ANTONIO HURTADO

DIPUTADO POR CÓRDOBA

CANDIDATO A LA ALCALDÍA DE CÓRDOBA

Cuando hablamos del Ayuntamiento como la administración más cercana al ciudadano, es cierto. Esta aseveración cobra más sentido en esa España interior que sufrió el gran éxodo de los años 50 y 60.

La industrialización vació nuestros pueblos y produjo serios desequilibrios económicos, sociales y culturales; una brecha entre el mundo rural y el urbano, vulnerando el principio constitucional de igualdad de oportunidades.

Es necesario abandonar el lenguaje peyorativo y la imagen de decadencia que se traslada cuando hablamos de los pueblos, vinculándolos al fracaso, pobreza e incultura.

Necesitamos que se contemple el factor ruralidad en la legislación.

Nuestros pueblos no tienen que ser sólo museos o pueblos bonitos vinculados al pasado.

Atesoramos riqueza patrimonial e histórica y ofrecemos una vida atractiva y cómoda, con ocio y cultura accesibles. Los ayuntamientos jugamos un papel fundamental para colgar el cartel de “abierto todo el año”.

La despoblación ha pasado de ser el tema recurrente en época electoral a estar en la agenda política del Gobierno, que trabaja para afrontar el reto que supone y aprueba medidas para combatirla.

Los fondos Next Generation son los grandes aliados de los ayuntamientos, para poner en marcha una población rural acorde al siglo XXI.

Aprovechémoslos.