando salí por una cerveza bien fría para sentir más frío del que había afuera. Te vi caminar serena por la Ricardo Vicuña, anoche como a las doce cuando se humedecieron los ladrillos de aquella casa despierta a la que entraste de improviso como si te asustara la niebla. Quise correr a saludarte pero tenía muchas ganas de emborracharme bebiendo chelas

~9~


Digno de honor

Los cuerpos yacen furibundos bajo la espuma etérea del aire Y se van disipando lentamente las voces grises de los dipsómanos vagos del bar La espesura me aloca en este invierno recio Y me siento como furcia después de haber taconeado las veredas Y las calles ásperas de los paseos que invaden la ciudad. Hay tanta ironía en esta vida, tanta melancolía, pasión, suciedad, rabia y todo merece beneplácito del honor. Me acuesto sobre el honor, me río de la ignorante farándula: famosos alabados y lavados también, embellecidos, idolatrados por mostrarse diferentes a lo que son: hombres genuinos, ingenuos. No soy famoso, ni quiero serlo, solo tengo ganas de revelarme y decir que son basura, pura basura, pura mierda indigna de existencia. ~ 10 ~


Mejor me callo, soy más lindo cuando callo y alabo a todos. Tengo rabia. Me retengo. Tengo pena. Me mojo la cara. Tengo frío. Me abrigo. Tengo calor. Me desabrigo. Tengo hambre. Me como un trozo de pan y listo. Para qué darle tanta vuelta al asunto: todo es digno de eufemismo, de disfraz o antifaz. El silencio me avisa que estoy solo, La noche avanza lento rasguñando las estrellas Y yo, el mismo de siempre, ya no soy ése, soy otro: un duende benevolente acostumbrado Al benjuí que absorbo como éxtasis eterno Y me paseo esbelto sobre el pasto delirante.

~ 11 ~


La noche etérea

Nos ocultamos bajo la alfombra oscura de la vida, oímos rezongar las paredes que nos esconden de la masa. Esta es nuestra tienda, nuestro bunker para el fin del mundo. Tú dices que me calle y no ría tan fuerte pueden oírnos afuera. La noche se llena de niebla, nuestras pieles se confunden nos volvemos esquizofrénicos y pareciera que navegáramos entre letras y el vapor corpóreo nos envuelve sumándonos en la oscuridad etérea de la noche.

~ 12 ~


Deja Vú

He creído en la memoria del alma como aquellos budistas que han tolerado sus vivencias pasadas. Deja vú, deja vú. El recuerdo se hace presente en estos vagabundos descontentos. Muestran una sonrisa dañada por el cuchillo de la boca, de las miradas y los prejuicios. Soy un judío en los tiempos del hambre; he escapado para construir mi memoria. Ahora soy un simple abogado del diablo, Deja vú, deja vú.

~ 13 ~


Condena

Me cuesta aceptar que existo existo para condenarme a fallecer y desfallecer en esta Troya entre el día y la noche. Las calaveras se pasean desnudas y excitan mi mente antropófaga. ¿A Dónde llegaré en esta hora del crepúsculo? Me cuesta aceptar que la vida se quema fugitiva en el bosque de las horas y cultiva en las cenizas mi cuerpo vivo.

~ 14 ~


Fugacidad de la vida

Mañana no encontrarás nada sobre la mesa nadie estará esperándote en la bajada de la micro en las afueras de alguna estación de metro. Mañana puede que tus manos eyecten confundidas la fugacidad de la vida y puede también que nos miremos y no reconozcamos ese cuerpo que alguna vez besamos.

~ 15 ~


Tarde

¿Qué hora es? Es tarde, la noche ha abrazado el alma del vagabundo, ese que duerme tambaleante sobre las veredas y las bancas de las plazas. ¿Qué hora es? Es tarde madre. Es tarde.

~ 16 ~


Viaje al centro de la ciudad

La gente se mueve como advertida no sé por qué augurio corren a la velocidad de un peo: Sonidos Megasonidos Ultrasonidos Autos micros Carteles campañas electorales, música Celulares, agendas, ipod, tablet Manos llenas Bolsas, corazones vacíos Consumismo Mal augurio. Caminar a esta hora en el centro Es como exiliarse a patadas al infierno.

~ 17 ~


Exilio voluntario

Haré un exilio voluntario conmigo. Me marcharé donde pueda descansar de la miseria, los avances, la ignorancia y el sin sentido. Allí donde pueda dormirme y no tener que despertar sintiendo el ruido, estupidez posmoderna, allí donde no recuerde ni qué es la vida, donde no exista el día ni la noche. Me marcharé a la ciudad donde nadie habita ni aun los muertos Con su silencio perturbador y asesino de mi iconoclasta locura.

~ 18 ~


Caída de la noche I

Cae despierta la noche, a hurtadillas me escondo de la sórdida inocencia que me habla titubeante; grosera complacencia de los caídos: La noche es una llave que cierra el sueño una trémula esquina ve sufrir a las mujeres taco agujas, ensimismadas en los brazos del placer nocturno. La esquina está pariendo un baile nauseabundo.

~ 19 ~


Caída de la noche II

La noche es un sonido en mi memoria recuerdo cuando apenas era un niño y la niebla me gritaba desde afuera. Cae la noche asustada en las enredaderas de la casa; a hurtadillas se despierta mi pueril conciencia. La noche está tejiendo abrigos para el frío nadie aquí visita las calles fértiles solo yo penetro en ellas jugando con el moho como un ciempiés baila un tango en las soleras ocultas apagadas por la oscuridad. Ahí, en una esquina grito y corro despavorido. Cae la noche y nadie responde. La mísera luz es un dictador antaño. Yo soy su adversario.

~ 20 ~


Poema Errante

Ajeno, desconocido, miserable. Un ave errante bebiendo en las esquinas a punto de violar el suelo. ¿Qué te parece? Soy ajeno a todo. Tú me desconoces, yo te reconozco al instante: tus piernas y tu trasero voluptuoso. Errante viajo hacia las orillas del frío A punto de morir ajeno, desconocido, vulnerable: Una gota de alcohol está besando mi sexo.

~ 21 ~


Teoría del insomnio

Explicar quisiera el porqué de este insomnio: quizás una mala noticia un mal día, un mal momento Preocupaciones, lucubraciones, cavilaciones. No hay cómo decirles lectores míos que sufro en estos tiempos de un terrible puto insomnio.

~ 22 ~


Dinámica del día a día

Todos hacen su vida con normalidad O quizás más normal que de costumbre Tienen hijos, se casan, construyen un hogar Y yo me consumo entre mi vida y este espacio que no es mío. Con nadie ya converso, Todos se agitan con esto de la vida Y sus avatares Yo me siento a esperar ¿qué? No lo sé Solo miro cada día. Cómo su dinámica va bailando con la lluvia Y el sol de agosto.

~ 23 ~


Etérea Juventud

Milésimas partes de mí están en contacto Con las milésimas partes de ti Con las súbitas aguas que suben a beber en el Pozo negro de nuestro parnaso Somos jóvenes con un poco Más de veinte Veinte días de arder como la lluvia Arde al caer en otoño Somos jóvenes y nos burlamos de eso Al creer que la eternidad no existe Y convencernos de ser etéreamente jóvenes A veces pueriles en comportamiento. Nos desvanecemos Nos mojamos en el charco frío Afuera en la calle cerca de la avenida Sin venida y sin ida Sin regreso… Mi cuerpo está quieto Tu cuerpo se mueve y agita al Compartir partículas conmigo

~ 24 ~


Alevosía del cuerpo

En un acto maligno te quitaste la ropa Mujer de seda, mujer de espinas Clavaste tu mirada en mi cuerpo frío y Viste como la vergüenza se reía de nosotros Bajo nuestros ojos en una tibia tarde Después de reírnos de todo lo dicho Y burlarnos agresivamente de los ricos Mujer de seda, mujer de espinas Tus pies se sumergen en un idilio acuario Como en una pintura de Dalí Y de pronto los besos locos Se alborotan y caen graves sobre tu piel Abarrotando la noche de sensualidad femenina… ¿Y quién soy yo? Una hombrecito minúsculo sobre la muralla china.

~ 25 ~


Llantos en la penumbra

La noche llega con su cántaro De esquilas luciérnagas. Voces y llantos en la penumbra. Un recuerdo de infancia Que no acostumbra al recuerdo, Todavía no puedo quitar la caña Que la noche dejó En mi cabeza hostigada Luciérnagas y su música ahuyentan la memoria, Veo sombras que crecen y se acercan Como la noche cae con el crepúsculo Y una fiebre consume mi estómago: Me consumo en las horas.

~ 26 ~


Antropófagos

El y ella en una órbita de placeres Consumiendo las horas: Letras, versos, gemidos y sensaciones Acumulándose entre las sábanas Y no fingiéndole nada a nadie. El y ella consumiéndose.

~ 27 ~


Musaraña

El viento se fue Yo me quedé sentado muerto de frío Mientras ella volvía calurosa y Se sentaba en mis rodillas. ¡Cómo disfruté sentir su trasero Sobre mis piernas!.. Hasta que regresó el viento Con su gélida musaraña.

~ 28 ~


~ 29 ~


Ă?ndice

~ 30 ~


Poesía inconclusa Jorge Matamala Cid se terminó de imprimir en el mes de octubre del 2016 en los talleres de editorial Opalina Factoría

www.opalinacartonera.blogspot.com

~ 31 ~


Los libros de la editorial opalina factoría SON OBJETOS DE ARTE COMPLETAMENTE ARTESANALES - fabricados con nuestras patas delanteras todos hechos con dedicación, delicadeza y amor

~ 32 ~


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.